************Día dos*********
Día dos: Tu primera pareja. Donají y Nucano
Sí lo sé suena muy raro, pero es que es una leyenda de Oaxaca y pues llevo el nombre de ella y cada año mi mamá me llevaba a ver la representación de está historia, es una costumbre que se ha conservado hasta ahora.
La historia de manera abreviada, es que había una princesa zapoteca que se llamaba Donají (alma grande o princesa amada) la cual había nacido con la marca de la fatalidad, su pueblo se encontraba en conflicto con los poderosos mixtecos.
En una de esas batallas, los zapotecas llevan a un herido que por sus atavíos resulta ser el príncipe Nucano (Fuego grande) de los Mixtecos, mientras ella lo cuida y sana sus heridas ellos dos se enamoran, a pesar de ser enemigos. Cuando él sana ella lo deja ir con la promesa de verse de nuevo.
Los dos pueblos llegan a un acuerdo de paz, pero los Mixtecos piden a Donají como prueba de esa paz, ella es llevada a dominios Mixtecos, pero aprovechando que ellos duermen, decide dar aviso a los zapotecos, los cuales atacan la ciudad y empieza una batalla terrible, sin embargo antes que puedan rescatar a Donají, ella es aprehendida por los guerreros que la vigilaba y a orillas de un río de Oaxaca es decapitada, cuando Nucano llega a intentar rescatarla, sólo puede llevarse su cuerpo.
Los Zapotecos quisieron rescatar su cuerpo, los mixtecos no los dejaron diciendo que no sabían dónde estaba, cuenta la leyenda que un pastor ya en época colonial encontraba cada año una azucena saliendo de la margen del río, al intentar sacarlo se encontró con la cabeza de Donají, quien se encontraba en perfecto estado, como sumida en un sueño. Por lo que fue considerado un milagro, después sus restos fueron depositados en la tumba dónde reposaba Nucano.
Quienes se amaron en la vida, se unieron al fin a la muerte del príncipe, Donají y Nucano descansan en la misma losa en la iglesia de Cuilapan de Guerrero. Dónde dicen que en las tardes se les puede ver caminando de la mano.
Esa es la primera pareja que yo conocí, es la leyenda de mi ciudad y de mi nombre, cada año se representa en las fiestas de Oaxaca, cuando era niña siempre quise participar, al fin y al cabo yo era Donají, sin embargo, cuando fui a ver para estar dentro de la compañía y llegar a ser Donají, el coreográfo principal, siendo un hombre cruel y malvado (Yo tenía 6 años) me dijo que yo jamás sería Donají por que mis rasgos no eran indígenas... Fue un trauma jajaja Pero bueno esa otra historia...
Y yo aún creo en encontrar a mi Nucano xD.
Sí lo sé suena muy raro, pero es que es una leyenda de Oaxaca y pues llevo el nombre de ella y cada año mi mamá me llevaba a ver la representación de está historia, es una costumbre que se ha conservado hasta ahora.
La historia de manera abreviada, es que había una princesa zapoteca que se llamaba Donají (alma grande o princesa amada) la cual había nacido con la marca de la fatalidad, su pueblo se encontraba en conflicto con los poderosos mixtecos.
En una de esas batallas, los zapotecas llevan a un herido que por sus atavíos resulta ser el príncipe Nucano (Fuego grande) de los Mixtecos, mientras ella lo cuida y sana sus heridas ellos dos se enamoran, a pesar de ser enemigos. Cuando él sana ella lo deja ir con la promesa de verse de nuevo.
Los dos pueblos llegan a un acuerdo de paz, pero los Mixtecos piden a Donají como prueba de esa paz, ella es llevada a dominios Mixtecos, pero aprovechando que ellos duermen, decide dar aviso a los zapotecos, los cuales atacan la ciudad y empieza una batalla terrible, sin embargo antes que puedan rescatar a Donají, ella es aprehendida por los guerreros que la vigilaba y a orillas de un río de Oaxaca es decapitada, cuando Nucano llega a intentar rescatarla, sólo puede llevarse su cuerpo.
Los Zapotecos quisieron rescatar su cuerpo, los mixtecos no los dejaron diciendo que no sabían dónde estaba, cuenta la leyenda que un pastor ya en época colonial encontraba cada año una azucena saliendo de la margen del río, al intentar sacarlo se encontró con la cabeza de Donají, quien se encontraba en perfecto estado, como sumida en un sueño. Por lo que fue considerado un milagro, después sus restos fueron depositados en la tumba dónde reposaba Nucano.
Quienes se amaron en la vida, se unieron al fin a la muerte del príncipe, Donají y Nucano descansan en la misma losa en la iglesia de Cuilapan de Guerrero. Dónde dicen que en las tardes se les puede ver caminando de la mano.
Esa es la primera pareja que yo conocí, es la leyenda de mi ciudad y de mi nombre, cada año se representa en las fiestas de Oaxaca, cuando era niña siempre quise participar, al fin y al cabo yo era Donají, sin embargo, cuando fui a ver para estar dentro de la compañía y llegar a ser Donají, el coreográfo principal, siendo un hombre cruel y malvado (Yo tenía 6 años) me dijo que yo jamás sería Donají por que mis rasgos no eran indígenas... Fue un trauma jajaja Pero bueno esa otra historia...
Y yo aún creo en encontrar a mi Nucano xD.