Capítulo 8. Tegomass Fic.
Título del fanfic: Tegomass no Fic
Parejas: Tegoshi/Massu... Tegomass, TegoMasu, como sea que los quieran llamar.
Genero: Fluff, romantico, muy muuuuy poquito angst.
Clasificación: G a NC-17
Advertencias: Ninguna, no hay cosas grotescas ni nada, no soy tan densa.
Descripción: Qué pasaría cuando tu compañero de grupo tiene algo importante que decirte, y esto podría cambiar la relación que han llevado por tantos años. Para ambos los sentimientos están a punto de sobrepasarlos y tarde o temprano algo tendrá que pasar para dejarlos salir.
CAPÍTULO 8.
Keii nos pidió que nos quedáramos en su casa esa noche, Massu y yo aceptamos porque ya era muy tarde para regresar, además ya no tenía ganas de caminar, a pesar de que no bebí mucho me sentía un poco mareado, el alcohol me afecta demasiado.
Acosté a Keii quien sí estaba bien borracho y ya no podía mas con su alma, para después irme con Massu al cuarto que Keii tenía para las visitas; mientras nos dirigíamos hacia allá me estaba poniendo extrañamente nervioso, Massu y yo teníamos una semana estando juntos, siendo una pareja y solo nos habíamos besado, pero yo tenía la necesidad de sentirlo, de estar lo más juntos que se puede estar uno del otro, de entrégame enteramente a la persona que amo, de por fin poder sentir que todo su ser me pertenece.
Llegamos a la habitación, quitándonos solo los zapatos para tirarnos en la cama así con ropa; quedamos de frente observándonos el uno al otro, tenía tantas ganas de darle un beso...
-y mi beso de buenas noches??
-Tegoshi ya no eres un niño pequeño!
-pero quiero mi beso de las buenas noches.
Me acerqué a él, tomé una de sus manos y le di un suave beso en la mejilla, para después pasar a sus labios, esos labios que había deseado durante todo el día por fin volverían a estar junto a los míos.
Esa noche quería sentirlo mío por completo; solté su mano y empecé a acariciar su pecho, y casi sin darme cuenta le quité la playera, él no se resistió y también sacó mi camisa.
-Aquí hace mucho calor.
Me dijo con una gran sonrisa y volvió a besarme apasionadamente, su boca movía la mía, nuestras lenguas rozando, comenzaba a crearse en mi un mar de emociones que nunca antes había sentido, nadie me había despertado este tipo de sentimiento.
Era como si remolinos de electricidad recorrieran todo mi cuerpo, me sentía tan bien, empezaba a notar ese calor del que hablaba Massu, mi temperatura subía y subía a medida que nos besamos más intensamente.
Acariciaba su torso con mis dos manos, su cuerpo es perfecto, tocar su pecho me hacía excitarme más, poco a poco fui acariciando sus brazos y su rostro, no parábamos de besarnos, sus manos jugaban con mi cabello, sentía la calor de su cuerpo, nuestras respiraciones comenzaban a hacerse más rápidas, pronunciábamos nuestros nombres y palabras de amor entre besos y suspiros.
Entonces con un movimiento me puse sobre él, dejé mi cara cerca de la suya, para ver sus bellos ojos, él me observaba con esa tierna mirada que hacía que yo me derritiera, en sus labios se dibujaba una sonrisa, la sonrisa que tanto amo.
-Massu, quiero estar por siempre a tu lado.
-Te amo Tegoshi.
Lo dijo tan repentinamente y me hizo tan feliz, jamás pensé que existiera este sentimiento, el estar al lado de la persona que amas y saber que es todo lo que necesitas para vivir, ahora no importa nada más solo él y yo, juntos, amándonos.
Ataqué de nuevo sus labios, con más pasión que antes, quería que los dos nos sintiéramos bien, quería amarlo hasta no poder más, tocarlo, embriagarme con su esencia, él comenzó a acariciar mi espalda, sus dedos recorrían lentamente mi piel, me estremecía con su roce, yo comencé a besar su cuello, bajaba lentamente, dando besos por todo su abdomen, y pude escuchar como él dejaba escapar un gemido, volví a sus labios, dejando besos húmedos en ellos.
Ya no podía esperar más, dirigí mis manos hacia el botón de su pantalón, y al tocarlo pude sentir como Massu daba una sacudida, aferrándose a mí, apretándome a su cuerpo. Por fin me deshice de su pantalón, para comenzar a tocar su parte más íntima, acariciaba aquel bulto que empezaba a crecer, sentía lo excitado que se ponía.
Pero por un momento, se quedó quieto, sin besarme ni tocarme y en silencio, esa reacción me asustó, pensé que ya no quería que siguiera con eso, lo miré a los ojos y me di cuenta que tenía una mirada diferente a la de hacia un momento, ahora estaba cargada de deseo, y sin necesidad de palabras entendí todo perfectamente.
Me separé un poco, aun estaba encima de él, me despojé de mi pantalón, junto con mi ropa interior, también quité la de Massu, quedamos completamente desnudos, me agarró por la cintura y me atrajo hacia su cuerpo, ahora era él quien besaba mi cuello, y acariciaba cada parte de mi ser, mi excitación también empezó a crecer al sentir el contacto de nuestros cuerpos, su cálida piel rozando con la mía.
Podía sentir también como el palpitar de su corazón, se aceleraba cada vez más, me sujetó con fuerza cambió nuestras posiciones, ahora era yo quien estaba debajo, mi mente dejaba de funcionar, lo único en lo que quería en ese momento era él, todo cuanto él era, todo lo que significaba para mí el entregarme de esa manera y que él se entregara a mí.
Me miró y me dijo:
-Eres solo mío Tegoshi.
Y se abalanzó sobre mí, podía sentir un fuerte palpitar donde había entrado, el lugar donde nuestros cuerpos se unieron. Era doloroso, me aferré fuertemente a su espalda, esperando acostumbrarme a esa sensación, quedándonos así por un momento.
Massu comenzó a moverse, el dolor desapareció dando pasó a un placer que nunca antes había experimentado, con movimientos cadenciosos entraba y salía de mi cuerpo.
Nuestras respiraciones agitadas se sincronizaban, escuchaba el fuerte palpitar de nuestros corazones, una capa de sudor empezaba a extenderse por todo nuestro cuerpo, y esas cargas de electricidad se iban acomodando en un solo punto de mí.
No dejaba de pronunciar su nombre, no dejaba de decirle cuanto lo amaba y el hacía lo mismo, hasta que con un último y rápido movimiento, sentí como si algo estallara dentro de mí, todo mi ser estaba vibrando, era maravillosa esa sensación de éxtasis, de placer absoluto.
Él se dejó caer encima de mio, aun sentía como pequeños espasmos recorrían nuestros cuerpos, de a poco nuestras respiraciones comenzaron a regularizarse, estaba cansado, pero era tan feliz como jamás imagine.
Massu jaló la sabana para cubrir nuestros cuerpos, me dio un último beso, lleno de ternura, y se acomodo en mí cerrando los ojos, yo me abracé a su espalda, dejé un beso en su cabeza y me quedé profundamente dormido.
*
*
*
La luz comenzaba a inundar la habitación en que nos encontrábamos, haciendo que las sabanas blancas emitieran un resplandor, nuestros cuerpos cubiertos por esas sabanas parecían brillar, Massu se veía hermoso, su cabeza estaba sobre mi pecho, su cabello estaba un poco revuelto, me encantaba sentir la tibieza de su cuerpo, me moví un poco lo que provocó que lo despertara, abrió los ojos y me dedicó una mirada llena de amor.
-Buenos días Massu.
-buenos días Tegoshi, creo que… Estoy aplastándote.
Intentó dejar mi cuerpo libre pero yo se lo impedí rodeándolo con mis brazos y sin dar tiempo que hiciera más movimientos los besé dulcemente. Después de lo que hicimos anoche, ya no me queda duda de que es con Massu con quien quiero pasar el resto de mis días, lo amo.
Nos separamos y nos quedamos abrazados y en silencio, hasta que Massu dijo:
-Sabes qué? creo que fue un poco atrevido hacer eso en la casa de Koyama, solo espero que no nos haya escuchado.
-Me va a dar pena verlo, pero… ayer ya no pensaba en nada más que en ti, olvide por completo en qué lugar estábamos - decía con un poco de preocupación, Massu tenía razón, ayer nos dejamos llevar por esa pasión que nos enajenó -Mejor nos levantamos ya, es un poco tarde, habrá que ver si Keii está bien, anoche que lo dejamos en su cuarto estaba muy borracho.
Nos levantamos y nos vestimos, me dolían un poco las caderas, era una sensación rara, Massu notó eso
-Estas bien?
-Sí, este… solo me duele un poquito jeje hehe
-Yo… Tegoshi, lo siento!! No quería lastimarte…
-No te preocupes, de verdad estoy bien, sabes nuestro cuerpo reacciona de esta forma cuando…
-cosas psicológicas que no entiendo verdad?! Bueno, me basta con saber que estas bien.
-Sip, ahora vallamos a ver qué tal esta Keii-chan.
Caminábamos al cuarto de Koyama, tomados de la mano, al caminar me sentía diferente y contrario a las cosas de las que normalmente suceden alrededor de Massu y él se da cuenta, esta vez ponía mucha atención.
-Seguro que si estás bien? Estas caminando raro -.-
-Massu, estoy perfectamente, es más - me acerque a su oído y le dije en voz baja - me encantaría hacerlo de nuevo, quiero estar contigo otra vez.
-Como dices esas cosas!!!
Sonreí, le di un besito en los labios, y seguimos caminando a la habitación de Keii, Massu estaba todo rojo, me encantaba verlo así.
Llegamos y tocamos la puerta, no obtuvimos respuesta por lo que decidimos entrar.
Y lo que encontramos fue a Keii desparramado en la cama, estaba con las manos y pies extendidos a lo largo y ancho de la cama, la boca abierta, y las almohadas y cobijas tiradas en el piso. Su cabello se veía todo enredado. Nos acercamos lentamente a él, y Massu le tocó el hombro sacudiéndolo un poco y diciendo su nombre, Keii movió su mano muy rápidamente y grito
-AYUMI!!!
Nos dio risa esa reacción, ahora era yo quien intentaba despertarlo, moviéndolo más fuerte de lo que lo hizo Massu, y conseguí que gritara otro nombre
-SHIGE!!!
Pero no se despertó, solo giró un poco su cabeza, fue entonces cuando se me ocurrió algo, programe el despertador para que se activara en un minuto, y se lo puse a Keii-chan a un lado de la oreja.
Esperamos un minuto y sonó, el ruido tan estruendoso, y provocó que Keii pegara un sonoro grito y saltara de la cama, quedando con medio cuerpo en el piso, dándose un tremendo golpe en la cabeza.
-Qué paso? - Keii.
-Te caíste - Respondió Massu muy serio.
-no me digas…
-Tú preguntaste!!
-Hay Massu, eres todo un caso. A lo que me refiero es que paso anoche? Porque estoy en mi cama? Quien me trajo? Que hacen ustedes dos aquí? Donde esta Ayumi-chan? Me siento tan mareado, me duele la cabeza, me duele el estómago… no me siento muy bien, díganme que paso por favor.
-Lo que pasó…
-Yo le contesto Massu - Keii se puso sentó en su cama, nos veía expectante a pesar de tener muy mal aspecto, la resaca de esta vez va a ser muy dura - Pues verás, primero, anoche te pusiste tan borracho que te era imposible mantenerte en pie, entonces Massu y yo decidimos traerte a casa, nos pediste que nos quedáramos aquí dado que ya era muy tarde y algo malo nos podría pasar. Keii, eres tan buena madre aun estando borracho, siempre pensando en nosotros
-mmmm
-ah! Y mmm, Ayumi… Ayumi-chan… se fue con Shige - tenía miedo de decirle eso, pero él preguntó.
-QUE!!!!, ese… como se atreve… Se aprovecho de la situación. Pero ni crea que le va a ser tan fácil, Ayumi-chan es un encanto, y me interesa en serio, aunque recién nos conocimos anoche, fue como amor a primera vista…
Eh!! Keii diciendo eso, anoche fue muy obvio que se interesó por Ayumi, igual que Shige, pero de eso a que este diciendo que fue amor a primera vista es algo muy diferente, él nunca había actuado así con ninguna otra chica… Tengo que preguntarle.
-Keii-chan, te sientes bien? Aun estas borracho? No pareces tú diciendo esas cosas. O será que el ruido del despertador te dejó algo confundido?
-Nada de eso Tegoshi, es que no se… Esa chica tiene algo, para empezar me hace pensar cosas diferentes de cómo normalmente soy yo. Ella me gusta en serio, y voy por todo.
-Valla, el amor llega a NEWS - Massu
-Ja, solo faltas tú Massu, ah y Tegoshi también. Ya va siendo hora que consigan una novia, no les parece; si no se quedarán castos y puros para siempre - Keii se reía yo también lo hice, la mente se me nubló.
Ahora que él lo dice, aun no sé cómo les vamos a decir que Massu y yo estamos juntos, no había pensado en eso, y por la cara que puso Massu, me di cuenta que al igual que yo, pensaba en eso. Tarde o temprano tenemos que decírselos, son nuestros amigos, y no creo que nos vallan a rechazar por estar enamorados, eso espero.
-Bueno, creo que ya es hora de irnos, verdad Tegoshi, dejemos que Koyama se dé un baño, y se recueste un rato mas para que se le pase la resaca.
Keii se había acostado de nuevo, empezaba a ponerse de otro color, va a tener muchos mareos, Massu tiene razón, tenemos que dejar que descanse. Antes de irnos, fuimos a arreglar el cuarto donde dormimos la noche anterior, para que no quedara rastro de lo sucedido, moriria de vergüenza si nuestro amigo se da cuenta.
Luego nos despedimos de Keii, nos agradeció por haberlo llevado a su casa, y nos encaminamos a las nuestras.
Caminábamos muy discretamente, siendo domingo muchas personas estaban dando paseos o de compras, había que pasar desapercibidos.
Llegamos al punto donde debíamos separarnos, yo no quería hacerlo, pero sabía que Massu tenía que ir a su casa y yo a la mía. Nos veríamos mañana en el trabajo, pero aun así, sentía la necesidad de estar con él, de no alejarme de su lado.
A regañadientes lo dejé ir y aprovechando que esa calle se quedó desierta por un momento, le di un rapido beso en la mejilla. Sonriendo cada uno se dirigió a su casa.
Al llegar mi mamá me recibió con una rica comida, de repente me di cuenta que tenía hambre, ya eran las 2 de la tarde y no había comido nada. Apenas me había servido, escuche sonar mi celular, era un mensaje de Massu.
“Espero estés bien, ya caminabas normal… no te esfuerces mucho el día de hoy y descansa”.
Que tierno, se preocupa tanto por mí, pero está exagerando un poco, ni que estuviera embarazado. Pero que tonterías digo, mejor le contesto.
-mmm y esa sonrisota?? Hijo se te ven ojitos de enamorado!! Paso algo bueno anoche?? Anda cuéntale a tu mami quien te robo el corazón, aunque tengo mis sospechas
Ya me asuste, como es que mi mamá se dio cuenta…
-Mamá, no es eso, no estoy enamorado - mentí descaradamente - no sé porque lo dices - ahora fingia indiferencia.
-Tú lo dices Tego, mira tú carita, nunca antes te había visto con esa expresión.
-Es la misma de siempre madre. Esto te ha quedado delicioso!!, eres la mejor cocinando!
Cambie el tema, no quiero que me haga preguntas, aun no sabría como responde, no puedo decirle, así como si nada que anoche… que anoche… hice el amor con Massu.
-Ay hijo, te dejo comer, voy con tu abuela un rato.
Me dejó ahí solo, comiendo y contestando el mensaje de Massu. Toda esa tarde y hasta muy noche, nos la pasamos mandándonos mensajes, era tan divertido, nunca antes me habían gustado los celulares como en ese momento. Tuvimos que despedirnos porque si no dormíamos tendríamos problemas para levantarnos al día siguiente, luego Ryo se la pasa fastidiando por eso.
*
*
*
Lunes y a trabajar de nuevo, a pesar del desvelo por mensajes de la noche pasada, llegue temprano a la agencia, casi todos ya estaban en nuestro salón de ensayos, solo faltaba Shige. Me uní a la plática, Yamashita estaba contando lo ocurrido con Martha la noche del sábado.
-Entonces cuando llegamos, Melissa dijo que tenía sueño, y se metió a la casa, dejándonos solos en la entrada. Y yo feliz, quería un momento para hablar a solas con Martha.
-Y que ya le pediste una cita? - Massu.
-Pues… si, pero… va a ser un poco raro - Yamapi.
-Porque? - Keii
-Porque para nuestra cita, vamos a ir a un concierto de Arashi
-Eh!! Como que a un concierto de Arashi, la vas a llevar a un concierto de Arashi para la primera cita? a ti se te boto la canica o qué?, Mejor le hubieras dicho que viniera a un concierto de nosotros - Ryo
-Es que me dijo que a parte de nosotros, Arashi era un grupo que le encantaba, que había tratado de ir a un concierto, pero nunca conseguía entradas, y dijo que le encantaría poder ir a estar ahí con alguien especial. Además pues yo puedo conseguir entradas fácilmente, eso me da puntos no? Imagínense, los dos tomados de la mano cantando canciones románticas de Arashi, es un buen plan, un tanto extraño, pero buen plan - Yamapi lo decía con un tono de satisfacción.
-Tu sabrás lo que haces, pero si luego te sale con que se enamoro de un Arashi, no digas que no te lo advertí - Ryo - por cierto quería decirles que hoy…
Ryo no terminó la frase porque justo en ese instante llegó Shige, al parecer de muy buen humor.
-Bueeeeeeenos diaaaaaaas!!! Pero que bonito día hace, no les parece, haaa todo es tan perfecto!
-Y a ti que te pasa?? Que con tu sonrisa?? Y con el buenos días cantadito - decía Ryo mientras ponía una mirada de desagrado.
-Ryo-chan, es que la vida es tan linda…
-Con que sé, a ver si dices lo mismo cuando mi venganza se lleve a cabo jojo - Ryo
-Supongo que te paso algo bueno con Ayumi - Yamapi
-Mi querido Yamashita - Shige se puso a un lado de Yamapi y recargo un brazo en su hombro - Ella es la mujer perfecta.
-Sí, perfecta para mí - Keii
-Jaja, Keiichirou, acéptalo, ella y yo somos el uno para el otro - Shige
-Ya lo veremos Shigeaki, después que salga conmigo, tú no tendrás oportunidad. Te aprovechaste de que estaba mal el otro día, pero ya te dije, ella me interesa y no pienso dejarla.
-Lo mismo digo yo - Shige
-Pues ni lo digas - Keii se acerco y Shige y lo agarró de la playera - veras como ella estará conmigo.
-Solo ella sabe con quién quiere estar y ya verás que será conmigo - dijo Shige quitándole las manos a Keii de un empujón.
Sus miradas daban miedo, nunca antes los había escuchado hablarse así, todos nos empezamos a poner muy inquietos, se estaba formando una atmósfera muy extraña, creo que algo peligroso va a pasar aquí, ellos dos, ahora enamorados de la misma mujer.
De repente la puerta del salón se abrió y entraron Yume, Ayumi, Martha y Melissa. Yamapi se puso feliz de ver a Martha; Shige y Keii sonreían y saludaban a Ayumi, Ryo iba con Yume, mientras que Melissa estaba escaneando a Massu con la mirada, para después dedicarle una sonrisita y guiñarle el ojo.
Massu lo único que hizo fue voltear a verme y poner cara de asustado.
Como si no fuera suficiente con la tensión que había, ahora se aparecen ellas.
Parejas: Tegoshi/Massu... Tegomass, TegoMasu, como sea que los quieran llamar.
Genero: Fluff, romantico, muy muuuuy poquito angst.
Clasificación: G a NC-17
Advertencias: Ninguna, no hay cosas grotescas ni nada, no soy tan densa.
Descripción: Qué pasaría cuando tu compañero de grupo tiene algo importante que decirte, y esto podría cambiar la relación que han llevado por tantos años. Para ambos los sentimientos están a punto de sobrepasarlos y tarde o temprano algo tendrá que pasar para dejarlos salir.
CAPÍTULO 8.
Keii nos pidió que nos quedáramos en su casa esa noche, Massu y yo aceptamos porque ya era muy tarde para regresar, además ya no tenía ganas de caminar, a pesar de que no bebí mucho me sentía un poco mareado, el alcohol me afecta demasiado.
Acosté a Keii quien sí estaba bien borracho y ya no podía mas con su alma, para después irme con Massu al cuarto que Keii tenía para las visitas; mientras nos dirigíamos hacia allá me estaba poniendo extrañamente nervioso, Massu y yo teníamos una semana estando juntos, siendo una pareja y solo nos habíamos besado, pero yo tenía la necesidad de sentirlo, de estar lo más juntos que se puede estar uno del otro, de entrégame enteramente a la persona que amo, de por fin poder sentir que todo su ser me pertenece.
Llegamos a la habitación, quitándonos solo los zapatos para tirarnos en la cama así con ropa; quedamos de frente observándonos el uno al otro, tenía tantas ganas de darle un beso...
-y mi beso de buenas noches??
-Tegoshi ya no eres un niño pequeño!
-pero quiero mi beso de las buenas noches.
Me acerqué a él, tomé una de sus manos y le di un suave beso en la mejilla, para después pasar a sus labios, esos labios que había deseado durante todo el día por fin volverían a estar junto a los míos.
Esa noche quería sentirlo mío por completo; solté su mano y empecé a acariciar su pecho, y casi sin darme cuenta le quité la playera, él no se resistió y también sacó mi camisa.
-Aquí hace mucho calor.
Me dijo con una gran sonrisa y volvió a besarme apasionadamente, su boca movía la mía, nuestras lenguas rozando, comenzaba a crearse en mi un mar de emociones que nunca antes había sentido, nadie me había despertado este tipo de sentimiento.
Era como si remolinos de electricidad recorrieran todo mi cuerpo, me sentía tan bien, empezaba a notar ese calor del que hablaba Massu, mi temperatura subía y subía a medida que nos besamos más intensamente.
Acariciaba su torso con mis dos manos, su cuerpo es perfecto, tocar su pecho me hacía excitarme más, poco a poco fui acariciando sus brazos y su rostro, no parábamos de besarnos, sus manos jugaban con mi cabello, sentía la calor de su cuerpo, nuestras respiraciones comenzaban a hacerse más rápidas, pronunciábamos nuestros nombres y palabras de amor entre besos y suspiros.
Entonces con un movimiento me puse sobre él, dejé mi cara cerca de la suya, para ver sus bellos ojos, él me observaba con esa tierna mirada que hacía que yo me derritiera, en sus labios se dibujaba una sonrisa, la sonrisa que tanto amo.
-Massu, quiero estar por siempre a tu lado.
-Te amo Tegoshi.
Lo dijo tan repentinamente y me hizo tan feliz, jamás pensé que existiera este sentimiento, el estar al lado de la persona que amas y saber que es todo lo que necesitas para vivir, ahora no importa nada más solo él y yo, juntos, amándonos.
Ataqué de nuevo sus labios, con más pasión que antes, quería que los dos nos sintiéramos bien, quería amarlo hasta no poder más, tocarlo, embriagarme con su esencia, él comenzó a acariciar mi espalda, sus dedos recorrían lentamente mi piel, me estremecía con su roce, yo comencé a besar su cuello, bajaba lentamente, dando besos por todo su abdomen, y pude escuchar como él dejaba escapar un gemido, volví a sus labios, dejando besos húmedos en ellos.
Ya no podía esperar más, dirigí mis manos hacia el botón de su pantalón, y al tocarlo pude sentir como Massu daba una sacudida, aferrándose a mí, apretándome a su cuerpo. Por fin me deshice de su pantalón, para comenzar a tocar su parte más íntima, acariciaba aquel bulto que empezaba a crecer, sentía lo excitado que se ponía.
Pero por un momento, se quedó quieto, sin besarme ni tocarme y en silencio, esa reacción me asustó, pensé que ya no quería que siguiera con eso, lo miré a los ojos y me di cuenta que tenía una mirada diferente a la de hacia un momento, ahora estaba cargada de deseo, y sin necesidad de palabras entendí todo perfectamente.
Me separé un poco, aun estaba encima de él, me despojé de mi pantalón, junto con mi ropa interior, también quité la de Massu, quedamos completamente desnudos, me agarró por la cintura y me atrajo hacia su cuerpo, ahora era él quien besaba mi cuello, y acariciaba cada parte de mi ser, mi excitación también empezó a crecer al sentir el contacto de nuestros cuerpos, su cálida piel rozando con la mía.
Podía sentir también como el palpitar de su corazón, se aceleraba cada vez más, me sujetó con fuerza cambió nuestras posiciones, ahora era yo quien estaba debajo, mi mente dejaba de funcionar, lo único en lo que quería en ese momento era él, todo cuanto él era, todo lo que significaba para mí el entregarme de esa manera y que él se entregara a mí.
Me miró y me dijo:
-Eres solo mío Tegoshi.
Y se abalanzó sobre mí, podía sentir un fuerte palpitar donde había entrado, el lugar donde nuestros cuerpos se unieron. Era doloroso, me aferré fuertemente a su espalda, esperando acostumbrarme a esa sensación, quedándonos así por un momento.
Massu comenzó a moverse, el dolor desapareció dando pasó a un placer que nunca antes había experimentado, con movimientos cadenciosos entraba y salía de mi cuerpo.
Nuestras respiraciones agitadas se sincronizaban, escuchaba el fuerte palpitar de nuestros corazones, una capa de sudor empezaba a extenderse por todo nuestro cuerpo, y esas cargas de electricidad se iban acomodando en un solo punto de mí.
No dejaba de pronunciar su nombre, no dejaba de decirle cuanto lo amaba y el hacía lo mismo, hasta que con un último y rápido movimiento, sentí como si algo estallara dentro de mí, todo mi ser estaba vibrando, era maravillosa esa sensación de éxtasis, de placer absoluto.
Él se dejó caer encima de mio, aun sentía como pequeños espasmos recorrían nuestros cuerpos, de a poco nuestras respiraciones comenzaron a regularizarse, estaba cansado, pero era tan feliz como jamás imagine.
Massu jaló la sabana para cubrir nuestros cuerpos, me dio un último beso, lleno de ternura, y se acomodo en mí cerrando los ojos, yo me abracé a su espalda, dejé un beso en su cabeza y me quedé profundamente dormido.
*
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La luz comenzaba a inundar la habitación en que nos encontrábamos, haciendo que las sabanas blancas emitieran un resplandor, nuestros cuerpos cubiertos por esas sabanas parecían brillar, Massu se veía hermoso, su cabeza estaba sobre mi pecho, su cabello estaba un poco revuelto, me encantaba sentir la tibieza de su cuerpo, me moví un poco lo que provocó que lo despertara, abrió los ojos y me dedicó una mirada llena de amor.
-Buenos días Massu.
-buenos días Tegoshi, creo que… Estoy aplastándote.
Intentó dejar mi cuerpo libre pero yo se lo impedí rodeándolo con mis brazos y sin dar tiempo que hiciera más movimientos los besé dulcemente. Después de lo que hicimos anoche, ya no me queda duda de que es con Massu con quien quiero pasar el resto de mis días, lo amo.
Nos separamos y nos quedamos abrazados y en silencio, hasta que Massu dijo:
-Sabes qué? creo que fue un poco atrevido hacer eso en la casa de Koyama, solo espero que no nos haya escuchado.
-Me va a dar pena verlo, pero… ayer ya no pensaba en nada más que en ti, olvide por completo en qué lugar estábamos - decía con un poco de preocupación, Massu tenía razón, ayer nos dejamos llevar por esa pasión que nos enajenó -Mejor nos levantamos ya, es un poco tarde, habrá que ver si Keii está bien, anoche que lo dejamos en su cuarto estaba muy borracho.
Nos levantamos y nos vestimos, me dolían un poco las caderas, era una sensación rara, Massu notó eso
-Estas bien?
-Sí, este… solo me duele un poquito jeje hehe
-Yo… Tegoshi, lo siento!! No quería lastimarte…
-No te preocupes, de verdad estoy bien, sabes nuestro cuerpo reacciona de esta forma cuando…
-cosas psicológicas que no entiendo verdad?! Bueno, me basta con saber que estas bien.
-Sip, ahora vallamos a ver qué tal esta Keii-chan.
Caminábamos al cuarto de Koyama, tomados de la mano, al caminar me sentía diferente y contrario a las cosas de las que normalmente suceden alrededor de Massu y él se da cuenta, esta vez ponía mucha atención.
-Seguro que si estás bien? Estas caminando raro -.-
-Massu, estoy perfectamente, es más - me acerque a su oído y le dije en voz baja - me encantaría hacerlo de nuevo, quiero estar contigo otra vez.
-Como dices esas cosas!!!
Sonreí, le di un besito en los labios, y seguimos caminando a la habitación de Keii, Massu estaba todo rojo, me encantaba verlo así.
Llegamos y tocamos la puerta, no obtuvimos respuesta por lo que decidimos entrar.
Y lo que encontramos fue a Keii desparramado en la cama, estaba con las manos y pies extendidos a lo largo y ancho de la cama, la boca abierta, y las almohadas y cobijas tiradas en el piso. Su cabello se veía todo enredado. Nos acercamos lentamente a él, y Massu le tocó el hombro sacudiéndolo un poco y diciendo su nombre, Keii movió su mano muy rápidamente y grito
-AYUMI!!!
Nos dio risa esa reacción, ahora era yo quien intentaba despertarlo, moviéndolo más fuerte de lo que lo hizo Massu, y conseguí que gritara otro nombre
-SHIGE!!!
Pero no se despertó, solo giró un poco su cabeza, fue entonces cuando se me ocurrió algo, programe el despertador para que se activara en un minuto, y se lo puse a Keii-chan a un lado de la oreja.
Esperamos un minuto y sonó, el ruido tan estruendoso, y provocó que Keii pegara un sonoro grito y saltara de la cama, quedando con medio cuerpo en el piso, dándose un tremendo golpe en la cabeza.
-Qué paso? - Keii.
-Te caíste - Respondió Massu muy serio.
-no me digas…
-Tú preguntaste!!
-Hay Massu, eres todo un caso. A lo que me refiero es que paso anoche? Porque estoy en mi cama? Quien me trajo? Que hacen ustedes dos aquí? Donde esta Ayumi-chan? Me siento tan mareado, me duele la cabeza, me duele el estómago… no me siento muy bien, díganme que paso por favor.
-Lo que pasó…
-Yo le contesto Massu - Keii se puso sentó en su cama, nos veía expectante a pesar de tener muy mal aspecto, la resaca de esta vez va a ser muy dura - Pues verás, primero, anoche te pusiste tan borracho que te era imposible mantenerte en pie, entonces Massu y yo decidimos traerte a casa, nos pediste que nos quedáramos aquí dado que ya era muy tarde y algo malo nos podría pasar. Keii, eres tan buena madre aun estando borracho, siempre pensando en nosotros
-mmmm
-ah! Y mmm, Ayumi… Ayumi-chan… se fue con Shige - tenía miedo de decirle eso, pero él preguntó.
-QUE!!!!, ese… como se atreve… Se aprovecho de la situación. Pero ni crea que le va a ser tan fácil, Ayumi-chan es un encanto, y me interesa en serio, aunque recién nos conocimos anoche, fue como amor a primera vista…
Eh!! Keii diciendo eso, anoche fue muy obvio que se interesó por Ayumi, igual que Shige, pero de eso a que este diciendo que fue amor a primera vista es algo muy diferente, él nunca había actuado así con ninguna otra chica… Tengo que preguntarle.
-Keii-chan, te sientes bien? Aun estas borracho? No pareces tú diciendo esas cosas. O será que el ruido del despertador te dejó algo confundido?
-Nada de eso Tegoshi, es que no se… Esa chica tiene algo, para empezar me hace pensar cosas diferentes de cómo normalmente soy yo. Ella me gusta en serio, y voy por todo.
-Valla, el amor llega a NEWS - Massu
-Ja, solo faltas tú Massu, ah y Tegoshi también. Ya va siendo hora que consigan una novia, no les parece; si no se quedarán castos y puros para siempre - Keii se reía yo también lo hice, la mente se me nubló.
Ahora que él lo dice, aun no sé cómo les vamos a decir que Massu y yo estamos juntos, no había pensado en eso, y por la cara que puso Massu, me di cuenta que al igual que yo, pensaba en eso. Tarde o temprano tenemos que decírselos, son nuestros amigos, y no creo que nos vallan a rechazar por estar enamorados, eso espero.
-Bueno, creo que ya es hora de irnos, verdad Tegoshi, dejemos que Koyama se dé un baño, y se recueste un rato mas para que se le pase la resaca.
Keii se había acostado de nuevo, empezaba a ponerse de otro color, va a tener muchos mareos, Massu tiene razón, tenemos que dejar que descanse. Antes de irnos, fuimos a arreglar el cuarto donde dormimos la noche anterior, para que no quedara rastro de lo sucedido, moriria de vergüenza si nuestro amigo se da cuenta.
Luego nos despedimos de Keii, nos agradeció por haberlo llevado a su casa, y nos encaminamos a las nuestras.
Caminábamos muy discretamente, siendo domingo muchas personas estaban dando paseos o de compras, había que pasar desapercibidos.
Llegamos al punto donde debíamos separarnos, yo no quería hacerlo, pero sabía que Massu tenía que ir a su casa y yo a la mía. Nos veríamos mañana en el trabajo, pero aun así, sentía la necesidad de estar con él, de no alejarme de su lado.
A regañadientes lo dejé ir y aprovechando que esa calle se quedó desierta por un momento, le di un rapido beso en la mejilla. Sonriendo cada uno se dirigió a su casa.
Al llegar mi mamá me recibió con una rica comida, de repente me di cuenta que tenía hambre, ya eran las 2 de la tarde y no había comido nada. Apenas me había servido, escuche sonar mi celular, era un mensaje de Massu.
“Espero estés bien, ya caminabas normal… no te esfuerces mucho el día de hoy y descansa”.
Que tierno, se preocupa tanto por mí, pero está exagerando un poco, ni que estuviera embarazado. Pero que tonterías digo, mejor le contesto.
-mmm y esa sonrisota?? Hijo se te ven ojitos de enamorado!! Paso algo bueno anoche?? Anda cuéntale a tu mami quien te robo el corazón, aunque tengo mis sospechas
Ya me asuste, como es que mi mamá se dio cuenta…
-Mamá, no es eso, no estoy enamorado - mentí descaradamente - no sé porque lo dices - ahora fingia indiferencia.
-Tú lo dices Tego, mira tú carita, nunca antes te había visto con esa expresión.
-Es la misma de siempre madre. Esto te ha quedado delicioso!!, eres la mejor cocinando!
Cambie el tema, no quiero que me haga preguntas, aun no sabría como responde, no puedo decirle, así como si nada que anoche… que anoche… hice el amor con Massu.
-Ay hijo, te dejo comer, voy con tu abuela un rato.
Me dejó ahí solo, comiendo y contestando el mensaje de Massu. Toda esa tarde y hasta muy noche, nos la pasamos mandándonos mensajes, era tan divertido, nunca antes me habían gustado los celulares como en ese momento. Tuvimos que despedirnos porque si no dormíamos tendríamos problemas para levantarnos al día siguiente, luego Ryo se la pasa fastidiando por eso.
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Lunes y a trabajar de nuevo, a pesar del desvelo por mensajes de la noche pasada, llegue temprano a la agencia, casi todos ya estaban en nuestro salón de ensayos, solo faltaba Shige. Me uní a la plática, Yamashita estaba contando lo ocurrido con Martha la noche del sábado.
-Entonces cuando llegamos, Melissa dijo que tenía sueño, y se metió a la casa, dejándonos solos en la entrada. Y yo feliz, quería un momento para hablar a solas con Martha.
-Y que ya le pediste una cita? - Massu.
-Pues… si, pero… va a ser un poco raro - Yamapi.
-Porque? - Keii
-Porque para nuestra cita, vamos a ir a un concierto de Arashi
-Eh!! Como que a un concierto de Arashi, la vas a llevar a un concierto de Arashi para la primera cita? a ti se te boto la canica o qué?, Mejor le hubieras dicho que viniera a un concierto de nosotros - Ryo
-Es que me dijo que a parte de nosotros, Arashi era un grupo que le encantaba, que había tratado de ir a un concierto, pero nunca conseguía entradas, y dijo que le encantaría poder ir a estar ahí con alguien especial. Además pues yo puedo conseguir entradas fácilmente, eso me da puntos no? Imagínense, los dos tomados de la mano cantando canciones románticas de Arashi, es un buen plan, un tanto extraño, pero buen plan - Yamapi lo decía con un tono de satisfacción.
-Tu sabrás lo que haces, pero si luego te sale con que se enamoro de un Arashi, no digas que no te lo advertí - Ryo - por cierto quería decirles que hoy…
Ryo no terminó la frase porque justo en ese instante llegó Shige, al parecer de muy buen humor.
-Bueeeeeeenos diaaaaaaas!!! Pero que bonito día hace, no les parece, haaa todo es tan perfecto!
-Y a ti que te pasa?? Que con tu sonrisa?? Y con el buenos días cantadito - decía Ryo mientras ponía una mirada de desagrado.
-Ryo-chan, es que la vida es tan linda…
-Con que sé, a ver si dices lo mismo cuando mi venganza se lleve a cabo jojo - Ryo
-Supongo que te paso algo bueno con Ayumi - Yamapi
-Mi querido Yamashita - Shige se puso a un lado de Yamapi y recargo un brazo en su hombro - Ella es la mujer perfecta.
-Sí, perfecta para mí - Keii
-Jaja, Keiichirou, acéptalo, ella y yo somos el uno para el otro - Shige
-Ya lo veremos Shigeaki, después que salga conmigo, tú no tendrás oportunidad. Te aprovechaste de que estaba mal el otro día, pero ya te dije, ella me interesa y no pienso dejarla.
-Lo mismo digo yo - Shige
-Pues ni lo digas - Keii se acerco y Shige y lo agarró de la playera - veras como ella estará conmigo.
-Solo ella sabe con quién quiere estar y ya verás que será conmigo - dijo Shige quitándole las manos a Keii de un empujón.
Sus miradas daban miedo, nunca antes los había escuchado hablarse así, todos nos empezamos a poner muy inquietos, se estaba formando una atmósfera muy extraña, creo que algo peligroso va a pasar aquí, ellos dos, ahora enamorados de la misma mujer.
De repente la puerta del salón se abrió y entraron Yume, Ayumi, Martha y Melissa. Yamapi se puso feliz de ver a Martha; Shige y Keii sonreían y saludaban a Ayumi, Ryo iba con Yume, mientras que Melissa estaba escaneando a Massu con la mirada, para después dedicarle una sonrisita y guiñarle el ojo.
Massu lo único que hizo fue voltear a verme y poner cara de asustado.
Como si no fuera suficiente con la tensión que había, ahora se aparecen ellas.