May 24, 2006 11:46
Anoche me abracé a tus sueños. Arropé tu alma con mi piel para regalarte el calor de mi felicidad. Navegué por los mares de tu grandeza para inundarlos de ilusión. Te desbordaste y tus latidos confundieron al reloj del mundo, que se paró para ver la danza de tu dulzura con la luna. Las estrellas se batieron en duelo para empaparse del brillo de tus ojos y jugaron con las luciérnagas, borrachas del hechizo de tu corazón y la magia de tus sueños. En su lucha por tocarte, se precipitó la lluvia de estrellas de un cuento, y la noche cubrió con fuegos artificiales la rutina nocturna. Luego te canté mis silencios y te susurré el calor de mis secretos. Te hice cosquillas en el alma, y tu sonrisa cubrió de miel el universo. Entonces eclipsaste el mundo y te hiciste dueño del cielo.