Carta a Harry
Querido Harry:
¿Recuerdas cómo nos conocimos tú y yo? Era diciembre de 1998 y la persona que está aquí es muy distinta a la niña que recibió ese libro y lo miró con desconfianza, ¿recuerdas cómo no quería leer tu historia, como me resistí, segura que esa magia no era para mí? ¿Cómo cuando comencé no pude parar de leer y me atrapaste para siempre? Yo lo recuerdo, porque empezar a leerte fue una de las cosas más importantes de mi vida.
Tú no sabes quién soy, estas dentro de un universo paralelo, donde las cosas más mágicas son reales y tú eres un héroe; lo que no sabes es que en mi mundo también eres un héroe, un héroe para millones de chicos como yo, que llevan toda una vida leyendo sobre ti, que llevan toda la vida enamorándose de un universo a través de tus preciosos ojos verdes que heredaste de tu madre.
Gracias Harry por presentarnos a Ron, a Hermione, a Neville, a Luna, a Ginny y a Draco; gracias por los Weasley, todos y cada uno de esos pelirrojos que se convirtieron en tu familia; gracias por Sirius, por Remus, por Lily, por James, por Peter, por Severus, por todos los que sobrevivieron y los que no a la primera guerra de la que sabes tan poco pero te duele tanto; Gracias por Dumbledore y por Voldemort, por Bellatrix y por Kingsley, por Victor Krum y por Fleur Delacour, por Ojoloco Moody y por Nymphadora Tonks, por Teddy Lupin, por Lucius, por Cho, por Lavender, por Oliver, por Cedric, y por todos esos personajes (esas personas) que de una u otra forma fueron parte de tu vida, por tanto también fueron parte de la mía.
Gracias por el Quidditch, por El cabeza de puerco, por Las tres escobas, por Zonko y por todo Hogsmeade, por la tienda de varitas de Ollivander, por Gringotts, por el Caldero Chorreante y por todo el Callejón Diagon y por el Callejón Knockturn también. Gracias por todos esos lugares mágicos en los que estuviste, gracias por enseñarme a encontrar mis propios lugares mágicos.
Gracias principalmente por Hogwarts, por ese colegio majestuoso con un bosque prohibido, un lago con un calamar gigante y cuatro casas que son el hogar de cada alumno que pisa el lugar. Gracias por Hufflepuff, por Ravenclaw, por Slytherin y, en mi caso personal, gracias por Gryffindor, tu casa, mi casa y la casa de todos los leones impulsivos, cabezotas y valientes de espíritu.
Gracias Harry por tus películas con sus defectos y virtudes, gracias por Daniel, por Rupert, por Emma, por Matthew, por Evanna, por Bonnie, por Tom. Gracias por David, por Gary, por Helena, por Ralph, por Alan. Gracias por ese cast que hoy en esa última premiere logró sacarme lágrimas de emoción pensando que sería la última vez que los vería juntos pasar por la alfombra roja de una peli que lleva tu nombre.
Gracias Harry por inspirar a Darren a hacer un musical maravilloso que hoy lo ha llevado tan lejos, gracias por acompañar a Chris en esos momentos cuando solo era un pequeño chico de un pueblo que tenía que recibir los insultos de sus compañeros. Gracias por acompañar a esos dos maravillosos chicos y ayudarlos a convertirse en los hombres que son hoy en día, esos hombres que me hacen sentir orgullosa de ser su seguidora.
Gracias Harry por toda esa gente maravillosa que he conocido gracias a ti, que son tantas que ni siquiera puedo empezar a nombrar, por esas amigas que se quedan hablando hasta altas horas de la mañana en msn, por esa gente que comparte y nos entrega un poco de ellos a través de fics, fanarts, fanmix, fanvids, etc. Gracias por romper las barreras de países, gustos, política e idioma y concentrarnos a todos en el amor a tu universo. Gracias por toda esa gente que he concido y esa que me queda por conocer. Gracias porque por ti, he conocido a kyra_theurge , la mujer que ahora está a mi lado y que hace mi mundo más mágico de lo que jamás imagine.
J.K GRACIAS POR REGALARNOS A HARRY. AMIGOS GRACIAS POR COMPARTIR EL UNIVERSO DE HARRY CONMIGO. Y HARRY… GRACIAS POR TODO.
Y por último un pequeño fic que escribi después del trailler de HP a pesar de que no tiene ningún tipo de spoiler de la peli, tiene ligero Sirius/Remus pero es un regalo para todos los que han llegado conmigo hasta aquí
Titulo: Una última vez... por Harry
Personajes: Sirius, Remus, James y Lily
Rating: Gen
Spoilers: El septimo libro?
Nota: Ya lo dije arriba pero nadie me matara si lo repito, para todas las personas que llevan a Harry en el corazón, no tiene beta así que todos los errores son mios.
Remus abre los ojos y lo primero que ve es azul, una inmensidad de azul, parpadea un par de veces antes de percatarse de que está mirando el cielo, que no siente dolor en su cansado cuerpo, que no hay ningún atisbo de preocupación en su mente y eso le preocupa porque supuestamente está en medio de una batalla, que hay cuerpos a su alrededor de muchas personas y no sabe si son amigos o enemigos, pero lo único que tiene claro es que la mayoría de ellos no merecía morir y que esto es demasiado para los hombros de un chico de diecisiete años, como no va a hacerlo, si es mucho para sus hombros y él ya lo vivió una vez. Entonces los últimos segundos aparecen como un flash en su memoria, la pelea con Dolohov, Tonks tratando de alcanzarle la mano, ese segundo de distracción pensando que la mujer al lado suyo es la madre de su hijo y el rayo de luz verde. La realidad se siente como un golpe en el estómago, un golpe que extrañamente no duele.
-¿Estoy muerto?
-Y yo que pensaba que eras el más listo de los cuatro- la voz profunda y la risa perruna inundan sus oídos y no puede reprimir una sonrisa, porque ese siempre será para él, el sonido del hogar.
Cuando mira hacia Sirius recién cae en la cuenta de que esta en Hogwarts, salvo que no, porque sabe cómo lucia la escuela antes de morir y solo el recuerdo lo hace temblar, aparte de todas las cosas que hicieron en su época de estudiantes, recostarse en el suelo del gran comedor a observar el cielo entre las mesas de las cuatro casas nunca estuvo en la lista.
Ambos se levantan sin dejar de mirarse, como si no pudieran quitarse la vista el uno del otro, Sirius se ve más joven, el pelo largo, el rostro atractivo, la mirada segura, igual como cuando salieron de Hogwarts, entonces se percata que él también se ve así, como en esa época, con su ropa raída, sus manos de pianista sin cicatrices y siente más cabello sobre su nuca, los huesos no le duelen, no lleva el peso del mundo sobre sus hombros, ya no más.
-Sirius… - Remus siente la necesidad de decirle tantas cosas, hablar sobre como lo ha extrañado, de cómo el dolor lo hizo refugiarse en los primeros brazos que estuvieron ahí para recibirlo, de que tiene un hijo que es metamorfomago y que cuando lo mira sus ojos siempre se vuelven gris tormenta y no puede evitar sentir un nudo en la garganta recordándolo, que ese niño tiene sangre de los Black en sus venas, de que está seguro de que esa sangre no debe estar tan maldita si corre por las venas de las dos personas que más ha amado en la vida. Siente que las palabras se agrupan en su garganta pero antes que pueda decir cualquier cosa, Sirius lo interrumpe.
- Ya habrá tiempo para eso, ahora tenemos algo que hacer
Cuando habla no lo está mirando, y sus ojos no pueden evitar seguir la misma dirección y entonces se encuentra observando a James (y su pelo revuelto, y su sonrisa genuina y sus ojos brillantes y ese semblante que es tan parecido a Harry y a la vez tan diferente) y a Lily (y su pelo rojo hasta la cintura, y sus ojos verdes esperanza, y ese brillo tan primaveral y tan Lily). Sus ojos se llenan de lágrimas de felicidad, porque ahí están sus mejores amigos, ahí está su familia, y nunca pensó que la muerte se sentiría tanto como el descanso después de un largo viaje.
Los cuatro comparten una mirada, saben que alguien falta entre ellos y su presencia ausente es lo único que trae dolor en el lugar donde se encuentran. Ya no hay odio, ni reclamos, ni la palabra traidor saliendo de la boca de alguien. Solo está el recuerdo del chico pequeño, de cabello castaño que siempre estuvo a su lado con una sonrisa, esperan que donde quiera que se encuentre, se encuentre tan en paz como ellos.
-Harry… - la melodiosa voz de Lily interrumpe los pensamientos de los hombres que la acompañan, todos saben que hacer, ni siquiera es necesario decirlo en voz alta. El pequeño Harry que es un poco hijo de todos ellos, no solo de James y Lily. Harry, los ojos verdes de su madre el cabello desordenado de su padre y la responsabilidad de salvar el mundo. Harry y sus diecisiete años y todo el dolor y la alegría y el amor. Harry, el niño que vivió para ser el salvador del mundo mágico. Harry, que siendo fuerte y valiente, necesita dirigirse a la muerte en la compañía de ellos, de esas personas que habiendo compartido tan poco tiempo con él, son de todas formas su imagen de familia.
-Ya es hora… - La voz de James no puede ocultar el orgullo en su voz, y los cuatro se dirigen hacía el bosque prohibido, donde Harry los está esperando para ganar la guerra junto a ellos. Por todas las personas que quieren un mundo mejor, y para que otros niños, al igual que ellos, puedan entrar un primero de Septiembre después de un mágico viaje.
¿Recuerdas cómo nos conocimos tú y yo? Era diciembre de 1998 y la persona que está aquí es muy distinta a la niña que recibió ese libro y lo miró con desconfianza, ¿recuerdas cómo no quería leer tu historia, como me resistí, segura que esa magia no era para mí? ¿Cómo cuando comencé no pude parar de leer y me atrapaste para siempre? Yo lo recuerdo, porque empezar a leerte fue una de las cosas más importantes de mi vida.
Tú no sabes quién soy, estas dentro de un universo paralelo, donde las cosas más mágicas son reales y tú eres un héroe; lo que no sabes es que en mi mundo también eres un héroe, un héroe para millones de chicos como yo, que llevan toda una vida leyendo sobre ti, que llevan toda la vida enamorándose de un universo a través de tus preciosos ojos verdes que heredaste de tu madre.
Gracias Harry por presentarnos a Ron, a Hermione, a Neville, a Luna, a Ginny y a Draco; gracias por los Weasley, todos y cada uno de esos pelirrojos que se convirtieron en tu familia; gracias por Sirius, por Remus, por Lily, por James, por Peter, por Severus, por todos los que sobrevivieron y los que no a la primera guerra de la que sabes tan poco pero te duele tanto; Gracias por Dumbledore y por Voldemort, por Bellatrix y por Kingsley, por Victor Krum y por Fleur Delacour, por Ojoloco Moody y por Nymphadora Tonks, por Teddy Lupin, por Lucius, por Cho, por Lavender, por Oliver, por Cedric, y por todos esos personajes (esas personas) que de una u otra forma fueron parte de tu vida, por tanto también fueron parte de la mía.
Gracias por el Quidditch, por El cabeza de puerco, por Las tres escobas, por Zonko y por todo Hogsmeade, por la tienda de varitas de Ollivander, por Gringotts, por el Caldero Chorreante y por todo el Callejón Diagon y por el Callejón Knockturn también. Gracias por todos esos lugares mágicos en los que estuviste, gracias por enseñarme a encontrar mis propios lugares mágicos.
Gracias principalmente por Hogwarts, por ese colegio majestuoso con un bosque prohibido, un lago con un calamar gigante y cuatro casas que son el hogar de cada alumno que pisa el lugar. Gracias por Hufflepuff, por Ravenclaw, por Slytherin y, en mi caso personal, gracias por Gryffindor, tu casa, mi casa y la casa de todos los leones impulsivos, cabezotas y valientes de espíritu.
Gracias Harry por tus películas con sus defectos y virtudes, gracias por Daniel, por Rupert, por Emma, por Matthew, por Evanna, por Bonnie, por Tom. Gracias por David, por Gary, por Helena, por Ralph, por Alan. Gracias por ese cast que hoy en esa última premiere logró sacarme lágrimas de emoción pensando que sería la última vez que los vería juntos pasar por la alfombra roja de una peli que lleva tu nombre.
Gracias Harry por inspirar a Darren a hacer un musical maravilloso que hoy lo ha llevado tan lejos, gracias por acompañar a Chris en esos momentos cuando solo era un pequeño chico de un pueblo que tenía que recibir los insultos de sus compañeros. Gracias por acompañar a esos dos maravillosos chicos y ayudarlos a convertirse en los hombres que son hoy en día, esos hombres que me hacen sentir orgullosa de ser su seguidora.
Gracias Harry por toda esa gente maravillosa que he conocido gracias a ti, que son tantas que ni siquiera puedo empezar a nombrar, por esas amigas que se quedan hablando hasta altas horas de la mañana en msn, por esa gente que comparte y nos entrega un poco de ellos a través de fics, fanarts, fanmix, fanvids, etc. Gracias por romper las barreras de países, gustos, política e idioma y concentrarnos a todos en el amor a tu universo. Gracias por toda esa gente que he concido y esa que me queda por conocer. Gracias porque por ti, he conocido a kyra_theurge , la mujer que ahora está a mi lado y que hace mi mundo más mágico de lo que jamás imagine.
J.K GRACIAS POR REGALARNOS A HARRY. AMIGOS GRACIAS POR COMPARTIR EL UNIVERSO DE HARRY CONMIGO. Y HARRY… GRACIAS POR TODO.
Y por último un pequeño fic que escribi después del trailler de HP a pesar de que no tiene ningún tipo de spoiler de la peli, tiene ligero Sirius/Remus pero es un regalo para todos los que han llegado conmigo hasta aquí
Titulo: Una última vez... por Harry
Personajes: Sirius, Remus, James y Lily
Rating: Gen
Spoilers: El septimo libro?
Nota: Ya lo dije arriba pero nadie me matara si lo repito, para todas las personas que llevan a Harry en el corazón, no tiene beta así que todos los errores son mios.
Remus abre los ojos y lo primero que ve es azul, una inmensidad de azul, parpadea un par de veces antes de percatarse de que está mirando el cielo, que no siente dolor en su cansado cuerpo, que no hay ningún atisbo de preocupación en su mente y eso le preocupa porque supuestamente está en medio de una batalla, que hay cuerpos a su alrededor de muchas personas y no sabe si son amigos o enemigos, pero lo único que tiene claro es que la mayoría de ellos no merecía morir y que esto es demasiado para los hombros de un chico de diecisiete años, como no va a hacerlo, si es mucho para sus hombros y él ya lo vivió una vez. Entonces los últimos segundos aparecen como un flash en su memoria, la pelea con Dolohov, Tonks tratando de alcanzarle la mano, ese segundo de distracción pensando que la mujer al lado suyo es la madre de su hijo y el rayo de luz verde. La realidad se siente como un golpe en el estómago, un golpe que extrañamente no duele.
-¿Estoy muerto?
-Y yo que pensaba que eras el más listo de los cuatro- la voz profunda y la risa perruna inundan sus oídos y no puede reprimir una sonrisa, porque ese siempre será para él, el sonido del hogar.
Cuando mira hacia Sirius recién cae en la cuenta de que esta en Hogwarts, salvo que no, porque sabe cómo lucia la escuela antes de morir y solo el recuerdo lo hace temblar, aparte de todas las cosas que hicieron en su época de estudiantes, recostarse en el suelo del gran comedor a observar el cielo entre las mesas de las cuatro casas nunca estuvo en la lista.
Ambos se levantan sin dejar de mirarse, como si no pudieran quitarse la vista el uno del otro, Sirius se ve más joven, el pelo largo, el rostro atractivo, la mirada segura, igual como cuando salieron de Hogwarts, entonces se percata que él también se ve así, como en esa época, con su ropa raída, sus manos de pianista sin cicatrices y siente más cabello sobre su nuca, los huesos no le duelen, no lleva el peso del mundo sobre sus hombros, ya no más.
-Sirius… - Remus siente la necesidad de decirle tantas cosas, hablar sobre como lo ha extrañado, de cómo el dolor lo hizo refugiarse en los primeros brazos que estuvieron ahí para recibirlo, de que tiene un hijo que es metamorfomago y que cuando lo mira sus ojos siempre se vuelven gris tormenta y no puede evitar sentir un nudo en la garganta recordándolo, que ese niño tiene sangre de los Black en sus venas, de que está seguro de que esa sangre no debe estar tan maldita si corre por las venas de las dos personas que más ha amado en la vida. Siente que las palabras se agrupan en su garganta pero antes que pueda decir cualquier cosa, Sirius lo interrumpe.
- Ya habrá tiempo para eso, ahora tenemos algo que hacer
Cuando habla no lo está mirando, y sus ojos no pueden evitar seguir la misma dirección y entonces se encuentra observando a James (y su pelo revuelto, y su sonrisa genuina y sus ojos brillantes y ese semblante que es tan parecido a Harry y a la vez tan diferente) y a Lily (y su pelo rojo hasta la cintura, y sus ojos verdes esperanza, y ese brillo tan primaveral y tan Lily). Sus ojos se llenan de lágrimas de felicidad, porque ahí están sus mejores amigos, ahí está su familia, y nunca pensó que la muerte se sentiría tanto como el descanso después de un largo viaje.
Los cuatro comparten una mirada, saben que alguien falta entre ellos y su presencia ausente es lo único que trae dolor en el lugar donde se encuentran. Ya no hay odio, ni reclamos, ni la palabra traidor saliendo de la boca de alguien. Solo está el recuerdo del chico pequeño, de cabello castaño que siempre estuvo a su lado con una sonrisa, esperan que donde quiera que se encuentre, se encuentre tan en paz como ellos.
-Harry… - la melodiosa voz de Lily interrumpe los pensamientos de los hombres que la acompañan, todos saben que hacer, ni siquiera es necesario decirlo en voz alta. El pequeño Harry que es un poco hijo de todos ellos, no solo de James y Lily. Harry, los ojos verdes de su madre el cabello desordenado de su padre y la responsabilidad de salvar el mundo. Harry y sus diecisiete años y todo el dolor y la alegría y el amor. Harry, el niño que vivió para ser el salvador del mundo mágico. Harry, que siendo fuerte y valiente, necesita dirigirse a la muerte en la compañía de ellos, de esas personas que habiendo compartido tan poco tiempo con él, son de todas formas su imagen de familia.
-Ya es hora… - La voz de James no puede ocultar el orgullo en su voz, y los cuatro se dirigen hacía el bosque prohibido, donde Harry los está esperando para ganar la guerra junto a ellos. Por todas las personas que quieren un mundo mejor, y para que otros niños, al igual que ellos, puedan entrar un primero de Septiembre después de un mágico viaje.