"K" FOR TWO **episiodio tres**
KONBAWA!!!
Soy yo Hashira, vengo a compartir el episiodio 3 de este fic *-*
Creo que quedo largo...
Y seguimos conocemos a Nari, un personaje hara apariciòn! Wiii
Si, es el personaje que les dije... ¿Quien creen que sera?
No soy mucho de hacer lime, ( bueno no se como llamarlo, ya que no se escribir lemon), pero hize el intento, me hicieron enojar en mi clase de ingles. Asi que esto salio. Disfrutenlo *-*
Si la inspiraciòn me visita habra cap nuevo para ¡San Valentin!
Douzo...
____________________________________________________________________________________________
-Entonces ¿hiciste esa escena con él? ¿Y no te pusiste nervioso? - Jun sorbió un espagueti- Estoy tan orgulloso. Como crece ¿verdad?-le pregunto a la silla vacía que estaba a su lado.
-Fue un momento que ni yo puede predecir. Fue espontaneo- Nari recordó- Sakurai-san fue muy amable.
-Oh Vaya. ¿Qué es esa mueca? ¿Es una sonrisa?-se burló Jun
Nari se llevó las manos a la cara y noto que de verdad tenia dibujada una sonrisa.
-Puede que sí. No lo sé.
-Me voy a poner celoso, el actorcito ese- Jun hizo un puchero- ¿Es el niño de la laguna?-
-Si es él- Nari recogió los platos y empezó a lavarlos-
-Yo me voy a dormir- anuncio el psicólogo.
-¿No jugaras hoy conmigo?, lo prometiste. "Mañana te daré la revancha", eso dijiste ayer-reclamo Nari.
-Lo sé. Pero necesito dormir temprano, mi primera cita es a las 7:30. Vendrán tres personas, la esposa, el esposo y el amante- hablo Jun- Son unos problemáticos. Son tres horas que estaré con ellos. Lo siento Nari- Jun se inclinó un poco
-Ohhh-Nari suspiro pesadamente-Ve a dormir. Luego me contaras todo. ¿Ok?
-Ok. Hasta mañana pato lodoso-Jun se acercó hacia su amigo y le deposito un beso en la nariz-
-Hasta mañana señorita Diva-
Kazunari estuvo jugando Wii por casi tres horas. Solo cuando ya empezaba a ver borroso. Apago la televisión y se fue a dormir no sin antes revisar que Jun estuviera dormido.
Ahí estaba dormido como una roca otra vez destapado y con la ventana abierta. Se acercó sigilosamente y cerró la ventana con cuidado y también tapo a Jun con otra manta más gruesa.
Aunque no lo quería admitir la presencia de Jun en su pequeño hogar le hacía sentir que no estaba solo. Aún tenía un amigo que lo quería. ¿Porque no cuidar de él?
Decir que estaba solo era solo una expresión. Ya que todavía aunque no se lo negara él mismo aún estaba él. Atormentándolo. Quitándole sus sueños, rompiendo su corazón y tirándolo a la basura. Burlándose de todo el tiempo que le dedico. Después de un año algo estaba ahí. Metido en su cerebro, alma, cuerpo y corazón.
"Ese chico te traerá problemas" le había dicho Jun. Pero Nari no había hecho caso, estaba enamorado de absolutamente todo de su ex novio. Odiaba recordar como lo engaño. Como vio que besaba la mano de otro chico igual que él. Como se burló de él, cuando fue a reclamarle. Como observo que subía aquel avión para irse definitivamente de Japón.
Iago Miyagi era un chico seis años mayor que Nari, le había conocido en un casting de un dorama en el cual Nari quería participar. El papel no era necesariamente para él, así que irremediablemente escogieron a Iago.
Después de una semana alguien llamo al móvil de Nari. Era Iago quien le decía que lamentaba mucho haberlo dejado sin un papel en drama, así que como recompensa lo invitaría a cenar y lo recomendaría a varios de sus amigos productores.
Sin esperar un momento Nari dio una respuesta afirmativa a la invitación.
Esa misma noche, enfundado en unos vaqueros azules y una camisa negra elegidas por Jun, Nari ceno y hablo con Iago. Tenían tantas cosas en común, se parecían tanto y descubrieron que ambos amaban jugar videojuegos, esa noche se convertiría en algo que jamás olvidaría.
Recordaría como Iago le había dicho que nunca en su vida se había divertido tanto y que deseaba con todo su corazón volver a tener una cita con él. Y que también anhelaba volver a besar sus labios. Si. Lo había besado dulce y tiernamente casi como un susurro, solo cuando Nari permitió que el beso pasara de nivel. Iago lo había llevado lejos de este mundo con un simple y húmedo beso. Cuando ambos estaban con los ojos brillosos y los labios hinchados, se despidieron con una sonrisa boba y una promesa de otra cita mucho mejor que la otra.
Y efectivamente así fue. Todos los viernes en la noche Iago venía en su convertible rojo y llevaba a Nari a lugares diferentes. En una ocasión lo llevo a la punta de torre de Tokio para ver como caían estrellas fugaces. Cada uno pedio un deseo cerrando los ojos con fuerza. Otra noche de lluvia fueron a una cabaña abandonada y vieron cómo se consumía la pequeña fogata que habían encendido con algo de esfuerzo.
Otra tarde fueron a comer comida marina cerca de un lago. Iago le platico de una historia, sobre una sirena que tenía el cabello de oro. Lamentablemente se enamoró de un horrible pez que era juzgado por su aspecto. La sirena tomo sus largos cabellos y los corto e hizo una larga capa y con ella vistió a su amado. El pez sorprendido de su "belleza" se fue con la capa y dejo a la sirena triste y sola. Las lágrimas que brotaban de aquellos ojos marinos son las perlas que ahora vemos en el mar.
Después de eso ambos se burlaron de la comida y se juraban uno al otro que el sushi que comían era el pez feo.
Luego de dos largos meses llenos de citas y por supuesto besos.
Iago llevo a Nari a su casa. En ella le esperaban una lujosa comida preparada por el anfitrión. Cenaron y charlaron como si fuera si primera cita.
Iago no necesito pedir que Nari se quedara. Nari tomo la iniciativa e inicio aquel juego húmedo con sus lenguas que ansiosas besaban los labios del otro.
Nari recorrió el contorno de la cintura de Iago, lentamente le quito la camisa, sin perder tiempo Iago hizo lo mismo solo que con más agresividad. Pronto ambos ya no tenían pantalones. Y se mecían frotando sus erecciones. Ambos se dirigieron a la habitación y terminaron de hacer lo que habían empezado en la sala.
Con profunda lentitud Nari entro en Iago de una sola estocada. Ambos gimieron con ganas de más, respirando el nombre del otro, juntos llegaron al éxtasis entrelazando sus manos.
Luego se acurrucaron juntos y durmieron como nunca lo habían hecho. Soñaron con su futura vida juntos. Estaban seguros que nadie los separaría. Se amaban y querían hacerlo para el resto de sus vidas.
Pero la mentira termino 1 año después...
Dejando a Nari por supuesto sin ganas de amar a nadie y con esa aura tan triste.
Amar a alguien era imposible para él. ¿Quièn le podía entregar su amor, siendo como era?
********************************************************************
-Estas comiendo bien Sho-kun?
-Si madre.
-¿Tienes trabajo pronto?-
-Si madre.
-¿Te estas abrigando?
-Sii Madre.
-¿Hijo?
-Dime.
-Hijito...¿ ya conseguiste novio?
-No madre aún no.
-Hijo quiero que seas feliz. Quiero verte al lado de una persona que te quiera. Quiero que formes una familia. No importa si no tienes hijos. Por favor se feliz.
-Madre aun yo no quiero nada de eso. Yo estoy bien solo.
-Solo piénsalo ¿Si?. Tengo que colgar tu padre está maldiciendo al tipo de la televisión que conduce al noticiero. Adiós mi SakuSho-
-Adiós Madre.
Su madre estaba insistiendo desde hace 5 años con el mismo tema. Teniendo ya 30 años, aun no tenía pareja estable.
Si había tenido una que otra cita casual, pero casi todos eran iguales. Mirándole la cara, el trasero, su pelvis y sobre todo su dinero. Quería encontrar a alguien que lo quisiera tal como era; sonaba como quinceañera pensando así. Pero era la verdad. ¿Acaso podría encontrar a alguien que lo amara?
Sin pensarlo a su mente vino un recuerdo fugaz vivido hace unos días. Unos ojos caramelo tristes, una nariz pequeña y unos labios delgados adornados con lunares. Y una sonrisa tímida pero a la vez hermosa.
Sonrió al recordar.
-Puede que tengas razón madre- le hablo al aire-Empezare a buscar a alguien cercano a mi entorno.
****************************************************************************************************************************************
-Ya voy en camino, es bueno volver, solo esperame Nari...
To be continued...
Kyaaaaaa!!! okya, hasta yo me emociono, ¿què pasara?, ni yo lo se, pero les digo que esto se pondra interesante.
Iago Miyagi aparecio, ¿Què tal? Yo amo a este personaje, ya que una vez me soñe que alguien parecido a este chico(aun no saben como es, asì que les dejare con la intriga) me llevaba en un pony verde... ok demasiada informaciòn.
Al principio queria poner a otro arasho, pero no cuadraba con la historia que estaba en mi cabeza. Espero que el personaje de Iago se quede en su cabeza, digo ¿no?.
La historia de la sirena tambièn salio de mi cabeza, tengo demasiadas cosas en mi cabeza ¿verdad?. jejejeje
Estoy muy satisfecha con este capitulo. Es muy poco probable que yo me enoje, pero lo hize de verdad, y creo que si me enojo salen las cosas bien.
Espero que hayan disfrutado del fic, a tod@s l@s que leen muchas gracias!
Como siempre estoy dispuesta a recibir sus opiniones con los brazos abiertos
Deja un comentario, si no el pez feo te jalara las patas en la noche
Soy yo Hashira, vengo a compartir el episiodio 3 de este fic *-*
Creo que quedo largo...
Y seguimos conocemos a Nari, un personaje hara apariciòn! Wiii
Si, es el personaje que les dije... ¿Quien creen que sera?
No soy mucho de hacer lime, ( bueno no se como llamarlo, ya que no se escribir lemon), pero hize el intento, me hicieron enojar en mi clase de ingles. Asi que esto salio. Disfrutenlo *-*
Si la inspiraciòn me visita habra cap nuevo para ¡San Valentin!
Douzo...
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-Entonces ¿hiciste esa escena con él? ¿Y no te pusiste nervioso? - Jun sorbió un espagueti- Estoy tan orgulloso. Como crece ¿verdad?-le pregunto a la silla vacía que estaba a su lado.
-Fue un momento que ni yo puede predecir. Fue espontaneo- Nari recordó- Sakurai-san fue muy amable.
-Oh Vaya. ¿Qué es esa mueca? ¿Es una sonrisa?-se burló Jun
Nari se llevó las manos a la cara y noto que de verdad tenia dibujada una sonrisa.
-Puede que sí. No lo sé.
-Me voy a poner celoso, el actorcito ese- Jun hizo un puchero- ¿Es el niño de la laguna?-
-Si es él- Nari recogió los platos y empezó a lavarlos-
-Yo me voy a dormir- anuncio el psicólogo.
-¿No jugaras hoy conmigo?, lo prometiste. "Mañana te daré la revancha", eso dijiste ayer-reclamo Nari.
-Lo sé. Pero necesito dormir temprano, mi primera cita es a las 7:30. Vendrán tres personas, la esposa, el esposo y el amante- hablo Jun- Son unos problemáticos. Son tres horas que estaré con ellos. Lo siento Nari- Jun se inclinó un poco
-Ohhh-Nari suspiro pesadamente-Ve a dormir. Luego me contaras todo. ¿Ok?
-Ok. Hasta mañana pato lodoso-Jun se acercó hacia su amigo y le deposito un beso en la nariz-
-Hasta mañana señorita Diva-
Kazunari estuvo jugando Wii por casi tres horas. Solo cuando ya empezaba a ver borroso. Apago la televisión y se fue a dormir no sin antes revisar que Jun estuviera dormido.
Ahí estaba dormido como una roca otra vez destapado y con la ventana abierta. Se acercó sigilosamente y cerró la ventana con cuidado y también tapo a Jun con otra manta más gruesa.
Aunque no lo quería admitir la presencia de Jun en su pequeño hogar le hacía sentir que no estaba solo. Aún tenía un amigo que lo quería. ¿Porque no cuidar de él?
Decir que estaba solo era solo una expresión. Ya que todavía aunque no se lo negara él mismo aún estaba él. Atormentándolo. Quitándole sus sueños, rompiendo su corazón y tirándolo a la basura. Burlándose de todo el tiempo que le dedico. Después de un año algo estaba ahí. Metido en su cerebro, alma, cuerpo y corazón.
"Ese chico te traerá problemas" le había dicho Jun. Pero Nari no había hecho caso, estaba enamorado de absolutamente todo de su ex novio. Odiaba recordar como lo engaño. Como vio que besaba la mano de otro chico igual que él. Como se burló de él, cuando fue a reclamarle. Como observo que subía aquel avión para irse definitivamente de Japón.
Iago Miyagi era un chico seis años mayor que Nari, le había conocido en un casting de un dorama en el cual Nari quería participar. El papel no era necesariamente para él, así que irremediablemente escogieron a Iago.
Después de una semana alguien llamo al móvil de Nari. Era Iago quien le decía que lamentaba mucho haberlo dejado sin un papel en drama, así que como recompensa lo invitaría a cenar y lo recomendaría a varios de sus amigos productores.
Sin esperar un momento Nari dio una respuesta afirmativa a la invitación.
Esa misma noche, enfundado en unos vaqueros azules y una camisa negra elegidas por Jun, Nari ceno y hablo con Iago. Tenían tantas cosas en común, se parecían tanto y descubrieron que ambos amaban jugar videojuegos, esa noche se convertiría en algo que jamás olvidaría.
Recordaría como Iago le había dicho que nunca en su vida se había divertido tanto y que deseaba con todo su corazón volver a tener una cita con él. Y que también anhelaba volver a besar sus labios. Si. Lo había besado dulce y tiernamente casi como un susurro, solo cuando Nari permitió que el beso pasara de nivel. Iago lo había llevado lejos de este mundo con un simple y húmedo beso. Cuando ambos estaban con los ojos brillosos y los labios hinchados, se despidieron con una sonrisa boba y una promesa de otra cita mucho mejor que la otra.
Y efectivamente así fue. Todos los viernes en la noche Iago venía en su convertible rojo y llevaba a Nari a lugares diferentes. En una ocasión lo llevo a la punta de torre de Tokio para ver como caían estrellas fugaces. Cada uno pedio un deseo cerrando los ojos con fuerza. Otra noche de lluvia fueron a una cabaña abandonada y vieron cómo se consumía la pequeña fogata que habían encendido con algo de esfuerzo.
Otra tarde fueron a comer comida marina cerca de un lago. Iago le platico de una historia, sobre una sirena que tenía el cabello de oro. Lamentablemente se enamoró de un horrible pez que era juzgado por su aspecto. La sirena tomo sus largos cabellos y los corto e hizo una larga capa y con ella vistió a su amado. El pez sorprendido de su "belleza" se fue con la capa y dejo a la sirena triste y sola. Las lágrimas que brotaban de aquellos ojos marinos son las perlas que ahora vemos en el mar.
Después de eso ambos se burlaron de la comida y se juraban uno al otro que el sushi que comían era el pez feo.
Luego de dos largos meses llenos de citas y por supuesto besos.
Iago llevo a Nari a su casa. En ella le esperaban una lujosa comida preparada por el anfitrión. Cenaron y charlaron como si fuera si primera cita.
Iago no necesito pedir que Nari se quedara. Nari tomo la iniciativa e inicio aquel juego húmedo con sus lenguas que ansiosas besaban los labios del otro.
Nari recorrió el contorno de la cintura de Iago, lentamente le quito la camisa, sin perder tiempo Iago hizo lo mismo solo que con más agresividad. Pronto ambos ya no tenían pantalones. Y se mecían frotando sus erecciones. Ambos se dirigieron a la habitación y terminaron de hacer lo que habían empezado en la sala.
Con profunda lentitud Nari entro en Iago de una sola estocada. Ambos gimieron con ganas de más, respirando el nombre del otro, juntos llegaron al éxtasis entrelazando sus manos.
Luego se acurrucaron juntos y durmieron como nunca lo habían hecho. Soñaron con su futura vida juntos. Estaban seguros que nadie los separaría. Se amaban y querían hacerlo para el resto de sus vidas.
Pero la mentira termino 1 año después...
Dejando a Nari por supuesto sin ganas de amar a nadie y con esa aura tan triste.
Amar a alguien era imposible para él. ¿Quièn le podía entregar su amor, siendo como era?
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-Estas comiendo bien Sho-kun?
-Si madre.
-¿Tienes trabajo pronto?-
-Si madre.
-¿Te estas abrigando?
-Sii Madre.
-¿Hijo?
-Dime.
-Hijito...¿ ya conseguiste novio?
-No madre aún no.
-Hijo quiero que seas feliz. Quiero verte al lado de una persona que te quiera. Quiero que formes una familia. No importa si no tienes hijos. Por favor se feliz.
-Madre aun yo no quiero nada de eso. Yo estoy bien solo.
-Solo piénsalo ¿Si?. Tengo que colgar tu padre está maldiciendo al tipo de la televisión que conduce al noticiero. Adiós mi SakuSho-
-Adiós Madre.
Su madre estaba insistiendo desde hace 5 años con el mismo tema. Teniendo ya 30 años, aun no tenía pareja estable.
Si había tenido una que otra cita casual, pero casi todos eran iguales. Mirándole la cara, el trasero, su pelvis y sobre todo su dinero. Quería encontrar a alguien que lo quisiera tal como era; sonaba como quinceañera pensando así. Pero era la verdad. ¿Acaso podría encontrar a alguien que lo amara?
Sin pensarlo a su mente vino un recuerdo fugaz vivido hace unos días. Unos ojos caramelo tristes, una nariz pequeña y unos labios delgados adornados con lunares. Y una sonrisa tímida pero a la vez hermosa.
Sonrió al recordar.
-Puede que tengas razón madre- le hablo al aire-Empezare a buscar a alguien cercano a mi entorno.
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-Ya voy en camino, es bueno volver, solo esperame Nari...
To be continued...
Kyaaaaaa!!! okya, hasta yo me emociono, ¿què pasara?, ni yo lo se, pero les digo que esto se pondra interesante.
Iago Miyagi aparecio, ¿Què tal? Yo amo a este personaje, ya que una vez me soñe que alguien parecido a este chico(aun no saben como es, asì que les dejare con la intriga) me llevaba en un pony verde... ok demasiada informaciòn.
Al principio queria poner a otro arasho, pero no cuadraba con la historia que estaba en mi cabeza. Espero que el personaje de Iago se quede en su cabeza, digo ¿no?.
La historia de la sirena tambièn salio de mi cabeza, tengo demasiadas cosas en mi cabeza ¿verdad?. jejejeje
Estoy muy satisfecha con este capitulo. Es muy poco probable que yo me enoje, pero lo hize de verdad, y creo que si me enojo salen las cosas bien.
Espero que hayan disfrutado del fic, a tod@s l@s que leen muchas gracias!
Como siempre estoy dispuesta a recibir sus opiniones con los brazos abiertos
Deja un comentario, si no el pez feo te jalara las patas en la noche