A menudo su madre le llama Ricky. Se sienta con ella a preparar la comida hasta que su padre le llama para enseñarle a arreglar un carburador. “Créeme, te va a ser más útil que lo que estabas haciendo.” A veces su padre también le llama Ricky, cuando ha bebido, cuando están relajados o viendo un partido.
Rick sigue teniendo el pelo corto, los músculos se marcan en su camiseta y de vez en cuando se mira al espejo a conciencia, buscando los errores.
-Rick.
Dice.
Rick. Rick. Rick.
Después de un tiempo, el nombre pierde su sentido.
*
A Kieren le gustan las chicas. La primera vez que se emborrachan, la segunda que están en la cueva, Kieren le dice “me gustan las chicas” y Rick coge otra cerveza y se encoge de hombros:
-Y a quién no, tío.
Se siente demasiado grande y descoordinado, Kieren tiene las pestañas más largas que ha visto nunca y a veces se hablan demasiado cerca. Joder, a ver si te lo va a pegar. Rick le apoya la cabeza en el hombro y se ríe. Kieren lleva una camiseta negra que le queda dos tallas más grande, se ha hecho un destrozo en el pelo con una maquinilla y le dibuja figuras en el antebrazo con un pilot. A Kieren le da igual lo que piensen de él.
-Estate quieto.
Rick nota cómo el cabello de su nuca se eriza cuando Kieren le pasa los dedos por la muñeca.
*
Vicky tiene los labios finos y suaves, ambos han bebido de más y Rick no sabe dónde poner las manos. Vicky se las pone en la cadera y más tarde le empuja contra la colcha, se levanta el vestido. Es la chica más bonita que ha visto en mucho tiempo y no sabe por qué se le revuelve el estómago cuando le desabrocha el cinturón. Cierra los ojos y el alcohol se lo come entero, su piel es insensible. Se besan un rato más y Rick se concentra en los dedos de Vicky en su polla y piensa en las revistas que siguen escondidas en su armario.
-Mierda, creo que he bebido demasiado.
Los dos se ríen, y Rick trata de ocultar su alivio cuando se abrocha los pantalones y salen de la habitación.
Su padre le invita a una cerveza la semana siguiente, le da una palmada en la espalda.
A menudo su madre le llama Ricky. Se sienta con ella a preparar la comida hasta que su padre le llama para enseñarle a arreglar un carburador. “Créeme, te va a ser más útil que lo que estabas haciendo.” A veces su padre también le llama Ricky, cuando ha bebido, cuando están relajados o viendo un partido.
Rick sigue teniendo el pelo corto, los músculos se marcan en su camiseta y de vez en cuando se mira al espejo a conciencia, buscando los errores.
-Rick.
Dice.
Rick. Rick. Rick.
Después de un tiempo, el nombre pierde su sentido.
*
A Kieren le gustan las chicas. La primera vez que se emborrachan, la segunda que están en la cueva, Kieren le dice “me gustan las chicas” y Rick coge otra cerveza y se encoge de hombros:
-Y a quién no, tío.
Se siente demasiado grande y descoordinado, Kieren tiene las pestañas más largas que ha visto nunca y a veces se hablan demasiado cerca. Joder, a ver si te lo va a pegar. Rick le apoya la cabeza en el hombro y se ríe. Kieren lleva una camiseta negra que le queda dos tallas más grande, se ha hecho un destrozo en el pelo con una maquinilla y le dibuja figuras en el antebrazo con un pilot. A Kieren le da igual lo que piensen de él.
-Estate quieto.
Rick nota cómo el cabello de su nuca se eriza cuando Kieren le pasa los dedos por la muñeca.
*
Vicky tiene los labios finos y suaves, ambos han bebido de más y Rick no sabe dónde poner las manos. Vicky se las pone en la cadera y más tarde le empuja contra la colcha, se levanta el vestido. Es la chica más bonita que ha visto en mucho tiempo y no sabe por qué se le revuelve el estómago cuando le desabrocha el cinturón. Cierra los ojos y el alcohol se lo come entero, su piel es insensible. Se besan un rato más y Rick se concentra en los dedos de Vicky en su polla y piensa en las revistas que siguen escondidas en su armario.
-Mierda, creo que he bebido demasiado.
Los dos se ríen, y Rick trata de ocultar su alivio cuando se abrocha los pantalones y salen de la habitación.
Su padre le invita a una cerveza la semana siguiente, le da una palmada en la espalda.
-Me han dicho que eres todo un semental.
Reply
Leave a comment