Historia Original
Capitulo 1: Alpha
La mañana estaba empezando, el reloj a penas daba las 7:23, para Amara Eileen Bruchel era otro día más, sin cambio aparente.
Termino de arreglarse su uniforme que estaba impecable, le quedaba grande y haciéndola verse un poco gorda, sin embargo esa había sido la intensión de Eileen cuando escogió la talla.
Para casi finalizar su atuendo, se coloco el saco negro característico de los guardianes, un rayo de luz se infiltró por la ventana impactando en uno de los botones plateados, ella repaso el detallado diseño.
Los uniformes de su academia eran de los pocos que se parecían a los oficiales, solo existía una única diferencia entre los aprendices y ellos; El uniforme de los aprendices estaba bordado con hilo de plata y todas sus insignias también eran del mismo material; El uniforme de los oficiales estaba bordado con hilo de oro ya que era el metal más puro existente y era un amplificador para las invocaciones y conjuros.
Dejo de tocar dicho botón, sabía de antemano que al reverso del mismo estaría grabado su nombre. Se miro nuevamente al espejo y una vez satisfecha con su atuendo, se recogió el cabello en una cola alta, para que no le estorbara.
Se le hacía tarde, por lo que con un rápido movimiento de mano hizo que sus cosas se ordenaran y metieran en su mochila, que llego a sí con otro simple movimiento de muñeca. Hacía mucho tiempo que dominaba esa clase de conjuros y le era completamente normal utilizarlos hasta en las cosas más sencillas, sin embargo procuraba siempre hacerlo con especial cuidado, evitando dejar huellas de su magia en cualquier lugar.
Cuando estaba por salir de su departamento, en el recibidor vio sus lentes los cuales nunca habían sido de su agrado pero servían para su propósito, ya que ocultaban muy bien su rostro y eso le ayudaba a evitarse, lo que ella consideraba, distracciones inútiles.
Al salir de su departamento, el pasillo estaba desierto en ese piso solo había dos viviendas y una era la suya. Se dirigió al final del corredor donde se encontraban las escaleras y el elevador. Como era su rutina bajo por las escaleras, después de todo siempre se exigía tener una buena condición y bajar los 9 pisos del edificio no le eran un mayor problema a comparación de los ejercicios dados en la academia.
El recorrido hacía el lugar fue tranquilo, estaba bastante acostumbrada a las miradas de desprecio que le profesaban la gente de su alrededor; y también a las curiosas que los niños le mandaban como si esperaran que de un momento a otro cambiara de forma y se hiciera un monstruo, eso antes de que las madres apuradas alejaran a los niños creyendo que era contagioso ser un Pisac*, (como vulgarmente los llamaban) cuando eso pasaba no podía evitar sonreír con ironía, al recordar que a esas personas protegían y estaban dispuesto a dar su vida por la protección de la humanidad, y dicha humanidad no los terminaba de aceptar.
No era nuevo el tema de la discriminación de los Cadkar**, nombre con el que los habían bautizado al inicio de la nueva era cuando apenas se daban a conocer las primeras personas capaces de manipular las energías especiales denominadas Phises***.
-Lista para el examen de estrategia- La voz de su mejor amiga la sacó de sus pensamientos.
-Buenos Días- Respondió con ironía ante la falta de saludo de parte de su acompañante.
-Entonces que, crees que te puedo pasar algo de mi suerte- exclamo pasándole una mano por los hombros en señal de complicidad.
-La duda ofende, yo no necesito suerte, siempre estoy lista Coral- contesto con su habitual arrogancia.
Coral era su mejor amiga, cuando habían entrado a la academia nadie se le acercaba y nunca había sido su intensión que alguien le hablara pero una chica castaña de gran sonrisa y animo inquebrantable se había acercado y sin darse cuenta había terminado siendo su mejor amiga. Era de las pocas personas que conocían su verdadero aspecto y respetaba el secreto.
-No seas creída- le dio un pequeño empujón que la tomo desprevenida e hizo que casi se le callera la mochila.
-Van a ser 4 equipos contra dos- informo la castaña cambiando de tono, a uno más serio- Los comandantes repartieron los equipos y fueron publicados hoy a primera hora.
-Odio que me impongan un equipo- murmuro por lo bajo- Entonces ¿estamos juntas?- pregunto con una pizca de esperanza.
-En realidad tu equipo te va a gustar- ambas habían dado por sentado que Eileen sería una de los lideras de los 6 equipos, ya que siempre los mejores eran elegido para ser los lideres.- Sin embargo el capitán de tus aliados es él-
-Estas bromeando- dijo quitándole importancia.
-No, no estoy bromeando- el tono serio era más que suficiente para aclarar ese punto.
-Porque de entre todos los capitanes me toco hacer equipo con Dimitri.
-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-
Ok. Aquí termina el primer capítulo, lo sé no es nada emocionante y no tiene un súper gancho que diga quiero seguir leyendo, pero es el primer capítulo y si metiera todo en este terminaría apresurando demasiado las cosas y serian ilógicas, en fin espero que les haya gustado, cualquier crítica constructiva es bienvenida. Y si se me paso un Horror ortográfico profas avísenme que hago lo que puedo con el corrector de Word, pero a veces no es suficiente.
*Demonio
** Manipulador
*** Especial
La mañana estaba empezando, el reloj a penas daba las 7:23, para Amara Eileen Bruchel era otro día más, sin cambio aparente.
Termino de arreglarse su uniforme que estaba impecable, le quedaba grande y haciéndola verse un poco gorda, sin embargo esa había sido la intensión de Eileen cuando escogió la talla.
Para casi finalizar su atuendo, se coloco el saco negro característico de los guardianes, un rayo de luz se infiltró por la ventana impactando en uno de los botones plateados, ella repaso el detallado diseño.
Los uniformes de su academia eran de los pocos que se parecían a los oficiales, solo existía una única diferencia entre los aprendices y ellos; El uniforme de los aprendices estaba bordado con hilo de plata y todas sus insignias también eran del mismo material; El uniforme de los oficiales estaba bordado con hilo de oro ya que era el metal más puro existente y era un amplificador para las invocaciones y conjuros.
Dejo de tocar dicho botón, sabía de antemano que al reverso del mismo estaría grabado su nombre. Se miro nuevamente al espejo y una vez satisfecha con su atuendo, se recogió el cabello en una cola alta, para que no le estorbara.
Se le hacía tarde, por lo que con un rápido movimiento de mano hizo que sus cosas se ordenaran y metieran en su mochila, que llego a sí con otro simple movimiento de muñeca. Hacía mucho tiempo que dominaba esa clase de conjuros y le era completamente normal utilizarlos hasta en las cosas más sencillas, sin embargo procuraba siempre hacerlo con especial cuidado, evitando dejar huellas de su magia en cualquier lugar.
Cuando estaba por salir de su departamento, en el recibidor vio sus lentes los cuales nunca habían sido de su agrado pero servían para su propósito, ya que ocultaban muy bien su rostro y eso le ayudaba a evitarse, lo que ella consideraba, distracciones inútiles.
Al salir de su departamento, el pasillo estaba desierto en ese piso solo había dos viviendas y una era la suya. Se dirigió al final del corredor donde se encontraban las escaleras y el elevador. Como era su rutina bajo por las escaleras, después de todo siempre se exigía tener una buena condición y bajar los 9 pisos del edificio no le eran un mayor problema a comparación de los ejercicios dados en la academia.
El recorrido hacía el lugar fue tranquilo, estaba bastante acostumbrada a las miradas de desprecio que le profesaban la gente de su alrededor; y también a las curiosas que los niños le mandaban como si esperaran que de un momento a otro cambiara de forma y se hiciera un monstruo, eso antes de que las madres apuradas alejaran a los niños creyendo que era contagioso ser un Pisac*, (como vulgarmente los llamaban) cuando eso pasaba no podía evitar sonreír con ironía, al recordar que a esas personas protegían y estaban dispuesto a dar su vida por la protección de la humanidad, y dicha humanidad no los terminaba de aceptar.
No era nuevo el tema de la discriminación de los Cadkar**, nombre con el que los habían bautizado al inicio de la nueva era cuando apenas se daban a conocer las primeras personas capaces de manipular las energías especiales denominadas Phises***.
-Lista para el examen de estrategia- La voz de su mejor amiga la sacó de sus pensamientos.
-Buenos Días- Respondió con ironía ante la falta de saludo de parte de su acompañante.
-Entonces que, crees que te puedo pasar algo de mi suerte- exclamo pasándole una mano por los hombros en señal de complicidad.
-La duda ofende, yo no necesito suerte, siempre estoy lista Coral- contesto con su habitual arrogancia.
Coral era su mejor amiga, cuando habían entrado a la academia nadie se le acercaba y nunca había sido su intensión que alguien le hablara pero una chica castaña de gran sonrisa y animo inquebrantable se había acercado y sin darse cuenta había terminado siendo su mejor amiga. Era de las pocas personas que conocían su verdadero aspecto y respetaba el secreto.
-No seas creída- le dio un pequeño empujón que la tomo desprevenida e hizo que casi se le callera la mochila.
-Van a ser 4 equipos contra dos- informo la castaña cambiando de tono, a uno más serio- Los comandantes repartieron los equipos y fueron publicados hoy a primera hora.
-Odio que me impongan un equipo- murmuro por lo bajo- Entonces ¿estamos juntas?- pregunto con una pizca de esperanza.
-En realidad tu equipo te va a gustar- ambas habían dado por sentado que Eileen sería una de los lideras de los 6 equipos, ya que siempre los mejores eran elegido para ser los lideres.- Sin embargo el capitán de tus aliados es él-
-Estas bromeando- dijo quitándole importancia.
-No, no estoy bromeando- el tono serio era más que suficiente para aclarar ese punto.
-Porque de entre todos los capitanes me toco hacer equipo con Dimitri.
-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-…-
Ok. Aquí termina el primer capítulo, lo sé no es nada emocionante y no tiene un súper gancho que diga quiero seguir leyendo, pero es el primer capítulo y si metiera todo en este terminaría apresurando demasiado las cosas y serian ilógicas, en fin espero que les haya gustado, cualquier crítica constructiva es bienvenida. Y si se me paso un Horror ortográfico profas avísenme que hago lo que puedo con el corrector de Word, pero a veces no es suficiente.
*Demonio
** Manipulador
*** Especial