"K FOR TWO" **episodio cuatro**
Kyaaa!!! <3,
Kyaaaa, Volví, a actualizar este fic.
Ya estamos en el capítulo 4!
¿Qué pasara?
¿Tienen alguna idea?
Pues para serles sinceras, escribir este capítulo me costó un poco, ya que me enferme, y eran los últimos días de mis clases de inglés, pero a pesar de todo esto, logre terminar de escribir este capítulo.
Estaba muy emocionada que este capítulo se publicara, pues porque aparece un personaje que nadie se espera…
¿Quién será? Lean y lo averiguaran.
Por cierto cambiaré el color de letra, mi hermana me dijo que el color rosa, era un poco raro. Así que lo dejare en negro.
Douzo…
_________________________________________________________________________________________________________
Nari ya me voy-grito Jun desde el pasadizo-
-Espera-Nari lo alcanzo y le entrego una bolsa con un bento casero.
-Aww que tierno..., pareces mi esposa-Jun se burló.
-Esposo-corrigió Nari.
Jun levanto las cejas y esbozo una sonrisa.
-No, te preocupes. Comeré cuando llegue a casa.
-Pero son tres horas de viaje, te vas a morir de hambre-le aseguro Nari.
-Está bien-Jun tomo la bolsa con mucho cuidado-Vamos no pongas esa cara regresare en tres días-dijo al ver que su amigo ponía cara triste.
-Me sentiré muy solo. Pero esos tres días iré a trabajar en el dorama, quizás salga a divertirme un poco, ya sabes, puede ser divertido.
-Solo no lo hagas taaan divertido, ni quiero que te embaraces.
-Ya mami, Junko. Cuídate. Saluda a tu madre.
-Adiós Kazuko-
Después que Jun abrazara y besara a Nari en los labios, se marchó cargando su pequeña maleta.
Al instante que Jun se fue. Nari se alisto y se fue a trabajar. Y así fue durante la ausencia de su amigo, no había salido a divertirse, solo había ido de su casa al trabajo y del trabajo a su casa, en donde comía ramen y se iba a dormir.
Ya en el último día. Recibió un mensaje de Jun.
**Llego a las 7 pm. ¿Te puedo cenar? Perdón. Cenamos pasta en "Make a Wish"?**
Nari sonrió y de levanto de la cama de un salto, alisto sus cosas. Iba a ser un gran día.
Estaba a punto de salir de su casa cuando su móvil sonó. Reviso el número, era uno que no conocía. Extrañado contesto.
-Si, Ninomiya Kazunari habla.
-¡Hola! Tanto tiempo sin oír tu hermosa voz.
A Nari se le fueron los colores del rostro y empezó temblar. No había oído esa voz hace mucho. Mucho tiempo y de alguna manera le resulto agobiante
-¿Qué es lo que quieres?-hablo con dureza
-Jo. Ahora me hablas así. Pensé que este tiempo te había hecho pensar.
-No molestes. No llames más a este número. Por favor.
-¿Y piensas que te voy a obedecer? Llama para decirte que estoy en Tokio, tal vez podamos salir a cenar, ya sabes cómo los viejos tiempos.
-No, ni lo sueñes. Nunca. No te acerques a mi o a mi casa.
-¿Estás hablando enserio? Me rompes el corazón Nari.
-No me importa. Adiós. No vuelvas a llamar.
-Aunque me lo ruegues. Sabes que lo haré. Nuestra relación no se puede romper. Tienes que dejar de huir de esto.
-Adiós-Nari cortó el teléfono con ira y salió dando un fuerte portazo.
Cuando empezó su camino hacia su trabajo. La mente se llenó de ideas, ideas que empezaban a atormentarlo. Justo cuando todo iba bien tenía que aparecer. Esa persona...
¿Cómo le habrá ido en Europa? ¿Habrá logrado conseguido sus sueños?
No había mantenido contacto con él, después que su cruel y tormentosa despedida.
Cuando llego al estudio, ya todos estaban corriendo de un lado a otro. Maquillistas con sus bolsos tratando de poner base liquida en las caras de los actores principales. Algunos actores secundarios mirando sus guiones tratando de aprendérselos. Los camarógrafos limpiando las lunas de sus cámaras y haciendo tomas de prueba.
Nari amaba ese ambiente. Cada vez que pisaba ese set se daba cuenta que estaba hecho para eso. Hecho para actuar.
Las primeras tomas de este capítulo fueron totalmente complicadas. Ya que anteriormente a los guionistas habían cambiado gran parte de los diálogos. Eso atribuía que se venía una escena de beso entre dos chicos.
Saigo-san corría de un lado a otro, preocupado con ganas de desaparecer. Ya se había transmitido dos capítulos de aquel dorama y los ratings habían sido muy buenos.
-Yaaa basta. Todos solo por hoy, tengan su guion a la mano, los que no los tengan, pueden pedir su pago en secretaria y nunca más volver.
-Siii- se escuchó y de inmediato todos tomaron sus guiones.
Cuando empezaron de nuevo de nuevo las grabaciones, los actores estuvieron un poco menos nerviosos y más profesionales.
Nari observó como Saigo-san le gritaba a un actor principal, este no tenía el guion en mano y ahora temblaba enfrente al productor.
-No me importa que sepas todo el dialogo, yo dije algo y ¡se cumple!
El chico asintió torpemente y una mano solidaria le alcanzo un guion. Este agradeció con lágrimas en los ojos.
Nari suspiro por suerte él si había traído su guion. Fue a buscarlo en su mochila. Cuando metió la mano para sacarlo...
-No-suspiro.
Todos los días menos hoy. Porque justo hoy tenía que olvidarse de su guion. ¿Porque?
Busco con más ahínco; nada.
Una especie de pánico empezó a apoderase de él. Saigo-san había sido muy claro respecto a la regla de hoy. Él un simple cameo no tenía guion. Eso significaba que cuando lo llamaran a actuar dentro de 45 minutos...
-¡No!-grito
Un destello de un recuerdo vino a su mente.
Él, Él, Él, había tenido la culpa de su olvido. Por su estúpida llamada había dejado el guion encima de la mesa del comedor.
Desesperado llamo a su única alternativa. Jun Matsumoto.
Marco como loco el número de su amigo, pero cuando iba apretar el botón de llamada. Recordó que Jun no llegaba dentro de tres horas. En las cuales Nari estaría despedido y llorando en forma fetal en su habitación.
Cerró los ojos con fuerza. Sintió calor debajo de ellos, ese calor que te indica que estas a punto de llorar.
No pudo aguantar y lo hizo.
Una chica encargada del vestuario pasó por ahí y lo miro con forma curiosa. Inmediatamente huyo y se encerró en el baño.
No supo cuánto tiempo estuvo llorando, pero cuando vio su reloj de muñeca se dio cuenta que solo habían sido diez minutos.
-Bueno. Se acabó.- suspiro cerro los ojos, cuando los abrió su reflejo le devolvió la mirada. Un chico de 28 años le miro de regreso.
Una idea loca se le vino a la mente. Cogió su móvil y llamo al número que lo había molestado esa mañana
-Aquí tienes-dijo él con una sonrisa de oreja a oreja.
-Gracias, ya ahora vete, alguien puede verte y si lo hacen estaré en problemas- Nari recibió el guion y empujo a la persona que estaba en frente de él-
-Vi tu casa, ¿Vives con otra persona? ¿Es tu novio?
-No, Jun no es mi novio- respondió. - Y eso no debería importante, ahora vete, ¡ya!
La persona que estaba en frente de él soltó una risita cruel, lo inspecciono de arriba hacia abajo y se dio media vuelta.
Nari respiro pesadamente.
No había sido buena idea llamar a aquella persona, pero era su única alternativa. Al menos se había comportado bien y no había hecho un escándalo.
La grabación fue un éxito, Saigo-san lo felicito por su excelente participación gracias a eso, Nari se ganó una miradas de odio y otras de admiración.
Justo cuando estaba por irse, Saigo-san se paró en frente de él con una sonrisa demasiado grande.
-Ninomiya tienes mucha suerte- le gritó agitando los brazos
-¿Yo?- preguntó
-Si tú. Soy muy feliz por la noticia que me acaban de dar. ¡Por fin Nino! ¡Por fin!-tomo un largo suspiro y continuo- Me encantaría contarte esta bella noticia, pero no soy el indicado. En la habitación 1994 hay alguien esperándote. Ve ahora mismo-
Sin perder tiempo Nari literalmente corrió hasta esa habitación, con cierto miedo tiro el picaporte, cuando entro solo había una persona de espaldas. Nari carraspeo, y la persona se dio la vuelta dando a Nari la sorpresa de su vida.
Ahí parado frente a él estaba Sho Sakurai, que lo miraba con una sonrisa.
-Me alegro que no hayas tardado mucho, cuando se lo conté a Saigo-san se alegró mucho por ti.
-¿Es la habitación correcta?-, Nino se giró y vio los números 1994 en la parte de arriba de la puerta.
-Por supuesto que es la habitación correcta.
-Entonces ¿Por qué estás aquí?- Nari miro a Sho de pies a cabeza.
-¿Ni siquiera te lo imaginas?- preguntó acercándose
No, no se lo imaginaba.
Miles de ideas vinieron a su cabeza, una más incoherente que la otra. No supo porque pero la idea que más lo incomodó era una en la Sho lo besaba y no de una manera dulce, como lo hacía Jun a veces, si no que Sho tenía el total control de su cuerpo, sus labios se complementaban perfectamente, sus manos volaron por su espalda, se sorprendió cuando sin querer soltó un suspirito.
-¿Qué te habrás imaginado?- soltó Sho
Nari se llevó las manos al rostro, estaba caliente y estaba seguro que su cara estaba totalmente roja.
-Yo y..o no he pensado nada malo- tartamudeó Nari.
Sho soltó una risa blanca y pura.
-Bueno, entonces como no te imaginaste la noticia que te diré- Sho le extendió unos papeles- Toma, tal vez te interesé leerlos
Nari tomo los papeles
Obviamente era un guion. Con cuidado hecho un vistazo a la primera hoja.
“Pulverem”
“Nube de Polvo”
Actores:
-Sakurai Sho como Sumire Naoki
-Ninomiya Kazunari como Yamada Takeshi
El nombre de Sho estaba ahí, y también el suyo…
-Felicitaciones Ninomiya-san - Sho hizo una reverencia- espero poder trabajar bien contigo.
Nari miro del guion a Sho y de Sho al guion
-Yo no. No lo entiendo.
-El productor te vio actuar. Con mi recomendación, con la recomendación de Saigo-san; obtuviste el papel.
-¿Tu recomendación?- Nari preguntó y abrió muchos los ojos.
-Si yo te recomendé y espero no poder equivocarme
Todo estaba pasando muy rápido, todo. Una película. Y él como protagonista. Junto a su ídolo. ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Qué estaba pasando?
-¿Yo?, en una película. Esto es un sueño, toda mi vida yo…
-¿Si?
-Muchísimas gracias, Sakurai-san, Muchas gracias. Yo no lo defraudaré.
-No tienes que agradecerme, te lo mereces has trabajado muy duro todo este tiempo. Las grabaciones comenzaran pronto, así que te llamaré. Dame tu número.
Nari recito el número de su móvil, casi cantando.
-Bueno entonces nos vemos.
-Hasta luego Sakurai-san, y muchísimas gracias. Gracias de verdad-Nari se inclinó hacia adelante.
-De nada- Sho caminó hasta la puerta y antes de desaparecer por ella dijo- Por cierto soy Sho y cuando quieras podemos hacer lo que imaginaste.
Nari abrió la boca y sin pensar asintió. Sho le regalo una sonrisa de nuevo y se fue, dejando a un Kazunari Ninomiya con una sonrisa en rostro y el corazón a punto de salírsele por la boca
Jun llego a casa demasiado cansado. Miro el reloj solo tenía una hora exacta para dormir y poder cenar con Nari, justo como lo había prometido con aquel mensaje de texto.
Tomo sus llaves y las metió al picaporte.
Oh no.
Algo iba mal. Nari jamás dejaría su casa sin llave. Aunque no tenían nada de valor, esa casa tenia recuerdos valiosos, como la primera licuadora que compraron juntos o el televisor en el cual Nari pasaba horas jugando sus amados videojuegos.
Escucho un sonido adentro de su casa, agudizo el oído. Era el sonido del televisor.
Suspiro aliviado, quizás Nari había llegado antes de trabajar.
Entonces justo cuando abrió la puerta una figura apareció ante él. Era un chico que lo miraba sonriente.
-Hola, ¿Tu eres Jun Matsumoto verdad? Mucho gusto mi nombre es Kazuhiro Ninomiya.
To be Continued…
Ohhh rayos!!!!
Hashira Lo vas a dejar ahì?
Mujajajajajajajajaaj *se ríe*
Pos siiiiii!!!
¿Qué les ha parecido el capítulo?
Tenemos a un Sho muy picaron, y muy amable; se le hizo el sueño a nuestro Nari, por fin actuara en una película y con el SabroSho!! ¿Qué más puede pedir?
La imaginación de Nari es poderosísima!! Jajaaj XD.
El restaurante en donde Jun y Nino van a ir a cenar, no existe. De hecho es mi canción favorita del último álbum de los Arashos, escuchaba la canción cuando escribia. **belive in your smile**
La película, “Pulverem” es parte de mi imaginación, me gustó mucho el título, ya que está escrito en latín. Ohh siii Hashira sabe latín, okno. Simplemente use google traductor *la patean*
Bueno sin más que decir, me despido. Muchas a todos los que me leen y dejan sus comentarios, y los que no pues también muchas muchas gracias.
¿Quién crees que será Kazuhiro? Déjame saber tu opinión.
Como siempre estoy dispuesta a recibir sus opiniones con los brazos abiertos
Deja tu comentario, si también tienes la imaginación de Nari.
Kyaaaa, Volví, a actualizar este fic.
Ya estamos en el capítulo 4!
¿Qué pasara?
¿Tienen alguna idea?
Pues para serles sinceras, escribir este capítulo me costó un poco, ya que me enferme, y eran los últimos días de mis clases de inglés, pero a pesar de todo esto, logre terminar de escribir este capítulo.
Estaba muy emocionada que este capítulo se publicara, pues porque aparece un personaje que nadie se espera…
¿Quién será? Lean y lo averiguaran.
Por cierto cambiaré el color de letra, mi hermana me dijo que el color rosa, era un poco raro. Así que lo dejare en negro.
Douzo…
_________________________________________________________________________________________________________
Nari ya me voy-grito Jun desde el pasadizo-
-Espera-Nari lo alcanzo y le entrego una bolsa con un bento casero.
-Aww que tierno..., pareces mi esposa-Jun se burló.
-Esposo-corrigió Nari.
Jun levanto las cejas y esbozo una sonrisa.
-No, te preocupes. Comeré cuando llegue a casa.
-Pero son tres horas de viaje, te vas a morir de hambre-le aseguro Nari.
-Está bien-Jun tomo la bolsa con mucho cuidado-Vamos no pongas esa cara regresare en tres días-dijo al ver que su amigo ponía cara triste.
-Me sentiré muy solo. Pero esos tres días iré a trabajar en el dorama, quizás salga a divertirme un poco, ya sabes, puede ser divertido.
-Solo no lo hagas taaan divertido, ni quiero que te embaraces.
-Ya mami, Junko. Cuídate. Saluda a tu madre.
-Adiós Kazuko-
Después que Jun abrazara y besara a Nari en los labios, se marchó cargando su pequeña maleta.
Al instante que Jun se fue. Nari se alisto y se fue a trabajar. Y así fue durante la ausencia de su amigo, no había salido a divertirse, solo había ido de su casa al trabajo y del trabajo a su casa, en donde comía ramen y se iba a dormir.
Ya en el último día. Recibió un mensaje de Jun.
**Llego a las 7 pm. ¿Te puedo cenar? Perdón. Cenamos pasta en "Make a Wish"?**
Nari sonrió y de levanto de la cama de un salto, alisto sus cosas. Iba a ser un gran día.
Estaba a punto de salir de su casa cuando su móvil sonó. Reviso el número, era uno que no conocía. Extrañado contesto.
-Si, Ninomiya Kazunari habla.
-¡Hola! Tanto tiempo sin oír tu hermosa voz.
A Nari se le fueron los colores del rostro y empezó temblar. No había oído esa voz hace mucho. Mucho tiempo y de alguna manera le resulto agobiante
-¿Qué es lo que quieres?-hablo con dureza
-Jo. Ahora me hablas así. Pensé que este tiempo te había hecho pensar.
-No molestes. No llames más a este número. Por favor.
-¿Y piensas que te voy a obedecer? Llama para decirte que estoy en Tokio, tal vez podamos salir a cenar, ya sabes cómo los viejos tiempos.
-No, ni lo sueñes. Nunca. No te acerques a mi o a mi casa.
-¿Estás hablando enserio? Me rompes el corazón Nari.
-No me importa. Adiós. No vuelvas a llamar.
-Aunque me lo ruegues. Sabes que lo haré. Nuestra relación no se puede romper. Tienes que dejar de huir de esto.
-Adiós-Nari cortó el teléfono con ira y salió dando un fuerte portazo.
Cuando empezó su camino hacia su trabajo. La mente se llenó de ideas, ideas que empezaban a atormentarlo. Justo cuando todo iba bien tenía que aparecer. Esa persona...
¿Cómo le habrá ido en Europa? ¿Habrá logrado conseguido sus sueños?
No había mantenido contacto con él, después que su cruel y tormentosa despedida.
Cuando llego al estudio, ya todos estaban corriendo de un lado a otro. Maquillistas con sus bolsos tratando de poner base liquida en las caras de los actores principales. Algunos actores secundarios mirando sus guiones tratando de aprendérselos. Los camarógrafos limpiando las lunas de sus cámaras y haciendo tomas de prueba.
Nari amaba ese ambiente. Cada vez que pisaba ese set se daba cuenta que estaba hecho para eso. Hecho para actuar.
Las primeras tomas de este capítulo fueron totalmente complicadas. Ya que anteriormente a los guionistas habían cambiado gran parte de los diálogos. Eso atribuía que se venía una escena de beso entre dos chicos.
Saigo-san corría de un lado a otro, preocupado con ganas de desaparecer. Ya se había transmitido dos capítulos de aquel dorama y los ratings habían sido muy buenos.
-Yaaa basta. Todos solo por hoy, tengan su guion a la mano, los que no los tengan, pueden pedir su pago en secretaria y nunca más volver.
-Siii- se escuchó y de inmediato todos tomaron sus guiones.
Cuando empezaron de nuevo de nuevo las grabaciones, los actores estuvieron un poco menos nerviosos y más profesionales.
Nari observó como Saigo-san le gritaba a un actor principal, este no tenía el guion en mano y ahora temblaba enfrente al productor.
-No me importa que sepas todo el dialogo, yo dije algo y ¡se cumple!
El chico asintió torpemente y una mano solidaria le alcanzo un guion. Este agradeció con lágrimas en los ojos.
Nari suspiro por suerte él si había traído su guion. Fue a buscarlo en su mochila. Cuando metió la mano para sacarlo...
-No-suspiro.
Todos los días menos hoy. Porque justo hoy tenía que olvidarse de su guion. ¿Porque?
Busco con más ahínco; nada.
Una especie de pánico empezó a apoderase de él. Saigo-san había sido muy claro respecto a la regla de hoy. Él un simple cameo no tenía guion. Eso significaba que cuando lo llamaran a actuar dentro de 45 minutos...
-¡No!-grito
Un destello de un recuerdo vino a su mente.
Él, Él, Él, había tenido la culpa de su olvido. Por su estúpida llamada había dejado el guion encima de la mesa del comedor.
Desesperado llamo a su única alternativa. Jun Matsumoto.
Marco como loco el número de su amigo, pero cuando iba apretar el botón de llamada. Recordó que Jun no llegaba dentro de tres horas. En las cuales Nari estaría despedido y llorando en forma fetal en su habitación.
Cerró los ojos con fuerza. Sintió calor debajo de ellos, ese calor que te indica que estas a punto de llorar.
No pudo aguantar y lo hizo.
Una chica encargada del vestuario pasó por ahí y lo miro con forma curiosa. Inmediatamente huyo y se encerró en el baño.
No supo cuánto tiempo estuvo llorando, pero cuando vio su reloj de muñeca se dio cuenta que solo habían sido diez minutos.
-Bueno. Se acabó.- suspiro cerro los ojos, cuando los abrió su reflejo le devolvió la mirada. Un chico de 28 años le miro de regreso.
Una idea loca se le vino a la mente. Cogió su móvil y llamo al número que lo había molestado esa mañana
-Aquí tienes-dijo él con una sonrisa de oreja a oreja.
-Gracias, ya ahora vete, alguien puede verte y si lo hacen estaré en problemas- Nari recibió el guion y empujo a la persona que estaba en frente de él-
-Vi tu casa, ¿Vives con otra persona? ¿Es tu novio?
-No, Jun no es mi novio- respondió. - Y eso no debería importante, ahora vete, ¡ya!
La persona que estaba en frente de él soltó una risita cruel, lo inspecciono de arriba hacia abajo y se dio media vuelta.
Nari respiro pesadamente.
No había sido buena idea llamar a aquella persona, pero era su única alternativa. Al menos se había comportado bien y no había hecho un escándalo.
La grabación fue un éxito, Saigo-san lo felicito por su excelente participación gracias a eso, Nari se ganó una miradas de odio y otras de admiración.
Justo cuando estaba por irse, Saigo-san se paró en frente de él con una sonrisa demasiado grande.
-Ninomiya tienes mucha suerte- le gritó agitando los brazos
-¿Yo?- preguntó
-Si tú. Soy muy feliz por la noticia que me acaban de dar. ¡Por fin Nino! ¡Por fin!-tomo un largo suspiro y continuo- Me encantaría contarte esta bella noticia, pero no soy el indicado. En la habitación 1994 hay alguien esperándote. Ve ahora mismo-
Sin perder tiempo Nari literalmente corrió hasta esa habitación, con cierto miedo tiro el picaporte, cuando entro solo había una persona de espaldas. Nari carraspeo, y la persona se dio la vuelta dando a Nari la sorpresa de su vida.
Ahí parado frente a él estaba Sho Sakurai, que lo miraba con una sonrisa.
-Me alegro que no hayas tardado mucho, cuando se lo conté a Saigo-san se alegró mucho por ti.
-¿Es la habitación correcta?-, Nino se giró y vio los números 1994 en la parte de arriba de la puerta.
-Por supuesto que es la habitación correcta.
-Entonces ¿Por qué estás aquí?- Nari miro a Sho de pies a cabeza.
-¿Ni siquiera te lo imaginas?- preguntó acercándose
No, no se lo imaginaba.
Miles de ideas vinieron a su cabeza, una más incoherente que la otra. No supo porque pero la idea que más lo incomodó era una en la Sho lo besaba y no de una manera dulce, como lo hacía Jun a veces, si no que Sho tenía el total control de su cuerpo, sus labios se complementaban perfectamente, sus manos volaron por su espalda, se sorprendió cuando sin querer soltó un suspirito.
-¿Qué te habrás imaginado?- soltó Sho
Nari se llevó las manos al rostro, estaba caliente y estaba seguro que su cara estaba totalmente roja.
-Yo y..o no he pensado nada malo- tartamudeó Nari.
Sho soltó una risa blanca y pura.
-Bueno, entonces como no te imaginaste la noticia que te diré- Sho le extendió unos papeles- Toma, tal vez te interesé leerlos
Nari tomo los papeles
Obviamente era un guion. Con cuidado hecho un vistazo a la primera hoja.
“Pulverem”
“Nube de Polvo”
Actores:
-Sakurai Sho como Sumire Naoki
-Ninomiya Kazunari como Yamada Takeshi
El nombre de Sho estaba ahí, y también el suyo…
-Felicitaciones Ninomiya-san - Sho hizo una reverencia- espero poder trabajar bien contigo.
Nari miro del guion a Sho y de Sho al guion
-Yo no. No lo entiendo.
-El productor te vio actuar. Con mi recomendación, con la recomendación de Saigo-san; obtuviste el papel.
-¿Tu recomendación?- Nari preguntó y abrió muchos los ojos.
-Si yo te recomendé y espero no poder equivocarme
Todo estaba pasando muy rápido, todo. Una película. Y él como protagonista. Junto a su ídolo. ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Qué estaba pasando?
-¿Yo?, en una película. Esto es un sueño, toda mi vida yo…
-¿Si?
-Muchísimas gracias, Sakurai-san, Muchas gracias. Yo no lo defraudaré.
-No tienes que agradecerme, te lo mereces has trabajado muy duro todo este tiempo. Las grabaciones comenzaran pronto, así que te llamaré. Dame tu número.
Nari recito el número de su móvil, casi cantando.
-Bueno entonces nos vemos.
-Hasta luego Sakurai-san, y muchísimas gracias. Gracias de verdad-Nari se inclinó hacia adelante.
-De nada- Sho caminó hasta la puerta y antes de desaparecer por ella dijo- Por cierto soy Sho y cuando quieras podemos hacer lo que imaginaste.
Nari abrió la boca y sin pensar asintió. Sho le regalo una sonrisa de nuevo y se fue, dejando a un Kazunari Ninomiya con una sonrisa en rostro y el corazón a punto de salírsele por la boca
Jun llego a casa demasiado cansado. Miro el reloj solo tenía una hora exacta para dormir y poder cenar con Nari, justo como lo había prometido con aquel mensaje de texto.
Tomo sus llaves y las metió al picaporte.
Oh no.
Algo iba mal. Nari jamás dejaría su casa sin llave. Aunque no tenían nada de valor, esa casa tenia recuerdos valiosos, como la primera licuadora que compraron juntos o el televisor en el cual Nari pasaba horas jugando sus amados videojuegos.
Escucho un sonido adentro de su casa, agudizo el oído. Era el sonido del televisor.
Suspiro aliviado, quizás Nari había llegado antes de trabajar.
Entonces justo cuando abrió la puerta una figura apareció ante él. Era un chico que lo miraba sonriente.
-Hola, ¿Tu eres Jun Matsumoto verdad? Mucho gusto mi nombre es Kazuhiro Ninomiya.
To be Continued…
Ohhh rayos!!!!
Hashira Lo vas a dejar ahì?
Mujajajajajajajajaaj *se ríe*
Pos siiiiii!!!
¿Qué les ha parecido el capítulo?
Tenemos a un Sho muy picaron, y muy amable; se le hizo el sueño a nuestro Nari, por fin actuara en una película y con el SabroSho!! ¿Qué más puede pedir?
La imaginación de Nari es poderosísima!! Jajaaj XD.
El restaurante en donde Jun y Nino van a ir a cenar, no existe. De hecho es mi canción favorita del último álbum de los Arashos, escuchaba la canción cuando escribia. **belive in your smile**
La película, “Pulverem” es parte de mi imaginación, me gustó mucho el título, ya que está escrito en latín. Ohh siii Hashira sabe latín, okno. Simplemente use google traductor *la patean*
Bueno sin más que decir, me despido. Muchas a todos los que me leen y dejan sus comentarios, y los que no pues también muchas muchas gracias.
¿Quién crees que será Kazuhiro? Déjame saber tu opinión.
Como siempre estoy dispuesta a recibir sus opiniones con los brazos abiertos
Deja tu comentario, si también tienes la imaginación de Nari.