Meme.

Apr 20, 2009 09:09

Comenté en un post de  nakuruchan  y he aqui el resultado:

Comment to this post and I will give you 5 subjects/things I associate you with. Then post this in your LJ and elaborate on the subjects given.

Y ella me dio:

Vida Real

Japonés

Trabajo/Diversión

Libros

TezuFuji

Mi pésimo inglés me dice que son cosas que tenemos en común (¿?) y que debería de comentar.


Empezando con:

Vida Real: Me gusta definirme como alguien que diversifica sus intereses y se aplica a lo que le interesa. En ocasiones hago demasiadas cosas y mi cuerpo lo resiente (creo que de ahí provienen mis resientes problemas de salud). Sin embargo nunca he podido estarme quieta, tengo que estar haciendo algo si no siento que muero. Trabajo. Mi trabajo me gusta, ahora está más tranquilo que antes, pero creo que después de casi dos años de trabajos sin descanso y casi sin vacaciones, me merezco la aparente tranquilidad de la que gozo en estos momentos.

No gano la gran cosa, pero si me da para disfrutar de alguno que otro gustillo.

También estudio. Hace unos años estudié contabilidad y aunque en un principio no me gustó, al final de cuentas terminé cogiéndole cariño  y trabajé durante mucho tiempo de ello. Pero ganaba una miseria, así que terminé buscando otro trabajo y me quedé en el que estoy ahora. Todavía trato de mantenerme un poquito actualizada, pero mi estilo de vida actual en ocasiones me lo impide.

Actualmente estudio derecho. Con lo de mi enfermedad, ahora estoy batallando con materias de 3ro y de 4to, mitad y mitad, por lo que me devano los sesos tratando de salir adelante.

También estudio japonés e inglés. Me divierto, aunque pareciera que simplemente me estoy torturando.

En mis ratitos libres, leo. Cualquier cosa que caiga en mis manos. Y estudio. Porque ahora me cuesta un montón de trabajo aprenderme un montón de cosas que antes me bastaba con leer una ocasión para aprenderlas al derecho y al revés.

Tengo un perrito.

Una familia que me ama.

Y amigos que me aprecian.

Por lo que soy asquerosamente feliz con mi vida fuera del Internet.

Japonés. ¡Ah Merdé! Hubo un tiempo en que llamó mi atención. Pero nada tan grave como para ir más allá del común “Konnichiwa”. Me gusta la animación y el manga japonés. Pero el idioma no me llamaba particularmente. Ni siquiera cuando comencé a escuchar como lo hablaban o escribían. Sentía curiosidad por la forma en que los símbolos se dibujaban, pero lo que realmente quería aprender era chino. Una vez leí (y luego investigué para confirmar), que el chino, independientemente de en que provincia te encontraras, si lo escribías, cualquier persona lo entendería. Porque sin importar el dialecto, el idioma escrito es el mismo para toda China. Además de que el mercado chino está ganando un montón de terreno, en la escuela me lo recomendaron ampliamente.

Pero como no es un idioma muy popular, Sólo había un grupo de inscripción, y mi trabajo me impedía inscribirme. Ilusamente, al escuchar vagos conocimientos de que el japonés se originó en el chino y bla bla… creí que si estudiaba japonés, en algún punto relativo de mi existencia, podría intentar hablar chino y no sería tan difícil porque ya tendría ciertas bases, pero ¡oh horror! Son completamente distintos y mi maestra (Yukari-sensei), se encargó de tirar mis esperanzas por la borda (luego de hacerlas pedacitos y machacarlas). Es una buena profesora, hace que sea entretenido aprender y me tiene paciencia.

Ahora puedo distinguir algunas palabras, pero soy realista, a penas y me pude poner en posición de gateo. El idioma no es difícil, pero requiere atención y empeño.

Espero poder continuar.

Trabajo/Diversión. El trabajo es lo que me da el dinero para conseguir medios de diversión. No hay más que decir -.-

Libros. Oh Libros. Etéreas dríadas de mis más placenteros sueños. Los amo. Fueron ellos los que inspiraron el placer insano que me causa escribir. Creo que es un punto de convergencia en todos aquellos que nos empeñamos en plasmar nuestras historias en pequeñas y hermosas frases. Bueno, al menos así debería ser para todos. Porque aquellos que no lo hacen, aquellos que casi no leen, su falta de cultura les delata en cada palabra que escriben. En la forma en que se expresan… una verdadera afrenta contra el idioma.

El año pasado sólo pude leer uno por placer. “El Imperio de los Dragones”, una historia de un aguerrido romano que termina, junto con parte de su centuria, enredado en una guerra en el Imperio lejano y desconocido de los Dragones (China). Es muy interesante y entretenido, y narra magníficamente una historia atrayente que conjunta dos de mis grandes (y actuales) pasiones. El Imperio Romano y Chino.

Este año ha sido un poco más rico. Me he leído de un jalón, tres libros de la serie “Nightrunner”, o el mensajero de la oscuridad, así conocido vulgarmente por los hispanohablantes.

Casi todo lo que leo últimamente es sobre Derecho, para la escuela y eso. Un poco de textos en inglés (que no entiendo) y en japonés (que menos entiendo), por la misma razón.

Supongo que los libros siempre formaran parte de mi existencia y es algo que amaré por siempre.

Tezu/Fuji. Estaba yo hace unos años mirando la TV, y empezó un programa de chicos que jugaban tenis. No llamó mucho mi atención y estuve a punto de cambiarle de canal, cuando él apareció. No sé que fue exactamente lo que me atrajo de él, pero irremediablemente (y con mi vicio por el yaoi reciente), me puse como desesperada a encontrarle pareja. Y se presentó. En una alta figura de presencia imponente y delgados lentes que maduraban su expresión.

Seré sincera.

No soy una fanática en forma (ni pretendo serlo), no sigo religiosamente la serie, ni siquiera la terminé de ver. Pero me enamoré del Tezu/Fuji sin remedio, por lo que expresé mi amor con unas cuantas historias, que pululan por ahí, perdidas en algún rincón del enorme mundo que es el Internet.

Quiero hacer una tablita, para sacarme el bichito que hace que me remuerda la conciencia por una historia no terminada (y que probablemente no termine) que anda por ahí.

Aún los amo. Como amo a muchos otros. Pero por ahora mi corazón lo ocupa un despampanante rubio de ojos azules, que simplemente es un dios.

Fine.

real life, trabajo

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