Eres bonita y me enamoraré de ti, que no te quepa duda, yo soy así de frívolo y superficial. Poco más importa, yo terminaré de dibujarte en mi imaginación, soñaré contigo en mis momentos de introversión y te escribiré cartas que nunca jamás leerás. También saldremos a volar cada noche cogidos de la mano, y te besaré hasta absorver una parte de tu alma. Te querré en secreto y te miraré cuando no me veas. Y seré feliz al principio, pero poco tiempo después caminaré por el sinuoso camino de la obsesión, me perderé por el bosque del tormento y en un momento de desengaño intentaré convencerme en vano de que en realidad no eres tan increíble, para al final acabar así, chapoteando en los charchos de mis lágrimas.