Over -Capítulo 1

Aug 20, 2020 00:20

OVER

Título: Over
Emparejamiento: Tegoshi Yuya/Masuda Takahisa, Yamashita Tomohisa/Masuda Takahisa, Masuda Takahisa/Takahashi Kaito (unilateral), Tegoshi/OC.
Resumen: Tegoshi volvió luego de 2 años, pero todavía no puede perdonar a Masuda.
Nota: El título nuevamente es por una canción de Ayumi Hamasaki, se adapta muy bien a la historia y no tenía ganas de pensar en un título.

Capítulo 1

Las gotas de lluvia se arrastraban lentamente del otro lado de la ventana, el cielo anunciaba que el tiempo no iba mejorar y las nubes oscuras se agolpaban sobre la ciudad. Tegoshi caminó hacia la ventana y observó el nublado y desanimado paisaje. Vaya forma de recomenzar su vida en su ciudad natal, dos años que le parecieron una eternidad estuvo alejado de esta, pero finalmente había regresado para intentar rehacer su vida intentando olvidar todo. Tomó su chaqueta y las llaves, era tiempo de visitar a sus viejos amigos.

-Keii, ¿no podías comprar algo menos pesado? -reclamó Kato, mientras subían el nuevo refrigerador por las escaleras.
-¿Crees que yo planeaba que el anterior fallara? Ojalá Massu estuviese aquí, él tiene los músculos para este tipo de trabajo.
-¿Quieres que te deje a medio camino con esto y vaya por Massu? No tengo ningún problema -ofreció Kato con malestar.
-Sólo fue un comentario. Maldito ascensor, ¿por qué se tenía que descomponer justo hoy?
-Según el letrero, sólo le estaban haciendo mantenimiento, no estaba descompuesto.
-¿Y por qué escogieron hoy para eso?
-¿Crees que alguien se iba a imaginar que tú llegarías con un nuevo refrigerador? -regañó Kato.
-Vamos, Shige, no te molestes -trató de calmarlo Koyama-. Ya sólo son unos escalones.
-¿Por qué tenías que vivir en el tercer piso?
-Para bajar el viejo mejor llamamos a Massu.
Tegoshi miró a Kato y Koyama medio muertos sobre el sofá.
-¿Y ustedes qué estaban haciendo? ¿Corrieron un maratón? - preguntó a sus amigos que apenas se movían sobre el sofá en la sala de Koyama.
-Subimos un refrigerador por las escaleras -contestó Kato levantando la cabeza
-Entiendo -sonrió Tegoshi-. Bueno, ¿quieren algo de beber? -ofreció levantando una bolsa.
-Claro -asintió Koyama alzando la cabeza entusiasta-. Espera, ¿exactamente qué haces aquí? ¿No deberías estar en el extranjero con tu mujercita?
-Nos divorciamos -contestó cortante, lanzándole una cerveza a Koyama-. Shige, ¿quieres una?
-Claro, gracias.
-¿Y qué pasó? -preguntó Koyama curioso.
-Las cosas no resultaron como esperaba, la relación se fue desgastando y aquí estoy -sonrió-. ¿Qué? ¿Acaso no están felices de verme?
-Claro -sonrieron los otros dos animados.
-Ahora podremos reunirnos como antes.
-Para que sea como antes falta una persona aquí -dejó escapar Koyama.
-Sí, pero no creo que le importe quedar fuera, está claro que los compromisos no son lo suyo.
-¿Aún estás enojado por lo que pasó?
-Jamás me explicó nada, por lo menos eso me debía, pero en vez de enfrentarme se escondió como una rata.
-Tegoshi, Ma…
-Koyama, Shige, ¿están aquí? Recibí tu mensaje, la puerta estaba abier… -Tegoshi alzó la vista molesto, Masuda acababa de entrar, lucía igual que siempre, ropa amplia y llamativa, el cabello oscuro revuelto. Al verlo se quedó paralizado- Yuya… -susurró aturdido.
-Hola, Taka -repuso en tono molesto, Masuda bajó la vista incómodo-. Bueno, por lo visto ustedes tenían un compromiso, qué bueno que hayas aprendido a cumplirlos.
-Tegoshi, no empieces, sólo le envié un mensaje a Massu pidiéndole que viniera a ayudarnos -explicó Koyama.
-Entiendo, ahora eres buen amigo.
-Sólo te fallé una vez -repuso Masuda sin alzar la vista.
-Sí, y escogiste un día que era importante para mí para hacerlo, ya te habías comprometido y no apareciste, ni siquiera me diste una explicación, creí que te había pasado algo.
-Lo siento…
-Ya es un poco tarde para eso, ¿no crees, Taka? Si de verdad quieres disculparte dime por qué no fuiste. Te habías comprometido, eras mi padrino de bodas, creí que mi mejor amigo me acompañaría ese día y no apareciste, dime por qué.
-Lo siento -repitió Masuda girándose hacia la puerta y caminando hacia esta.
-Sigue igual que hace dos años -se quejó Tegoshi malhumorado cuando Masuda ya hubo desaparecido del lugar, Kato y Koyama se miraron entre sí incómodos-. Traidor.
-Lo dices como si hubiese intentado asesinarte, sólo no pudo asistir a tu boda.
-Por si lo olvidaste era mi padrino, llevábamos meses planeando ese día, estuvo en todos los preparativos, ayudó a Keiko con todo y falló en el último momento. No estaría molesto si me dijera qué fue lo que pasó, pero sigue haciendo lo mismo que hace dos años, pide disculpas y huye -repuso Tegoshi arrojándose sobre el sofá- y al parecer nadie sabe nada de lo que pasó.
-Ya te dijimos, no tenemos idea.
-Como sea, ya da igual. Taka no va a hablar y yo no le voy a rogar.

Masuda abrió la puerta de su departamento, dentro del lugar se oían risas.
-Ya volví -anunció mirando hacía la sala.
-Hola, tío Taka, ¿cómo te f…? Estás pálido, ¿te sientes mal? -repuso su sobrino poniéndose de pie.
-No, Sho, estoy bien, sólo cansado. Hola, Kaito, ¿cómo estás? -saludó al mejor amigo de su sobrino que lo miraba fijamente desde el sofá, mientras Masuda colgaba su chaqueta.
-Bi… bien -contestó el chico apresuradamente-. ¿De verdad sólo está cansado?
-Sí, sólo eso- sonrió amable, mientras las mejillas del adolescente se sonrojaban lentamente-. Voy a mi habitación, luego hago la cena. Kaito, quedas invitado, Sho, supongo que ya hiciste tu tarea -preguntó a su sobrino.
-Ya voy… Odio la tarea -protestó el chico.
-No importa si la odias, sólo hazla, no quiero que tu maestro me llame DE NUEVO -repuso remarcando lo último caminando a su habitación, mientras su sobrino se hacía el idiota intentando ignorar el comentario.
-¿De verdad le crees que está bien? -pregunto Kaito a su amigo.
-No lo sé, pero si insisto quizá se moleste, el tío Taka tiene mal genio.
-Contigo, cualquiera.
-Qué quieres decir, ¿eh? -repuso cogiéndolo de la nariz, mientras Kaito gritaba.
-¡Sho, haz tu tarea de una vez! -oyeron gritar desde la habitación. Ambos chicos se quedaron en silencio de inmediato.
-Ya se enojó… -susurró Sho.

Tegoshi caminó hacia la tienda cerca de su casa, habían pasado días desde su regreso, pero algo no lo dejaba tranquilo. A pesar de salir con sus amigos y hablar con estos, algo les faltaba a aquellas reuniones y creía saber qué, lo que sólo lo hacía sentir más molesto consigo mismo. Uno de los dos tendría que ceder y hablar primero para arreglar aquella amistad dañada, pero no iba a ser él.
Pasó frente a un instituto, los estudiantes estaban saliendo de clases, los gritos y risas le recordaron su adolescencia y las travesuras realizadas junto a Masuda. Dio un suspiro nostálgico.
-Vayan directo a casa -oyó decir cerca de la salida, aceleró el paso, conocía esa voz. En la salida del instituto, vestido con ropa deportiva, estaba Masuda.
-Sí, profesor -respondían algunos chicos de mala gana.
-No estoy jugando -amenazó Masuda serio.
Tegoshi sonrió instintivamente, no había cambiado, seguía teniendo el mismo humor de años atrás. Algunas estudiantes se le quedaron viendo mientras hablaban entre ellas, Tegoshi se sintió halagado, seguía siendo presuntuoso de su cara bonita, debía aprovecharlo mientras durara.
-¡Tío, Taka! -gritó un chico lanzándose sobre la espalda de Masuda.
-¡Sho! -regañó dándole un golpe-. ¿Cuántas veces tengo que decirte que no hagas eso?
-Perdón. ¿Puedo ir con Kaito y los chicos al karaoke? -preguntó tirando a su amigo junto a él.
-¿Ahora?
-Síiii.
-No.
-Vamos, por favor.
-Tú hacías lo mismo cuando teníamos su edad -comentó Tegoshi acercándose al grupo- y recuerdo que no le avisabas a tus padres. Hola, Sho, has crecido mucho.
Sho miró a su tío desconcertado, Masuda guardaba silencio incómodo.
-¿Quién es usted? -acabó por preguntar desconcertado.
-Es Tegoshi Yuya, era mi amigo, tú eras pequeño cuando lo conociste, por eso no te acuerdas de él -repuso Masuda de golpe-. Puedes ir, pero primero ve a casa y cámbiate de ropa y no vuelvas tarde.
-¿De verdad mi tío iba al karaoke sin permiso? -preguntó el chico acercándose a Tegoshi curioso.
-Sho… -refunfuñó Masuda.
-Sí y también tenía el mismo mal humor de ahora, no ha cambiado mucho.
-Tesshi tampoco ha cambiado, sigue siendo el mismo pretencioso coqueto con las chicas.
-Tesshi… Hace mucho que no escuchaba aquel apodo, Buta -sonrió algo más animado. Masuda bajó la vista, incómodo, sus mejillas se sonrojaron levemente.
-¿Buta? ¿Tesshi? Qué apodos tan raros -comentó Sho desconcertado.
-Sho, estás perdiendo tiempo, vete ahora antes de que cambie de opinión -amenazó Masuda.
-Está bien, está bien, pero usted algún día tiene que hablarme sobre cómo era mi tío antes. Vamos, Kaito -sonrió a su amigo, mientras el otro chico fulminaba a Tegoshi con la mirada, este último lo miró desconcertado.
-¿Por qué te pidió permiso a ti para salir?
-Mi hermana ya no vive en el país, se fue igual que tú, pero no podía llevarlo con ella, así que lo dejó a mi cuidado. Ahora soy el tío Taka corriendo todo el tiempo para que no se estrelle con un poste o algo le pase.
-¿Eh?
-Créeme, lo ha hecho.
-¿Qué pasa con tu sobrino?
-No tengo idea, quizás su padre era igual, mi hermana nunca me dijo quién era. Bueno, yo te dejo, tengo cosas que hacer -sonrió tímido. Tegoshi recordó esa expresión, sólo la hacía cuando se sentía culpable.
-Claro -asintió mirándolo, mientras se alejaba. De verdad no había cambiado nada.

Tegoshi dio un suspiro, Koyama y Kato discutían sobre un programa de televisión.
-Oigan, ¿de verdad van a discutir sobre un programa de TV? ¿No tienen algo mejor que contar? -protestó malhumorado.
-No repliques tanto, además, tú fuiste quien nos invitó. Si querías otra clase de compañía, debiste pensarlo mejor -repuso Kato regañón.
-Qué humor.
-Siempre se pone así antes de entregar un libro, ya se relajará -sonrió Koyama alegre-. Vamos, pidamos otra ronda, mañana no hay que trabajar.
-Dilo por ti, fin de semana o no, yo debo escribir igual.
-Qué enojón estás, se supone que el mayor entre nosotros es Koyama -se burló Tegoshi.
-Koyama, Kato, hola, ¿cómo están? -saludó un tipo alto y musculoso. Tegoshi se le quedó viendo, nunca lo había visto-. ¿Y Massu? ¿No vino con ustedes?
-No, Yamashita, está en casa cuidando a su sobrino, no siempre puede venir -explicó Koyama.
-Qué lástima, quería verlo -suspiró desanimado, mientras giraba su rostro hacia Tegoshi.
-Él es Tegoshi Yuya, un viejo amigo. Tegoshi, él es Yamashita Tomohisa, un conocido.
-Hola, un gusto -se saludaron ambos fríamente. Tegoshi desvió la mirada en otra dirección.
-Bueno, yo los dejo, denle mis saludos a Massu -se despidió el desconocido.
-¿Y ese qué negocio tiene con Taka?
-Ninguno, sólo está enamorado de él -comentó Koyama distraído mirando a un grupo de chicas que les sonreían desde el fondo del bar.
-¿Enamorado?
-Sí, larga historia. No importa, de todas formas, Massu no le hace caso, sigue enamorado de otra persona.
Tegoshi fijó su mirada en Koyama, atónito. ¿Enamorado de otra persona? ¿Desde cuándo? Había tantas cosas que se había perdido esos años. En otros tiempos, seguro Masuda se lo hubiese contado, pero su distanciamiento y el hecho de que él estuvo dos años en el extranjero no ayudaron en nada. Kato miró a Koyama con cara de reproche, este se cubrió la boca aturdido.
-No le digas que te dije o me matara -suplicó a Tegoshi.
-Lo voy a pensar -se burló el rubio divertido. No lo haría, pero era divertido gastarle bromas a Koyama, además, dudaba que Masuda lo quisiera inmiscuyéndose en su vida privada. Quizás, si las cosas cambiaban, podrían hablar de ello en el futuro, aunque realmente estaba sorprendido de que Masuda hubiese confesado estar enamorado de alguien, de adolescentes tenía que hacer malabares para que aquel chico confesara sentir interés en alguna chica.

Masuda arrastró a su sobrino en dirección a su habitación, el adolescente se había dormido sobre el sofá y no había forma de despertarlo, lo acomodó sobre su cama y lo dejó solo.
Miró la hora en su reloj, apenas eran las diez, apagó la luz y caminó a su habitación, fue directo al closet y hurgó entre sus cosas sacando un álbum de fotos. Se sentó sobre su cama y observó su contenido, la mayoría eran fotos de su adolescencia, posiblemente la época más confusa de su vida, cuando descubrió que se sentía atraído por su mejor amigo y no por una chica como los demás. Pasó las páginas con nostalgia, observándose a sí mismo y a Tegoshi, la persona que despertó aquellos extraños sentimientos que lentamente se transformaron en amor y que hasta ese día continuaban allí. Había intentado olvidarse de él, conocer a otras personas, enamorarse de alguien más, pero aun así lo que sentía se negaba a abandonarlo. Posiblemente, si tenía una pareja jamás la podría querer como a él, Tegoshi siempre sería especial, incluso si como en ese momento lo odiaba por mal amigo.

Capítulo 2

****No revisé bien esto antes de publicarlo, me disculpo por los errores.
Aaaaaaah, segunda historia publicada, espero llegar hasta el final. Al terminar la anterior dije que Ueda y Nakamaru aparecerían más, pero mentí, sólo aparecerán una vez jajajaja En su lugar, están algunos Kinpuri, me encanta Sho en esta historia.

emparejamiento: yamapi/masuda, yamashita tomohisa, hirano sho, masuda takahisa, takahashi kaito, emparejamiento: tegoshi/masuda, iwahashi genki, fanfic, emparejamiento: masuda/kaito, koyama keiichiro, kato shigeaki, fic: over, tegoshi yuya

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