Riesgo
Autor: milkymushi
Fandom: RPF Tokio Hotel
Claim: Bill Kaulitz/Eudoxia Kouzounis (O.C)
Tabla: Momentos
Tema: #2. Riesgo
Personajes: Bill Kaulitz, Eudoxia Kouzounis (O.C.)
Resumen: Cuando se trata de amor, en realidad, si no arriesgas, no ganas nada.
Advertencias: Continuación de #1. Brillo. Se recomienda leerlo escuchando Thunder de Boys Like Girls.
Fue recibido con un azotón de puerta en la cara, y bien merecido que lo tenía luego de salir huyendo del salón de ensayos donde el y Eudoxia se habían besado cuando alguien destrabó la puerta. Era un cobarde pero habían tantas cosas que nunca se hubiera atrevido a arriesgar...ahora lo que sentía por Eudoxia era una de esas cosas.
Hacía ya una semana que no dormía ni comía bien y se podía decir que parecía un adicto con síndrome de abstinencia. Eudoxia le había desbaratado totalmente lo poco de cabeza que le quedaba, estaba vuelto un ex-patriado, un bicho fuera de lugar...y no iba a soportarlo. Al fin, la puerta cedió lo suficiente como para que Bill observara el rostro furibundo de la muchacha.
-Eudoxia, por favor...lo lamento ¿De acuerdo? Me siento muy mal por lo que hice ¿Si?
-¿Por cual de las dos cosas? Por hacerme feliz por escasos minutos o por dejarme como tonta delante de la prensa?
¿¡Prensa!?
¿Acaso la prensa había sido quien abrió la puerta?
-No se por donde saliste tu, pero yo salí por el frente del edificio, no puedo creer que se atrevan a preguntar cosas tan crueles. - dijo medianamente tranquila, pero con la voz algo alterada por el enojo. -En vez de quedarte conmigo solo pasé la vergüenza más grande de mi vida, te apuesto que tan pronto como mi rostro aparezca en todos los medios conocidos no voy a poder salir a ningún lado sin que alguien me ataque o me llame...de forma inadecuada.
-Mira, ya te dije que lo lamento, pero nunca te mentí y si ahora estoy aquí es por que no quiero que pienses que soy un cobarde.
-Ya es muy tarde para eso, Kaulitz. - Eudoxia cerró la puerta con fuerza, solo que, sin contar que estaría lastimando la mano del muchacho.
-No, no... - Gimió de dolor y Eudoxia se vió forzada a abrir la puerta de un tirón.
Primero, observó la mano de Bill que comenzaba a hincharse y tambien estaba roja, y luego a los ojos oscuros que la miraban pacientemente y con un ruego implícito. Se recargó en el marco de la puerta y se cruzó de brazos, sin dejar de mirarlo y esa mirada, ese par de diamantes azules que lucían más brillantes y hermosos que nunca a pesar de la evidente vergüenza y enojo que emitían, le hicieron sentir al vocalista que había sido de verdad...un completo idiota.
Un ruido, un auto frenando de golpe...de hecho hubo una sucesión de aquel sonido justo delante de la casa de la muchacha y Bill escondió su mano. Asustado como estaba, se quedó paralizado, junto a Eudoxia, esperando lo innevitable, y aunque tanto fotografos y periodistas se tardaron un tanto en llegar hasta la puerta para comenzar con su rutina diaria de molestar, e no hizo nada, los observó, observó la expresión de aprehensión de Eudoxia y le dieron ganas de gritar.
Ahora se daba cuenta que no era el quien se arriesgaba al hacer público que quizá iba a hacer algo formal con Eudoxia, si no que la exponía a ella, la exponía a que la hirieran, a que le hicieran algo malo, a que la gente la viera como algo que no era solo por estar con el.
Pero esa decisión en sus ojos, esa resignación...el saber que estaban el uno para el otro...
La abrazó por la cintura y la acercó hacia su pecho, para luego mirar de forma desafiante a todos los que esa tarde se habían atrevido a molestarla, a perturbar su momento juntos.
-¿Planean empezar con las preguntas o podemos irnos? - Eudoxia apretó su mano y lo miró con una sonrisa de gratitud, ciertamente, aún no le perdonaba el hecho de que la hubiera dejado atrás sin preocuparse, pero podía ver, ahora que los flashes de las cámaras iluminaban su rostro, que haberse puesto en riesgo, no solo a ella, si no a el...
De verdad había valido la pena
Fandom: RPF Tokio Hotel
Claim: Bill Kaulitz/Eudoxia Kouzounis (O.C)
Tabla: Momentos
Tema: #2. Riesgo
Personajes: Bill Kaulitz, Eudoxia Kouzounis (O.C.)
Resumen: Cuando se trata de amor, en realidad, si no arriesgas, no ganas nada.
Advertencias: Continuación de #1. Brillo. Se recomienda leerlo escuchando Thunder de Boys Like Girls.
Fue recibido con un azotón de puerta en la cara, y bien merecido que lo tenía luego de salir huyendo del salón de ensayos donde el y Eudoxia se habían besado cuando alguien destrabó la puerta. Era un cobarde pero habían tantas cosas que nunca se hubiera atrevido a arriesgar...ahora lo que sentía por Eudoxia era una de esas cosas.
Hacía ya una semana que no dormía ni comía bien y se podía decir que parecía un adicto con síndrome de abstinencia. Eudoxia le había desbaratado totalmente lo poco de cabeza que le quedaba, estaba vuelto un ex-patriado, un bicho fuera de lugar...y no iba a soportarlo. Al fin, la puerta cedió lo suficiente como para que Bill observara el rostro furibundo de la muchacha.
-Eudoxia, por favor...lo lamento ¿De acuerdo? Me siento muy mal por lo que hice ¿Si?
-¿Por cual de las dos cosas? Por hacerme feliz por escasos minutos o por dejarme como tonta delante de la prensa?
¿¡Prensa!?
¿Acaso la prensa había sido quien abrió la puerta?
-No se por donde saliste tu, pero yo salí por el frente del edificio, no puedo creer que se atrevan a preguntar cosas tan crueles. - dijo medianamente tranquila, pero con la voz algo alterada por el enojo. -En vez de quedarte conmigo solo pasé la vergüenza más grande de mi vida, te apuesto que tan pronto como mi rostro aparezca en todos los medios conocidos no voy a poder salir a ningún lado sin que alguien me ataque o me llame...de forma inadecuada.
-Mira, ya te dije que lo lamento, pero nunca te mentí y si ahora estoy aquí es por que no quiero que pienses que soy un cobarde.
-Ya es muy tarde para eso, Kaulitz. - Eudoxia cerró la puerta con fuerza, solo que, sin contar que estaría lastimando la mano del muchacho.
-No, no... - Gimió de dolor y Eudoxia se vió forzada a abrir la puerta de un tirón.
Primero, observó la mano de Bill que comenzaba a hincharse y tambien estaba roja, y luego a los ojos oscuros que la miraban pacientemente y con un ruego implícito. Se recargó en el marco de la puerta y se cruzó de brazos, sin dejar de mirarlo y esa mirada, ese par de diamantes azules que lucían más brillantes y hermosos que nunca a pesar de la evidente vergüenza y enojo que emitían, le hicieron sentir al vocalista que había sido de verdad...un completo idiota.
Un ruido, un auto frenando de golpe...de hecho hubo una sucesión de aquel sonido justo delante de la casa de la muchacha y Bill escondió su mano. Asustado como estaba, se quedó paralizado, junto a Eudoxia, esperando lo innevitable, y aunque tanto fotografos y periodistas se tardaron un tanto en llegar hasta la puerta para comenzar con su rutina diaria de molestar, e no hizo nada, los observó, observó la expresión de aprehensión de Eudoxia y le dieron ganas de gritar.
Ahora se daba cuenta que no era el quien se arriesgaba al hacer público que quizá iba a hacer algo formal con Eudoxia, si no que la exponía a ella, la exponía a que la hirieran, a que le hicieran algo malo, a que la gente la viera como algo que no era solo por estar con el.
Pero esa decisión en sus ojos, esa resignación...el saber que estaban el uno para el otro...
La abrazó por la cintura y la acercó hacia su pecho, para luego mirar de forma desafiante a todos los que esa tarde se habían atrevido a molestarla, a perturbar su momento juntos.
-¿Planean empezar con las preguntas o podemos irnos? - Eudoxia apretó su mano y lo miró con una sonrisa de gratitud, ciertamente, aún no le perdonaba el hecho de que la hubiera dejado atrás sin preocuparse, pero podía ver, ahora que los flashes de las cámaras iluminaban su rostro, que haberse puesto en riesgo, no solo a ella, si no a el...
De verdad había valido la pena