Nov 25, 2015 20:57
He escrito estando borracha (sólo con una cerveza, pero bueno), estando de resaca (una resaca increíble, en la que no podía casi ni pensar) y ahora, estando con anginas y fiebre. Se podría decir que he cubierto casi todos los estados de conciencia en los que uno puede escribir.
La tercera semana fue dura. Me entró una especie de bloqueo a final de semana como siempre me pasa, y además el tiempo jugó en mi contra, no pude escribir el jueves, el viernes por la mañana me puse a ello pero no escribí, lo que hice fue estructurar-pensar en la novela (y bloquearme un poco, también), una amiga vino a visitarme de viernes tarde a martes al mediodía, y escribí estando con ella el domingo y el lunes, pero el martes morí por anginas. Así que ahí estoy de nuevo, con el Word abierto, 32.000 palabras, sin haber llegado ni de lejos al conflicto principal de la historia, preguntándome cuánto de lo que estoy escribiendo deberá ser borrado en Kill your darlings (-NO PIENSO BORRAR NADA, OKAY? -grita, aferrándose al ordenador y a su obra) y siendo muy consciente de lo afortunada que soy al poder trabajar en pijama y tumbada en un sofá. That-is-just-awesome.
Como dije al principio de este NaNo, lo conseguiré o moriré en el intento.
PD. Otra cosa que he empezado a hacer es narrar cuestiones de la vida cotidiana. He llegado al "dijo ella, mientras esparcía las cenizas del cigarro". Sí, he llegado a decir cosas así hablando con gente y aún no me han puesto la camisa de fuerza.
PD2. Realmente creo que esta es la mejor manera de escribir una novela. Escribirla, sin más, sin pararte a editar. Escribirla hasta sudar, escribirla aunque a veces las palabras salgan como pulling teeth y pienses que nada merece la pena y solo quieras darte con la cabeza contra la pared. Y luego volver, y editar. Porque creo que, al menos para alguien como yo, que soy tan perfeccionista, si te pones a editar antes de tiempo, se te va la cabeza y ves fallos por todas partes. Así que por ahora, este es el método creativo que voy a adoptar.