Oct 01, 2007 22:27
Mi queridísimo papá ha insinuado que soy aburrida.
Eso si es notable. Una cosa es que lo digan las amigas (que no lo han hecho, por lo menos no en mi cara) las hermanas menores, vecinos, primos, compañeros, etc. Pero mi jefazo es otra cuestión.
Papá: Ya será el Festival Cervantino ¿vas a ir?
Yo: Mhmmm… Hay volantes por toda la escuela. Ya sabes. Viaje redondo súper barato, con barra libre de lo que lleves. Como que no me llama mucho la atención. (Claro, un autobús lleno de escuincles emborrachándose de aquí hasta Guanajuato y de regreso, uuuuuhhh, que divertido.)
Papá: Deberias ir. Echar relajo un día, por lo menos.
Mi papá, a diferencia de la mayoría de jefes en este planeta, se preocupa porque su hijita no esta desesperada por irse de borracha a otro estado, poniendo de pretexto un evento cultural.
Soy aburrida.
Mi gran fin de semana, fue hacer un intento de ver “El clavel negro”, pero como esta en pocas salas, no llegue a tiempo a ninguna de las dos funciones a las que pude haber asistido. Lo mejor que hice desde la tarde del sábado hasta el domingo, fue intentar sin muchas ganas comprarme zapatos, chacharear por la lagunilla, caminar a lo menso, y comprar unas cuantas plantas en la feria de plantas que se puso en Paseo de la Reforma. Conseguí una planta móvil (mimosa sensitiva), albahaca, y una fresa.
Tendré que hacer cambios. Aunque eso no significa que saldré corriendo a tomar el primer autobús al Cervantino. Debe haber algo mejor.
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