Una estupida historia de amor (Cuento)
Bueno, ayer fue mi cumpleaños y el de mi hermoso castorcito, peor me la pase afuerita y dormida y no postie nada. Esto los posteo en honor a los cumpleaños de nosotros dos que somos tan sexys XDDD LOL!!
Gracias por felicitarme y por los hermosos regalos y más que nada, por el lindo tiempo que comparten conmigo *-*!!
Ahora si, la historia...
“Una estupida historia de amor”
Te ame desde que naciste. Al mirarte crecer, irte desarrollando, pensé que eras hermosa, simplemente me parecías el capullito de amor más bello del universo, yo, así de infantil y con mi existencia tan diminuta e inmadura como la tuya, me atrevía a pensar “te amo, te amo mi hermoso capullo, te amo” y ahora, que has florecido y eres la más hermosa entre todas, rivalizando a distancia conmigo, trato de obtener el valor para gritar “te amo, te amo, hermosa flor, te amo”
El frío metal se clava en mis entrañas, enterrándome y sentenciándome junto con otros seres elegidos como yo. Sabíamos que los mimos y los cuidados no serían gratis, que la muerte vendría a nosotros, pro que lo hemos visto un millón de veces, un ciclo por el cual nuestros ancestros han pasado y hemos presenciado con terror. Ahora, aquí viendo mi vida irse, admiro con horror como cortan tu fuente de vida, como te entierran aquí, cerca de mi, esos metales que nos mantienen tristes y atados a todos los seres vivos sacrificados solo para engrandecer un ego o para un pequeño destejo del cual no tenemos idea o interés.
Sufres y lloras, preguntando por qué, maldiciendo tu belleza - eres hermosa… eres la más hermosa - me miras con odio y desprecio, pero es que la inteligencia se esfuma ahora que estas a mi lado. Sé que es lo que no debería decirte, pero es la verdad. Somos llevados entre incomodas paredes de metal, percibimos el ruidoso mundo exterior y el calor nos extenúa aun más. Lo único que recibimos como pago, es la sonrisa de una mujer. Sin gracias ni “lo siento”, los agradecimientos son para nuestros asesinos. Injusto, ¿verdad?
Mi hermosa flor, ahora en silencio, callada y muriendo lentamente, quiero estar junto a ti, abrazarte, enredarme contigo, pero yacemos inmóviles, adoloridos… - eres la más hermosa… - vuelvo a decirte, pero me ignoras, siempre observando al frente, esperando la muerte.
El día y la noche pasan y a la mañana siguiente, eres arrancada de tu lugar. Quiero gritar como ellos lo hacen, pero es inútil, vida mía… Espero y espero y no te veo volver, solo a ella, que también me arranca y me acaricia tiernamente, con compasión, quitando los fierros de mi cuerpo. Un tajante dolor llega cuando me corta y ella solo sonríe como si quisiera consolarme. La maldigo a la vez que me lleva y me sumerge en un recipiente donde otros de mi especie parecen disfrutar de sus últimas horas. Al fin te veo, entre seres que te ignoran, altos y hermosos - te amo… te amo… - dijo bajito, como un secreto para ti y para mí.
-¿Por qué no me lo dijiste antes…?- al fin me hablas, emocionando mis diminutas esporas.
- Porque solo cerca de la muerte, mi hermosa flor, he encontrado el valor de declamar mis sentimientos…- enredas tus hojas a las mías, en un sutil abrazo, en un inmaculado amor que solo nosotras, las flores, conocemos y brindamos a los humanos.
Ahora entiendo porque seguimos existiendo, porque aun que nos corten o nos mutilen sin razón, somos una forma de decir “te amo” a los que no encuentran el valor, somos el idioma de los enamorados. Solo desearía, que en vez de lastimarnos, simplemente nos tomaran entre sus manos y nos entregaran hermosas y vivas para adornar y recordarles cada día lo mucho que les aman y les amamos.
-Fin.