Luto

Jun 05, 2009 21:32

Como peruana criada en los '80, una de las primeras cosas que aprendí sobre política es que los buenos no siempre son buenos, y que los malos no siempre son malos sin motivo. A tenerle miedo a las personas uniformadas. A no dar opiniones en voz alta frente a extraños. A nunca preguntarle nada a un policía.

Aprendí que la gente no necesitaba ser culpable para que le den la pena de muerte sin juicio. Bastaba con que el que tenía el arma en ese momento pensara que lo era.

Y aprendí que la violencia no es gratuita.

Ésa es una de las cosas que más me ha costado explicar a lo largo de mi vida. Que el hecho de que crea firmemente que existen razones para la violencia no significa de ningún modo que justifique el terrorismo. No digo que tuvieran razón. Estoy totalmente en contra de lo que hicieron. Solo digo que la violencia no surge de la cabeza de un loco arengando a las "pobres masas ignorantes".

Existen razones para la violencia.

Son éstas:
http://www.youtube.com/watch?v=DjBFat1YoNk
http://www.youtube.com/watch?v=VRj7trvxguw

La versión oficial es que han muerto 11 policías y 3 civiles. Los reportes de los hospitales cuentan hasta el momento 25 civiles y más de 100 heridos. Los heridos incluyen a una niña de 4 años con un balazo en el estómago.

La versión oficial es que los nativos tenían armas y atacaron a la policía. Las primeras imágenes muestran que la policía disparó desde los helicópteros a población desarmada. Los testimonios dicen que le quitaron los fusiles a la policía cuando vieron a los heridos.

La versión oficial culpa a los dirigentes por arengar la protesta, y se escuda en las negociaciones que ha mantenido hasta ahora sin ningún resultado concreto para los pueblos amazónicos. No es la primera vez que lo hacen. Y me temo que no será la última.

La versión oficial dice que nunca se planeó matar a nadie, que solo querían dispersar a la gente. Uno de los primeros muertos fue el dirigente principal de las comunidades nativas.

Temo por mi país. Cada día que pasa nos acercamos más al abismo, y el gobierno no parece capaz de más respuesta que "lancemos bombas lacrimógenas y disparemos a matar".

"No podemos ceder ante demandas terroristas," dicen. Y parece que por "ceder" se refieren a escuchar a otros, y por "terroristas" a todo aquel que no esté de acuerdo con sus políticas. No digo que la protesta haya sido enteramente pacífica (casi ninguna lo es). No digo que no haya sido necesario frenarla. Lo que digo es que, tal vez, solo tal vez, la manera de frenarla no era una masacre, sino una voluntad real de escuchar a tu pueblo como a un igual, de tomar en cuenta la opinión de las personas más afectadas por una medida al momento de implementarla.

Dije hace poco que estaba orgullosa de mi país.

Había olvidado (por un glorioso segundo) quien se sentaba en la silla presidencial.

de las cosas serias

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