Título: Espuma de mar
Resumen: Las sirenas pueden morir de tristeza.
Pareja: Blaine&Kurt, Blaine&Sebastian
Cantidad de palabras: 212 + título
Tipo: Capítulo único y corto.
Género: Angst.
Advertencia: Sin betear, todo error es mío.
Notas: ¿Alguien ha leído la verdadera historia de La Sirenita? Si no, la recomiendo, de ahí saqué la idea.
Escrito para la
Klaine Week 2013: Día 3 - Cuento de hadas (que los cuentos de hadas también tienen sus partes tristes, yo nunca dije que Kurt no quedaba con Blaine al final, ¿o sí :P?).
Espuma de mar
Le dolía, era una sensación horrible que le consumía todo el aire en sus pulmones e, irónicamente, le hacía desear ahogarse en pena para poder olvidarlo. Para poder dejar de vivir.
Porque aquella visión, del príncipe Blaine a un lado de otro chico era desgarradora. Aquellos hermosos y cálidos ojos avellana no lo veían, era como si fuera invisible otra vez, como si las olas del mar lo hubieran tragado definitivamente y en esta ocasión le resultaba imposible nadar fuera de ella.
Las lágrimas cayeron por sus mejillas empapándolas y ciertamente era una sensación extramente reconfortante, porque siempre había estado rodeado por agua hasta un par de días atrás y, de alguna forma, se sentía en casa.
Dio una última mirada al barco que se alejaba de la costa, donde él se quedaba varado, olvidado por el chico al que amaba, para ver a aquel desconocido besar aquellos labios que jamás pudo probar.
Su padre tenía razón. Los humanos no eran nada bueno para ellos, si no los cazaban hasta la eternidad y hacerles morir de locura, le podían romper el corazón y convertirse en espuma de mar, la cruel muerte de los de su especie. Esta siempre en el mar sin estar.
Y, en esos momentos, Kurt estaba muriendo de tristeza.