Fantasmas del Pasado - Capitulo 6
Aca tienes Gina!!
Titulo: "Fantasmas del Pasado"
Autores: Miri (mirita23) y Nad (cristcat)
Fandom: Btvs/Ats
Raiting: NC-17
Género: Crack, Angst, Romance.
Warnings: Sexo explícito.
Capitulo 6
Spike estaba empezando a ponerse impaciente. Angelús había entrado a la mansión del Conde hacia más de una hora y aún no había señales de que fuese a salir. De pronto, Spike ve a los vampiros movilizarse y Angelús abandona la mansión seguido por sus sirvientes. El rubio lo ve pasar cerca de él y siente una punzada en medio de su alma, desde la noche que fue a su departamento no lo había visto. Por un momento, el observar la imagen del vampiro caminando seguro y vistoso en la oscuridad de la noche, lo llevó a pensar en Angel. En sus brazos, sus labios y en lo mucho que lo necesitaba, sintiendo como lo extrañaba más que nunca.
Luego de darles un poco de tiempo para alejarse, Spike comenzó a rastrear su aroma desde una distancia razonable para no ser descubierto, caminado cerca de media hora hasta llegar a una antigua casa al este de la ciudad.
La casa era grande, con un espacioso jardín y columnas con acabados hechos en mármol, lo que no extrañó a Spike que conocía muy bien los suntuosos gustos de Angelús. Spike empezó a infiltrarse por la parte posterior, intentando pasar desapercibido. Un vampiro salió a su paso y Spike sacó su estaca eliminándolo tan rápido que hasta le pareció aburrido tener que enfrentar a vampiros tan mediocres. “¿Estos idiotas te cuidan Angelús?... ¿no pudiste conseguirte algo mejor?" pensó Spike cuando trepaba un muro entrando al patio posterior de la casa. Caminó lento y con cautela hasta que tres vampiros salieron a su paso. Uno de ellos se había enfrentado anteriormente con él.
-Otra vez tú -dijo el vampiro- ¿No te rindes verdad William?
-Es Spike -responde molesto-. Y no, no tiendo a darme por vencido con facilidad.
Se desató una pelea en la que inicialmente Spike tiene un poco de ventaja debido a su experiencia. Logró estacar a dos de ellos y otros más aparecen rodeándolo, mientras Spike pelea lo mejor que puede a pesar de encontrarse en total desventaja. Dos de ellos lo toman por la espalda y un tercero lo golpea en el estomago.
-¡Basta! ¡Déjenlo! -ordenó Angelús entrando por una puerta.
-Pero… Angelús, este estúpido está intentando matarnos -protestó uno de los vampiros.
-¡He dicho que lo suelten! -gritó Angelús mostrando su rostro vampírico-. ¡Ahora!
Los vampiros sueltan Spike que tardó un poco en reponerse. Angelús se le acercó despacio, mirándolo divertido.
-Debiste avisarme que vendrías, Willy. Mis chicos no suelen ser muy amigables con los extraños -le dice acercándose a su oído y susurrando-. ¿Vienes buscando un poco de pasión?
-Cállate imbécil -responde Spike alejándose -. Vine a matarte.
-¿En serio? ¿Vas a matar a tu creador? ¿Destruirías a Ángel? -pregunta Ángelus fingiendo interés -.. No lo creo, William. Tu nunca será capaz de hacerlo Por el contrario, creo que si me buscas tanto es porque lo extrañas, ¿verdad?
Spike se da cuenta que Ángelus estaba hablando en un tono diferente al que usaba por teléfono, obviamente para mantener ante sus sirvientes su imagen de macho dominante, entonces decide atacar justo en su ego.
-No. Pero imagino que tú si debes de extrañar las noches conmigo. De lo contrario, Angelús, no entiendo el motivo de tus llamadas amorosas y de los regalos que dejas en mi cama -pregona Spike, añadiendo mordazmente- ¿Eres tú el que extraña lo que le hacia a Angel, mis caricias, mi cuerpo haciéndote Mío?
Angelús enfureció ante eso al notar que los demás lo miraban sorprendidos, entonces golpea a Spike en el rostro haciéndolo volar contra la pared. Uno de sus sirvientes se acercó para sumarse a la pelea y Angelús lo detiene.
-Váyanse, déjenme solo son él. Parece que a Spike se le olvido como respetar a su sire.
El grupo obedece las ordenes de Angelús y se retiran dejándolos solos.
-¿Acaso te volviste loco? -dice con reproche Ángelus-. ¿Pretendes acabar con mi reputación?. No es mi culpa que Angel y tú sean un par de locas pérdidas. Yo no lo soy. Tú a mi sólo me sirves como diversión.
-Eres un Bloody bastardo -gritó Spike levantándose-. Juro que voy a acabar contigo y traeré a Angel de vuelta.
-Si, claro. Sabes? Ya me tiene cansado ese estribillo, Willy -señaló con sarcasmo acercándose a Spike-. Y creo que sólo hay una forma de corregirte.
Angelús empezó a golpear a Spike y pronto ambos estaban sumergidos en una gran pelea, Spike golpea con todas sus fuerzas a Angelús tratando de reducirlo para luego poder llevarlo a W&H, pero el moreno parece estar en mejores condiciones, sobretodo considerando que el oxigenado lleva días sin dormir y alimentarse bien.
Spike saca una estaca y Angelús al verla ríe divertido. Antes que el rubio se diese cuenta de una patada logra que el rubio pierda el equilibrio y la estaca. Angelús la coge y luego empuja a Spike contra la pared. El oxigenado pensando que este es su fin, cierra los ojos. De pronto, siente los labios fríos de Angelús sobre los suyos besándolo furiosamente. Spike intenta alejarse, pero el sabor de los labios de Angelús es el sabor de Angel y la nostalgia lo gana, cediendo por unos segundos ante el deseo corresponde al beso, pero luego reaccionar mordiendo el labio del moreno y logrando que este lo suelte.
-Vete... -indicó Angelús con rabia y amenazando al rubio aún sin soltarlo-. Desaparece en cinco segundos o te juro que tu linda estaca terminará hundida en tu corazón.
-¿Por qué no lo haces de una vez?
-Aún quiero divertirme contigo, Willy -responde con burla soltándolo, agregando mientras se aleja-. Hablo en serio, ¡Vete!
Spike se quedó parado mirándolo, pero Angelús vuelve a acercársele levantando la estaca de forma amenazante. Spike sólo esquiva el ataque y emprende la retirada.
El recorrido de Spike hasta W&H se hace eterno, camina sintiéndose derrotado, humillado. Hace un esfuerzo por contener las lágrimas que se asoman en sus ojos. Haber sentido los labios de Angel nuevamente lo ha llenado de pesar. Más aún, el haber sido derrotado y humillado una vez más por Angelús hacen que se sienta peor a cada segundo, extrañando infinitamente el calor y la seguridad que le daban los brazos y caricias de Angel.
***
En W&H, Wesley se encontraba en la biblioteca, buscando una nueva forma de convencer al maldito Conde Machiavello de devolverles el alma, pero no la encontraba. En esos momentos su secretaria entro anunciándole una llamada desde Europa, exactamente desde el Consejo de Vigilantes.
-¿Giles? -dijo Wesley al levantar el teléfono, imaginándose de quien se trataba.
-Si. ¿Cómo esta todo por allá, Wesley?
-Igual. Aún no podemos capturar a Angelús, ni recuperar el alma de Angel -respondió con cansancio Wes-. Los Ángeles está hecho un caos por estos días.
-Me lo imagino. Creo que deberías volver a considerar mi oferta de enviarte una Cazadora. Si las cosas están tan mal como sugieres quizás sea lo mejor.
-No -aseguró el ex vigilante-. Por ahora lo estamos manejando. ¿Apareció Willow?
-Si. Ese es el motivo de mi llamada. Estará en el consejo en un par de horas, y le explicaré sobre el problema.
-Grandioso.
-La enviaré en el siguiente vuelo a L.A., con suerte estará allá en la noche de mañana.
-¿Noche? Creo que será mejor que pueda llegar en el día. Por su seguridad, durante el día es más difícil que los vampiros ataquen.
-Entiendo, entonces debo suponer que ellos han tomado L.A, ¿y no necesitan una cazadora?. Creo que deberías dejar de pensar sólo en Angel y recordar que debe haber mucha gente muriendo con todo esto, Wesley -le amonestó Giles.
-Lo sé... pero, apenas Willow recupere a Angel lograremos acabar con esto.
-No me parece la mejor forma. Pero confió en tú criterio y en que recuerdes que después de todo, los vampiros, sea quien sea, no son tan importantes como los humanos.
-¿Criterios del Consejo? No te preocupes, los tengo presentes -contesta sintiéndose sermoneado-. Pero en el mundo real, esos criterios no se aplican siempre, tú lo sabes mejor que nadie y yo tengo aquí dos ejemplos perfectos, de que los vampiros no son siempre malos.
-Si y también son ejemplos de la gran destrucción que pueden causar uno sólo de ellos.
-Angel ha ayudado a mucha gente, merece una oportunidad.
-Probablemente, pero… ¿a costa de cuantas vidas será esta vez? -preguntó Giles con reproche y Wesley no le pudo contestar, quedándose por un rato mudo-. Sé que es duro decirlo y pensarlo de esta forma, Wesley.
-No creas que no lo he pensado.
-Lo creo. Bien, ya no te preocupes, pronto, Willow estará allá para ayudarlos... pero si ella no puede hacerlo, siento mucho decirte que el Consejo piensa intervenir.
-¿Qué dices? -preguntó Wesley sorprendido- ¿Cómo se enteraron?... ¿acaso tú?
-No fue por mí que lo hicieron, te lo aseguro. Aunque opino igual que ellos, un vampiro como Angelús suelto y con el control de esa firma de abogados maligna puede ser el inicio de un nuevo Apocalipsis y eso debe ser detenido, a cualquier precio.
-No pueden hacer eso, tenemos la seguridad de que Willow va a detener esto, solo necesitamos un poco de tiempo.
-Wesley... creo que debes empezar a pensar en forma objetiva -pidió Giles, agregando rápidamente-. En cuanto al tiempo, no te preocupes, tendrás un par de días con Willow para ver si puede resolverlo.
-De acuerdo, te mantendré informado -respondió resignado Wesley colgando el teléfono, mientras por su mente pasaban en conflicto muchos pensamientos.
El ex vigilante no podía dejar de sentirse disgustado por haber dejado que todo vaya tan lejos, al limite que incluso el Consejo ya estuviese enterado. ¡Demonios! Esta vez el equipo se confió demasiado en que la poderosa W&H pudiese ser lo suficientemente segura como para evitar que un loco pudiese hacer realidad una amenaza de ese tipo. Era ridículo pensar en que ello fuese posible, pero ocurrió y ahora, Wesley tenía su escritorio lleno de expedientes con todas las muertes que su error le estaba causando a la ciudad de Los Ángeles. Probablemente no era justo para tantos inocentes, terminar siendo alimento de vampiros, pero por el momento era mejor no pensar en esto, para hacerlo más fácil a su conciencia y no terminar aceptando la ayuda del consejo... por ahora, Wesley sólo esperaba que Willow llegara sin problemas y recuperara el alma de Angel.
***
Más tarde, Wesley ya estaba dejando su oficina para buscar a Gunn en la suya, cuando de pronto Spike llego, bastante golpeado.
-¿Qué te paso?
-Yo lo encontré...-respondió, agregando con cierta aflicción-. Encontré a Angelús, pero no pude atraparlo.
-¿Dónde? Quizás aún podamos dar con él.
-No lo creo, a estas alturas ya debe estar en otro sitio.
-Pero, Spike... ¿Qué... cómo... cómo lo encontraste? -preguntó Wesley confundido.
-Fui a ver al Conde de nuevo, para acabar lo que empecé temprano, ya sabes, mandar a una nueva dimensión a ese estúpido y fue allí donde lo encontré, él esta haciendo tratos con Machiavello y...
-Un momento. ¿Fuiste a hacer qué? -Interrumpió Wesley incrédulo-. ¿Has perdido la razón?
-Yo... es sólo que -empezó a decir Spike recordando toda esa noche y sus sentimientos por Angel-. Tú no lo entenderías.
-Lo siento, Spike -dijo Wesley, tratando de ponerse en la situación del vampiro y darle de alguna forma un consuelo-. Me imagino que esto es muy duro para ti... Angel también lo sabía y estaba seguro que tú podrías manejarlo. Pero, perdiendo el control no se logra nada, lo sabes -Añadió sin recibir respuesta del rubio, quien parecía sumido en sus propios pensamientos.
Wesley pensó que lo mejor era cambiar de tema, sino iba a tener que pasarse la noche argumentando con Spike las formas correctas para actuar bajo las circunstancias que tienen y las que no lo son, era una situación que prefería evitar.
-Ahora, ¿cuéntame todo, quieres?. ¿Dónde encontraste a Angelús?
-¿Encontraste a Angelús? -preguntó Gunn entrando a la oficina, llamando la atención del rubio -¿Dónde esta?
-No lo sé -respondió Spike.
-¿Qué?... dices que lo encontraste y no sabes dónde esta, ahora. Déjame ver, no será que se te ocurrió meterte en el lugar, en vez de venir a avisarnos? -preguntó Gunn, ya algo molesto.
-No tuve tiempo... tenía que llegar a Angelús.
-¿Quieres decir que diste con su escondite?
-Así es.
-¡Spike! Eres un completo imbécil -le increpó el abogado, bastante molesto por el poco criterio del vampiro.
-Gunn, cálmate... seguro, Spike tuvo una buena razón para hacer esto. ¿Spike, qué fue lo que paso?
-Ya te dije -contestó tratando de no responder a los insultos de Gunn ni a sus ganas de romperle la cara, sobretodo porque ahora sí tenía razón de estar furioso-. Lo encontré, lo seguí, llegue a la mansión donde se escondía y quise investigar para estar seguro, pero sus hombres me encontraron, pelee con ellos, luego con Angelús... y finalmente...
-¡Escapaste! ¡Grandioso! -Interrumpe Gunn irritado, añadiendo entre burla y molestia, mientras miraba con desaprobación a Spike-. Tú mismo lo has escuchado, Wesley, el oxigenado lo encuentra después de días de búsqueda intensa y quiere jugar al héroe enfrentándose con ellos solo. ¿Sabes?, hasta para ser héroe hay que tener cierta práctica -concluyó hiriente de frente al rubio.
-Gunn no digas eso, ¿quieres? -le pidió Wesley.
Wesley puso una mano en el hombro de Gunn alejándolo de Spike, era notorio que el vampiro se sentía bastante mal como para hacerlo sentirse peor. El vampiro evitaba mirarlos y contenía sus ganas de salir corriendo de ese sitio y mandar todo al infierno.
-Vamos, Wes ¿cómo vas a defenderlo?. Ayer fue lo mismo, no te das cuenta que sus arrebatos nos traen sólo problemas -se quejó Gunn mientras Spike un poco más allá los escuchaba, tratando de no pensar en esa situación y perdiéndose en el vacío.
-No es el momento para reproches -señaló Wesley determinante al abogado, para después volviéndose hacia Spike, agregar-. Ahora, debemos pensar objetivamente, ¿en que lugar fue que estaba esa mansión, Spike?
-Al este de la ciudad... en las afueras -contestó el rubio cortante.
-Enviaremos a cubrir toda la zona. Gunn, ¿puedes ir con uno de los equipos de la firma?
-De acuerdo, iré con un grupo, pero es la última vez que acepto arreglar las estupideces de otros. Gracias Spike, gracias por ayudar a Angelús -exclamó mirándolo despectivamente y saliendo de la oficina.
Spike no dijo nada, ni se movió para responderle, sólo espero que saliera, para él mismo pensar en seguir de nuevo el rastro de Angelús.
-Creo que es mejor que me vaya -mencionó Spike desanimado, dirigiéndose a la puerta-. Tal vez pueda volver a encontrarlo.
-¿Spike?
-Lo sé. -respondió el vampiro parando aún sin voltear- Les avisaré si lo veo y no te preocupes, no voy a actuar solo.
-Bien... y Spike, yo... yo lamento lo que dijo Gunn, todos estamos muy tensos con esto -se disculpo Wesley-. De todas formas lo atraparemos, sólo debes confiar más en nosotros como lo estamos haciendo contigo.
-Como digas... pero, lo que dices no es cierto -señaló el vampiro, volteando a ver al otro.
-¿De qué hablas?
-Todos ustedes no confían en mí -dijo Spike con molestia y reproche-. Ustedes piensan que los estoy engañando o que en cualquier momento lo voy a empezar a hacer, que llegaré a traicionarlos y trabajare para Angelús, ¿no?
-Eso no es cierto. Fred confía en ti. Gunn esta muy estresado y yo no creo que Angel no te interese. Estamos en esto juntos, ¿no lo ves?
-No, no es así -replicó Spike irónico, agregando algo lastimado- Tú por ejemplo, lo haces porque Angel te pidió que fueses bueno conmigo, ¿cierto?. Pero, sabes, no tienes que hacerlo, no, si él ya no esta.
-Olvídalo -se da por vencido Wesley-. Trata de mantenerte vivo, avísanos si lo ves y pronto lo tendremos, ¿de acuerdo?.
-Bien -afirmó el rubio sin emoción, volviendo a retomar su camino para salir de la oficina.
-Spike, sólo una cosa más -dijo Wesley regresando a sentarse a su escritorio y retomando los papeles que estaba revisando-. Por hoy, no creo que sea buena idea que sigas buscando. Deja eso para el equipo que ya envié y si me permites un consejo, me parece que es mejor que vayas a casa y descanses.
-No necesito tus consideraciones -respondió a la defensiva el vampiro, volteando a ver al ex vigilante de nuevo con fastidio.
-Yo tampoco necesito un hombre menos -le reprochó Wesley mirándolo algo molesto por su obstinación y tratando de ser lo más convincente posible-. Así que sólo descansa, ¿quieres? A la noche no le queda más de un par de horas y serás de más ayuda, si duermes y luego comes algo... y no lo digo por Angel... sólo es simple lógica -concluye Wesley volviendo a sus papeles.
Spike iba a contestarle algo, pero finalmente decidió dejarlo así e irse a descansar, después de todo probablemente el ex vigilante tenía razón.
...
En otro lado de Los Ángeles, Angelús y sus hombres salieron de la mansión al este de la ciudad y se instalaron en un edificio deshabitado en el oeste de la ciudad. El vampiro odiaba el lugar, pero por el momento les serviría hasta poder encontrar otro sitio y mientras la gente de W&H los rastreaba... gracias, probablemente a ese inútil de Spike.
En el Hotel, ya cerca del amanecer, Angelús buscó la soledad de una de las habitaciones, para poder hacer un recuento de sucesos, ordenar sus ideas y planear nuevas torturas para los amigos de Angel.
Así, empezó a pensar todo lo que había hecho y en lo que faltaba aún por hacer para concretar su plan de deshacerse de su adorado equipo, y dejar a Spike para el final. Pero, por supuesto con esos "adorables" intermedios entre ellos, que sólo servían para lastimar más al rubio, lo cual se había vuelto casi una obsesión para él.
Aunque no quisiese, siempre terminaba la noche pensando en Spike. Probablemente, porque por alguna razón la mente del estúpido de Angel se había acostumbrado tanto a pensar en esa patética criatura, que ahora incluso para Angelús era difícil no hacerlo. Claro, que lo que lo guiaba ahora era el odio que sentía el moreno por todo lo que amaba su otro yo.
A veces venían a su mente, imágenes de toda su vida pasada con Spike, cuando empezó a adiestrarlo para ser tan o más cruel que él mismo "Vaya tiempo desperdiciado" pensaba Angelús con molestia. Apenas podía creer que Spike hubiese sido capaz de, siendo un demonio, ir en busca de un alma para atarse a alguien que probablemente sólo lo utilizaba.
Y de nuevo estaba ella, Buffy, malográndole la existencia a un vampiro... era un hecho, que ella se merecía más que las otras cazadoras sufrir una muerte dolorosa, pues al menos las otras sólo los mataban, no hacían que los vampiros traicionen a toda su raza volviéndose cazademonios como Angel o perritos falderos como Spike. En fin, ya tendría tiempo después de buscar a la rubia y matarla él mismo o mejor enviar a alguien a hacerlo. Y de paso, ver si podían dar con la segunda... Faith era una más en la lista que merecía una visita, aunque ella quizás podría tener potencial de vampiro... quien sabe.
Como fuese, la idea sería poder exterminarlas a todas... pero un paso a la vez, lo primero era poder permanecer como Angelús sin ninguna alma que fuese inesperadamente a volver, y para ello lo principal sería matar a Willow, en la primera oportunidad que se presentase. "Pobre Willy, su última esperanza muerta... ¡Genial!" pensó Angelús, sin poder dejar de sonreír pérfidamente, fantaseando en como se pondría Spike cuando descubriera el cuerpo de Willow sin vida. Y luego de disfrutar ese maravilloso momento, lo mataría... o quizás... aún no. Después de todo, William era de la familia y quizás dentro del rubio aún hubiese algo de maldad recuperable. William el Sangriento alguna vez fue prometedor como un vampiro despiadado, y era una lástima que esa porquería de chip y la maldita cazadora le quitasen toda oportunidad de ser malo por siempre.
Sí... quizás, Spike aún tuviese esperanza... salvo, claro por ese beso que le correspondió... "Qué patético" pensó Angelús divertido, suponiendo que probablemente el rubito estaba tan necesitado de cariño, que no le importo ser nuevamente usado... "¿Y si le hubiese propuesto follar?... seguro se corría solo por la excitación" volvió a pensar el moreno en burla, no pudiendo evitar reír cruelmente.
Esto llevo a Angelús al pasado. Podía recordar como fue cambiando William, como todo lo asustaba al principio y como fue poco a poco consintiendo todo, por supuesto con la excusa de que no había limites para los demonios. Hacer dúos, tríos, orgías o lo que fuese por complacer a su Sire, no era muestra de debilidad, sino de audacia. Parte del vivir fuera de las reglas, aunque no se entendiesen bien cuales eran estas ni si se estuviese listo aún para enfrentarlas como en el caso de Willy. Sin embargo para eso lo tenía a él o a Dru, para decirle cuan malo debería ser. Lástima, que ocurriera la maldición de los gitanos, y que luego el rubio le resultara tan aburrido a Drusilla, que en menos de un siglo lo terminase dejando por otros. Pero eso no sorprendía a nadie, lo cierto es que al principio, William era demasiado frágil para ser un demonio, como si la humanidad en su cuerpo fuese difícil de erradicar, a pesar de todos los golpes y de las humillaciones a las que Angelús lo sometió, llegando incluso a irrumpir en su cuerpo sólo para demostrarle quien dominaba. Y quién diría que siglos después la nostalgia por el sexo con él ardería tanto que lo llevaría a entregarse a Angel y que este se enamoraría del rubio. Ambos un par de seres trágicos, productos de la Cazadora, quien los dejó sin darles mejor opción que el ser un par de maricas. "Imbéciles".
Era mejor no seguir recordando, lo único que Angelús había conseguido con todo esto fue revivir la necesidad de volver a poseer a Spike, someterlo de nuevo a golpes hasta sacar de nuevo al demonio que habita en él. De pronto, ya estaba decidido, Spike recibiría pronto algo más que una simple visita. Algo que le seria difícil de olvidar, de eso se encargaría Angelús, como siempre buscando eliminar todo rastro de humanidad en el rubio. Pensando en esto, Angelús se quedó planeando su futuro ataque, teniendo como prioridades la muerte de Willow y luego el abusar del rubio, muy pronto.
...
Cerca al mediodía, Spike, quien se había quedado dormido en la oficina de Angel, por fin se despertó, y al darse cuenta de la hora se sintió fastidiado por haberse dormido durante tanto tiempo, aunque realmente sólo lo hubiese hecho por 4 horas, el resto del tiempo se la paso despierto, pensando en lo inútil de su proceder la noche anterior. Ahora estaba listo para empezar de nuevo su búsqueda. Con esto en mente salió de la oficina, pensando en visitar primero a Harmony y pedirle algo de sangre, sin embargo al acercarse al estante de la vampiro lo primero que observó fueron un montón de coronas de flores y otros arreglos fúnebres en todo el hall, y a unos empleados que continuaban trayendo más.
-¿Qué es todo esto, Harm? -preguntó extrañado viendo que la rubia por fin aparecía, llegando algo fastidiada de una de las oficinas.
-Son de Angelús -le explicó, agregando con cara de culpa-. Gunn está realmente molesto. Es que se me olvido llamar para bloquear las tarjetas de crédito de Angel.
-Ya veo. ¿Dónde esta Wesley? -preguntó el rubio, luego de darse cuenta que cada corona tenía un nombre escrito, el nombre de cada uno del equipo con un "Descanse en paz". Indudablemente eso salió de la mente retorcida de Angelús.
-Wesley está con Gunn en su oficina, pero, yo que tú no entraría allí -respondió Harm, dirigiéndose a los teléfonos para empezar a llamar a los bancos y realizar los bloqueos de tarjetas.
Spike no hizo caso a la sugerencia de la vampiro, y se dirigió a la oficina del abogado, quien apenas lo vio no pudo evitar mirarlo con desprecio.
-Pero ¿mira a quien tenemos aquí? -dijo Gunn con ironía-. ¿Y ahora que vendrás a decirnos, eh?... que Angelús esta camino a Europa y tu no pudiste detenerlo.
-No he venido a hablar contigo -advirtió Spike.
-¿Viste lo que nos envió tu amigo Angelús? -preguntó el abogado con reproche-. Por supuesto, si aquí tenemos a un par de vampiros que trabajan para él, debe estar muy feliz.
-Gunn, no sigas con eso -advirtió Wesley-. Sólo fueron un par de pequeños errores y nada más.
-¿Pequeños errores? -Respondió enojado Gunn-. Wesley, ¿no entendiste lo que paso? Harmony se olvidó de bloquear todas las tarjetas de Angel ¿te imaginas lo que pudo haber pasado?. Yo te lo diré, fuera de las flores del psicópata, él pudo haber hecho lo que quisiese con ese dinero, incluso salir del país. Claro... porque cierto vampiro inútil que también está supuestamente ayudándonos, le da la oportunidad de hacerlo.
-Sabes que eso seria difícil -comentó Wesley rápidamente, mientras el rubio permanecía callado-. Angelús no saldría del país, no al menos hasta asegurarse de que su alma ya no va a volver sobre él.
-¿Qué garantía hay de eso Wesley?. Sólo tenemos lo que nos dice Spike y francamente la ayuda que nos esta dando hasta el momento da mucho que desear, ¿o has averiguado algo más? -concluyó preguntándole al rubio.
-No -respondió Spike cortante.
-Lo ves. Pierde a Angelús y en vez de tratar de arreglarlo, se va a descansar. ¡Increíble!.
-Wesley, ¿puedo hablar contigo en la oficina de Angel?. Te espero allá -mencionó Spike ignorando al abogado y saliendo de la oficina sin decir nada más.
-¿Te das cuenta, Wes? Por eso no responde, porque sabe que tengo razón.
-No, la tienes y deja de hacer esto. Necesitamos calmarnos y pensar mejor lo que hacemos, lo de las tarjetas fue un error, pero no sólo de Harmony y lo otro, le pudo pasar a cualquiera y si Spike se fue a descansar, fue porque yo lo se lo ordene.
-¡Increíble! -dijo Gunn con fastidio- ¿No puedes dejar de defenderlo?
-No es eso -respondió Wesley-. No debería, pero voy a repetírtelo, Angel confiaba en Spike, así que sólo déjalo en paz y busquemos otra forma.
-De acuerdo.
-Y pienso que deberías disculparte con Harmony, ella tampoco merece que la trates mal.
-Lo haré.
Wesley fue a la oficina de Angel, sintiéndose intranquilo al pasar por el pasadizo con todos esos arreglos florales, pensando que tal vez Gunn podría tener razón, Angelús podría haber decidido abandonar el país o la ciudad, quizás iría en busca de Willow. Se quito los lentes y apoyo su mano en la frente en obvio señal de agotamiento. Pensó calmadamente que era muy probable que en esos momentos Willow se encontrase a punto de salir hacía Los Ángeles, así que estaría a salvo.
Por su lado, Spike también estaba enfrascado en sus pensamientos, en todas las muertes que Angelús estaba causando y que más adelante le traerían miseria y sufrimiento a Angel cuando volviese. El remordimiento sería insoportable, por que Angel nunca había llevado muy bien la carga de su pasado despiadado. Por ahora, Spike sólo esperaba que pudiesen lograr recuperar a Angel y luego lo ayudaría a sobrellevar lo que venga. Sumido en estos pensamientos, el rubio no noto cuando el ex vigilante entro al despacho.
-¿Cómo estas Spike?
-Mejor, ayer quería preguntarte, si sabias algo de Willow.
-No aún no -mintió el ex vigilante, en su idea de mantener la llegada de la pelirroja oculta a todos, hasta estar seguro de que había llegado con bien-. Hoy voy a llamar a Giles.
-¿Y dónde esta Fred? - pregunto el rubio.
-A estas horas debe haber ido a casa a cambiarse, volverá antes del anochecer.
-Bien, eso es todo lo que quería saber. Gracias -dijo Spike sin emoción.
-Correcto. ¿Irás a buscar a Angelús ahora?
-Sí, en un rato.
-Ok, nos vemos mañana entonces -finalizó Wesley, saliendo del lugar.
Wesley dejo la oficina de Angel y volviendo a la suya, llamo por teléfono para confirmar la llegada de Willow.
...
Al día siguiente, por la mañana Willow arribó a Los Ángeles, siendo recibida por Wesley en el aeropuerto. Quizás, ahora la suerte empezaba a cambiar.
Spike despertó en el departamento de Angel, luego de toda una noche de búsqueda sin éxito, como ya era costumbre, se sintió muy derrotado y esta vez sin necesidad que Wes le exigiese descanso fue a su casa en busca de paz y tranquilidad.
Le tomó un poco de tiempo juntar ánimos para dejar la cama, aquellas sábanas olían a Angel, con un suspiro Spike se levantó y miró a su alrededor, el lugar era un completo desastre, sobretodo gracias a la última visita de Angelús, de pronto una sonrisa apareció en su rostro al recordar los sermones de Angel sobre el orden y la limpieza, entonces como una forma de guardar las esperanzas en recuperar a su amante, Spike empezó a limpiar y ordenar el lugar y no pensaba parar hasta dejarlo impecable.
Mientras en W&H, Wesley y Willow conversaban sobre todo lo sucedido en esas semanas.
-Como verás Willow, estamos en medio de una gran crisis -concluye Wesley su relato.
-Así parece -responde un tanto preocupada la bruja-. Bien, manos a la obra, aunque antes quisiera darme un baño y cambiarme, tú sabes a sido un largo viaje.
-Entiendo -afirma Wes-. Vamos con Fred, seguro puedes quedarte con ella si no te molesta.
-No hay problema.
Terminada la conversación ambos salen de la oficina rumbo al laboratorio.
Por su parte Spike había terminado de ordenar el departamento, sin poder creerlo se había relajado bastante mientras trabajaba, quizás por el hecho de haber mantenido por unas horas su mente ocupada en otra cosa. Luego fue a la cocina y se calentó un poco de sangre que había traído la noche anterior y la bebió con nostalgia, pero sin darle paso a los sentimentalismos el rubio decidió darse un baño y volver a W&H antes del anochecer para ver si habían novedades.
***
Angelús caminaba por las alcantarillas de L.A., estaba bastante aburrido y molesto, la intromisión de Spike lo había obligado a abandonar la casa donde estaba refugiado, y entonces pensó que no sería tan mala idea empezar a ejecutar su plan de tortura sobre el vampiro oxigenado.
Caminó rápido en dirección al departamento, seguramente el patético vampirito estaría refugiado en ese lugar, pronto llego y pudo infiltrarse por las escaleras de escape hasta llegar al departamento. Parado frente a la puerta el moreno pudo sentir el olor del rubio, no había duda que estaba en casa, entonces con sumo cuidado el vampiro giro el picaporte para entrar, pero cuando quiso dar un paso una barrera invisible se lo impidió... "maldito William" pensó Angelús al darse cuenta de lo que sucede y escuchó el agua de la ducha correr, por un momento pensó en ocultarse y esperar, tarde o temprano Spike tendría que salir, pero un suceso lo hizo cambiar de opinión.
El teléfono del departamento suena varias veces, Spike escuchó el sonido desde la ducha y piensa que seguramente son malas noticias desde W&H y decidió continuar y dejar que la contestadora responda.
-Spike ¿estás ahí? -dice Wesley desde la contestadota-. Te tengo noticias, Willow llegó, está con nosotros en la oficina, necesitamos que vengas de inmediato, estoy tratando de comunicarme con tu celular pero lo tienes apagado. Ven en cuanto escuches el mensaje.
Angelús escuchó las noticias dadas por Wesley y lejos de temer por lo que la bruja podría hacer se alegra, con Willow en L.A., su plan empieza a estar más cerca de ejecutarse,. Decidió dejar a Spike para después y volver a su refugio para planear cuidadosamente su siguiente movimiento.
Spike escuchó desde el baño el mensaje de Wesley y abandonó de inmediato su baño, vistiéndose tan rápido como puede, por fin una buena noticia dentro de todo ese caos. Cuando por fin esta listo y se dirige a la puerta ve que esta no está cerrada y siente en el ambiente el olor de Angelús, supone que ha tratado de entrar pero el hechizo funciono. Se preocupa, podría haber escuchado el mensaje de Wes. Pero no hay tiempo para preocuparse, ahora lo importante es llegar a W&H.
Todos los miembros del equipo de Angel están reunidos en la oficina del vampiro y Willow los acompaña, luce bastante más fresca y con otra ropa, entonces Gunn procede a mostrarle el vídeo donde esta registrado el momento en que Angel pierde su alma, pero la brujita no llega a ver mucho porque la entrada del vampiro oxigenado distrae a todos.
-Hey Red, vaya que te hiciste esperar -dice Spike desde la puerta de la oficina.
-¡Spike! -responde Willow visiblemente contenta y acercándose al rubio- Me alegra verte, ¿cómo estas?
-Bien, bueno ya sabes con todo este bloody problema, pero bien.
-¡Que bueno! me alegra que estés bien... -abrazándolo tímidamente-. Pensamos que nunca volveríamos a verte.
-Podemos dejar sus demostraciones de afecto para después -dice algo incomodo Gunn-. Tenemos trabajo que hacer.
-Si... yo... bien veamos el vídeo -dice Willow volviendo a su lugar.
Gunn le muestra detalladamente a Willow todas las pistas que tienen, luego todos la miran en busca de una respuesta.
-Y bien Willow, puedes ayudarnos ¿verdad? -pregunta tímidamente Fred.
-Si, pe... pero necesito más datos, alguien sabe que tipo de urna es esa, si es como Muo-Ping o de otro tipo.
-La verdad no, creo que no tenemos datos -responde un poco avergonzado Wes.
-Podemos intentar romperla, pero no quiero usar magia en vano, solo perderíamos tiempo y con el alma de Angel atrapada no puedo hacer mucho...
-¿Que sugieres? -pregunta serio Spike a Wesley.
-Fred y yo investigaremos todo lo referente a esa urna y posibles hechizos para romperla ¿podrías ayudarnos Willow? -pregunta Wes.
-Claro.
-Wesley, podemos hablar un momento a solas -pide Spike.
Wesley asiente y ambos salen de la oficina.
-¿Qué sucede Spike?
-No estoy seguro, pero creo que Angelús intentó entrar al departamento, cuando salí de bañarme la puerta estaba abierta.
-¿Te siguió?, ¿dejó alguna nota o algo? -preguntó preocupado el ex vigilante.
-No, y eso no es lo que me preocupa, sino que haya escuchado el mensaje que dejaste, voy a salir a buscarlo, pero no dejen sola a Willow, si algo le sucede Wes, nunca podríamos traer de vuelta a Angel, además yo nunca me lo perdonaría.
-Ni yo, no te preocupes, pondré vigilancia extra y no la dejaremos sola.
Spike se queda un poco más tranquilo con eso y espera que se oculte el sol del todo para poder volver a los bares a buscar a Angelús en medio de la noche y el terror.
Angelús por su parte pasó el resto de la tarde maquinando su plan, lo primero que hizo fue mandar a dos de sus sirvientes a vigilar W&H y atacar a la bruja en la primera oportunidad, la verdad era que esa noche no tenía ganas de enfrentarse a esos ineptos, necesitaba algo de acción, crueldad y diversión, así acompañado de otros vampiros se dirigió a unos de los bares mas exclusivos de la ciudad en busca de bellas y delicadas víctimas.
Spike volvió a la casa donde encontró a Angelús la noche anterior, pero ya no había rastro de él, el resto de la noche lo paso recorriendo las calles y algunos bares, y una vez más ninguna pista sobre el moreno, aunque un demonio le informó que hacía ya unos 3 días que no se asomaba por esos bares, y que lo habían visto cerca del centro comercial. De inmediato tomó ese rumbo, pero para su mala suerte en el camino se encontró con una pareja que estaba siendo atacada por unos vampiros que no eran del grupo de Angelús. Intento ignorar los gritos, pero no pudo y de inmediato intervino, logrando que la pareja escapase y peleando con los 3 vampiros por un buen rato. Cuando por fin terminó con esos tres retomo su camino y sintió la esencia del vampiro en el ambiente, siguió su olfato y encontró a 5 chicas muertas en un coche frente a un bar, sabía que era obra de Angelús, entró al lugar a buscarlo, pero el moreno ya se había ido, una vez más Spike llegó demasiado tarde.
***
Ya había amanecido. Willow, Fred y Wesley habían trabajado toda la noche buscando el tipo de urna y al parecer no tenían buenas noticias.
-¿Y si usamos la Flecha de Delothrian? -pregunta Fred notoriamente cansada.
-Me temo que no funcionaria, a diferencia del Muo-Ping, esta urna no puede romperse, sólo puede abrirse mediante un hechizo -contesta Willow.
-Es natural que el Conde haya usado una urna tan poderosa como esta, considerando su colección, me imagino que toma todas las precauciones -asegura Wes.
Spike regresó de su búsqueda directo a W&H y escucha voces en la oficina, no quiere interrumpir, pero en eso escucha a Fred decir algo que lo preocupa bastante.
-Entonces si el Conde no nos devuelve el alma, ¿no podemos hacer nada? -dice aterrada Fred.
-¿Qué dijiste pet? -dice alterado Spike mientras entra-. El maldito de Machiavello no nos la va a devolver y ustedes dicen que ya no hay nada que hacer.
-No es tan simple Spike, tranquilízate y te explicamos -surgiere Wesley.
-No puedo tranquilizarme. Quiero respuestas. ¡Ahora!
-Mira Spike -comienza a explicar Willow-. El alma de Angel esta atrapada en la Urna de Evlesh, es un artefacto antiguo y poderoso, los antiguos hechiceros lo usaban para poner en ellas las almas de asesinos y demonios, para así evitar que estas se reencarnasen en otras criaturas. Lamentablemente esta sólo se puede abrir mediante un hechizo y para eso necesito tenerla en mis manos, no puedo hacerlo a la distancia.
-Y nos vamos a quedar tan tranquilos, bloody hell, algo tenemos que hacer -grita el vampirito mientras empieza a romper todo lo que encuentra a su paso.
-¡Cálmate Spike! -ordena Wesley- Así no ayudas en nada.
-No puedo calmarme. Llevo noches buscándolo y es en vano, sólo recibo dudas, desconfianza, malas noticias... y la maldita burla de Angelús a cada momento. No importa lo que hagamos Wesley, ese bloody bastardo gano.
-No Spike, ya pensaremos en algo -agrega Willow-. No podemos permitir que Angelús siga matando, tenemos que pensar con claridad y tratar de solucionar rápido las cosas antes de que el Consejo intervenga.
-¿El Consejo? -pregunta preocupado Spike mirando al ex vigilante- ¿Qué diablos tiene que ver El Consejo en todo esto?
-Están enterados de lo que sucede y dicen que si no traemos de vuelta a Angel en unos días mandaran a una Cazadora para que termine el trabajo -explica Wesley.
Spike los mira sin responder, todo esto es demasiado para él. Había puesto todas sus esperanzas en Willow y lo que ahora le informaban las tiraba todas al suelo, lo único que hizo fue azotar la puerta y salir del lugar lo mas rápido que pudo, saco varios botellas de Whisky de la despensa de W&H y subió a su auto en dirección al departamento, donde se encerró y apago el celular empezando con la primera botella y dejando que todo el dolor y frustración que sentía se apoderasen de él, aventando varios objetos contra las paredes para desfogar su rabia. El lugar que había ordenado con esmero unas horas atrás era un completo desastre ahora.
Wesley trató de comunicarse toda la tarde con Spike, pero fue imposible y por la hora que era el ex vigilante estaba seguro que esa noche no contarían con él para que salga en busca de Angelús, así que opto por organizarse con Gunn para hacer ellos el trabajo. Con lo que Gunn no estaba muy contento, ya que pensaba que toda esta rabieta de Spike era solo una excusa para tomarse algo de tiempo libre. Cuando ya estaban listos para salir, Willow insistió en ir con ellos y así ver que tan graves estaban las cosas, finalmente Wesley aceptó ya que esa era la mejor manera de tener vigilada y protegida.
Recorrieron algunos bares sin tener éxito, hasta que en uno de ellos se toparon con unos vampiros que al parecer no habían notado la presencia de los humanos en el lugar, Wesley le sugiere a Willow que salga del lugar y los espere en el auto, la pelirroja sale y los chicos empiezan el ataque a los vampiros.
En la calle Willow camina en dirección al auto cuando es acorralada por cuatro vampiros.
-¿A donde vas tan sola, bruja? -menciona un vampiro.
-Sal de mi camino -contesta Willow.
Los vampiros se miran entre ellos y se ríen, acercándosele poco a poco.
-Parece que esta pequeña no se ha dado cuenta que esta en problemas.
-Sí -agrega otro de los vampiros-. Tu amigo Angelús nos mando a darte un regalito.
-¿De verdad? Y donde esta, hace mucho que no lo veo -dice irónica Willow.
Los vampiros no contestan y empiezan a acercarse, entonces Willow cierra sus ojos y al segundo los abre y están totalmente negros, mientras recita algunas palabras. Los vampiros se ríen y uno de ellos al notar la gravedad del asunto empieza a escapar y los demás no saben que hacer; en ese momento Willow extiende sus manos dejando salir de ellas ráfagas de luz que atraviesan a los vampiros volviéndolos polvo. Wesley y Gunn salen corriendo y la ven parada en una de las esquinas.
-¿Estas bien, Willow? -pregunta Gunn.
-Sí, Angelús me mando visitas, pero últimamente no soy muy amable con los extraños... y ¿cómo les fue a ustedes?
-Bien -responde Wes-. Será mejor que nos vayamos, los sirvientes de Angelús pueden volver.
Los chicos vuelven a W&H y luego Wesley deja a Willow en casa de Fred y da ordenes de que vigilen en todo momento el departamento de las chicas, solo como prevención.
…
Angelús estaba en su nueva guarida esperando que sus sirvientes regresen con las noticias de que lograron deshacerse de Willow, cuando solo unos de ellos llega corriendo y asustado.
-¿Qué sucedió, me tienes buenas noticias? -pregunta Angelús.
-Me temo que no. La bruja, los mato a los 3 en un instante, pude escapar por que corrí antes que ellos.
-Maldita Willow... no se va a salir con la suya.
-Vayamos a intentarlo de nuevo, pero esa chica es peligrosa.
-No, hoy no, ya me aburrí de estar acá, necesito un poco de acción.
El vampiro coge su abrigo y sale en busca de una víctima joven y llena de vida, una vida que el podrá drenar en un solo sorbo.
…
Por los siguientes dos días Spike no se asomo por W&H ni un segundo. Gunn estaba contento con eso, a su punto de vista por fin el rubio se había quitado la careta y los había abandonado a su suerte, tal como él lo pronosticó. Por su lado Wesley estaba realmente preocupado por Spike, además en esas noches sin que el rubio ande tras la pista de Angelús ellos no se habían dado abasto, entre proteger a Willow y los casos, en verdad necesitaban la ayuda de Spike, pero no se le ocurría como hacer para convencerlo de regresar.
Por su lado Angelús estaba disfrutando al máximo de su tiempo, ya se había enterado que Spike había cesado en su búsqueda y sus informantes le dijeron que no salía de su departamento hacia unos días. Angelús pensaba que era totalmente ridículo el esfuerzo de Gunn y Wes por dar por él, tanto que ni siquiera se molesto por cruzarse con ellos, de todas maneras todos ellos tenían sus horas contadas.
Mientras en W&H, Wesley insistía en el teléfono en probar suerte y ver si Spike se animaba a contestarle.
-Hola Wes -dice Willow entrando a la oficina- ¿Alguna novedad?
-La verdad no, necesitamos a Spike de regreso, nosotros no estamos haciendo mucho.
-Gunn dice que Spike esta aprovechando la crisis para darse unas vacaciones -dice mientras se sienta-. Pero yo no lo creo, Spike a cambiado mucho y parece que esta en verdad preocupado por Angel.
-Lo está -asegura Wes-. Willow ¿por que no vas a su departamento y hablas con él? Ustedes son casi amigos y quizás te escuche.
La pelirroja acepta sin problemas y luego de una corta conversación con Wesley sale en dirección al departamento de Spike.
Spike esta sentado en el suelo del cuarto con su nueva botella de whisky, se siente débil y ni siquiera recuerda cuando fue la última vez que se alimento. Hace varios días que se acabo la sangre y no ha tenido cabeza para pensar en comprar más. En la refrigeradora sólo hay helado y algunos pedazos de pizza que no quiere ni ver por que le recuerdan a su última cena con Angel. Sumergido en su dolor y recuerdos siente el sonido de la puerta, un escalofrío lo recorre pensando que puede ser Angelús nuevamente y no se siente en condiciones de pelear.
-Spike soy yo -dice Willow fuera del departamento-. Ábreme por favor, necesitamos hablar.
El rubito reconoció la voz de la bruja y ni se movió, no tenia ganas de ver a nadie.
-Vamos Spike -insiste Willow-. Es importante.
Tratando de tomar fuerzas, Spike se levanta tambaleando, llega hasta la puerta y la abre. Willow lo mira sin poder evitar sentirse mal por el estado en que lo encuentra. Él sin mirarla vuelve a internarse en su habitación mientras bebe. La bruja lo sigue y se sienta frente a él mientras busca las palabras para hacer sentir un poco mejor a Spike.
-Yo... no se que decirte... me gustaría traerte buenas noticias, pe... pero -empieza a explicar la pelirroja-, hemos seguido investigando y no puedo restaurar el alma de Angel mientras la tenga el Conde -Spike la mira con los ojos llenos de frustración-. Por eso te necesitamos, tienes que ayudarnos a recuperarla
-No puedo -responde-. Todo fue mi culpa, aunque Wesley diga que no, se que fue mi culpa... no logro encontrarlo y cuando lo he visto no he podido enfrentarlo
-Esta bien, te entiendo, pero te apoyaremos, no estas solo.
-Si lo estoy, yo solo tenia a Angel en este bloody mundo, se que los demás no confían en mí y si Wes se acerca es sólo por que Angel se lo pidió, no por que yo le importe, yo no le importo a nadie
-¡Hey! -exclama Willow-. A mi me importas... vamos, nos conocemos hace mucho, siempre has estado cerca, me apoyaste cuando Buffy se fue, tu y yo tenemos historia.
-Si como no -dice irónico Spike.
-Claro que si. Te acuerdas cuando me secuestraste para que te ayudase con Dru... o, cu... cuando descubriste que no podías lastimar a nadie por el chip, yo te apoye moralmente, te deje intentarlo varias veces... -Spike sonríe un poco-. Así te ves mejor, ahora date una ducha y me acompañas a W&H, ¿quieres?
-No, no quiero verlos, Gunn piensa que estoy ayudando a Angelús y yo...
-Bueno ya me hartaste tonto oxigenado -dice en tono serio Willow mientras Spike la mira desconcertado-. Ese no es el big bad que yo conozco, la muerte debió cambiarte mucho... o ¿hay algo que no sepa?
Willow observa a su alrededor y ve el departamento casi destrozado. Hay ropa de Angel regada por la habitación y las botellas de licor apiladas en un rincón. Luego observa el rostro de Spike, demacrado y con los ojos irritados. Entonces le llega el entendimiento.
-Oh, tú y Angel... debí imaginarlo. Tú… tú… ¿lo amas?
-Sí. Demonios Red, Angel es lo más importante en este momento para mi, estábamos bien... el me ama, debí suponer que todo se arruinaría, por que no es usual que alguien me ame
-Basta Spike, ya no te hagas daño, si Angel te ama es por que descubrió lo maravilloso que eres... yo misma hubiese intentado conquistarte si no fuese gay... escúchame, si en verdad lo amas, entonces con más razón debes de ayudarme... el alma de Angel esta atrapada en esa urna, esta sufriendo Spike, ¿vas a dejarlo sufrir eternamente?
-¿Sufriendo? -pregunta Spike sin entender.
-Si... ya te dije que la usaban para condenar a las almas de los asesinos y tipos así, entonces, nos ayudas o condenamos de una vez a ese infierno al alma de Angel.
Spike la mira y trata de sonreír pero se siente vencido. Arrojando la botella de whisky contra la pared se para y contiene las lagrimas mientras habla.
-No tengo fuerzas Willow, no soy un big bad. Soy un patético vampiro, todos esperan que tome el lugar de Angel y sea el de las decisiones radicales, que salga y lo atrape y que si no hay otra opción que lo mate... no puedo Willow, yo no soy Buffy, yo no puedo matarlo... le prometí que lo haría, se lo prometí a Angel, pero no puedo cumplir esa promesa... no puedo verlo morir, no quiero matarlo.
Willow lo observa y titubeante se acerca para tratar de consolarlo. Spike siente el apoyo de la bruja intentando sentirse reconfortado.
-No tendrás que matarlo Spike, no mientras este en mis manos, te lo prometo -dice Willow -¿Confías en mi?
-Sí -contesta Spike-. Además no tengo otra opción, ¿o si?, no voy a dejar que sufra eternamente por culpa de ese bloody Conde -agrega con determinación.
Spike se levanta y se dirige al baño.
-Me ducho y nos vamos -menciona el rubito y Willow asiente sonriente, Spike voltea a verla- Willow, gracias.
Minutos después Spike estaba sobrio, limpio y despejado, listo para continuar con su búsqueda y hacer hasta lo imposible para recuperar a Angel.
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Titulo: "Fantasmas del Pasado"
Autores: Miri (mirita23) y Nad (cristcat)
Fandom: Btvs/Ats
Raiting: NC-17
Género: Crack, Angst, Romance.
Warnings: Sexo explícito.
Capitulo 6
Spike estaba empezando a ponerse impaciente. Angelús había entrado a la mansión del Conde hacia más de una hora y aún no había señales de que fuese a salir. De pronto, Spike ve a los vampiros movilizarse y Angelús abandona la mansión seguido por sus sirvientes. El rubio lo ve pasar cerca de él y siente una punzada en medio de su alma, desde la noche que fue a su departamento no lo había visto. Por un momento, el observar la imagen del vampiro caminando seguro y vistoso en la oscuridad de la noche, lo llevó a pensar en Angel. En sus brazos, sus labios y en lo mucho que lo necesitaba, sintiendo como lo extrañaba más que nunca.
Luego de darles un poco de tiempo para alejarse, Spike comenzó a rastrear su aroma desde una distancia razonable para no ser descubierto, caminado cerca de media hora hasta llegar a una antigua casa al este de la ciudad.
La casa era grande, con un espacioso jardín y columnas con acabados hechos en mármol, lo que no extrañó a Spike que conocía muy bien los suntuosos gustos de Angelús. Spike empezó a infiltrarse por la parte posterior, intentando pasar desapercibido. Un vampiro salió a su paso y Spike sacó su estaca eliminándolo tan rápido que hasta le pareció aburrido tener que enfrentar a vampiros tan mediocres. “¿Estos idiotas te cuidan Angelús?... ¿no pudiste conseguirte algo mejor?" pensó Spike cuando trepaba un muro entrando al patio posterior de la casa. Caminó lento y con cautela hasta que tres vampiros salieron a su paso. Uno de ellos se había enfrentado anteriormente con él.
-Otra vez tú -dijo el vampiro- ¿No te rindes verdad William?
-Es Spike -responde molesto-. Y no, no tiendo a darme por vencido con facilidad.
Se desató una pelea en la que inicialmente Spike tiene un poco de ventaja debido a su experiencia. Logró estacar a dos de ellos y otros más aparecen rodeándolo, mientras Spike pelea lo mejor que puede a pesar de encontrarse en total desventaja. Dos de ellos lo toman por la espalda y un tercero lo golpea en el estomago.
-¡Basta! ¡Déjenlo! -ordenó Angelús entrando por una puerta.
-Pero… Angelús, este estúpido está intentando matarnos -protestó uno de los vampiros.
-¡He dicho que lo suelten! -gritó Angelús mostrando su rostro vampírico-. ¡Ahora!
Los vampiros sueltan Spike que tardó un poco en reponerse. Angelús se le acercó despacio, mirándolo divertido.
-Debiste avisarme que vendrías, Willy. Mis chicos no suelen ser muy amigables con los extraños -le dice acercándose a su oído y susurrando-. ¿Vienes buscando un poco de pasión?
-Cállate imbécil -responde Spike alejándose -. Vine a matarte.
-¿En serio? ¿Vas a matar a tu creador? ¿Destruirías a Ángel? -pregunta Ángelus fingiendo interés -.. No lo creo, William. Tu nunca será capaz de hacerlo Por el contrario, creo que si me buscas tanto es porque lo extrañas, ¿verdad?
Spike se da cuenta que Ángelus estaba hablando en un tono diferente al que usaba por teléfono, obviamente para mantener ante sus sirvientes su imagen de macho dominante, entonces decide atacar justo en su ego.
-No. Pero imagino que tú si debes de extrañar las noches conmigo. De lo contrario, Angelús, no entiendo el motivo de tus llamadas amorosas y de los regalos que dejas en mi cama -pregona Spike, añadiendo mordazmente- ¿Eres tú el que extraña lo que le hacia a Angel, mis caricias, mi cuerpo haciéndote Mío?
Angelús enfureció ante eso al notar que los demás lo miraban sorprendidos, entonces golpea a Spike en el rostro haciéndolo volar contra la pared. Uno de sus sirvientes se acercó para sumarse a la pelea y Angelús lo detiene.
-Váyanse, déjenme solo son él. Parece que a Spike se le olvido como respetar a su sire.
El grupo obedece las ordenes de Angelús y se retiran dejándolos solos.
-¿Acaso te volviste loco? -dice con reproche Ángelus-. ¿Pretendes acabar con mi reputación?. No es mi culpa que Angel y tú sean un par de locas pérdidas. Yo no lo soy. Tú a mi sólo me sirves como diversión.
-Eres un Bloody bastardo -gritó Spike levantándose-. Juro que voy a acabar contigo y traeré a Angel de vuelta.
-Si, claro. Sabes? Ya me tiene cansado ese estribillo, Willy -señaló con sarcasmo acercándose a Spike-. Y creo que sólo hay una forma de corregirte.
Angelús empezó a golpear a Spike y pronto ambos estaban sumergidos en una gran pelea, Spike golpea con todas sus fuerzas a Angelús tratando de reducirlo para luego poder llevarlo a W&H, pero el moreno parece estar en mejores condiciones, sobretodo considerando que el oxigenado lleva días sin dormir y alimentarse bien.
Spike saca una estaca y Angelús al verla ríe divertido. Antes que el rubio se diese cuenta de una patada logra que el rubio pierda el equilibrio y la estaca. Angelús la coge y luego empuja a Spike contra la pared. El oxigenado pensando que este es su fin, cierra los ojos. De pronto, siente los labios fríos de Angelús sobre los suyos besándolo furiosamente. Spike intenta alejarse, pero el sabor de los labios de Angelús es el sabor de Angel y la nostalgia lo gana, cediendo por unos segundos ante el deseo corresponde al beso, pero luego reaccionar mordiendo el labio del moreno y logrando que este lo suelte.
-Vete... -indicó Angelús con rabia y amenazando al rubio aún sin soltarlo-. Desaparece en cinco segundos o te juro que tu linda estaca terminará hundida en tu corazón.
-¿Por qué no lo haces de una vez?
-Aún quiero divertirme contigo, Willy -responde con burla soltándolo, agregando mientras se aleja-. Hablo en serio, ¡Vete!
Spike se quedó parado mirándolo, pero Angelús vuelve a acercársele levantando la estaca de forma amenazante. Spike sólo esquiva el ataque y emprende la retirada.
El recorrido de Spike hasta W&H se hace eterno, camina sintiéndose derrotado, humillado. Hace un esfuerzo por contener las lágrimas que se asoman en sus ojos. Haber sentido los labios de Angel nuevamente lo ha llenado de pesar. Más aún, el haber sido derrotado y humillado una vez más por Angelús hacen que se sienta peor a cada segundo, extrañando infinitamente el calor y la seguridad que le daban los brazos y caricias de Angel.
***
En W&H, Wesley se encontraba en la biblioteca, buscando una nueva forma de convencer al maldito Conde Machiavello de devolverles el alma, pero no la encontraba. En esos momentos su secretaria entro anunciándole una llamada desde Europa, exactamente desde el Consejo de Vigilantes.
-¿Giles? -dijo Wesley al levantar el teléfono, imaginándose de quien se trataba.
-Si. ¿Cómo esta todo por allá, Wesley?
-Igual. Aún no podemos capturar a Angelús, ni recuperar el alma de Angel -respondió con cansancio Wes-. Los Ángeles está hecho un caos por estos días.
-Me lo imagino. Creo que deberías volver a considerar mi oferta de enviarte una Cazadora. Si las cosas están tan mal como sugieres quizás sea lo mejor.
-No -aseguró el ex vigilante-. Por ahora lo estamos manejando. ¿Apareció Willow?
-Si. Ese es el motivo de mi llamada. Estará en el consejo en un par de horas, y le explicaré sobre el problema.
-Grandioso.
-La enviaré en el siguiente vuelo a L.A., con suerte estará allá en la noche de mañana.
-¿Noche? Creo que será mejor que pueda llegar en el día. Por su seguridad, durante el día es más difícil que los vampiros ataquen.
-Entiendo, entonces debo suponer que ellos han tomado L.A, ¿y no necesitan una cazadora?. Creo que deberías dejar de pensar sólo en Angel y recordar que debe haber mucha gente muriendo con todo esto, Wesley -le amonestó Giles.
-Lo sé... pero, apenas Willow recupere a Angel lograremos acabar con esto.
-No me parece la mejor forma. Pero confió en tú criterio y en que recuerdes que después de todo, los vampiros, sea quien sea, no son tan importantes como los humanos.
-¿Criterios del Consejo? No te preocupes, los tengo presentes -contesta sintiéndose sermoneado-. Pero en el mundo real, esos criterios no se aplican siempre, tú lo sabes mejor que nadie y yo tengo aquí dos ejemplos perfectos, de que los vampiros no son siempre malos.
-Si y también son ejemplos de la gran destrucción que pueden causar uno sólo de ellos.
-Angel ha ayudado a mucha gente, merece una oportunidad.
-Probablemente, pero… ¿a costa de cuantas vidas será esta vez? -preguntó Giles con reproche y Wesley no le pudo contestar, quedándose por un rato mudo-. Sé que es duro decirlo y pensarlo de esta forma, Wesley.
-No creas que no lo he pensado.
-Lo creo. Bien, ya no te preocupes, pronto, Willow estará allá para ayudarlos... pero si ella no puede hacerlo, siento mucho decirte que el Consejo piensa intervenir.
-¿Qué dices? -preguntó Wesley sorprendido- ¿Cómo se enteraron?... ¿acaso tú?
-No fue por mí que lo hicieron, te lo aseguro. Aunque opino igual que ellos, un vampiro como Angelús suelto y con el control de esa firma de abogados maligna puede ser el inicio de un nuevo Apocalipsis y eso debe ser detenido, a cualquier precio.
-No pueden hacer eso, tenemos la seguridad de que Willow va a detener esto, solo necesitamos un poco de tiempo.
-Wesley... creo que debes empezar a pensar en forma objetiva -pidió Giles, agregando rápidamente-. En cuanto al tiempo, no te preocupes, tendrás un par de días con Willow para ver si puede resolverlo.
-De acuerdo, te mantendré informado -respondió resignado Wesley colgando el teléfono, mientras por su mente pasaban en conflicto muchos pensamientos.
El ex vigilante no podía dejar de sentirse disgustado por haber dejado que todo vaya tan lejos, al limite que incluso el Consejo ya estuviese enterado. ¡Demonios! Esta vez el equipo se confió demasiado en que la poderosa W&H pudiese ser lo suficientemente segura como para evitar que un loco pudiese hacer realidad una amenaza de ese tipo. Era ridículo pensar en que ello fuese posible, pero ocurrió y ahora, Wesley tenía su escritorio lleno de expedientes con todas las muertes que su error le estaba causando a la ciudad de Los Ángeles. Probablemente no era justo para tantos inocentes, terminar siendo alimento de vampiros, pero por el momento era mejor no pensar en esto, para hacerlo más fácil a su conciencia y no terminar aceptando la ayuda del consejo... por ahora, Wesley sólo esperaba que Willow llegara sin problemas y recuperara el alma de Angel.
***
Más tarde, Wesley ya estaba dejando su oficina para buscar a Gunn en la suya, cuando de pronto Spike llego, bastante golpeado.
-¿Qué te paso?
-Yo lo encontré...-respondió, agregando con cierta aflicción-. Encontré a Angelús, pero no pude atraparlo.
-¿Dónde? Quizás aún podamos dar con él.
-No lo creo, a estas alturas ya debe estar en otro sitio.
-Pero, Spike... ¿Qué... cómo... cómo lo encontraste? -preguntó Wesley confundido.
-Fui a ver al Conde de nuevo, para acabar lo que empecé temprano, ya sabes, mandar a una nueva dimensión a ese estúpido y fue allí donde lo encontré, él esta haciendo tratos con Machiavello y...
-Un momento. ¿Fuiste a hacer qué? -Interrumpió Wesley incrédulo-. ¿Has perdido la razón?
-Yo... es sólo que -empezó a decir Spike recordando toda esa noche y sus sentimientos por Angel-. Tú no lo entenderías.
-Lo siento, Spike -dijo Wesley, tratando de ponerse en la situación del vampiro y darle de alguna forma un consuelo-. Me imagino que esto es muy duro para ti... Angel también lo sabía y estaba seguro que tú podrías manejarlo. Pero, perdiendo el control no se logra nada, lo sabes -Añadió sin recibir respuesta del rubio, quien parecía sumido en sus propios pensamientos.
Wesley pensó que lo mejor era cambiar de tema, sino iba a tener que pasarse la noche argumentando con Spike las formas correctas para actuar bajo las circunstancias que tienen y las que no lo son, era una situación que prefería evitar.
-Ahora, ¿cuéntame todo, quieres?. ¿Dónde encontraste a Angelús?
-¿Encontraste a Angelús? -preguntó Gunn entrando a la oficina, llamando la atención del rubio -¿Dónde esta?
-No lo sé -respondió Spike.
-¿Qué?... dices que lo encontraste y no sabes dónde esta, ahora. Déjame ver, no será que se te ocurrió meterte en el lugar, en vez de venir a avisarnos? -preguntó Gunn, ya algo molesto.
-No tuve tiempo... tenía que llegar a Angelús.
-¿Quieres decir que diste con su escondite?
-Así es.
-¡Spike! Eres un completo imbécil -le increpó el abogado, bastante molesto por el poco criterio del vampiro.
-Gunn, cálmate... seguro, Spike tuvo una buena razón para hacer esto. ¿Spike, qué fue lo que paso?
-Ya te dije -contestó tratando de no responder a los insultos de Gunn ni a sus ganas de romperle la cara, sobretodo porque ahora sí tenía razón de estar furioso-. Lo encontré, lo seguí, llegue a la mansión donde se escondía y quise investigar para estar seguro, pero sus hombres me encontraron, pelee con ellos, luego con Angelús... y finalmente...
-¡Escapaste! ¡Grandioso! -Interrumpe Gunn irritado, añadiendo entre burla y molestia, mientras miraba con desaprobación a Spike-. Tú mismo lo has escuchado, Wesley, el oxigenado lo encuentra después de días de búsqueda intensa y quiere jugar al héroe enfrentándose con ellos solo. ¿Sabes?, hasta para ser héroe hay que tener cierta práctica -concluyó hiriente de frente al rubio.
-Gunn no digas eso, ¿quieres? -le pidió Wesley.
Wesley puso una mano en el hombro de Gunn alejándolo de Spike, era notorio que el vampiro se sentía bastante mal como para hacerlo sentirse peor. El vampiro evitaba mirarlos y contenía sus ganas de salir corriendo de ese sitio y mandar todo al infierno.
-Vamos, Wes ¿cómo vas a defenderlo?. Ayer fue lo mismo, no te das cuenta que sus arrebatos nos traen sólo problemas -se quejó Gunn mientras Spike un poco más allá los escuchaba, tratando de no pensar en esa situación y perdiéndose en el vacío.
-No es el momento para reproches -señaló Wesley determinante al abogado, para después volviéndose hacia Spike, agregar-. Ahora, debemos pensar objetivamente, ¿en que lugar fue que estaba esa mansión, Spike?
-Al este de la ciudad... en las afueras -contestó el rubio cortante.
-Enviaremos a cubrir toda la zona. Gunn, ¿puedes ir con uno de los equipos de la firma?
-De acuerdo, iré con un grupo, pero es la última vez que acepto arreglar las estupideces de otros. Gracias Spike, gracias por ayudar a Angelús -exclamó mirándolo despectivamente y saliendo de la oficina.
Spike no dijo nada, ni se movió para responderle, sólo espero que saliera, para él mismo pensar en seguir de nuevo el rastro de Angelús.
-Creo que es mejor que me vaya -mencionó Spike desanimado, dirigiéndose a la puerta-. Tal vez pueda volver a encontrarlo.
-¿Spike?
-Lo sé. -respondió el vampiro parando aún sin voltear- Les avisaré si lo veo y no te preocupes, no voy a actuar solo.
-Bien... y Spike, yo... yo lamento lo que dijo Gunn, todos estamos muy tensos con esto -se disculpo Wesley-. De todas formas lo atraparemos, sólo debes confiar más en nosotros como lo estamos haciendo contigo.
-Como digas... pero, lo que dices no es cierto -señaló el vampiro, volteando a ver al otro.
-¿De qué hablas?
-Todos ustedes no confían en mí -dijo Spike con molestia y reproche-. Ustedes piensan que los estoy engañando o que en cualquier momento lo voy a empezar a hacer, que llegaré a traicionarlos y trabajare para Angelús, ¿no?
-Eso no es cierto. Fred confía en ti. Gunn esta muy estresado y yo no creo que Angel no te interese. Estamos en esto juntos, ¿no lo ves?
-No, no es así -replicó Spike irónico, agregando algo lastimado- Tú por ejemplo, lo haces porque Angel te pidió que fueses bueno conmigo, ¿cierto?. Pero, sabes, no tienes que hacerlo, no, si él ya no esta.
-Olvídalo -se da por vencido Wesley-. Trata de mantenerte vivo, avísanos si lo ves y pronto lo tendremos, ¿de acuerdo?.
-Bien -afirmó el rubio sin emoción, volviendo a retomar su camino para salir de la oficina.
-Spike, sólo una cosa más -dijo Wesley regresando a sentarse a su escritorio y retomando los papeles que estaba revisando-. Por hoy, no creo que sea buena idea que sigas buscando. Deja eso para el equipo que ya envié y si me permites un consejo, me parece que es mejor que vayas a casa y descanses.
-No necesito tus consideraciones -respondió a la defensiva el vampiro, volteando a ver al ex vigilante de nuevo con fastidio.
-Yo tampoco necesito un hombre menos -le reprochó Wesley mirándolo algo molesto por su obstinación y tratando de ser lo más convincente posible-. Así que sólo descansa, ¿quieres? A la noche no le queda más de un par de horas y serás de más ayuda, si duermes y luego comes algo... y no lo digo por Angel... sólo es simple lógica -concluye Wesley volviendo a sus papeles.
Spike iba a contestarle algo, pero finalmente decidió dejarlo así e irse a descansar, después de todo probablemente el ex vigilante tenía razón.
...
En otro lado de Los Ángeles, Angelús y sus hombres salieron de la mansión al este de la ciudad y se instalaron en un edificio deshabitado en el oeste de la ciudad. El vampiro odiaba el lugar, pero por el momento les serviría hasta poder encontrar otro sitio y mientras la gente de W&H los rastreaba... gracias, probablemente a ese inútil de Spike.
En el Hotel, ya cerca del amanecer, Angelús buscó la soledad de una de las habitaciones, para poder hacer un recuento de sucesos, ordenar sus ideas y planear nuevas torturas para los amigos de Angel.
Así, empezó a pensar todo lo que había hecho y en lo que faltaba aún por hacer para concretar su plan de deshacerse de su adorado equipo, y dejar a Spike para el final. Pero, por supuesto con esos "adorables" intermedios entre ellos, que sólo servían para lastimar más al rubio, lo cual se había vuelto casi una obsesión para él.
Aunque no quisiese, siempre terminaba la noche pensando en Spike. Probablemente, porque por alguna razón la mente del estúpido de Angel se había acostumbrado tanto a pensar en esa patética criatura, que ahora incluso para Angelús era difícil no hacerlo. Claro, que lo que lo guiaba ahora era el odio que sentía el moreno por todo lo que amaba su otro yo.
A veces venían a su mente, imágenes de toda su vida pasada con Spike, cuando empezó a adiestrarlo para ser tan o más cruel que él mismo "Vaya tiempo desperdiciado" pensaba Angelús con molestia. Apenas podía creer que Spike hubiese sido capaz de, siendo un demonio, ir en busca de un alma para atarse a alguien que probablemente sólo lo utilizaba.
Y de nuevo estaba ella, Buffy, malográndole la existencia a un vampiro... era un hecho, que ella se merecía más que las otras cazadoras sufrir una muerte dolorosa, pues al menos las otras sólo los mataban, no hacían que los vampiros traicionen a toda su raza volviéndose cazademonios como Angel o perritos falderos como Spike. En fin, ya tendría tiempo después de buscar a la rubia y matarla él mismo o mejor enviar a alguien a hacerlo. Y de paso, ver si podían dar con la segunda... Faith era una más en la lista que merecía una visita, aunque ella quizás podría tener potencial de vampiro... quien sabe.
Como fuese, la idea sería poder exterminarlas a todas... pero un paso a la vez, lo primero era poder permanecer como Angelús sin ninguna alma que fuese inesperadamente a volver, y para ello lo principal sería matar a Willow, en la primera oportunidad que se presentase. "Pobre Willy, su última esperanza muerta... ¡Genial!" pensó Angelús, sin poder dejar de sonreír pérfidamente, fantaseando en como se pondría Spike cuando descubriera el cuerpo de Willow sin vida. Y luego de disfrutar ese maravilloso momento, lo mataría... o quizás... aún no. Después de todo, William era de la familia y quizás dentro del rubio aún hubiese algo de maldad recuperable. William el Sangriento alguna vez fue prometedor como un vampiro despiadado, y era una lástima que esa porquería de chip y la maldita cazadora le quitasen toda oportunidad de ser malo por siempre.
Sí... quizás, Spike aún tuviese esperanza... salvo, claro por ese beso que le correspondió... "Qué patético" pensó Angelús divertido, suponiendo que probablemente el rubito estaba tan necesitado de cariño, que no le importo ser nuevamente usado... "¿Y si le hubiese propuesto follar?... seguro se corría solo por la excitación" volvió a pensar el moreno en burla, no pudiendo evitar reír cruelmente.
Esto llevo a Angelús al pasado. Podía recordar como fue cambiando William, como todo lo asustaba al principio y como fue poco a poco consintiendo todo, por supuesto con la excusa de que no había limites para los demonios. Hacer dúos, tríos, orgías o lo que fuese por complacer a su Sire, no era muestra de debilidad, sino de audacia. Parte del vivir fuera de las reglas, aunque no se entendiesen bien cuales eran estas ni si se estuviese listo aún para enfrentarlas como en el caso de Willy. Sin embargo para eso lo tenía a él o a Dru, para decirle cuan malo debería ser. Lástima, que ocurriera la maldición de los gitanos, y que luego el rubio le resultara tan aburrido a Drusilla, que en menos de un siglo lo terminase dejando por otros. Pero eso no sorprendía a nadie, lo cierto es que al principio, William era demasiado frágil para ser un demonio, como si la humanidad en su cuerpo fuese difícil de erradicar, a pesar de todos los golpes y de las humillaciones a las que Angelús lo sometió, llegando incluso a irrumpir en su cuerpo sólo para demostrarle quien dominaba. Y quién diría que siglos después la nostalgia por el sexo con él ardería tanto que lo llevaría a entregarse a Angel y que este se enamoraría del rubio. Ambos un par de seres trágicos, productos de la Cazadora, quien los dejó sin darles mejor opción que el ser un par de maricas. "Imbéciles".
Era mejor no seguir recordando, lo único que Angelús había conseguido con todo esto fue revivir la necesidad de volver a poseer a Spike, someterlo de nuevo a golpes hasta sacar de nuevo al demonio que habita en él. De pronto, ya estaba decidido, Spike recibiría pronto algo más que una simple visita. Algo que le seria difícil de olvidar, de eso se encargaría Angelús, como siempre buscando eliminar todo rastro de humanidad en el rubio. Pensando en esto, Angelús se quedó planeando su futuro ataque, teniendo como prioridades la muerte de Willow y luego el abusar del rubio, muy pronto.
...
Cerca al mediodía, Spike, quien se había quedado dormido en la oficina de Angel, por fin se despertó, y al darse cuenta de la hora se sintió fastidiado por haberse dormido durante tanto tiempo, aunque realmente sólo lo hubiese hecho por 4 horas, el resto del tiempo se la paso despierto, pensando en lo inútil de su proceder la noche anterior. Ahora estaba listo para empezar de nuevo su búsqueda. Con esto en mente salió de la oficina, pensando en visitar primero a Harmony y pedirle algo de sangre, sin embargo al acercarse al estante de la vampiro lo primero que observó fueron un montón de coronas de flores y otros arreglos fúnebres en todo el hall, y a unos empleados que continuaban trayendo más.
-¿Qué es todo esto, Harm? -preguntó extrañado viendo que la rubia por fin aparecía, llegando algo fastidiada de una de las oficinas.
-Son de Angelús -le explicó, agregando con cara de culpa-. Gunn está realmente molesto. Es que se me olvido llamar para bloquear las tarjetas de crédito de Angel.
-Ya veo. ¿Dónde esta Wesley? -preguntó el rubio, luego de darse cuenta que cada corona tenía un nombre escrito, el nombre de cada uno del equipo con un "Descanse en paz". Indudablemente eso salió de la mente retorcida de Angelús.
-Wesley está con Gunn en su oficina, pero, yo que tú no entraría allí -respondió Harm, dirigiéndose a los teléfonos para empezar a llamar a los bancos y realizar los bloqueos de tarjetas.
Spike no hizo caso a la sugerencia de la vampiro, y se dirigió a la oficina del abogado, quien apenas lo vio no pudo evitar mirarlo con desprecio.
-Pero ¿mira a quien tenemos aquí? -dijo Gunn con ironía-. ¿Y ahora que vendrás a decirnos, eh?... que Angelús esta camino a Europa y tu no pudiste detenerlo.
-No he venido a hablar contigo -advirtió Spike.
-¿Viste lo que nos envió tu amigo Angelús? -preguntó el abogado con reproche-. Por supuesto, si aquí tenemos a un par de vampiros que trabajan para él, debe estar muy feliz.
-Gunn, no sigas con eso -advirtió Wesley-. Sólo fueron un par de pequeños errores y nada más.
-¿Pequeños errores? -Respondió enojado Gunn-. Wesley, ¿no entendiste lo que paso? Harmony se olvidó de bloquear todas las tarjetas de Angel ¿te imaginas lo que pudo haber pasado?. Yo te lo diré, fuera de las flores del psicópata, él pudo haber hecho lo que quisiese con ese dinero, incluso salir del país. Claro... porque cierto vampiro inútil que también está supuestamente ayudándonos, le da la oportunidad de hacerlo.
-Sabes que eso seria difícil -comentó Wesley rápidamente, mientras el rubio permanecía callado-. Angelús no saldría del país, no al menos hasta asegurarse de que su alma ya no va a volver sobre él.
-¿Qué garantía hay de eso Wesley?. Sólo tenemos lo que nos dice Spike y francamente la ayuda que nos esta dando hasta el momento da mucho que desear, ¿o has averiguado algo más? -concluyó preguntándole al rubio.
-No -respondió Spike cortante.
-Lo ves. Pierde a Angelús y en vez de tratar de arreglarlo, se va a descansar. ¡Increíble!.
-Wesley, ¿puedo hablar contigo en la oficina de Angel?. Te espero allá -mencionó Spike ignorando al abogado y saliendo de la oficina sin decir nada más.
-¿Te das cuenta, Wes? Por eso no responde, porque sabe que tengo razón.
-No, la tienes y deja de hacer esto. Necesitamos calmarnos y pensar mejor lo que hacemos, lo de las tarjetas fue un error, pero no sólo de Harmony y lo otro, le pudo pasar a cualquiera y si Spike se fue a descansar, fue porque yo lo se lo ordene.
-¡Increíble! -dijo Gunn con fastidio- ¿No puedes dejar de defenderlo?
-No es eso -respondió Wesley-. No debería, pero voy a repetírtelo, Angel confiaba en Spike, así que sólo déjalo en paz y busquemos otra forma.
-De acuerdo.
-Y pienso que deberías disculparte con Harmony, ella tampoco merece que la trates mal.
-Lo haré.
Wesley fue a la oficina de Angel, sintiéndose intranquilo al pasar por el pasadizo con todos esos arreglos florales, pensando que tal vez Gunn podría tener razón, Angelús podría haber decidido abandonar el país o la ciudad, quizás iría en busca de Willow. Se quito los lentes y apoyo su mano en la frente en obvio señal de agotamiento. Pensó calmadamente que era muy probable que en esos momentos Willow se encontrase a punto de salir hacía Los Ángeles, así que estaría a salvo.
Por su lado, Spike también estaba enfrascado en sus pensamientos, en todas las muertes que Angelús estaba causando y que más adelante le traerían miseria y sufrimiento a Angel cuando volviese. El remordimiento sería insoportable, por que Angel nunca había llevado muy bien la carga de su pasado despiadado. Por ahora, Spike sólo esperaba que pudiesen lograr recuperar a Angel y luego lo ayudaría a sobrellevar lo que venga. Sumido en estos pensamientos, el rubio no noto cuando el ex vigilante entro al despacho.
-¿Cómo estas Spike?
-Mejor, ayer quería preguntarte, si sabias algo de Willow.
-No aún no -mintió el ex vigilante, en su idea de mantener la llegada de la pelirroja oculta a todos, hasta estar seguro de que había llegado con bien-. Hoy voy a llamar a Giles.
-¿Y dónde esta Fred? - pregunto el rubio.
-A estas horas debe haber ido a casa a cambiarse, volverá antes del anochecer.
-Bien, eso es todo lo que quería saber. Gracias -dijo Spike sin emoción.
-Correcto. ¿Irás a buscar a Angelús ahora?
-Sí, en un rato.
-Ok, nos vemos mañana entonces -finalizó Wesley, saliendo del lugar.
Wesley dejo la oficina de Angel y volviendo a la suya, llamo por teléfono para confirmar la llegada de Willow.
...
Al día siguiente, por la mañana Willow arribó a Los Ángeles, siendo recibida por Wesley en el aeropuerto. Quizás, ahora la suerte empezaba a cambiar.
Spike despertó en el departamento de Angel, luego de toda una noche de búsqueda sin éxito, como ya era costumbre, se sintió muy derrotado y esta vez sin necesidad que Wes le exigiese descanso fue a su casa en busca de paz y tranquilidad.
Le tomó un poco de tiempo juntar ánimos para dejar la cama, aquellas sábanas olían a Angel, con un suspiro Spike se levantó y miró a su alrededor, el lugar era un completo desastre, sobretodo gracias a la última visita de Angelús, de pronto una sonrisa apareció en su rostro al recordar los sermones de Angel sobre el orden y la limpieza, entonces como una forma de guardar las esperanzas en recuperar a su amante, Spike empezó a limpiar y ordenar el lugar y no pensaba parar hasta dejarlo impecable.
Mientras en W&H, Wesley y Willow conversaban sobre todo lo sucedido en esas semanas.
-Como verás Willow, estamos en medio de una gran crisis -concluye Wesley su relato.
-Así parece -responde un tanto preocupada la bruja-. Bien, manos a la obra, aunque antes quisiera darme un baño y cambiarme, tú sabes a sido un largo viaje.
-Entiendo -afirma Wes-. Vamos con Fred, seguro puedes quedarte con ella si no te molesta.
-No hay problema.
Terminada la conversación ambos salen de la oficina rumbo al laboratorio.
Por su parte Spike había terminado de ordenar el departamento, sin poder creerlo se había relajado bastante mientras trabajaba, quizás por el hecho de haber mantenido por unas horas su mente ocupada en otra cosa. Luego fue a la cocina y se calentó un poco de sangre que había traído la noche anterior y la bebió con nostalgia, pero sin darle paso a los sentimentalismos el rubio decidió darse un baño y volver a W&H antes del anochecer para ver si habían novedades.
***
Angelús caminaba por las alcantarillas de L.A., estaba bastante aburrido y molesto, la intromisión de Spike lo había obligado a abandonar la casa donde estaba refugiado, y entonces pensó que no sería tan mala idea empezar a ejecutar su plan de tortura sobre el vampiro oxigenado.
Caminó rápido en dirección al departamento, seguramente el patético vampirito estaría refugiado en ese lugar, pronto llego y pudo infiltrarse por las escaleras de escape hasta llegar al departamento. Parado frente a la puerta el moreno pudo sentir el olor del rubio, no había duda que estaba en casa, entonces con sumo cuidado el vampiro giro el picaporte para entrar, pero cuando quiso dar un paso una barrera invisible se lo impidió... "maldito William" pensó Angelús al darse cuenta de lo que sucede y escuchó el agua de la ducha correr, por un momento pensó en ocultarse y esperar, tarde o temprano Spike tendría que salir, pero un suceso lo hizo cambiar de opinión.
El teléfono del departamento suena varias veces, Spike escuchó el sonido desde la ducha y piensa que seguramente son malas noticias desde W&H y decidió continuar y dejar que la contestadora responda.
-Spike ¿estás ahí? -dice Wesley desde la contestadota-. Te tengo noticias, Willow llegó, está con nosotros en la oficina, necesitamos que vengas de inmediato, estoy tratando de comunicarme con tu celular pero lo tienes apagado. Ven en cuanto escuches el mensaje.
Angelús escuchó las noticias dadas por Wesley y lejos de temer por lo que la bruja podría hacer se alegra, con Willow en L.A., su plan empieza a estar más cerca de ejecutarse,. Decidió dejar a Spike para después y volver a su refugio para planear cuidadosamente su siguiente movimiento.
Spike escuchó desde el baño el mensaje de Wesley y abandonó de inmediato su baño, vistiéndose tan rápido como puede, por fin una buena noticia dentro de todo ese caos. Cuando por fin esta listo y se dirige a la puerta ve que esta no está cerrada y siente en el ambiente el olor de Angelús, supone que ha tratado de entrar pero el hechizo funciono. Se preocupa, podría haber escuchado el mensaje de Wes. Pero no hay tiempo para preocuparse, ahora lo importante es llegar a W&H.
Todos los miembros del equipo de Angel están reunidos en la oficina del vampiro y Willow los acompaña, luce bastante más fresca y con otra ropa, entonces Gunn procede a mostrarle el vídeo donde esta registrado el momento en que Angel pierde su alma, pero la brujita no llega a ver mucho porque la entrada del vampiro oxigenado distrae a todos.
-Hey Red, vaya que te hiciste esperar -dice Spike desde la puerta de la oficina.
-¡Spike! -responde Willow visiblemente contenta y acercándose al rubio- Me alegra verte, ¿cómo estas?
-Bien, bueno ya sabes con todo este bloody problema, pero bien.
-¡Que bueno! me alegra que estés bien... -abrazándolo tímidamente-. Pensamos que nunca volveríamos a verte.
-Podemos dejar sus demostraciones de afecto para después -dice algo incomodo Gunn-. Tenemos trabajo que hacer.
-Si... yo... bien veamos el vídeo -dice Willow volviendo a su lugar.
Gunn le muestra detalladamente a Willow todas las pistas que tienen, luego todos la miran en busca de una respuesta.
-Y bien Willow, puedes ayudarnos ¿verdad? -pregunta tímidamente Fred.
-Si, pe... pero necesito más datos, alguien sabe que tipo de urna es esa, si es como Muo-Ping o de otro tipo.
-La verdad no, creo que no tenemos datos -responde un poco avergonzado Wes.
-Podemos intentar romperla, pero no quiero usar magia en vano, solo perderíamos tiempo y con el alma de Angel atrapada no puedo hacer mucho...
-¿Que sugieres? -pregunta serio Spike a Wesley.
-Fred y yo investigaremos todo lo referente a esa urna y posibles hechizos para romperla ¿podrías ayudarnos Willow? -pregunta Wes.
-Claro.
-Wesley, podemos hablar un momento a solas -pide Spike.
Wesley asiente y ambos salen de la oficina.
-¿Qué sucede Spike?
-No estoy seguro, pero creo que Angelús intentó entrar al departamento, cuando salí de bañarme la puerta estaba abierta.
-¿Te siguió?, ¿dejó alguna nota o algo? -preguntó preocupado el ex vigilante.
-No, y eso no es lo que me preocupa, sino que haya escuchado el mensaje que dejaste, voy a salir a buscarlo, pero no dejen sola a Willow, si algo le sucede Wes, nunca podríamos traer de vuelta a Angel, además yo nunca me lo perdonaría.
-Ni yo, no te preocupes, pondré vigilancia extra y no la dejaremos sola.
Spike se queda un poco más tranquilo con eso y espera que se oculte el sol del todo para poder volver a los bares a buscar a Angelús en medio de la noche y el terror.
Angelús por su parte pasó el resto de la tarde maquinando su plan, lo primero que hizo fue mandar a dos de sus sirvientes a vigilar W&H y atacar a la bruja en la primera oportunidad, la verdad era que esa noche no tenía ganas de enfrentarse a esos ineptos, necesitaba algo de acción, crueldad y diversión, así acompañado de otros vampiros se dirigió a unos de los bares mas exclusivos de la ciudad en busca de bellas y delicadas víctimas.
Spike volvió a la casa donde encontró a Angelús la noche anterior, pero ya no había rastro de él, el resto de la noche lo paso recorriendo las calles y algunos bares, y una vez más ninguna pista sobre el moreno, aunque un demonio le informó que hacía ya unos 3 días que no se asomaba por esos bares, y que lo habían visto cerca del centro comercial. De inmediato tomó ese rumbo, pero para su mala suerte en el camino se encontró con una pareja que estaba siendo atacada por unos vampiros que no eran del grupo de Angelús. Intento ignorar los gritos, pero no pudo y de inmediato intervino, logrando que la pareja escapase y peleando con los 3 vampiros por un buen rato. Cuando por fin terminó con esos tres retomo su camino y sintió la esencia del vampiro en el ambiente, siguió su olfato y encontró a 5 chicas muertas en un coche frente a un bar, sabía que era obra de Angelús, entró al lugar a buscarlo, pero el moreno ya se había ido, una vez más Spike llegó demasiado tarde.
***
Ya había amanecido. Willow, Fred y Wesley habían trabajado toda la noche buscando el tipo de urna y al parecer no tenían buenas noticias.
-¿Y si usamos la Flecha de Delothrian? -pregunta Fred notoriamente cansada.
-Me temo que no funcionaria, a diferencia del Muo-Ping, esta urna no puede romperse, sólo puede abrirse mediante un hechizo -contesta Willow.
-Es natural que el Conde haya usado una urna tan poderosa como esta, considerando su colección, me imagino que toma todas las precauciones -asegura Wes.
Spike regresó de su búsqueda directo a W&H y escucha voces en la oficina, no quiere interrumpir, pero en eso escucha a Fred decir algo que lo preocupa bastante.
-Entonces si el Conde no nos devuelve el alma, ¿no podemos hacer nada? -dice aterrada Fred.
-¿Qué dijiste pet? -dice alterado Spike mientras entra-. El maldito de Machiavello no nos la va a devolver y ustedes dicen que ya no hay nada que hacer.
-No es tan simple Spike, tranquilízate y te explicamos -surgiere Wesley.
-No puedo tranquilizarme. Quiero respuestas. ¡Ahora!
-Mira Spike -comienza a explicar Willow-. El alma de Angel esta atrapada en la Urna de Evlesh, es un artefacto antiguo y poderoso, los antiguos hechiceros lo usaban para poner en ellas las almas de asesinos y demonios, para así evitar que estas se reencarnasen en otras criaturas. Lamentablemente esta sólo se puede abrir mediante un hechizo y para eso necesito tenerla en mis manos, no puedo hacerlo a la distancia.
-Y nos vamos a quedar tan tranquilos, bloody hell, algo tenemos que hacer -grita el vampirito mientras empieza a romper todo lo que encuentra a su paso.
-¡Cálmate Spike! -ordena Wesley- Así no ayudas en nada.
-No puedo calmarme. Llevo noches buscándolo y es en vano, sólo recibo dudas, desconfianza, malas noticias... y la maldita burla de Angelús a cada momento. No importa lo que hagamos Wesley, ese bloody bastardo gano.
-No Spike, ya pensaremos en algo -agrega Willow-. No podemos permitir que Angelús siga matando, tenemos que pensar con claridad y tratar de solucionar rápido las cosas antes de que el Consejo intervenga.
-¿El Consejo? -pregunta preocupado Spike mirando al ex vigilante- ¿Qué diablos tiene que ver El Consejo en todo esto?
-Están enterados de lo que sucede y dicen que si no traemos de vuelta a Angel en unos días mandaran a una Cazadora para que termine el trabajo -explica Wesley.
Spike los mira sin responder, todo esto es demasiado para él. Había puesto todas sus esperanzas en Willow y lo que ahora le informaban las tiraba todas al suelo, lo único que hizo fue azotar la puerta y salir del lugar lo mas rápido que pudo, saco varios botellas de Whisky de la despensa de W&H y subió a su auto en dirección al departamento, donde se encerró y apago el celular empezando con la primera botella y dejando que todo el dolor y frustración que sentía se apoderasen de él, aventando varios objetos contra las paredes para desfogar su rabia. El lugar que había ordenado con esmero unas horas atrás era un completo desastre ahora.
Wesley trató de comunicarse toda la tarde con Spike, pero fue imposible y por la hora que era el ex vigilante estaba seguro que esa noche no contarían con él para que salga en busca de Angelús, así que opto por organizarse con Gunn para hacer ellos el trabajo. Con lo que Gunn no estaba muy contento, ya que pensaba que toda esta rabieta de Spike era solo una excusa para tomarse algo de tiempo libre. Cuando ya estaban listos para salir, Willow insistió en ir con ellos y así ver que tan graves estaban las cosas, finalmente Wesley aceptó ya que esa era la mejor manera de tener vigilada y protegida.
Recorrieron algunos bares sin tener éxito, hasta que en uno de ellos se toparon con unos vampiros que al parecer no habían notado la presencia de los humanos en el lugar, Wesley le sugiere a Willow que salga del lugar y los espere en el auto, la pelirroja sale y los chicos empiezan el ataque a los vampiros.
En la calle Willow camina en dirección al auto cuando es acorralada por cuatro vampiros.
-¿A donde vas tan sola, bruja? -menciona un vampiro.
-Sal de mi camino -contesta Willow.
Los vampiros se miran entre ellos y se ríen, acercándosele poco a poco.
-Parece que esta pequeña no se ha dado cuenta que esta en problemas.
-Sí -agrega otro de los vampiros-. Tu amigo Angelús nos mando a darte un regalito.
-¿De verdad? Y donde esta, hace mucho que no lo veo -dice irónica Willow.
Los vampiros no contestan y empiezan a acercarse, entonces Willow cierra sus ojos y al segundo los abre y están totalmente negros, mientras recita algunas palabras. Los vampiros se ríen y uno de ellos al notar la gravedad del asunto empieza a escapar y los demás no saben que hacer; en ese momento Willow extiende sus manos dejando salir de ellas ráfagas de luz que atraviesan a los vampiros volviéndolos polvo. Wesley y Gunn salen corriendo y la ven parada en una de las esquinas.
-¿Estas bien, Willow? -pregunta Gunn.
-Sí, Angelús me mando visitas, pero últimamente no soy muy amable con los extraños... y ¿cómo les fue a ustedes?
-Bien -responde Wes-. Será mejor que nos vayamos, los sirvientes de Angelús pueden volver.
Los chicos vuelven a W&H y luego Wesley deja a Willow en casa de Fred y da ordenes de que vigilen en todo momento el departamento de las chicas, solo como prevención.
…
Angelús estaba en su nueva guarida esperando que sus sirvientes regresen con las noticias de que lograron deshacerse de Willow, cuando solo unos de ellos llega corriendo y asustado.
-¿Qué sucedió, me tienes buenas noticias? -pregunta Angelús.
-Me temo que no. La bruja, los mato a los 3 en un instante, pude escapar por que corrí antes que ellos.
-Maldita Willow... no se va a salir con la suya.
-Vayamos a intentarlo de nuevo, pero esa chica es peligrosa.
-No, hoy no, ya me aburrí de estar acá, necesito un poco de acción.
El vampiro coge su abrigo y sale en busca de una víctima joven y llena de vida, una vida que el podrá drenar en un solo sorbo.
…
Por los siguientes dos días Spike no se asomo por W&H ni un segundo. Gunn estaba contento con eso, a su punto de vista por fin el rubio se había quitado la careta y los había abandonado a su suerte, tal como él lo pronosticó. Por su lado Wesley estaba realmente preocupado por Spike, además en esas noches sin que el rubio ande tras la pista de Angelús ellos no se habían dado abasto, entre proteger a Willow y los casos, en verdad necesitaban la ayuda de Spike, pero no se le ocurría como hacer para convencerlo de regresar.
Por su lado Angelús estaba disfrutando al máximo de su tiempo, ya se había enterado que Spike había cesado en su búsqueda y sus informantes le dijeron que no salía de su departamento hacia unos días. Angelús pensaba que era totalmente ridículo el esfuerzo de Gunn y Wes por dar por él, tanto que ni siquiera se molesto por cruzarse con ellos, de todas maneras todos ellos tenían sus horas contadas.
Mientras en W&H, Wesley insistía en el teléfono en probar suerte y ver si Spike se animaba a contestarle.
-Hola Wes -dice Willow entrando a la oficina- ¿Alguna novedad?
-La verdad no, necesitamos a Spike de regreso, nosotros no estamos haciendo mucho.
-Gunn dice que Spike esta aprovechando la crisis para darse unas vacaciones -dice mientras se sienta-. Pero yo no lo creo, Spike a cambiado mucho y parece que esta en verdad preocupado por Angel.
-Lo está -asegura Wes-. Willow ¿por que no vas a su departamento y hablas con él? Ustedes son casi amigos y quizás te escuche.
La pelirroja acepta sin problemas y luego de una corta conversación con Wesley sale en dirección al departamento de Spike.
Spike esta sentado en el suelo del cuarto con su nueva botella de whisky, se siente débil y ni siquiera recuerda cuando fue la última vez que se alimento. Hace varios días que se acabo la sangre y no ha tenido cabeza para pensar en comprar más. En la refrigeradora sólo hay helado y algunos pedazos de pizza que no quiere ni ver por que le recuerdan a su última cena con Angel. Sumergido en su dolor y recuerdos siente el sonido de la puerta, un escalofrío lo recorre pensando que puede ser Angelús nuevamente y no se siente en condiciones de pelear.
-Spike soy yo -dice Willow fuera del departamento-. Ábreme por favor, necesitamos hablar.
El rubito reconoció la voz de la bruja y ni se movió, no tenia ganas de ver a nadie.
-Vamos Spike -insiste Willow-. Es importante.
Tratando de tomar fuerzas, Spike se levanta tambaleando, llega hasta la puerta y la abre. Willow lo mira sin poder evitar sentirse mal por el estado en que lo encuentra. Él sin mirarla vuelve a internarse en su habitación mientras bebe. La bruja lo sigue y se sienta frente a él mientras busca las palabras para hacer sentir un poco mejor a Spike.
-Yo... no se que decirte... me gustaría traerte buenas noticias, pe... pero -empieza a explicar la pelirroja-, hemos seguido investigando y no puedo restaurar el alma de Angel mientras la tenga el Conde -Spike la mira con los ojos llenos de frustración-. Por eso te necesitamos, tienes que ayudarnos a recuperarla
-No puedo -responde-. Todo fue mi culpa, aunque Wesley diga que no, se que fue mi culpa... no logro encontrarlo y cuando lo he visto no he podido enfrentarlo
-Esta bien, te entiendo, pero te apoyaremos, no estas solo.
-Si lo estoy, yo solo tenia a Angel en este bloody mundo, se que los demás no confían en mí y si Wes se acerca es sólo por que Angel se lo pidió, no por que yo le importe, yo no le importo a nadie
-¡Hey! -exclama Willow-. A mi me importas... vamos, nos conocemos hace mucho, siempre has estado cerca, me apoyaste cuando Buffy se fue, tu y yo tenemos historia.
-Si como no -dice irónico Spike.
-Claro que si. Te acuerdas cuando me secuestraste para que te ayudase con Dru... o, cu... cuando descubriste que no podías lastimar a nadie por el chip, yo te apoye moralmente, te deje intentarlo varias veces... -Spike sonríe un poco-. Así te ves mejor, ahora date una ducha y me acompañas a W&H, ¿quieres?
-No, no quiero verlos, Gunn piensa que estoy ayudando a Angelús y yo...
-Bueno ya me hartaste tonto oxigenado -dice en tono serio Willow mientras Spike la mira desconcertado-. Ese no es el big bad que yo conozco, la muerte debió cambiarte mucho... o ¿hay algo que no sepa?
Willow observa a su alrededor y ve el departamento casi destrozado. Hay ropa de Angel regada por la habitación y las botellas de licor apiladas en un rincón. Luego observa el rostro de Spike, demacrado y con los ojos irritados. Entonces le llega el entendimiento.
-Oh, tú y Angel... debí imaginarlo. Tú… tú… ¿lo amas?
-Sí. Demonios Red, Angel es lo más importante en este momento para mi, estábamos bien... el me ama, debí suponer que todo se arruinaría, por que no es usual que alguien me ame
-Basta Spike, ya no te hagas daño, si Angel te ama es por que descubrió lo maravilloso que eres... yo misma hubiese intentado conquistarte si no fuese gay... escúchame, si en verdad lo amas, entonces con más razón debes de ayudarme... el alma de Angel esta atrapada en esa urna, esta sufriendo Spike, ¿vas a dejarlo sufrir eternamente?
-¿Sufriendo? -pregunta Spike sin entender.
-Si... ya te dije que la usaban para condenar a las almas de los asesinos y tipos así, entonces, nos ayudas o condenamos de una vez a ese infierno al alma de Angel.
Spike la mira y trata de sonreír pero se siente vencido. Arrojando la botella de whisky contra la pared se para y contiene las lagrimas mientras habla.
-No tengo fuerzas Willow, no soy un big bad. Soy un patético vampiro, todos esperan que tome el lugar de Angel y sea el de las decisiones radicales, que salga y lo atrape y que si no hay otra opción que lo mate... no puedo Willow, yo no soy Buffy, yo no puedo matarlo... le prometí que lo haría, se lo prometí a Angel, pero no puedo cumplir esa promesa... no puedo verlo morir, no quiero matarlo.
Willow lo observa y titubeante se acerca para tratar de consolarlo. Spike siente el apoyo de la bruja intentando sentirse reconfortado.
-No tendrás que matarlo Spike, no mientras este en mis manos, te lo prometo -dice Willow -¿Confías en mi?
-Sí -contesta Spike-. Además no tengo otra opción, ¿o si?, no voy a dejar que sufra eternamente por culpa de ese bloody Conde -agrega con determinación.
Spike se levanta y se dirige al baño.
-Me ducho y nos vamos -menciona el rubito y Willow asiente sonriente, Spike voltea a verla- Willow, gracias.
Minutos después Spike estaba sobrio, limpio y despejado, listo para continuar con su búsqueda y hacer hasta lo imposible para recuperar a Angel.
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