(no subject)
reto twain
autor: poala_chan
fandom: bleach
Claim: Grimmjow/Ichigo
Lo de perder sus poderes no suena tan malo en un principio, no volverá a empuñar una espada, pero eso tampoco suena tan malo (ha tenido suficientes batallas para el resto de su vida, muchas gracias) y si de esto depende la vida de todos en Karakura, está dispuesto a hacerlo, así que no piensa demasiado en ello al finalmente fusionarse con Zangetsu.
Cuando despierta, Rukia está allí, tienen que pasar unos segundos antes de que repare en la presencia de los demás, Inoue escandaliza y Chad le dedica una mirada aliviada, incluso Ishida se guarda el comentario mordaz, que sabe, le quema la lengua, no puede evitar el sentimiento de fatalidad que lo embarga, pero se guarda los nubarrones para sí mismo, al tiempo que pide perdón a Zangetsu, tal vez por última vez, piensa sombrío.
Ha sido, un camino largo, desde la noche en que la enana entró en su vida como una tormenta, están Renji y Byakuya, Kenpachi y las batallas incontrolables y las sandalias de Urahara-san y las patadas de Hiyori, la extraña sonrisa de Hirako, la promesa de volver juntos, Nel y sus hermanos, las babas los mocos y su nombre mal pronunciado.
Los insultos, las peleas y cada noche clandestina en su habitación, o fuera de ella.
Y esta la parte de la historia que nadie más conoce, Grimmjow y su sonrisa los besos, los gritos y su propio corazón de colegiala enamorada y rendida (porque si, así es como Grimm lo hace sentir, por más que sienta su orgullo masculino herido), el sexo salvaje y las carcajadas y la mano de Grimm en su espalda.
Hay un vacio de tiempo que atesora en lo más profundo de su memoria, es el instante robado en hueco mundo, ese en el que Inoue es un nombre vacio y el volveremos los cinco es un montón de palabras en el aire, porque él está ahí y su huella energética lo atrae como abeja a la miel.
Si bien no es la causa primaria de su viaje encontrarse con Grimmjow, (no conscientemente al menos) en el minuto en que se encuentran, en que las espadas se cruzan, para luego dar paso a las bocas y a las manos desesperadas, cualquier otra razón pierde sentido.
Se pierden juntos en el blanco interminable y la noche eterna, y le roban veinticuatro horas completas al caos de afuera, más, sería una catástrofe y ambos lo saben.
La despedida es silenciosa, Ichigo levanta su ropa, y Grimmjow lo observa con su usual mueca sardónica, luego el shinigami desaparece a toda prisa justo después de soltar las dos palabras que le queman la lengua, no espera respuesta porque la próxima vez que se encuentren uno va amatar al otro y no tiene mucho sentido una declaración de amor eterno en esas circunstancias.
Desea por sobre todo ver a Grimm antes de que sus poderes desaparezcan por completo, le sonríe a Rukia mientras hablan, y hasta se da el lujo de asegurarle que está bien, que conoce y acepta las consecuencias de sus actos, que son del todo esperadas.
Finalmente lo dejan para que descanse, como si no hubieses descansado lo suficiente en el último mes Ja!, ríe débilmente su otro yo, y sabe que incluso va extrañarlo a él.
Grimmjow, observa desde lejos, ha montado guardia en la ventana todas las noches y ha sentido no sin cierto desconcierto la disminución del poder espiritual del shinigami. cuando la pandilla de criajos finalmente dejan la habitación, el se acerca y echa un vistazo al rostro durmiente del mocoso, solo por un minuto y luego sale y se marcha, ha repetido esta misma rutina por un mes.
Le sorprende encontrarlo despierto y observa maravillado el cuerpo esbelto moverse con soltura, se acerca un poco más para verlo más de cerca y entonces lo capta, algo anda mal, no hay reclamos ni insultos cuando entra por la ventana abierta y se le hace un nudo en el estomago, acaso no lo ve?, el shinigami le dedica una sonrisa suave, pero no dice nada, él se acerca cauteloso y pone una mano sobre su mejilla, entonces Ichigo cierra la distancia y lo besa, el contacto es suave y efímero, con ADIOS escrito en mayúsculas.
Y la figura de Grimm comienza a desvanecerse frente a sus ojos, una lagrima clandestina y que va negar por el resto de su vida se escapa de sus ojos, el ex-espada lo entiende de golpe y también sonríe con esa sonrisa que solo le dedica a Ichigo murmura un te amo, que no llega a los oídos de Ichigo.
Aunque decir adiós a Rukia, su compañera de batallas, su mejor amiga, es difícil, es esta la despedida que duele y bastante, en su memoria se graba a fuego la figura de Grimm y su sonrisa mientras se desvanece frente a sus ojos.
Ichigo se levanta, esquiva la patada matutina y le grita un poco a su padre antes de salir de casa, Yuzu le recuerda que debe llevarse la caja de bentou y él se despide con un movimiento de la mano, el almuerzo en la azotea transcurre con tranquilidad, Inoue trata de obligarlo a comer alguno de sus inventos raros, Tasuki lo evita mientras Ishida observa en silencio desde una esquina, golpea un par de veces a Keigo antes de que terminen las clases, regresa a casa con Chad, por la tarde su habitación esta silenciosa (tanto como puede estar la casa Kurosaki), su padre grita incoherencias y Yuzu lo llama a cenar, una cena normal, llena de discusiones y risas de sus hermanas, hace la tarea con los audífonos martillándole los oídos al terminar se acuesta a dormir.
No ve ni un solo espíritu en una semana y se siente patéticamente vacio, pero para todos tiene una mueca de enfado y el estoy bien listo.
Contempla el cielo nocturno por la ventana abierta y susurra bajito un “buenas noches idiota” del que por supuesto no escucha la respuesta.
Aunque eso no significa necesariamente que no la tenga, Grimmjow esta encaramado en la ventana, tan cómodo como si fuera su propia casa.
autor: poala_chan
fandom: bleach
Claim: Grimmjow/Ichigo
Lo de perder sus poderes no suena tan malo en un principio, no volverá a empuñar una espada, pero eso tampoco suena tan malo (ha tenido suficientes batallas para el resto de su vida, muchas gracias) y si de esto depende la vida de todos en Karakura, está dispuesto a hacerlo, así que no piensa demasiado en ello al finalmente fusionarse con Zangetsu.
Cuando despierta, Rukia está allí, tienen que pasar unos segundos antes de que repare en la presencia de los demás, Inoue escandaliza y Chad le dedica una mirada aliviada, incluso Ishida se guarda el comentario mordaz, que sabe, le quema la lengua, no puede evitar el sentimiento de fatalidad que lo embarga, pero se guarda los nubarrones para sí mismo, al tiempo que pide perdón a Zangetsu, tal vez por última vez, piensa sombrío.
Ha sido, un camino largo, desde la noche en que la enana entró en su vida como una tormenta, están Renji y Byakuya, Kenpachi y las batallas incontrolables y las sandalias de Urahara-san y las patadas de Hiyori, la extraña sonrisa de Hirako, la promesa de volver juntos, Nel y sus hermanos, las babas los mocos y su nombre mal pronunciado.
Los insultos, las peleas y cada noche clandestina en su habitación, o fuera de ella.
Y esta la parte de la historia que nadie más conoce, Grimmjow y su sonrisa los besos, los gritos y su propio corazón de colegiala enamorada y rendida (porque si, así es como Grimm lo hace sentir, por más que sienta su orgullo masculino herido), el sexo salvaje y las carcajadas y la mano de Grimm en su espalda.
Hay un vacio de tiempo que atesora en lo más profundo de su memoria, es el instante robado en hueco mundo, ese en el que Inoue es un nombre vacio y el volveremos los cinco es un montón de palabras en el aire, porque él está ahí y su huella energética lo atrae como abeja a la miel.
Si bien no es la causa primaria de su viaje encontrarse con Grimmjow, (no conscientemente al menos) en el minuto en que se encuentran, en que las espadas se cruzan, para luego dar paso a las bocas y a las manos desesperadas, cualquier otra razón pierde sentido.
Se pierden juntos en el blanco interminable y la noche eterna, y le roban veinticuatro horas completas al caos de afuera, más, sería una catástrofe y ambos lo saben.
La despedida es silenciosa, Ichigo levanta su ropa, y Grimmjow lo observa con su usual mueca sardónica, luego el shinigami desaparece a toda prisa justo después de soltar las dos palabras que le queman la lengua, no espera respuesta porque la próxima vez que se encuentren uno va amatar al otro y no tiene mucho sentido una declaración de amor eterno en esas circunstancias.
Desea por sobre todo ver a Grimm antes de que sus poderes desaparezcan por completo, le sonríe a Rukia mientras hablan, y hasta se da el lujo de asegurarle que está bien, que conoce y acepta las consecuencias de sus actos, que son del todo esperadas.
Finalmente lo dejan para que descanse, como si no hubieses descansado lo suficiente en el último mes Ja!, ríe débilmente su otro yo, y sabe que incluso va extrañarlo a él.
Grimmjow, observa desde lejos, ha montado guardia en la ventana todas las noches y ha sentido no sin cierto desconcierto la disminución del poder espiritual del shinigami. cuando la pandilla de criajos finalmente dejan la habitación, el se acerca y echa un vistazo al rostro durmiente del mocoso, solo por un minuto y luego sale y se marcha, ha repetido esta misma rutina por un mes.
Le sorprende encontrarlo despierto y observa maravillado el cuerpo esbelto moverse con soltura, se acerca un poco más para verlo más de cerca y entonces lo capta, algo anda mal, no hay reclamos ni insultos cuando entra por la ventana abierta y se le hace un nudo en el estomago, acaso no lo ve?, el shinigami le dedica una sonrisa suave, pero no dice nada, él se acerca cauteloso y pone una mano sobre su mejilla, entonces Ichigo cierra la distancia y lo besa, el contacto es suave y efímero, con ADIOS escrito en mayúsculas.
Y la figura de Grimm comienza a desvanecerse frente a sus ojos, una lagrima clandestina y que va negar por el resto de su vida se escapa de sus ojos, el ex-espada lo entiende de golpe y también sonríe con esa sonrisa que solo le dedica a Ichigo murmura un te amo, que no llega a los oídos de Ichigo.
Aunque decir adiós a Rukia, su compañera de batallas, su mejor amiga, es difícil, es esta la despedida que duele y bastante, en su memoria se graba a fuego la figura de Grimm y su sonrisa mientras se desvanece frente a sus ojos.
Ichigo se levanta, esquiva la patada matutina y le grita un poco a su padre antes de salir de casa, Yuzu le recuerda que debe llevarse la caja de bentou y él se despide con un movimiento de la mano, el almuerzo en la azotea transcurre con tranquilidad, Inoue trata de obligarlo a comer alguno de sus inventos raros, Tasuki lo evita mientras Ishida observa en silencio desde una esquina, golpea un par de veces a Keigo antes de que terminen las clases, regresa a casa con Chad, por la tarde su habitación esta silenciosa (tanto como puede estar la casa Kurosaki), su padre grita incoherencias y Yuzu lo llama a cenar, una cena normal, llena de discusiones y risas de sus hermanas, hace la tarea con los audífonos martillándole los oídos al terminar se acuesta a dormir.
No ve ni un solo espíritu en una semana y se siente patéticamente vacio, pero para todos tiene una mueca de enfado y el estoy bien listo.
Contempla el cielo nocturno por la ventana abierta y susurra bajito un “buenas noches idiota” del que por supuesto no escucha la respuesta.
Aunque eso no significa necesariamente que no la tenga, Grimmjow esta encaramado en la ventana, tan cómodo como si fuera su propia casa.