El augurio de la Mantis
Ayer me fuí a dormir a las 7 de la mañana, habiendo conseguido únicamente reducir mis 154 paginas de guión a 140.
A pesar de eso, hoy me he levantado como impulsada por un resorte a las 13:00, puesto que esa era la hora que había acordado con mi tutor para llamarle.
Total, que llego a la sala donde se concentraba todo lo necesario para efectuar esa llamada: el PC grande (donde miraría en inet el teléfono del tutor), la libreta de Muji donde apunto todo lo referente al largo con mi lista de dudas, el propio teléfono, el guión impreso, mi portátil. Todo en la misma mesa, que fácil, ¿verdad? Todo listo para efectuar la llamada.
LÁSTIMA DE ESTO:
D:
D:
D:
D:
D:
¡¡¡¡UNA MANTIS RELIGIOSA ESTABA SOBRE MI TOTO!!!!
¡¡¡Estaba ahi, dominando la situación la muy puta!!! ¡Justo enmedio de todos mis enseres necesarios para realizar la llamada y para trabajar! ¡No podia hacer nada mientras ella estuviera ahí!
Como ser racional que soy, no me he dejado llevar por el pánico, así que he analizado mis opciones:
1. Llamar a alguno de mis padres y que se libraran de ella -> ¡ERROR! Estaba sola en casa
2. Darle un zapatillazo, o mejor dicho vista su monstruosa dimensión, un periodicazo -> ¡ERROR! la muy lista se había puesto estrategicamente encima de mi Toto ;_; así que no podía proceder a masacrarla sin herir colateralmente mi querido portatil buuhuhuhu ¡Toto no temas te salvaré!
3. Cogerla con un paño en la mano y sacarla a la calle. -> ¡ERROR! Bueno, simplemente me daba ascazo cogerla aunque hubiera tela de por medio. ¿¿Pero habeis visto que patas tan enormes tenía?? Ggghh
Finalmente, he optado por coger una escoba, persuadirla para que se subiera encima y arrastrarla (con la distancia de seguridad que me procuraba la largura de la escoba) hasta la ventana para sacarla. Bien. Todo hubiera ido sobre la marcha de no ser porque ¡la muy petarda no se fiaba de mi escobón! No se subía ni a la de tres. Le ponía la escoba al ladico para que pillase la indirecta, y ella solo palpaba las cerdas en una clara actitud desconfiada, dejandome claro que DO NOT WANT. Pues bien, he perdido mi paciencia (que como sabréis es bien escasa) y he empezado a darle empujoncitos bullymente para que se moviera. Entonces ha cogido y ha revoloteado irregularmente hasta posarse en la otra punta del cuarto. Como tenía libre mi territorio, la he dejado allí plantada y he corrido a llamar al tutor.
Y...
... ¡he descubierto que el "momento mantis" no era sino un prólogo, un preludio, un aperitivo para la verdadera hecatombe!
Mi tutor me ha confirmado todos y cada uno de mis temores. Tengo que hacer cambios importantes en mi guión. Importantes de verdad. No reescribir una escena o dos, cortar un diálogo aquí y otro allá. Cambios de esos que requieren dar la vuelta a casi la mitad de la película y otros de raíz de los que cambian tramas enteras X__D
Lo cual no sería un problema extraordinario de no ser porque tengo que entregar este guión en dos días. Ja jo jajota.
Por favor, cuando inventen pastillas de ingenio que alguien me avise. Quiero ochocientas.
A pesar de eso, hoy me he levantado como impulsada por un resorte a las 13:00, puesto que esa era la hora que había acordado con mi tutor para llamarle.
Total, que llego a la sala donde se concentraba todo lo necesario para efectuar esa llamada: el PC grande (donde miraría en inet el teléfono del tutor), la libreta de Muji donde apunto todo lo referente al largo con mi lista de dudas, el propio teléfono, el guión impreso, mi portátil. Todo en la misma mesa, que fácil, ¿verdad? Todo listo para efectuar la llamada.
LÁSTIMA DE ESTO:
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¡¡¡¡UNA MANTIS RELIGIOSA ESTABA SOBRE MI TOTO!!!!
¡¡¡Estaba ahi, dominando la situación la muy puta!!! ¡Justo enmedio de todos mis enseres necesarios para realizar la llamada y para trabajar! ¡No podia hacer nada mientras ella estuviera ahí!
Como ser racional que soy, no me he dejado llevar por el pánico, así que he analizado mis opciones:
1. Llamar a alguno de mis padres y que se libraran de ella -> ¡ERROR! Estaba sola en casa
2. Darle un zapatillazo, o mejor dicho vista su monstruosa dimensión, un periodicazo -> ¡ERROR! la muy lista se había puesto estrategicamente encima de mi Toto ;_; así que no podía proceder a masacrarla sin herir colateralmente mi querido portatil buuhuhuhu ¡Toto no temas te salvaré!
3. Cogerla con un paño en la mano y sacarla a la calle. -> ¡ERROR! Bueno, simplemente me daba ascazo cogerla aunque hubiera tela de por medio. ¿¿Pero habeis visto que patas tan enormes tenía?? Ggghh
Finalmente, he optado por coger una escoba, persuadirla para que se subiera encima y arrastrarla (con la distancia de seguridad que me procuraba la largura de la escoba) hasta la ventana para sacarla. Bien. Todo hubiera ido sobre la marcha de no ser porque ¡la muy petarda no se fiaba de mi escobón! No se subía ni a la de tres. Le ponía la escoba al ladico para que pillase la indirecta, y ella solo palpaba las cerdas en una clara actitud desconfiada, dejandome claro que DO NOT WANT. Pues bien, he perdido mi paciencia (que como sabréis es bien escasa) y he empezado a darle empujoncitos bullymente para que se moviera. Entonces ha cogido y ha revoloteado irregularmente hasta posarse en la otra punta del cuarto. Como tenía libre mi territorio, la he dejado allí plantada y he corrido a llamar al tutor.
Y...
... ¡he descubierto que el "momento mantis" no era sino un prólogo, un preludio, un aperitivo para la verdadera hecatombe!
Mi tutor me ha confirmado todos y cada uno de mis temores. Tengo que hacer cambios importantes en mi guión. Importantes de verdad. No reescribir una escena o dos, cortar un diálogo aquí y otro allá. Cambios de esos que requieren dar la vuelta a casi la mitad de la película y otros de raíz de los que cambian tramas enteras X__D
Lo cual no sería un problema extraordinario de no ser porque tengo que entregar este guión en dos días. Ja jo jajota.
Por favor, cuando inventen pastillas de ingenio que alguien me avise. Quiero ochocientas.