Mar 18, 2024 01:14
Lo tengo claro desde hace mucho, más de 20 años. Me enfoca, me pierdo entre las líneas, pensando soluciones, mejoras. Me gusta por que es predecible la mayoría de las veces. Te obliga a abstraerte, ver los problemas desde distintos puntos de vista. Me gusta por que es un desafio intelectual.
Por eso me cuesta dejar de programar. Las tareas empresariales se me hacen pesadas, más estresantes. Son necesarias, no cabe duda, pero siempre me queda el sentimiento del sindrome del impostor, "¿Lo estaré haciendo bien?". Es un sentimiento que hace tiempo perdí en la programación.
En estos días de tiempos revueltos es un refugio seguro a la vez que práctico. Pelearme con Spring por que no me deja hacer un POST es mucho más sencillo que cualquier otro problema actual. Además, es una forma de tener tiempo para mí sin tener que dar explicaciones, ya que "estoy trabajando". Por suerte para mi es la clase de trabajo que me gusta, podría pasarme el día entero programando.
Nos quedaremos aquí por lo menos un par de semanas más parece, así que va a ser una buena via de escape.