Auxilio, he caído en la ola de chunches de Marvel!
Lo siento si Loki está medio OOC aquí, yo, como Loki, hago lo que se me da la gana, bye.
Ophelia y Nay son personajes originales que tal vez aparezcan después en algún otro trabajillo mío del universo Marvel.
Loki estaba en libertad condicional.
Tras haberse hecho pasar por el Padre Odín en Asgard, fue aprisionado -de nuevo- y después de una serie de eventos desafortunados para él, fue enviado a la Tierra en el mismo modo en que Thor había sido enviado algunos años atrás, como un simple mortal sin poderes.
Se sintió desesperado de verse solo, frágil, en aquel mundo que desconocía, sin embargo, fue inteligente, puesto que a pesar de no tener sus poderes, aún era el mejor para convencer a las personas de hacer lo que él quisiera, por lo que sin mucho esfuerzo logró llegar a Nueva York, y con menos esfuerzo aún, se coló en la torre de los Vengadores.
En realidad no se coló, en realidad lo que hizo -aunque no quiere que nadie lo sepa, y si alguien lo menciona, lo congelará- fue casi rogarle a Thor que lo dejara quedarse, que le pusiera a hacer algo de provecho y juró por su propia vida que se comportaría, por lo que ahora estaba viviendo en la torre, sin hacer nada de provecho, pero al menos no estaba viviendo en una caja de cartón en la calle.
Ni siquiera pudo ayudar cuando la Lady Ophelia necesitaba apoyo porque no. Tenía. Sus. Poderes. Y eso le frustraba porque la Lady Ophelia era la única que le caía bien.
Ella y Bucky, Bucky era divertido, a veces llevaba una consola al departamento donde estaba encerrado conviviendo más de lo que quisiera con Thor y con su mujer humana, y jugaban videojuegos. La última vez que Thor volvió de una misión con sus compañeros, les encontró a ambos en un serio duelo de Just Dance, en el que Loki estaba perdiendo miserablemente, y para evitar que siguiera enojado, le entregó una ofrenda de kimchi chigue -que a Loki le encantaba, porque era picante y era la única felicidad de su vida en ese momento, si destruía el mundo, se aseguraría de que los coreanos siguieran vivos, solo para que pudieran seguir produciendo semejantes maravillas- y el asunto fue olvidado.
Gradualmente, Loki descubrió que conforme formaba lazos afectivos no-deseados con los Vengadores, iba recuperando lentamente algunos de sus poderes, lo cual era agradable y desconcertante a la vez. Era extraño recuperar un poder con el que había jurado que mataría a Tony Stark después de una desagradable broma, para descubrir con horror que ya no quería hacerlo, porque en cierto modo, Tony y él no eran tan diferentes.
Pero eso no nos interesa en este momento y ya habrá tiempo de hablar al respecto.
En aquel momento, Loki estaba sentado con las piernas cruzadas sobre una silla giratoria que hacía mucho ruido, viendo a los Vengadores tener una sesión de entrenamiento contra unos muñecos para probar sus técnicas de combate, Tony los había diseñado para que resistieran mucho y ya todos se estaban hartando de golpearlos, intentar cortarlos, intentar quemarlos y demás cosas, luego los muñecos comenzaron a defenderse, y ahora todos estaban teniendo algunas dificultades. Nay supervisaba el ejercicio, viendo diferentes aspectos de los cuerpos y habilidades de cada miembro, y ocasionalmente viendo al Capitán Rogers como si fuera un bistec, Loki rodó los ojos.
“¿Cómo van las señales cardiacas?” Preguntó, porque Thor le dijo que Nay se distraía fácilmente -el idiota aún no descubría por qué, y Steve tampoco, pero Loki no iba a decirles porque según Bucky, era malo como la carne de puerco-, y la aspirante a científica salió de su trance.
“¿Ah? ¡Ah sí! El ritmo cardiaco de todos está estable, me preocupa un poco el doctor Banner, pero parece que tiene todo bajo control.”
“Esa cosa me lanzó en todas direcciones hace algún tiempo.” Loki sintió un escalofrío recorrerle la espalda. “Preferiría no recordar aquel evento. ¿Qué más? ¿No hay aumentos de presión arterial? ¿Nada en los sensores?”
“Uhm... Nah, parece que todo está en orden.” La chica suspiró, viendo al capitán Rogers lanzar su escudo y por fin -¡POR FIN! Loki casi llora de alegría- cortarle la cabeza a uno de los muñecos de entrenamiento. “¿Cómo va todo con esa chica que conociste en World of Warcraft? ¿Cómo se llamaba?”
“Stella... las cosas con Stella son... Normales...” Loki se encogió de hombros. “Hablamos regularmente por whatsapp así que creo que las cosas son algo estables.”
“Ooohh.” Nay hizo una cara graciosa, y Loki dio un sorbo a su té helado, mientras en la cámara de entrenamiento, Rogers y Bucky estaban teniendo un momento de compañerismo extraño, Tony puso cara de asco, les gritó que se fueran a un motel y todos siguieron tratando de deshacer muñecos.
“Estoy bromeando, ni siquiera sé usar Whatsapp y Stella no existe...”
“¿Qué? Pero dijiste que ya habían hablado y que...”
“Lo hice porque Thor quiere que sea más sociable, en realidad nadie quiere hablarme... El único que me habla es Bucky. La otra vez me llevó una consola y jugamos Mario Kart.”
“¿Por qué no me invitaron? ¡Deben invitarme la próxima vez! ¡Les llevaré juegos buenos!”
“De acuerdo.”
Para mortificación de Nay, el capitán Rogers salió de la cámara de entrenamiento, bañado en sudor y bebiendo agua de una botella, algunas gotas de agua resbalaban por la comisura de sus labios y se deslizaron lentamente por su mandíbula y su cuello, y la camisa se le pegaba descaradamente al cuerpo, marcando sus músculos, incluso Loki se quedó un poco idiotizado, su fascinación por la Lady Ophelia se desvaneció por un minuto, pero de pronto recordó que el capitán era “papa casada”, como decía Stark, y decidió volver a su lata de Arizona, Nay estaba casi babeando cuando Steve se sentó en una de las sillas cercanas.
“¿Cómo estuvo?” Preguntó, como si no notara la forma tan asquerosamente sexual en que su camisa estaba pegada a sus pectorales, y Nay se quedó viendo como tonta.
“Bastante bien.” Comentó Loki, dejando de lado su lata de té, le pediría a Thor o a la Lady Jane que le trajera una caja la próxima vez que fueran al mercado. “Ese movimiento con el escudo fue bastante admirable, estaba empezando a enojarme con esos muñecos.”
“Y tú no estabas ahí adentro. Tal vez cuando recuperes tus poderes puedas acompañarnos. No te emociones, aún no me caes del todo bien, pero a Bucky le agradas y estoy dispuesto a confiar en él al respecto.”
En realidad, a Loki le parecía que el capitán Rogers era interesante, no era muy brillante, puesto que no había notado aún que Nay lo miraba como si quisiera morderlo, o lanzarlo a la superficie plana más cercana, pero era un hombre honorable y había pocos humanos con el sentido de honor que el capitán poseía, por lo que Loki lo respetaba, a pesar de que no estuvieron del mismo lado al principio, además Bucky lo miraba con la misma mirada que Thor le dedicaba a la Lady Jane, y a Loki le divertía eso, quería ver qué sucedería después. Nay seguía idiotizada con el prominente pecho del capitán y Loki volvió a rodar los ojos, le dio un pellizco en el brazo, y Nay respondió con un quejido de indignación y un zape.
“¿Es verdad que estuvo congelado 70 años, señor Rogers?” Preguntó Loki, arqueando una ceja.
“Steve, el señor Rogers era mi padre.” Steve sonrió y Nay lo hizo también, suspirando como una adolescente. “Y sí, ¿por qué es tan difícil de creer?”
“Es que... Los humanos son tan delicados...”
“No soy un humano normal, al menos ya no...”
“¿Y es verdad que no siempre tuvo el cuerpo que tiene ahora? Bucky comentó algo de que era... Pequeño y delgado.”
“Si, medía como cinco pies y medio y era más delgado que Natasha...”
“Vaya, debe haber sentido envidia.” Loki comentó secamente, y Nay hizo un ruido que parecía una risa contenida, pero sonaba inhumano. “Debe ser desagradable ser tan vulnerable.”
“Fue mucho más incómodo para mi después. Viví durante 17 años en un cuerpo pequeño, extremadamente delgado, con asma, escarlatina, fiebre reumática y todas las enfermedades que se te ocurran, cada invierno era horrible para mí, Bucky llamó a un cura unas 8 veces, cada vez estaba seguro de que me moría... Pero era el cuerpo al que estaba acostumbrado. Y de pronto estaba en un cuerpo totalmente diferente...”
“Es un buen cuerpo...” Suspiró Nay, y Loki le dio otro pellizco.
“El punto es que tuve toda la vida para acostumbrarme al cuerpo con el que nací, y sólo he estado en este unos, ¿73 años? De los cuales 70 los pasé en el hielo, no hay muchas formas de acostumbrarte a un cuerpo nuevo cuando estás congelado y crees que estás muerto. A veces parece un sueño, a veces siento que despertaré y todo será como era antes, y volveré a ser ese chico que pesaba 90 libras y medía cinco pies y medio, enfermo de absolutamente todo.”
“Sí... Entiendo lo que se siente...” Suspiró Loki, luego sonrió con malicia. “¿Hay alguna manera de ver cómo eras antes?”
“Umm... Debo tener alguna fotografía por ahí. Tengo una con Bucky, de cuando fuimos a Coney Island.”
“¿Qué lugar es ese?” Loki frunció el ceño.
“¡Oh, te va a gustar Coney Island!” Exclamó Nay, buscando en su celular algunas fotografías, luego se las mostró, eran de una ocasión en la que asistió con la Lady Ophelia a algo que parecía una festividad, Nay le dijo que era un parque de diversiones. “Hay un parque, y museos, y la rueda de la fortuna, puedes verla por las noches, con todas sus luces...”
“Una vez Bucky y yo fuimos, había una montaña rusa, y él me aseguró que estaríamos bien y que no era gran cosa... Vomité cuando bajamos del juego.”
Loki soltó una carcajada, y todos en la cámara de entrenamiento se volvieron hacia ellos. Uno de los muñecos golpeó a Bucky en la cara, y Thor sonrió al ver a su hermano reír después de tanto tiempo. Nay y Steve siguieron contándole de las maravillas que había en Coney Island, y Loki se sintió realmente sorprendido de que Midgard tuviera semejantes cosas.
“Hmm... Me agrada.” Dijo, y luego se giró hacia la cámara de entrenamiento. “¡Thor!”
“¡Dime, hermano!” Le gritó el rubio, aún luchando con uno de los muñecos, el cual lo atacaba a manotazos.
“¡Quiero ir a Coney Island!”
“¡Estoy un poco ocupado en este momento para llevarte a Coney Island, hermano!”
“¡No ahorita, baboso, cuando realmente pueda salir de esta torre de porquería!”
“¡Ah! ¡Perfecto! ¡Llevaremos a Jane y a Darcy!”
“¡Hey, yo también quiero ir, no se vale!” Exclamó Tony, lanzando un rayo hacia un muñeco que estaba detrás de Ophelia, mientras ella quemaba otro con sus poderes. “¿Qué pasó con la amistad y el compañerismo?”
“¡Me dibujaste penes en la cara, Stark, ya no puedes ser nuestro amigo!” Dijo Clint, arrancando flechas de varios muñecos para lanzarlas a otros más.
“¡Todos se rieron menos tú, Merida!”
Ophelia quemó otro muñeco, anunció que estaba harta y hambrienta y ordenó a Nay que abriera la cámara, mientras Natasha recordaba los hashtags con los que Stark subió la foto de Clint lleno de penes en la cara al instagram de los Vengadores. La foto se volvió mucho más viral que la que había subido de Steve y Bucky dormidos durante la “super pijamada” con el hashtag #SuperMaridos o la foto de Steve comiendo nachos mientras veía la tele con la cita “él es belleza, él es gracia, él es el Sr. Estados Unidos”, al doctor Banner se le olvidó que estaba molesto con los jodidos muñecos cuando Tony salió de la cámara y apagó el simulador, diciendo algo parecido a “¿si ya saben cómo soy, para qué se ponen de pechito para que les haga bullying?”.
Pepper llegó cuando todos estaban en la sala común, tirados en el piso, Steve estaba tendido boca abajo (“el piso está frío, déjenme en paz”), de modo que no sabía quién rayos estaba usando su trasero de almohada, Loki estaba divirtiéndose demasiado, por lo que les dijo a todos “Nadie le diga.” Bucky y Nay eran los que estaban usando su trasero de almohada, Natasha estaba pegada al aire acondicionado, con Clint abrazado a su cintura y con cabeza recargada en su espalda, quejándose de cuando en cuando, Tony había dejado su traje de lado y estaba tendido en un sofá, con una camiseta de Led Zeppelin y una pijama de Charlie Brown. Mientras Bruce estaba sentado en el otro sofá, mirando al vacío, y Thor estaba hecho bolita cerca de Loki, Ophelia estaba sentada detrás de Loki, su espalda pegada a la de él, se había quitado el moño que iba a juego con su vestido.
Cuando Tony vio a Pepper, se arrastró hacia ella, rogando por comida, y ordenaron un montón de comida coreana a petición de Loki y de Ophelia. Comieron y bromearon, y Pepper les tomó una foto a todos mientras comían para el instagram de los Vengadores. La foto se hizo viral al cabo de unos minutos, con comentarios positivos de gente de todo el mundo, luego de un largo descanso, Thor trajo varios colchones con ayuda de Steve, y los acomodaron en la sala frente a la tele, después se acomodaron todos en los colchones y los sofás, y Tony ordenó a JARVIS que reprodujera una película, que nadie vio porque todos estaban hablando entre ellos.
Por la noche, Jane llegó y se acurrucó en los brazos de Thor, todos tomaron mantas de sus habitaciones y las acomodaron en los colchones, con la idea de tener otra “super pijamada” como Tony la había bautizado, lo cual era una costumbre semanal después de algún largo día de entrenamiento, y planeaban dormir temprano, pero debido a la adrenalina del entrenamiento, todos estuvieron despiertos hasta el día anterior, bromeando y riendo de cualquier cosa, porque a las 4 de la madrugada, de pronto todo es más gracioso.
El primero en caer dormido fue Clint, a eso de las 5 de la mañana, con Natasha abrazada a él, luego Tony, con Pepper aferrada a él, y Steve, el brazo humano de Bucky sirviéndole de almohada, y así, uno a uno, todos fueron quedándose dormidos.
A las 7 de la mañana, Loki era el único que seguía despierto. Vio el sol elevarse en el cielo y descubrió con horror que le gustaba vivir con esta gente. Que eran buenos y estaban dispuestos a darle una oportunidad después de todo el daño que había hecho.
Se vio las manos, y después de analizarlas un momento, se dio cuenta de que de pronto eran más pequeñas. Hurgó en el bolso en forma de corazón de Ophelia y encontró un espejo con cubierta en forma de barra de chocolate. Al observarse notó que la cara de Nay era la que lo estaba mirando en el espejo.
Había recuperado su capacidad de transformarse en quien él quisiera. Fácilmente podría haber escapado de la torre haciéndose pasar por Pepper o por Tony.
Se sorprendió a sí mismo al descubrir que no tenía ganas de irse.
Después de todo, se estaba bastante bien aquí, entre toda esta gente rara.
Se acomodó entre Nay y Ophelia, y ambas lo abrazaron en sueños.
Si. Se estaba bien en este lugar.