La medalla [School 2015. Who are you?] Los festivos cómplices
Título: La medalla
Autor: shiorita
Fandom: School 2015. Who are you?
Personaje/Pairing/Grupo: Eun Bi/Yi Ahn
Rating: PG
Resumen: Para Yi Ahn los regalos son promesas que cumplir, pero estas navidades va a tener que improvisar algo porque es la primera vez que la celebra con Eun Bi
Advertencias:
Especial de Navidad: Prompt #13
Nota de Autor:
En la pared del salón de Yi Ahn cuelgan dos medallas: una de bronce sujeta por una cinta azul y blanca, y una de hierro, algo pesada, que está amarrada por una cuerda áspera y amarillenta. Se la dio Tae Kwang, en un día de esos raros que tiene, con un encogimiento de hombros y un gracias casi escupido. Yi Ahn le miró como entendiendo, como queriendo entender... Pero lo cierto es que desde que se resolvió el misterio de Yun Soo In, ha estado diferente. Como más tranquilo, más suave, más ilusionado. No es que haya dejado de dormirse en las clases -excepto en las de matemáticas -, pero ya no termina en el hospital un día sí y otro también.
-¿Con ganas de màs? -Una voz le despierta de su ensimismamiento.
-¿Qué? -Le pregunta Yi Ahn a su padre, que acaba de entrar en casa.
-Mirabas a las medallas y estabas como ausente. ¿Tienes ganas de volver a ganar?
Yi Ahn asiente y su padre le revuelve el pelo mientras le sonríe. Sabe porqué Tae Kwang le dio esa medalla, ese símbolo de hierro con el que agradecerle que se arriesgara a salvar a Eun Bi, aunque fuera a costa de poner sus sueños en peligro. Se ríe para sí mismo y se pregunta cuándo creció tanto Tae Kwang. O, mejor, ¿cuándo dejaron de ser todos unos niños y empezaron a enfretarse sólos a sus miedos?
Sin embargo, si mira la pared de las medallas no es por Tae Kwang, ni porque siga queriendo competir... Sino porque echa en falta una de las que antes estaba allí. Echa de menos una que, a ratos, se arrepiente de haber entregado, pues no está seguro de que vaya a volver a sus manos.
-¿Vas a ir a la fiesta?
-¿Qué?
-Estás completamente ausente, ¿eh?
-Perdona. ¿Qué fiesta decías?
-Ayer llamó Song Mi Gyung, pero tú ya te habías ido a entrenar. Nos han invitado a celebrar la navidad con ellos.
No es que sea una sorpresa, claro; Yi Ahn no recuerda una navidad sin la compañía de Eun Byul. Quizás antes de la muerte de su madre... pero esa época cada vez está más borrosa en su mente. Sin embargo, por alguna razón, sonríe como si fuera un regalo inesperado que, a la vez, llevaba deseando desde hace tiempo.
-¿Has pensado en qué vas a regalarle a Eun Byul? -Le pregunta su padre -. ¿Le gustan los peluches?
A Yi Ahn se le escapa la risa hasta que se da cuenta que faltan dos días para Nochebuena y que no sólo no tiene el regalo para Eun Byul, sino que, además, tiene que buscar algo también para Eun Bi. Y serán gemelas, pero esas dos chicas se parecen lo que un huevo a una castaña. Así que se levanta rápido, y sale disparado de casa, como suele hacerlo cada vez que toma una decisión. Y es que, de pronto, ha visto el regalo perfecto para Eun Bi. No es una medalla de oro, como la que se prometió que un día le regalaría, como la que le dio a Eun Byul y para cuando llegó a sus manos ya no significaba lo que una vez, como aquello que pensó que era lo único que podía ofrecer. Tampoco son esos juguetes antiguos y desfasados con los que jugaba con Eun Byul y que quiere regalarle esta Navidad para que vea que, a pesar del dolor, la ha perdonado. Es algo distinto, sencillo, elegante, con lo que YI Ahn pretende recordarle lo que ya le dijo una vez: que va a esperarla, el tiempo que haga falta, pero que no se olvide de que puede contar con él para lo que necesite.
Autor: shiorita
Fandom: School 2015. Who are you?
Personaje/Pairing/Grupo: Eun Bi/Yi Ahn
Rating: PG
Resumen: Para Yi Ahn los regalos son promesas que cumplir, pero estas navidades va a tener que improvisar algo porque es la primera vez que la celebra con Eun Bi
Advertencias:
Especial de Navidad: Prompt #13
Nota de Autor:
En la pared del salón de Yi Ahn cuelgan dos medallas: una de bronce sujeta por una cinta azul y blanca, y una de hierro, algo pesada, que está amarrada por una cuerda áspera y amarillenta. Se la dio Tae Kwang, en un día de esos raros que tiene, con un encogimiento de hombros y un gracias casi escupido. Yi Ahn le miró como entendiendo, como queriendo entender... Pero lo cierto es que desde que se resolvió el misterio de Yun Soo In, ha estado diferente. Como más tranquilo, más suave, más ilusionado. No es que haya dejado de dormirse en las clases -excepto en las de matemáticas -, pero ya no termina en el hospital un día sí y otro también.
-¿Con ganas de màs? -Una voz le despierta de su ensimismamiento.
-¿Qué? -Le pregunta Yi Ahn a su padre, que acaba de entrar en casa.
-Mirabas a las medallas y estabas como ausente. ¿Tienes ganas de volver a ganar?
Yi Ahn asiente y su padre le revuelve el pelo mientras le sonríe. Sabe porqué Tae Kwang le dio esa medalla, ese símbolo de hierro con el que agradecerle que se arriesgara a salvar a Eun Bi, aunque fuera a costa de poner sus sueños en peligro. Se ríe para sí mismo y se pregunta cuándo creció tanto Tae Kwang. O, mejor, ¿cuándo dejaron de ser todos unos niños y empezaron a enfretarse sólos a sus miedos?
Sin embargo, si mira la pared de las medallas no es por Tae Kwang, ni porque siga queriendo competir... Sino porque echa en falta una de las que antes estaba allí. Echa de menos una que, a ratos, se arrepiente de haber entregado, pues no está seguro de que vaya a volver a sus manos.
-¿Vas a ir a la fiesta?
-¿Qué?
-Estás completamente ausente, ¿eh?
-Perdona. ¿Qué fiesta decías?
-Ayer llamó Song Mi Gyung, pero tú ya te habías ido a entrenar. Nos han invitado a celebrar la navidad con ellos.
No es que sea una sorpresa, claro; Yi Ahn no recuerda una navidad sin la compañía de Eun Byul. Quizás antes de la muerte de su madre... pero esa época cada vez está más borrosa en su mente. Sin embargo, por alguna razón, sonríe como si fuera un regalo inesperado que, a la vez, llevaba deseando desde hace tiempo.
-¿Has pensado en qué vas a regalarle a Eun Byul? -Le pregunta su padre -. ¿Le gustan los peluches?
A Yi Ahn se le escapa la risa hasta que se da cuenta que faltan dos días para Nochebuena y que no sólo no tiene el regalo para Eun Byul, sino que, además, tiene que buscar algo también para Eun Bi. Y serán gemelas, pero esas dos chicas se parecen lo que un huevo a una castaña. Así que se levanta rápido, y sale disparado de casa, como suele hacerlo cada vez que toma una decisión. Y es que, de pronto, ha visto el regalo perfecto para Eun Bi. No es una medalla de oro, como la que se prometió que un día le regalaría, como la que le dio a Eun Byul y para cuando llegó a sus manos ya no significaba lo que una vez, como aquello que pensó que era lo único que podía ofrecer. Tampoco son esos juguetes antiguos y desfasados con los que jugaba con Eun Byul y que quiere regalarle esta Navidad para que vea que, a pesar del dolor, la ha perdonado. Es algo distinto, sencillo, elegante, con lo que YI Ahn pretende recordarle lo que ya le dijo una vez: que va a esperarla, el tiempo que haga falta, pero que no se olvide de que puede contar con él para lo que necesite.