Home, Sweet Home
Intentan lichar a homicidas de niña en Contreras
Pobladores de San Nicolás Totoloapan se enardecen durante la reconstrucción del crimen
Rubelio Fernández
El Universal
Jueves 28 de julio de 2005
La reconstrucción del homicidio de una niña de ocho años de edad el pasado domingo, ordenada por el fiscal Sabastián Juvenal, de la 25 Agencia del Ministerio Público, estuvo a punto de terminar en el linchamiento de los dos presuntos responsables por parte de pobladores de San Nicolás Totoloapan, quienes observaron durante cuatro horas como los presuntos responsables escenificaron una y otra vez el delito contra la menor.
A partir de las 16:00 horas elementos de la policía judicial y preventiva, de la coordinación territorial en Magdalena Contreras formaron un cerco de protección a lo largo de las calles Álamo, donde vivía la menor y hasta la cerrada de callejón de las flores, donde fue encontrado el cuerpo mutilado de la pequeña.
Los ahora confesos, Pedro Jácome Mendoza, caballerango de un potrero donde se adiestran caballos, y el carnicero Germán Teherán Albarrán, narraron como durante la madrugada del domingo, cuando se encontraban en estado de ebriedad, tocaron a la puerta de "Beto", padre de la menor, y tras gritar por varios minutos empujaron la puerta y lograron abrirla accidentalmente.
En ese momento el caballerango cargó a Monserrat y aún dormida la llevaron hasta el potrero donde se despertó y tras taparle la boca la tundieron a golpes con una piedra.
Fue entonces cuando el carnicero la sacó a un terreno baldío y ahí le cortó el brazo derecho.
A pesar de que más de 25 patrullas del Sector Dinamos de la SSP local mantuvieron un cordón de protección para que los peritos y policías judiciales practicaran la dirigencia, la gente del poblado se enardeció al observar una y otra vez como los cómplices ejecutaron el homicidio, aparentemente motivado por una venganza sin que hasta el momento se conozca el motivo.
Tras hacer sonar las campanas de la Iglesia, los pobladores llamaron a linchar a Pedro Jácome Mendoza y Germán Teherán Albarrán, quienes permanecían a bordo de una camioneta cerrada para ser trasladados nuevamente a la Agencia 25 del MP.
Esta revuelta entre los pobladores propició que el director de la Policía Judicial, Damián Canales, y el subsecretario de Seguridad Pública, Gabriel Regino, se presentaran en el lugar con por lo menos 800 policías de ambas corporaciones para disuadir a los rijosos, quienes pretendían arrebatar a las autoridades a los responsables del homicidio de Monserrat y hacer justicia por sus propias manos.
El cordón policial nunca fue rebasado y los pobladores no se dieron cuenta del momento en que los presuntos responsables fueron evacuacados del área donde ellos suponían se encontraban, informaron fuentes de la SSP local.