002/100
Número: 002/100
Título: El reflejo de un deseo: Minutos [1/7]
Fandom: Harry Potter
Claim: Hermione Granger
Extensión: 363 palabras.
Advertencias: Línea de tiempo confusa, posibles hechos no del todo canónicos.
Notas: Serie de viñetas en las que diferentes personajes encuentran el espejo de Oesed. Para el Prompt Manía Multitemático de histeria_fandom
EL REFLEJO DE UN DESEO
1. MINUTOS
A simple vista no le parece nada del otro mundo. Un espejo común y corriente, tan alto que tiene que levantar la vista para leer en carácteres dorados una advertencia, una prosa, un encantamiento. Lo ha encontrado por mera casualidad en uno de sus paseos por el Ministerio de Magia, pues lleva tan sólo dos semanas en el cargo y no está familiarizada con los largos y laberínticos pasillos, pese a que alguna vez hizo un mapa del lugar para entrar a hurtadillas.
Así que Dumbledore lo dejó aquí. O pudo alguien haberlo movido durante el tiempo de locura precedido por Fudge y luego Scrimgeour, ¿quién sabe? Tampoco importa. El hecho es que está de cara al espejo de Oesed, ése del que tanto le había hablado Harry y, muy a su pesar, se siente bastante decepcionada.
Había leído maravillas de ese espejo, cuentos interminables sobre sus poderes, características e historia. Lo conocía tan bien, gracias a sus libros, que casi parecía haberlo construído con sus propias manos y aún así...
Hermione dejó que un suspiro escapara de sus labios, muy similar al que las madres hacen al encontrar una travesura de sus hijos: entre resignado y decepcionado. Espejo de Oesed, que muestra los más profundos deseos... ¡Vaya tontería! Fue cuestión de minutos antes de que se diera cuenta de que no tenía nada hipnotizante para ella, nada que le pidiera olvidar su actual trabajo para quedarse a observarlo, como un oasis entre el mar de empleados del Ministerio.
La mujer se detuvo por última vez frente al espejo, después de rodearlo, antes de salir de la habitación y continuar con su vida: Estaba ahí, sus propios ojos castaños le devolvían la mirada, pero no había nada más. Se veía tal cual era después de la guerra, un poco más alta y esbelta, con los ojos anegados de madurez y las facciones un poco crispadas, pues no se le había quitado el hábito de entregar todo a tiempo, así fueran informes para Kingsley.
En resumen: era feliz.
En resumen: ese espejo no podía ofrecerle ni mostrarle lo que ya tenía.
Y con esa determinación, salió pitando al encuentro del ministro, pidiendo que no se le hubiera hecho demasiado tarde.
Título: El reflejo de un deseo: Minutos [1/7]
Fandom: Harry Potter
Claim: Hermione Granger
Extensión: 363 palabras.
Advertencias: Línea de tiempo confusa, posibles hechos no del todo canónicos.
Notas: Serie de viñetas en las que diferentes personajes encuentran el espejo de Oesed. Para el Prompt Manía Multitemático de histeria_fandom
EL REFLEJO DE UN DESEO
1. MINUTOS
A simple vista no le parece nada del otro mundo. Un espejo común y corriente, tan alto que tiene que levantar la vista para leer en carácteres dorados una advertencia, una prosa, un encantamiento. Lo ha encontrado por mera casualidad en uno de sus paseos por el Ministerio de Magia, pues lleva tan sólo dos semanas en el cargo y no está familiarizada con los largos y laberínticos pasillos, pese a que alguna vez hizo un mapa del lugar para entrar a hurtadillas.
Así que Dumbledore lo dejó aquí. O pudo alguien haberlo movido durante el tiempo de locura precedido por Fudge y luego Scrimgeour, ¿quién sabe? Tampoco importa. El hecho es que está de cara al espejo de Oesed, ése del que tanto le había hablado Harry y, muy a su pesar, se siente bastante decepcionada.
Había leído maravillas de ese espejo, cuentos interminables sobre sus poderes, características e historia. Lo conocía tan bien, gracias a sus libros, que casi parecía haberlo construído con sus propias manos y aún así...
Hermione dejó que un suspiro escapara de sus labios, muy similar al que las madres hacen al encontrar una travesura de sus hijos: entre resignado y decepcionado. Espejo de Oesed, que muestra los más profundos deseos... ¡Vaya tontería! Fue cuestión de minutos antes de que se diera cuenta de que no tenía nada hipnotizante para ella, nada que le pidiera olvidar su actual trabajo para quedarse a observarlo, como un oasis entre el mar de empleados del Ministerio.
La mujer se detuvo por última vez frente al espejo, después de rodearlo, antes de salir de la habitación y continuar con su vida: Estaba ahí, sus propios ojos castaños le devolvían la mirada, pero no había nada más. Se veía tal cual era después de la guerra, un poco más alta y esbelta, con los ojos anegados de madurez y las facciones un poco crispadas, pues no se le había quitado el hábito de entregar todo a tiempo, así fueran informes para Kingsley.
En resumen: era feliz.
En resumen: ese espejo no podía ofrecerle ni mostrarle lo que ya tenía.
Y con esa determinación, salió pitando al encuentro del ministro, pidiendo que no se le hubiera hecho demasiado tarde.