Humildemente os pedimos
que escuchéis esta Tragedia,
disimulando las faltas
que haya en nosotros y en ella. Comico 4, Tercer Acto, Hamlet
He descubierto que me gusta la pareja Sirius/Remus o al reves y todo por unas imagenes que me paso
sirem y ellos aparecen en una de ellas tan lindos y cariñosos!! Me gusta !! XD
Además la imagen me inspiro para escribir está historia que es mi primer one-shot y la primera historia que escrito de los merodeadores: Sirius y Remus
Titulo: Hamlet por Sirius y Remus
Clasificación: nc-17
Resumen: Minerva les ha mandado a Sirius y Remus que organicen Hamlet para la obra de Navidad.
Pairing: Sirius/Remus y un poco James/Lily
Está es la imágen que me inspiro. Que guapos!!
Sirius se estaba tirando de los pelos mientras intentaba enseñar a expresar los sentimientos a los niños que tenía a su cargo.
A pesar de que ellos no eran muy dados al teatro, Minerva había encargado a Remus y Sirius que prepararan la obra de Shakespeare, Hamlet. Y mientras Remus acababa su clase de Defensa Contra Las Artes Oscuras, el tenía que ocuparse de los alumnos a su cargo para la obra de navidad.
No Susan- grito Sirius- Tienes que expresar tristeza no alegría
Perdón profesor- dijo la niña morena con uniforme de Gryffindor - pensare en algo triste
Eso es- le contesto- eso te ayudara mucho
Sirius y Remus habían pasado un día entero asignando los papeles para la obra. A Susan la niña que ahora no podía expresar correctamente su tristeza, le había tocado Gertrudis, la madre de Hamlet.
Mientras que para alegría del mismo Remus, habían terminado asignando el papel de Hamlet a Robin, uno de los niños más brillantes de su clase, que además era Slytherin.
Pero aparte de estos dos niños tenían a su cargo a varios más tanto para realizar los papeles como para preparar el decorado, del que por cierto se encargaba Sirius.
Cuando la puerta del gran comedor, que se había convertido en salón de actos improvisado, se abrió un Remus con varios papeles en la mano entro en el.
¿Como lo llevas?- pregunto Remus sentándose a su lado
Como puedo- le contesto- porque algunos de tus queridos alumnos no les da la gana de expresarse como deben
No seas así ¡Hombre!- le recrimino alegre Remus- además también son tus alumnos, profesor de Transformaciones
Hacia un año que Sirius estaba en ese puesto, tras mucho buscar y no encontrar trabajo, decidió acabar pidiendo uno en Hogwarts y una muy amable, como siempre, Minerva acabo dándole ese puesto de profesor para ver como lo desempeñaba y para su alegría y gozo resulto que lo hacía mejor de lo que todo el mundo hubiera esperado de el.
Esta bien Helena- le hablo Remus a la niña que hacia de Ofelia- eso está genial
Gracias profesor-
Y tú Susan intenta centrarte en la situación y piensa algo triste eso te ayudara- le explico el castaño a la niña después de verlas actuar otra vez
Vamos a seguir con la parte que dejamos el otro día- anuncio Sirius- abran el libro por la página 123
Todos los alumnos que estaban en el escenario delante de Sirius y Remus abrieron el libro de Hamlet a la vez que Hugo y Robin se levantaban de sus asientos para interpretar a sus personajes, Claudio y Hamlet respectivamente.
Y bien, Hamlet, ¿Dónde está Polonio?- dijo Hugo
Ha ido a cenar- contesto Robin
¿A cenar? ¿Dónde?-
Parar un momento- dijo Remus- haber Hugo, tienes que darle más énfasis a esa pregunta que se note lo que el personaje quiere expresar
El niño Hufflepuff que estaba vestido como su personaje le miro y asintió, volviendo junto a su compañero a interpretar la escena desde el principio.
Cuando por fin terminaron las dos largas horas de ensayo, Remus y Sirius recogieron sus cosas y se dirigieron a la salida del castillo. Eran las ocho de la noche y el próximo día era sábado por lo que no tenían que ir a trabajar.
Hacía un par de veranos que el castaño y el moreno había empezado una seria relación y poco más de cuatro meses que habían empezado a vivir juntos. Desde el primer día de convivencia habían decidido pasar allí todos los fines de semana dejando a un lado sus obligaciones de profesores.
Mira hay una carta de James y Lily- dijo Sirius cuando entraron en casa y se acerco a la ventana abierta
Seguro que ya han vuelto de su luna de miel- dijo Remus dejando las cosas en el salón
Pues vamos a averiguarlo- dijo Sirius mientras abría la carta sentado en el sofá
“Queridos Sirius y Remus:
Acabamos de llegar de nuestra Luna de Miel y lo primero que se nos ocurrió fue escribiros para contarnos lo bien que lo hemos pasado.
Argentina es precioso y además creo que hemos traído más regalos de los que teníamos pensados para todos. James se ha pasado el día sacando fotos y yo entre posando para el y mirando tiendas, realmente lo hemos pasado muy bien.
Hemos comido un montón de cosas típicas del país y tenemos ganas de volver a comer en casa y también de descansar. Esperamos que en el colegio todo marche bien.
Ya nos han contado que vais a hacer la obra de Hamlet, nos alegramos mucho, ¡si, James también se alegra!. Es una obra muy buena seguro que lo hacéis muy bien.
Tenemos que contaros una buena noticia, aún no está del todo claro, pero las cosas apuntan a que del viaje en vez de dos hemos vuelto tres. Ya os contaremos. Nos vemos estos días.
Saludos y miles de besos
Lily y James
Esa noche después de cenar ambos se metieron en la cama que como siempre no tenía mucho orden a su alrededor.
Sirius- dijo Remus mientras se metía en la cama- ¿Te acordaste de apagar el despertador antes de meterte en la cama?
Mmmm- se lo pensó- si lunático esta apagado
Eso espero- dijo mientras se metía el también en la cama- no quiero mañana despertarme a las seis
Eso será si duermes algo- dijo Sirius acercándose a su compañero de cama
Ninguno llevaba más ropa que la interior, lo que hizo que sus cuerpos rozaran. Ambos recibieron con gusto el roce de sus cuerpos, se miraban a los ojos mientras sus labios se acercaban a los de su compañero. Sus labios se pegaron el uno al otro durante mucho rato así como sus lenguas se metieron dentro de sus bocas sin ganas de salir de allí.
Se abrazaban y se acariciaban con los dedos la espalda, Sirius bajo con ellos hasta el trasero de Remus y lo acaricio, provocando gemidos en su pareja de juegos. Remus obsto por bajar su mano hasta la entrepierna de Sirius y hacerle gemir también a el de placer.
Después de diez minutos con sus manos ocupadas en el cuerpo del otro Sirius decidió que había llegado el momento de pasar a algo más y se deshizo de lo que quedaba de ropa debajo de las sábanas blancas.
Sirius se puso encima Remus que ardiente de placer le ordeno que lo hiciera, cosa que Sirius no dudo un segundo. Sus cuerpos se pegaban el uno al otro lo más que podían mientras Sirius entraba y salía cada vez más rápido de su amado. Sirius adoraba que Remus se dejase hacer, normalmente era Sirius quien se ponía debajo aunque para su alegría a veces el también descubría el placer de estar arriba.
Sus gemidos se mezclaban, sus manos se entrelazaban en medio del rítmico movimiento de las caderas de ambos como si fueran una sola. Después de largo rato, Sirius ya no aguanto más y llego al orgasmo mientras seguía dentro del castaño, quien adoraba esa sensación dentro de el. Pero el mismo no tardo nada más que segundos en seguirle y derramarse sobre las sábanas sin remedio y exhausto.
Sirius se tumbo a su lado y le abrazo a la vez que Remus usaba su varita, que tenía en un cajón de la mesilla, para limpiar un poco las sábanas y después abrazarse también a el.
¿Te he dicho alguna vez lo mucho que me gusta que hagas eso?- le susurro al oído a Sirius
Si- contesto acomodado en su cuello- pero me encanta que me lo digas
Si sigues igual nunca dejare de hacerlo canuto- le contesto ocultando una sonrisa picara
Está bien lunático, entonces nunca lo dejare de hacer-
Al cabo de un rato se quedaron dormidos abrazados. Varias horas después de caerse rendidos en las manos de Morfeo se empezó a oír un tic en la habitación.
Tic, tic,
Remus se despertó y sin abrir los ojos pregunto- Sirius dime que eso que suena no es el puñetero despertador
Remus estaba dormido, no se que es- dijo dándose la vuelta para seguir dormido
Olvidaste apagar el despertador- dijo Remus algo enfadado
Lo siento- contesto muy bajito medio dormido
Remus alargo la mano tocando la mesilla en busca del despertador, de pronto toco algo que cayo en la mesilla, cuando oyó el ruido supo que era el vaso de agua que Sirius siempre se llevaba a la cama. Sin abrir los ojos para no desvelarse y pensando que a la mañana lo limpiaría siguió buscando el despertador hasta que lo encontró y le dio un golpe tan fuerte al aparato para que se callara que se cayó pero al suelo y despertó sobresaltado al pobre Sirius que estaba dormido todavía.
¿Qué ha sido eso?- dijo sentado en la cama
El despertador- dijo Remus acurrucado en un lado de la cama- el que ayer a la noche olvidaste apagar
Ah- dijo volviéndose a la cama- vaya ruido que mete
Notando que su lunático estaba un poco enfadado se acerco a el y le abrazo para que se relajara y ambos acabaron dormidos, Remus en brazos del moreno, otra vez.
...
Programa de la obra:
1,
2 El salón de actos del colegio estaba a rebosar. Eran las cuatro de la tarde del día de nochebuena y todas las familias acababan de sentarse para ver la representación de Hamlet que habían hecho Remus y Sirius para navidad.
Minerva les había dado el visto bueno y felicitado a todos el día del ensayo general varias semanas atrás. Remus estaba tranquilizando a los alumnos y dándoles los últimos repasos y consejos a los que se lo pedían. Mientras Sirius se encargaba de colocar algunos adornos en el escenario junto a un par de alumnos de tercero que se habían ofrecido voluntarios para ayudar el día del estreno.
Cuando Remus fue a buscar a Sirius se encontró con que este ya había acabado de poner los adornos en el escenario y ambos bajaron a sentarse en la primera fila. Al lado de ellos estaban James y Lily quien tenía la mano puesta en la tripa, donde estaba el pequeño Potter.
Cuando el telón se abrió se pudo ver todo a oscuras y de fondo imágenes de un castillo en nieblas. Enfrente de la imagen estaban dos de sus alumnos, que hacían de extras desempeñando los papeles de dos soldados llamados Francisco y Bernardo, mirándose seriamente y diciendo sus frases.
Una hora después del inicio de la obra está tomo un descanso y toda la gente que había en el salón de actos pudo salir al pasillo a tomar algo. Tanto Remus como Sirius subieron al escenario y nada más entrar en el interior del mismo Robin y Susan se acercaron corriendo a su profesor de Defensa Contra Las Artes Oscuras.
Profesor- llamo Robin- estoy nervioso ahora viene la parte más importante
Tranquilo- le dijo Remus- todo ira bien, en los ensayos lo has hecho genial y te lo sabes de memoria
Después de tranquilizar a Robin, Remus miro a Susan que se revolvía los dedos en las manos muy nerviosa.
¿Qué pasa Susan?- pregunto Remus mientras Sirius terminaba de dar los retoques al decorado que iba en las siguientes escenas
Me he confundido en el segundo acto- dijo nerviosa- lo siento
¿Te has confundido?- pregunto asombrado- realmente creo que no, porque no lo recuerdo pero lo has hecho genial y lo que queda lo sabes de memoria como tu compañero
Cuando por fin ambos pudieron bajar del teatro y salir a beber un poco de algo al pasillo con sus amigos y demás, los padres de Robin, su alumno más brillante, se acercaron corriendo a el.
¡Oh! Profesor Lupin- dijo la señora Conr- es usted muy bueno al poner a mi Robin de protagonista
Es un buen actor- dijo sonriendo- así que por eso le puse donde está
Los padres de Robin eran dos sangres pura muy coquetos que siempre iban alegres a cualquier sitio, Sirius siempre decía que eran unos arrogantes y orgullosos pero Remus sabía que en el fondo tenían un poco de bondad y por ello siempre les saludaba. Además de que tenía mucho cariño por Robin ya que era un buen estudiante y se le veía que a pesar de ser un Slytherin era un chico agradable y buen estudiante.
Usted es muy amable- dijo la señora de nuevo- mi Robin siempre habla de usted como un buen profesor
Gracias señora- dijo alegre y sonriendo- me alegro que piense así de mi
Remus se disculpo y se dirigió a donde estaban sus amigos antes de volver a sentarse en el teatro frente a sus alumnos. A los pocos minutos todos volvieron a sentar en sus sitios y el teatro volvió a empezar.
Está vez fueron Helena y Robin los que haciendo de Ofelia y Hamlet aparecieron en escena diciendo sus frases. Tanto Sirius como Remus se sentían muy orgullosos de todos sus alumnos ya que estaban haciéndolo muy bien y todo el mundo les miraba sin apartar la vista de los protagonistas de cada escena y no había habido ningún error aún.
Cuando llegaron al final de la obra Ryan Avoy y Peter, Horacio y Fortimbrás respectivamente, estaban en escena junto a algunos extras y Peter fue el último en hablar.
Cuatro de mis capitanes lleven al túmulo el cuerpo de Hamlet con las insignias correspondientes a un guerrero. ¡Ah! Si él hubiese ocupado el trono, sin duda hubiera sido un excelente Monarca... Resuene la música militar por donde pase la pompa fúnebre, y hagánsele todos los honores de la guerra... Quitad, quitad de ahí esos cadáveres. Espectáculo tan sangriento, más es propio de un campo de batalla que de este sitio... Y vosotros, haced que salude con descargas todo el ejército- dijo Peter
Al segundo las luces se encendieron y todo el público que había en la sala de actos del colegio se puso en pie y aplaudieron con muchas ganas mientras todos los alumnos que habían participado en la obra, actuando, iban saliendo al escenario desde el interior del mismo. Cuando estaban todos se dieron las manos y saludaron varias veces, en una de esas veces Robin y Helena salieron del grupo y bajaron al público.
Robin se acerco a Remus y le dio la mano para llevarle hasta el escenario mientras que Helena hacia lo mismo con Sirius, cuando llegaron al mismo se sumaron al grupo de niños que había allí y saludaron a la gente que empezó a aplaudir más fuerte y sonriendo.