Drabble H50 - Steve/Danny - Conclusiones 3/3

Mar 01, 2012 18:57

Antes que nada esta es una continuación de Conclusiones.
Título: Conclusiones 3
Fandom: Hawaii five - 0
Personaje/pareja(s): Steve, Danny; Steve/Danny
Rating: PG-13
Resumen: Danny siente que todo eso es más de lo que puede soportar, Steve solamente quiere que el detective sea feliz.
Advertencias: Spoilers del 2x15
Nota: Un agradecimiento a yvarlcris por toda su ayuda y su paciencia. Esto no habría sido lo mismo sin su ayuda. ¡Gracias!
Disclaimer: ni Hawaii Five -0, ni sus personajes me pertenecen, esto es sin fines de lucro, simplemente entretenimiento
Palabras: 1,546
Beta: yvarlcris



El tiempo es inmutable, inalterable y la única cosa en la que siempre podías confiar. No dejaría de correr de un día a otro, ni saldría huyendo de ti, ni se sentaría a esperar a que tu estuvieras listo para tomar decisiones. Al tiempo no le importabas, Seguía fluyendo como lo hacía desde antes de que estuvieras en el mundo, y como lo seguiría haciendo una vez que de ti no quedara ya ni el recuerdo.

Sin embargo, parecía que a veces, en muy contadas ocasiones, el tiempo se burlaba de nosotros. El Tic-Tac del reloj absorbía todos nuestros pensamientos y parecía que el tiempo que pasaba entre cada Tic-tac era abrumadoramente largo, como si el tac se sintiera tímido y no quisiera estar en ese lugar. Otros momentos por el contrario, era como si el reloj se hubiera acelerado y no eras capaz de escuchar el tac cuando el tic estaba sonando de nuevo.

Y era justamente de la primera manera como Danny sentía que el tiempo estaba corriendo en ese momento, era como si el tiempo que hubiera pasado mientras estaba ahí, con las pupilas fijas en las de su jefe y amigo, se hubiese detenido. Una parte de él, la de la razón y la que seguía intentando mantener fuera de su corazón aquella isla y la gente que había en ella, deseaba que las palabras que salieran de boca del marine fueran un sí.

Sí, te quiero solo como mi amigo ¿De qué tonterías estás hablando ahora, Danno? Entonces podría sonreír aliviado, hacer algunas bromas y tomar una cerveza intentando olvidar aquel episodio convenciéndose que la conclusión a la que había llegado era errónea. Y culpar a la carga emocional del día a sus desvaríos.

Y podía creer que era solo su imaginación, si no estuviera mirando fijamente al marine. ¿Cómo había llegado a conocer a aquel hombre así de bien? Sintió que los ojos se le llenaron de lágrimas y se sintió completamente patético y débil, pero no podía evitarlo.

¿No había la vida ya reído suficiente a su costa? Su vida nunca había sido fácil; ser el mayor, cuidar de sus hermanas y su hermano, había sido un trabajo mucho más duro de lo que podían imaginar. Y la academia tampoco había sido fácil, sus padres ,aunque no se oponían, no estaban felices con su decisión de ser policía. Pero Daniel Williams no quería ser solo un patrullero. No, quería ser un detective, el mejor de su división y había trabajado más duro, durante más tiempo, para conseguirlo.

La vida parecía haberle sonreído durante unos años, dejándole conocer a una mujer con la que no se habría atrevido ni a soñar, una mujer de la que se había enamorado como un loco y que lo había querido, volviendo aquel breve sueño en una de las mejores etapas de su vida.

El problema de los sueños era que irremediablemente uno tenía que abrir los ojos y ver de golpe la realidad y eso le había pasado a él o más bien a Rachel, que se dio cuenta de que no estaba donde debería, se había conseguido al hombre que merecía y lo había dejado, con sus sueños e ilusiones rotos y entre los dedos.
No debería ser legal que alguien te diera toda la felicidad que has conocido y luego te la quitara de golpe, si había logrado sobrevivir sin romperse del todo, solo lo había hecho por Grace, que lo necesitaba.

Y por ella había dejado todo lo que conocía para mudarse a aquel lugar que odió con todas sus fuerzas en cuanto supo que era el hogar de aquel otro. Eso era algo que no podía explicarle a Steve, que odiaba la isla no por la isla en sí, sino por lo que representaba.

Que el sol, la arena y el mar, eran un recordatorio constante de su fracaso, que todo lo que había en la isla era el susurro de aquella voz desagradable que le recordaba “Stan es mejor hombre que tú” y, además, ahora Hawai también le recordaba que había fracasado como hermano mayor.

Solo esperaba no fallar también como padre, entonces sí no seria sería capaz de sobrevivir. Honestamente, luego de que decidieran intentarlo y Rachel volviera a dejarlo con las manos vacías y el corazón hecho añicos, no se sentía capaz de ser “la persona” de nadie más. Era la razón por la que las cosas con Gabby parecían estancadas y era la razón por la que ahora mismo las lágrimas traicioneras se escapaban de su control.

No me hagas esto Steve, no lo hagas quiso gritar pero no pudo.

X -X -X

Steve suponía que había sido entrenado para hacer frente a cualquier situación que la vida le pusiera en su camino. Había estado en más zonas de guerra de las que le gustaban recordar y había participado en misiones de las que jamás podría hablar. Pero nada de eso lo había preparado para la mirada que Danny le estaba dando en ese momento.

Daniel Williams siempre había sido un libro abierto para él, el rubio simplemente parecía andar por la vida con todo lo que pensaba y sentía escrito en la cara. Pero ahora se encontraba con una expresión completamente desconocida, había tantas cosas en aquella mirada azul que Steve no lograba descifrar ninguna. Pero por sobre todas aquellas emociones, el marine reconoció la desesperación.

Una parte de sí mismo quiso dar media vuelta en ese momento, salir corriendo de aquella cantidad de sentimientos que el rubio estaba proyectando, porque intuía que quedarse ahí no sería bueno. Que saldría lastimado y lastimaría a Danny en el proceso, quiso golpearse a sí mismo por dejar que aquello pasara, que Danny se diera cuenta de sus sentimientos.

La otra parte, esa que se movía al ritmo del detective y que lo hacían comportarse como un loco la mayor parte del tiempo en presencia del rubio, le invitaba a decir la verdad a confesarlo a todo, a pedirle perdón porque estaba completa y totalmente enamorado y contra eso no podía luchar.

Y mientras decidía que era lo que tenía que hacer, Danny abrió la boca

- No quiero perderte Steve, no puedo fallarte a ti también. No lo soportaría

No fueron solo las palabras, fue el tono en el que habían sido dichas, de aquella manera desesperada, mientras las lágrimas recorrían aquel rostro que Steve había aprendido a amar.

Supo entonces que no había en ese momento ninguna decisión que tomar, que ya lo había hecho. Que lo había hecho meses atrás, cuando permitió que aquel torbellino rubio se instalara en su vida.

- Danno - murmuró recorriendo la distancia que los separaba, y apresurándose a apresar a Danny entre sus brazos, para compartir aquel gesto que ambos necesitaban.

- Este no es el momento - le susurra al oído al rubio comenzando a pasar la mano de arriba debajo de su espalda en un gesto que esperaba fuera tranquilizador - lo único que yo quiero es que seas feliz

X -X -X

Danny cerró los ojos y dejó que el aroma y la presencia de su amigo lo tranquilizaran un poco. Se sentía completamente avergonzado de su reacción, pero no podía hacer nada contra aquel sentimiento que se había instalado en su cuerpo.

Steve había contestado ya a su pregunta, le quería y no solo como amigo, pero simplemente quería que fuera feliz, algo que Danny estaba comenzando a creer que era imposible. Estando ahí con la cabeza apoyada en el pecho del Marine no pudo evitar esbozar una sonrisa, si el SEAL no le hubiera contestado a su pregunta como lo hizo, lo estaría haciendo en ese mismo momento con el latido desbocado de su corazón.

Danny mantiene los ojos cerrados y se deja atrapar en ese momento, sin preocuparse del tiempo ni de nada, Steve esta susurrando algo más, pero el detective no presta atención a las palabras, no es algo importante, son solo frases destinadas a tranquilizarlo, lo sabe.

Hasta ahora se da cuenta de lo mucho que necesitaba eso, sentirse así de seguro. Jamás se lo dirá al moreno pero una parte de sí mismo ha estado guardando un poco de rencor a su jefe, por pasar más tiempo con Lori y Joe que con él. Pero ahora mismo todo esta perdonado y supone que puede intentarlo. Que por Steve puede intentarlo. Aunque aún se sienta completamente aterrorizado e incapaz de ser la persona que Steve necesita, se da cuenta de que si hay alguien por quien ha comenzado a querer la isla es por ese loco que no lo ha soltado en todo ese tiempo

- Supongo que mientras no se te ocurra volar nada todo estará bien - dice con la voz ahogada por la tela de la camisa del comandante

Steve emboza una sonrisa y abraza a Danny con más fuerza si eso es posible.

- Las cosas vuelan Danny, yo no hago nada - susurra - pero, claro que todo estará bien - murmura sobre el cabello rubio ahora que sabe que está permitido dejar que sus labios descansen un momento ahí.

El rubio por toda respuesta lo rodea por la cintura.

Steve sonríe, sabe que no será fácil, Daniel Williams es todo menos fácil, pero también sabe que valdrá la pena.

La felicidad siempre lo vale.

fandom: h50, personaje: danny williams, pareja: steve/danny, tipo: drabble, personaje: steve mcgarrett

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