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Título: Un Nuevo Comienzo
Fandom: Prince of Tennis
Personajes: Ryuuzaki Sakuno
Palabras: 377
Notas: Definitivamente, voy a terminar haciendo una saga de la infancia de Sakuno :)
Resumen: El primer día de colegio siempre es duro
UN NUEVO COMIENZO
La atención de todos los ocupantes de la clase estaba puesta en ella, y Sakuno tragó con dificultad mientras trataba de controlar su respiración y dominar las ganas de salir corriendo de allí. Nunca le había gustado destacar, y el hecho de estar subida en aquella tarima junto a la mesa del profesor era demasiado para su naturaleza tímida y reservada.
-Tenemos una nueva alumna, que ha sido transferida a esta escuela - el docente, un hombre joven y aparentemente afable, se volvió hacia ella con una ligera sonrisa -. Por favor, preséntate a tus compañeros.
El momento que más había temido, había por fin llegado. Su abuela le había dicho que debía estar tranquila, que se adaptaría muy bien a aquel colegio de primaria cercano al de secundaria donde trabajaba Sumire, y que no tenía división para los niveles elementales. Respiró hondo y procuró fijar su mirada en un punto de la pared del fondo lo suficientemente alto para no encontrar la mirada de nadie y lo suficientemente bajo como para disimular lo que hacía.
-Me llamo Ryuuzaki Sakuno... Tengo seis años y vengo de Asaka, en Saitama. Me... gusta dibujar y las manualidades. Espero que nos llevemos bien.
Hizo una inclinación con la cabeza y sintió las mejillas calientes y el latido de su corazón resonar con fuerza en su pecho con una mezcla de ansiedad y alivio. Lo había hecho, había conseguido decir casi sin cortes las frases que había ensayado aquella mañana durante el desayuno con su abuela.
-Muy bien, Sakuno-chan. Hay un asiento al fondo de la clase, ve a sentarte allí.
Sintió las miradas de todos clavadas en su espalda mientras caminaba por el pasillo entre dos filas de pupitres, dirigiéndose a su nueva mesa. Nada más sentarse, y mientras el profesor les mandaba sacar los libros, la alumna que se sentaba a su lado, una niña con el pelo castaño recogido en dos coletas, los ojos grandes y marrones, el derecho adornado por un bonito lunar bajo él, y una enorme y contagiosa sonrisa, se volvió hacia ella.
-Soy Osakada Tomoka, puedes llamarme Tomo-chan - Sakuno asintió mientras sentía sus labios curvarse en respuesta a su enorme y contagiosa sonrisa -. Espero que seamos buenas amigas.
FIN
Fandom: Prince of Tennis
Personajes: Ryuuzaki Sakuno
Palabras: 377
Notas: Definitivamente, voy a terminar haciendo una saga de la infancia de Sakuno :)
Resumen: El primer día de colegio siempre es duro
UN NUEVO COMIENZO
La atención de todos los ocupantes de la clase estaba puesta en ella, y Sakuno tragó con dificultad mientras trataba de controlar su respiración y dominar las ganas de salir corriendo de allí. Nunca le había gustado destacar, y el hecho de estar subida en aquella tarima junto a la mesa del profesor era demasiado para su naturaleza tímida y reservada.
-Tenemos una nueva alumna, que ha sido transferida a esta escuela - el docente, un hombre joven y aparentemente afable, se volvió hacia ella con una ligera sonrisa -. Por favor, preséntate a tus compañeros.
El momento que más había temido, había por fin llegado. Su abuela le había dicho que debía estar tranquila, que se adaptaría muy bien a aquel colegio de primaria cercano al de secundaria donde trabajaba Sumire, y que no tenía división para los niveles elementales. Respiró hondo y procuró fijar su mirada en un punto de la pared del fondo lo suficientemente alto para no encontrar la mirada de nadie y lo suficientemente bajo como para disimular lo que hacía.
-Me llamo Ryuuzaki Sakuno... Tengo seis años y vengo de Asaka, en Saitama. Me... gusta dibujar y las manualidades. Espero que nos llevemos bien.
Hizo una inclinación con la cabeza y sintió las mejillas calientes y el latido de su corazón resonar con fuerza en su pecho con una mezcla de ansiedad y alivio. Lo había hecho, había conseguido decir casi sin cortes las frases que había ensayado aquella mañana durante el desayuno con su abuela.
-Muy bien, Sakuno-chan. Hay un asiento al fondo de la clase, ve a sentarte allí.
Sintió las miradas de todos clavadas en su espalda mientras caminaba por el pasillo entre dos filas de pupitres, dirigiéndose a su nueva mesa. Nada más sentarse, y mientras el profesor les mandaba sacar los libros, la alumna que se sentaba a su lado, una niña con el pelo castaño recogido en dos coletas, los ojos grandes y marrones, el derecho adornado por un bonito lunar bajo él, y una enorme y contagiosa sonrisa, se volvió hacia ella.
-Soy Osakada Tomoka, puedes llamarme Tomo-chan - Sakuno asintió mientras sentía sus labios curvarse en respuesta a su enorme y contagiosa sonrisa -. Espero que seamos buenas amigas.
FIN