Resurgimiento
Hace mucho, mucho tiempo... Cien años atrás... Existió una leyenda sobre el primer blog de un sujeto que...
Vale, olviden eso. Aparte de que esa frase siento que la he escuchado en algún otro lado, no ha pasado tanto tiempo desde la última vez que escribí algo aquí. Y bueno, ¿cómo está todo por aquí? Veamos... No hay lectores nuevos (eso es algo obvio). No hay temas nuevos (algo que también es obvio). Hay un ligero cambio en el estilo general (que seguro, soy el único que lo sabe)... Bien, eso es lo que podría esperarse de un abandono de... Veamos... ¿¡Cuatro años ya!? Ufff... Sí que pasa el tiempo, oigan.
Bien, independientemente de eso, la pregunta que podría saltar es: ¿por qué escribir algo después de tanto tiempo? O más bien: ¿por qué ahora? La respuesta es simple y compleja a la vez (está bien, no tan compleja, pero me gusta dramatizar). Explicaré primero la parte simple. Hoy es el cumpleaños de este blog. Así de sencillo. Y es que si bien no puse nada en 2010, ni en 2011, ni mucho menos en 2012, eso no indica que lo haya olvidado. Simplemente, no tenía mucho interés en postear algo en un lugar donde ya no posteaba nada. Éste espacio fue mi primer intento de bitácora allá por el lejano 2005, y como se puede ver, la mantuve mucho tiempo. Vamos, una parte de mi vida está aquí, donde conté muchas cosas de mi día a día (mis Días Nada Interesantes) y donde conocí varias personas. Sin embargo, fue muriendo a medida que otras responsabilidades me absorbían, que conseguía otros intereses y en fin, que abría otros blogs donde pensaba que la creatividad me llegaría más frecuentemente o donde tendría más facilidades para que ocurriera. Huelga decir que no ocurrió esto, lo que al final concluyó en el abandono de este espacio, dejando solo la promesa de que no moría, pero tampoco dando esperanza de si habría un resurgimiento.
Esa es la razón "sencilla" (aunque un poco extendida) de por qué escribo de nuevo algo aquí. La razón "complicada" tiene más que ver con un estado de ánimo. Como dije más arriba, después de ir dejando éste blog abrí otros donde creí que podría mejorar mi experiencia como blogger. Un MSN Space intentó ser ese lugar. El desaparecido servicio de Computadora.de me dio otra oportunidad, con su servicio Diario.de. Muchas entradas y varios diseños realmente propios (el sitio permitía completa personalización HTML) pudieron dar la pauta a seguir. No ocurrió eso y luego el servicio cerró. Luego aterricé en Blogsome, donde mi intento no duró ni un asalto. Y al final terminé en Wordpress.com (Blogger ni lo probé). Ahí creé no uno, sino tres (¡!) blogs en orden consecutivo, a medida que me cansaba de cada uno. Y ahí sigo, si bien con el último (Los Caminos de la Luna) he intentado regresar a los tiempos donde escribía por gusto y sobre lo que quería. Que al fin y al cabo para eso es un blog, ¿no?
Y entonces, ¿para qué escribir de nuevo en LiveJournal? Lo primero, quise recordar cómo era esto. No ha cambiado mucho (todavía hay muchas restricciones) y la selección de temas y opciones aún es un truño. Muchas cosas que me enervaron en su momento (como la odiosa publicidad intrusiva) siguen. Otras, han mejorado un poco (como el editor de entradas). En especial, una de las cosas que más me gustó son los moods o estados de ánimo que se pueden poner en cada post. Es campo para la música actual es otra de esas cosas. Pero en general, siento todavía a LiveJournal como un sistema que se quedó anclado en alguna parte de inicios de este siglo y que ha sido superado por rivales mejores (que los lectores conocerán de sobra). Visto eso, se podría pensar que entonces no vale la pena "resucitar" este blog ni mucho menos regresar al servicio. Y no lo haré, ciertamente. O al menos, no de una forma activa. Puedo decir que entonces, la razón real de mi vuelta a escribir aquí es simplemente nostalgia. No me pregunten por qué, pero tengo debilidad con las cosas o relatos del pasado, y pensar en esos tiempos es uno de mis hobbies. Y los servicios web no son la excepción. Si bien no soy de la generación que aprendió con el Commodore 64 o el Amiga (más por falta de dinero que por edad), y entré a Internet por primera vez cuando éste ya tenía unos cuantos años (mediados de 1999), me encanta recordar esos años del Windows 95/98, el Netscape y las páginas con cientos de GIF's animados. Y como he dicho, éste Journal fue mi primer intento de diario. Por lo mismo, siento que es lógico que tenga nostalgia por él. Sí, puedo decir que es una razón endeble, ¿pero qué quieren? Es uno de los aspectos de mi personalidad y que me agrada solo por eso :P.
Vale, como sea, el caso es que me he decidido a escribir de nuevo aquí. ¿Otra vez periódicamente? Ni idea, la verdad. Éste post lo he creado como una especie de tributo a mi primer bitácora con motivo de que se han cumplido 8 años desde su creación. En realidad, en este momento tengo ganas de reactivarla y actualizarla una vez más, pero sé que puede ser solo un deseo creado por la sensación de nostalgia y por lo tanto fácil de olvidar. Más quién sabe. A lo mejor después de ésta entrada vienen otras, de una u otra manera. A lo mejor no tan frecuentes, pero puede ser.
En fin, éste ha sido mi "post de aniversario" para el blog. Si es el último dependerá de muchas cosas. Si no, entonces volveré a publicar debrayes de mi absurda vida diaria. Será divertido, después de tanto tiempo. En tal caso, no habré errado cuando elegí el nombre del blog. Ésta Canción Sin Final tendrá un nuevo comienzo...
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PD: Por cierto, me llamó la atención ver que el Internet Archive tiene algunas páginas de este blog en la época en que era genial. Por ejemplo éste. En aquellos años sí que me esforzaba :D.
PD 2: También encontré un screenshot del mi Diario.de. Otro de mis mini orgullos :3.
Vale, olviden eso. Aparte de que esa frase siento que la he escuchado en algún otro lado, no ha pasado tanto tiempo desde la última vez que escribí algo aquí. Y bueno, ¿cómo está todo por aquí? Veamos... No hay lectores nuevos (eso es algo obvio). No hay temas nuevos (algo que también es obvio). Hay un ligero cambio en el estilo general (que seguro, soy el único que lo sabe)... Bien, eso es lo que podría esperarse de un abandono de... Veamos... ¿¡Cuatro años ya!? Ufff... Sí que pasa el tiempo, oigan.
Bien, independientemente de eso, la pregunta que podría saltar es: ¿por qué escribir algo después de tanto tiempo? O más bien: ¿por qué ahora? La respuesta es simple y compleja a la vez (está bien, no tan compleja, pero me gusta dramatizar). Explicaré primero la parte simple. Hoy es el cumpleaños de este blog. Así de sencillo. Y es que si bien no puse nada en 2010, ni en 2011, ni mucho menos en 2012, eso no indica que lo haya olvidado. Simplemente, no tenía mucho interés en postear algo en un lugar donde ya no posteaba nada. Éste espacio fue mi primer intento de bitácora allá por el lejano 2005, y como se puede ver, la mantuve mucho tiempo. Vamos, una parte de mi vida está aquí, donde conté muchas cosas de mi día a día (mis Días Nada Interesantes) y donde conocí varias personas. Sin embargo, fue muriendo a medida que otras responsabilidades me absorbían, que conseguía otros intereses y en fin, que abría otros blogs donde pensaba que la creatividad me llegaría más frecuentemente o donde tendría más facilidades para que ocurriera. Huelga decir que no ocurrió esto, lo que al final concluyó en el abandono de este espacio, dejando solo la promesa de que no moría, pero tampoco dando esperanza de si habría un resurgimiento.
Esa es la razón "sencilla" (aunque un poco extendida) de por qué escribo de nuevo algo aquí. La razón "complicada" tiene más que ver con un estado de ánimo. Como dije más arriba, después de ir dejando éste blog abrí otros donde creí que podría mejorar mi experiencia como blogger. Un MSN Space intentó ser ese lugar. El desaparecido servicio de Computadora.de me dio otra oportunidad, con su servicio Diario.de. Muchas entradas y varios diseños realmente propios (el sitio permitía completa personalización HTML) pudieron dar la pauta a seguir. No ocurrió eso y luego el servicio cerró. Luego aterricé en Blogsome, donde mi intento no duró ni un asalto. Y al final terminé en Wordpress.com (Blogger ni lo probé). Ahí creé no uno, sino tres (¡!) blogs en orden consecutivo, a medida que me cansaba de cada uno. Y ahí sigo, si bien con el último (Los Caminos de la Luna) he intentado regresar a los tiempos donde escribía por gusto y sobre lo que quería. Que al fin y al cabo para eso es un blog, ¿no?
Y entonces, ¿para qué escribir de nuevo en LiveJournal? Lo primero, quise recordar cómo era esto. No ha cambiado mucho (todavía hay muchas restricciones) y la selección de temas y opciones aún es un truño. Muchas cosas que me enervaron en su momento (como la odiosa publicidad intrusiva) siguen. Otras, han mejorado un poco (como el editor de entradas). En especial, una de las cosas que más me gustó son los moods o estados de ánimo que se pueden poner en cada post. Es campo para la música actual es otra de esas cosas. Pero en general, siento todavía a LiveJournal como un sistema que se quedó anclado en alguna parte de inicios de este siglo y que ha sido superado por rivales mejores (que los lectores conocerán de sobra). Visto eso, se podría pensar que entonces no vale la pena "resucitar" este blog ni mucho menos regresar al servicio. Y no lo haré, ciertamente. O al menos, no de una forma activa. Puedo decir que entonces, la razón real de mi vuelta a escribir aquí es simplemente nostalgia. No me pregunten por qué, pero tengo debilidad con las cosas o relatos del pasado, y pensar en esos tiempos es uno de mis hobbies. Y los servicios web no son la excepción. Si bien no soy de la generación que aprendió con el Commodore 64 o el Amiga (más por falta de dinero que por edad), y entré a Internet por primera vez cuando éste ya tenía unos cuantos años (mediados de 1999), me encanta recordar esos años del Windows 95/98, el Netscape y las páginas con cientos de GIF's animados. Y como he dicho, éste Journal fue mi primer intento de diario. Por lo mismo, siento que es lógico que tenga nostalgia por él. Sí, puedo decir que es una razón endeble, ¿pero qué quieren? Es uno de los aspectos de mi personalidad y que me agrada solo por eso :P.
Vale, como sea, el caso es que me he decidido a escribir de nuevo aquí. ¿Otra vez periódicamente? Ni idea, la verdad. Éste post lo he creado como una especie de tributo a mi primer bitácora con motivo de que se han cumplido 8 años desde su creación. En realidad, en este momento tengo ganas de reactivarla y actualizarla una vez más, pero sé que puede ser solo un deseo creado por la sensación de nostalgia y por lo tanto fácil de olvidar. Más quién sabe. A lo mejor después de ésta entrada vienen otras, de una u otra manera. A lo mejor no tan frecuentes, pero puede ser.
En fin, éste ha sido mi "post de aniversario" para el blog. Si es el último dependerá de muchas cosas. Si no, entonces volveré a publicar debrayes de mi absurda vida diaria. Será divertido, después de tanto tiempo. En tal caso, no habré errado cuando elegí el nombre del blog. Ésta Canción Sin Final tendrá un nuevo comienzo...
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PD: Por cierto, me llamó la atención ver que el Internet Archive tiene algunas páginas de este blog en la época en que era genial. Por ejemplo éste. En aquellos años sí que me esforzaba :D.
PD 2: También encontré un screenshot del mi Diario.de. Otro de mis mini orgullos :3.