Back
Ya está. Después de algo más de cinco meses vuelvo a estar sentada delante de esta pantalla, con el sonido de la máquina de cortar el césped de fondo, y con todos los olores familiares.
Efectivamente, no es tan horrible volver. El mecanismo de defensa se activa de nuevo y la vida anterior parece lejana e irreal. Esta vida pasa a parecer la única que ha habido.
Pero.
Sé cómo desactivar el mecanismo de defensa. Sólo hace falta un poco de voluntad. Fotos, quizá, y pensar en eso en lo que no quieres pensar, en esa realidad que da puñetazos contra la muralla que el mecanismo de defensa ha construido en tu mente: SE HA ACABADO
Y a veces el muro se quiebra un poco y mil sentimientos e ideas se cuelan e inundan la parte del cerebro que creíamos segura. Y algo nos golpea y tenemos que agarrarnos a algo y cerrar los ojos. Y pequeñas lagrimitas te sorprenden, y parpadeas muchas veces y deseas que el mecanismo de defensa repare pronto la grieta.
Son días extraños.
Efectivamente, no es tan horrible volver. El mecanismo de defensa se activa de nuevo y la vida anterior parece lejana e irreal. Esta vida pasa a parecer la única que ha habido.
Pero.
Sé cómo desactivar el mecanismo de defensa. Sólo hace falta un poco de voluntad. Fotos, quizá, y pensar en eso en lo que no quieres pensar, en esa realidad que da puñetazos contra la muralla que el mecanismo de defensa ha construido en tu mente: SE HA ACABADO
Y a veces el muro se quiebra un poco y mil sentimientos e ideas se cuelan e inundan la parte del cerebro que creíamos segura. Y algo nos golpea y tenemos que agarrarnos a algo y cerrar los ojos. Y pequeñas lagrimitas te sorprenden, y parpadeas muchas veces y deseas que el mecanismo de defensa repare pronto la grieta.
Son días extraños.