Título: Tabula Rasa
Autor: Alexandreah
Personajes: Merlin , Nimueh y menciones a Arturo
Clasificación y advertencias: R , Spoilers del capitulo 1x04
Resumen: Arturo abandona a Merlin en un bosque desconocido y Nimueh aprovecha la oportunidad para obtener lo que mas desea.
TABULA RASA
Algo iba mal... Incluso antes de abrir los ojos supo que no estaba en su habitacion (¿desde cuando habia tanta corriente y los pajaros sonaban tan cerca?), tampoco sentia su dura y pequeña cama bajo su cuerpo si no... ¿Almohadones?; Pero lo que le llevo a abrir los ojos fue el inconfundible olor de los rescoldos de una hoguera; Para algo era un chico de campo al que le habian inculcado un sano miedo a los incendios.
Lo primero que vio al incorporarse de golpe fue que estaba rodeado del color verde y todavia sin procesar que era lo que miraba se sento sobre... ¡Oh , vaya! , si eran almohadones...Muchos... ¡¡¡Y caros!!! , ¿pero que?.
¡¡Auch!!, ¡Vale!, al moverse tan bruscamente habia surgido otra prioridad, esta vez fisica; La espalda le escocia como si se hubiera caido en un matorral de malas hierbas (no seria la primera vez que le ocurria).
Piensa Merlin - Se dijo a si mismo - ¿Que haces tirado en el bosque?; Entonces escucho un relincho, uno de los caballos de Arturo estaba atado en un arbol a unos metros y por fin recordo lo que se suponia que debia estar haciendo en aquel momento. ¡ LAS ESPADAS! , tenia que llegar temprano al Reino de Caerleon con las dos espadas gemelas unidas por un lazo blanco que simbolizaban la paz que el Rey Emleth y Camelot habian mantenido durante 10 años.
Podia visualizar a Arturo cruzado de brazos y pateando el suelo impacientemente en la plaza del castillo del Reino amigo.
Va a matarme... Y si por algun casual salgo vivo de esta estoy seguro de que cambiara el lanzamiento de fruta podrida por cierto producto que se produce en gran cantidad en los establos - murmuro recogiendo a toda prisa, viendose ya castigado de aquella manera.
- Bueno, culpa suya por dejarme atras; solo porque solte una rama de golpe y le di en la cara sin querer...
El proceso de ponerse de nuevo en marcha le llevo mas de lo que deberia (¿Por que estaba tan dolorido como cuando era utilizado como escudo humano en las practicas de los caballeros?) tambien se fijo en que su camisa estaba hecha jirones cerca de la hoguera y su omnipresente pañuelo no aparecia. Propio de el no haberse dado cuenta hasta ese momento.
- Es bueno que sea verano - se dijo encogiendose de hombros mientras inspeccionaba lo que quedaba de la parte superior de sus ropas.
Despues de 10 minutos de dar vueltas por su improvisado campamento encontro las espadas debajo de uno de los almohadones (¿En serio, de donde habian salido esos almohadones y donde estaba su vieja, fea y adorada manta?). Pero de nuevo se dijo que no tenia tiempo para eso. ¿Y que si por lo visto en algun momento de la noche habia usado magia para ponerse mas comodo? (como le gustaria recordar como lo habia hecho) y a lo de la espalda y la camisa... Bueno su mente parecia quedarse en blanco y se negaba a cooperar con el tema. Si algun animal le habia atacado era obvio que no habia sido herido de gravedad, ¿quizas un jabali pequeño? y lo de no recordarlo... .... ¡¡¡LLEGABA TARDE!!! y sorprendentemente ya no volvio a pensar en aquella extraña situacion jamas.
Escondida tras una roca una mujer habia observado toda la escena, llevaba una esplendida capa plateada. Con su mano derecha aferraba un pañuelo rojo y con la izquierda acariciaba su vientre. Entre las sombras de la capucha se adivinaba una sonrisa. Cuando por fin Merlin se subio al caballo y desaparecio en el bosque ella se acerco a lo que quedaba de hoguera y desenterro una piedra azul llena de simbolos tallados en oro sobre su superficie. - Me has sido de gran ayuda, preciosa. - Murmuro Nimueh al amuleto antes de tirarlo al suelo y destruirlo.
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** La noche anterior**
- ¡No puedo creer que me deje tirado en un bosque solo porque he soltado la rama de golpe y su cara estaba inapropiadamente cerca! - se quejaba Merlin al aire y a cualquier bicho que le pudiera escuchar a 100 metros a la redonda sobre la fria actitud de Arturo.
Con un suspiro de resignacion dejo la leña en el centro de su pequeño campamento y encendio un fuego pronunciando un par de palabras magicas (¿para que servian si no?). Sabia que la luz y el humo podian atraer a visitantes indeseables o lo que es lo mismo a saqueadores pero temia mas a los lobos y a la... Oscuridad.
Estiro su andrajosa manta en el suelo y se tumbo maldiciendo a Arturo y a su ego principesco.
Dudaba mucho que pudiera dormirse en semejantes circunstancias y empezo a contar las vueltas que daba sobre la manta, cuando iba por la 19ª creyo escuchar el crujir de una pisada en las hojas, demasiado cerca. - ¿Hola?, pregunto a la noche, no hubo respuesta y se sintio como un idiota; en el fondo tenia la esperanza de que Arturo apareciera en el claro y le tomara el pelo durante horas, era preferible a ese pesado silencio. Hacia rato que creia tener la sensacion de que le observaban. Un momento ... ¿Silencio? , ¿Por que no se oia a ningun buho, a algun animalillo corretear al salir de su madriguera, al caballo que tenia a pocos metros a... Algo?. En realidad los unicos sonidos que habia escuchado eran el crepitar del fuego y el crujido de antes. - Genial, penso, mi cobardia ha llegado al punto de que me asusto de un cruji... - Hola Merlin - se escucho saludar a una voz femenina.
Merlin salto desde su posicion buscando a la chica que habia hablado, la voz le era vagamente familiar. Para su sorpresa una encapuchada estaba a tan solo 3 pasos de el, frente a frente. Ella retiro lentamente la tela que cubria su cabeza, sonriendo y mirandole directamente a los ojos y por fin la reconocio.
- ¡Kara! -, no, no, Gaius le habia hablado de ella; Su nombre era Nimueh era un poderosa hechicera enemiga de Camelot y no hacia mucho que habia intentado matarlo... Sin dudarlo un segundo mas Merlin empezo a pronunciar un conjuro elemental para que el fuego atrapara a la joven en un circulo pero Nimueh fue mas rapida, no solo el conjuro de Merlin reboto en una especie de barrera invisible si no que sin que ella dijera una palabra (pero sus ojos brillaron igualmente) los brazos del chico se echaron bruscamente hacia atras y fueron atados por una fina cadena plateada.
Merlin forcejeo como un loco por liberarse mientras ella se acercaba a el todavia mas.
- Dejalo, esta encantada, no conseguirias soltarte en toda la noche - Susurro paseando juguetonamente un dedo por la barbilla del cada vez mas asustado Merlin. - Tampoco puedes romperla con un conjuro - Prosiguio, su dedo ahora deslizandose suavemente por el cuello.
- Si vas a matarme hazlo ya, no me gusta jugar al gato y al raton - Dijo el, intentando sonar como sonaria Arturo en una situacion asi pero fallo miserablemente cuando le traiciono un leve tartamudeo al final de la frase.
- ¡Oh!, pero a mi si me gusta jugar y ademas... ¿Quien dice que vaya a matarte? - contesto ella agarrando al chico por la barbilla, agachandolo hasta que estuvo a su altura.
- Bueno, no es que no lo hayas intentado antes... - Contesto el, pensando mientras tanto que Nimueh estaba usando algun tipo de hechizo silencioso para engatusarlo porque la alarma que sonaba en su cabeza desde el momento en que ella habia aparecido en el claro estaba empezando a ser sustituida por los recuerdos de cuando creia que ella era simplemente una bonita sirvienta de un reino vecino con la que podia flirtear.
- No voy a matarte Merlin, relajate. En aquel momento todavia no habia comprendido tu importancia... Ahora se que tu y yo somos lo mismo.
- ¡Yo no soy como tu! - grito el indignado ante la comparacion, momentaneamente rompiendo el contacto fisico tan agradable y desagradable a la vez.
- Si lo eres, una criatura de la religion antigua, una de las pocas que quedan aparte de mi - Dijo ella, sonriendo tristemente, su mirada perdida en algun momento de su pasado. El primer impulso de Merlin ante aquella expresion fue abrazarla y el segundo darse de guantazos por caer tan facilmente ante una chica guapa, poderosa y obviamente desequilibrada.
- ¿Entonces que quieres? - Se atrevio a preguntar. Ella volvio a mirarlo a los ojos, olvidado ya el momento de vulnerabilidad. - Te quiero a ti. Esta noche. - Le susurro sensualmente al oido.
- ¿Pa... Para que? - Tartamudeo confundido y de nuevo asustado (¿y/o excitado?).
- Llevo mucho tiempo sola Merlin y ultimamente te he estado observando, mucho, demasiado en realidad; soy la clase de persona que siempre tiene lo que quiere. No lo olvides. - La expresion de Nimueh cambio a algo mas salvaje, mas urgente. - Creo que ya hemos tenido bastante chachara por hoy joven mago. Empecemos a jugar. - Y en ese momento sus ojos volvieron a brillar.
Para Merlin todo paso a la vez. Ella lo empujo hacia atras y mientras el caia su pañuelo volo por los aires y su camisa practicamente estallo en pedazos, cerro los ojos esperando el impacto del duro suelo pero para su sorpresa cayo sobre algo mullido, tuvo tiempo de girar la cabeza hacia la izquierda y ver un nutrido monton de exoticos almohadones que un segundo antes no estaban alli; devolvio su atencion a Nimueh que se estaba desabrochando la capa. No llevaba nada debajo. El nunca habia visto a una chica desnuda. Se sorprendio cuando no perdio la consciencia en aquel mismo momento. Ella se sento a horcajadas sobre el y acaricio el pecho desnudo que ahora subia y bajaba muy deprisa pero no precisamente por el miedo. Con un solo movimiento lo obligo a sentarse clavandole las uñas en la espalda y arañandole. Merlin no solo no encontro ese acto doloroso si no que le gusto... Demasiado, y no ayudaba que Nimueh hubiera empezado a ronronear (¿que decia antes sobre el juego del gato y el raton?) y a besar su pecho.
Su cuerpo empezo a responder de forma natural a las caricias de la chica que tenia encima y quiso participar pero ella lo detuvo. - Shhhhh, joven mago, dejamelo a mi, tomalo como una clase practica de Hechicera a Brujo. - Y riendo lo beso de lleno en la boca mientras con la magia deslizaba su pantalon hacia abajo.
En algun momento Merlin perdio la nocion del tiempo. No sabia cuanto rato paso ella cabalgando sobre el, solo sentia ese nuevo placer mezclado con el choque de sus poderes. Magia por todas partes, rodeandolos, cambiando el color y la forma del fuego, haciendo que el viento cantara para ellos en el idioma mas antiguo del mundo; incluso creyo ver como del prado brotaban nuevas flores creando un circulo y nuevas hojas nacian en los arboles cercanos. Magia, antigua religion, la propia tierra, el y Nimueh. Todos fueron uno durante un largo momento.
Al alba Nimueh deshizo la cadena que todavia ataba al muchacho (y hacia rato que habia dejado de molestarle teniendo en cuenta lo pacificamente que dormia) comprobo que no habia dejado marcas en sus muñecas y contemplo durante un momento la idea de curar los arañazos que le habia hecho en la espalda, pero sonrio divertida y penso que era mejor que su hechicero conservara ese unico recuerdo aunque jamas sabria de donde procedian.
Finalmente intuyendo que como buen sirviente no tardaria mucho en despertar recogio un regalo para ella, el pañuelo que el llevaba siempre al cuello y se dirigio al fuego enterrando el amuleto azul que brillo en un tono mucho mas claro cuando ella pronuncio dos palabras. Tabula Rasa.
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- Caerleon en realidad es uno de los nombres mas antiguos por los que se conoce a Camelot, todavia se conoce a esa region por ese nombre, me parecio un guiño divertido.
- Tabula Rasa es una expresion en latin y en un sentido moderno significaria "hacer borron y cuenta nueva" , olvidar... Bueno ya veis por donde andan los tiros y mas con el fic xD.
- No preocuparse, obviamente Merlin tiene mas de un pañuelo rojo , LOL!.
- Espero que se sobreentienda lo que realmente queria Nimueh de Merlin...
- Pido disculpas por mi irracional odio hacia las tildes y lo obvio su ausencia xD , tambien por cualquier falta ortografica que se me haya podido colar.