Vamos, por Dios, pretenden que YO vaya ahí?! Válgame el cielo! Levantarme a las 9 de la mañana, beber kalimotxo y cerveza caliente, ver a la gente borracha desde las 11 de la mañana, toda la apestosa gente que ya conozco, y que no tengo ninguna gana de ver, y todo eso bajo el Sol? NO, hijos míos, yo me quedo en casa.
Sí, esa es la idea de Paellas. Se supone que se va para hacer una paella, pero es una burda excusa para que la juventud se embriague. Para más INRI lo hacen junto al cementerio (2ª foto), que no es que vayan a despertar a nadie, pero siempre se me ha hecho... curioso cuando menos (ya, no sé si se dice así). Siempre está la típica gente con unos altavoces del kopón, y peor son los que quieren dar "ambiente" al sitio haciendo su propia música (3ª foto). Puede que no sea agradable para todos, queridos. Y por último, las paellas, que algunas hay que preguntarse dónde coño está lo comestible (4ª foto). Por que el jurado mira bastante más lo bonito que queda que cómo estén (ya me dirás después de 200 paellas cómo tienen las papilas gustativas...).
Os direis, qué tiene todo eso de difernete del concurso de torilla de patatas que se hace en fiestas de mi pueblo? Nada, señores. Es lo mismo. Esto no tiene clase por ningún lado, pero la gente sí va al de paellas (plato de por ahí) y no va al de marmitako (plato de aquí). Qué desacastados, por Dios.
En fins, que hoy me espera un día sin resaca, de ver alguna peli, de leer un rato, de jugar a algo otro y descansar, que para algo es domingo. Especialemente para no madrugar.
Que tengan un buen día.