El lugar más hermoso 2/7 [QaF] C'est la vie
Título: El lugar más hermoso 2/7
Autor: begok
Fandom: Queer as Folk
Personaje/Pairing/Grupo: Brian Kinney/Justin Taylor
Rating: NC-17
Resumen: En una no-relación siempre hay momentos que marcan el presente y el futuro
Advertencias: Situado en la S1, la primera noche de Justin en el loft
Nota de Autor: Cada uno de los momentos está situado en una temporada
El lugar más hermoso 2/7
No puede evitar reírse cuando Brian se levanta de la cama y comienza a hacer malabares en mitad del salón. Brian está desnudo y no puede evitar empalmarse ante la hermosura del hombre que ha hecho que hasta sus fantasías más locas parezcan juego de niños comparadas con la realidad.
Masculla su nombre y sonríe y Brian, ese hermoso hombre que está poniendo patas arriba su loft, se gira para mirarle, como si algo hubiera captado su atención. Desnudo en mitad de la estancia, el hombre le mira con la ceja arqueada, sonriendo de medio lado cuando nota el abultamiento bajo la sábana a la altura de su entrepierna.
Nunca ha visto una sonrisa así en su vida. Tiene algo de felina, una pizca de peligrosa y mucho de excitante y su cuerpo reacciona haciendo que los ojos verdes se oscurezcan.
- ¿No has tenido suficiente?
A Justin se le seca la boca en cuanto escucha ese tono ronco y sensual de Brian, que comienza a caminar hacia la cama con una elegancia impropia de alguien que está tan colocado.
Intenta no parecer el adolescente asustado que es cuando Brian sube a la cama, dándole una increíble visión de su hermoso cuerpo… y de su cada vez más hinchada polla. Con una patada Brian aparta la sábana, dejándole expuesto.
- Veremos qué has aprendido y qué estás dispuesto a aprender de ahora en adelante.
Brian separa sus piernas y se arrodilla entre sus muslos, sonriendo de medio lado cuando se inclina y pone su rostro a tan solo unos centímetros del de Justin. Tiene tantas ganas de besarle que le queman los labios por la necesidad de hacerlo, pero algo le dice que a Brian no le gustaría, así que contiene la respiración, esperando que Brian se apiade de él y le dé lo que desea.
Pero en lugar de eso, Brian roza su nariz con la suya y le dedica una sonrisa depredadora que le hace estremecerse antes de levantar sus piernas para poder colocar una de las almohadas bajo sus caderas. Justin se lame los labios, anticipándose, hasta el momento todo lo que le ha hecho ha sido jodidamente caliente. Cuando Brian se inclina para besarle, todo su cuerpo se agita de puro placer incluso antes de que sus labios se rocen.
Es cierto que no ha besado a ningún hombre antes y las besos con las chicas no pasarán precisamente a los anales de la historia por ser especialmente buenos, más bien todo lo contrario, pero está seguro de no equivocarse si dice que Brian es un puto genio besando.
Brian le besa de un modo lascivo, haciéndole empalmarse aún más, pero a la vez es un beso suave, urgente pero lento y Justin no puede evitar derretirse entre sus brazos, entregándose como si fuera el último día de su vida… o el primero.
Gime cuando Brian desaparece entre sus piernas y siente el primer lengüetazo sobre su erección, tiene que aferrarse a las sábanas con todas sus fuerzas, intentando no volver a quedar en evidencia esa noche. A pesar de todas las madrugadas que ha fantaseado con algo así, de la cantidad de veces que se ha masturbado pensando en ello… nada le ha preparado para la realidad, para tener al hombre más sexy del mundo entre sus muslos haciéndole una mamada tan impresionante que teme que en cualquier momento se le va a fundir el cerebro y se le va a parar el corazón.
Cierra los ojos y respira hondo cuando Brian engulle su polla de una vez, haciéndole sentir cosas que jamás había sentido antes. Es intenso, es abrumador y es increíble. Apenas puede controlar sus reacciones cuando el primer dedo de Brian comienza a adentrarse en su culo. Definitivamente no va a tardar mucho en correrse como siga así y no es que tenga ninguna intención de pedirle que pare de hacerlo.
Cuando los dedos de sus pies comienzan a curvarse, se obliga a abrir los ojos y tirar del pelo castaño de Brian, que le devuelve una mirada desenfocada y oscura.
- Voy a… -la voz le sale estrangulada.
- Si no, no estaría haciendo un buen trabajo -la sonrisa glotona de Brian le hace jadear.
Ni siquiera se plantea resistirse cuando las primeras oleadas del orgasmo le llegan tras un nuevo lametón de Brian. Su cuerpo se sacude con los espasmos, la cabeza le da vueltas y el corazón le golpea en el pecho hasta dolerle mientras observa a Brian limpiándole como si fuera un helado.
Se permite cerrar los ojos unos segundos, lo que tarda Brian en incorporarse y cubrir su cuerpo con el suyo. Cuando le mira, se le atasca el aliento en la garganta porque jamás ha visto a un hombre tan hermoso.
- Espero que hayas tomado buena nota porque algún día tendrás que demostrarme lo que has aprendido.
Tal vez porque aún no sabe quién es Brian Kinney, tal vez porque después de un intenso orgasmo su cerebro es incapaz de entender nada o porque la anticipación de otro polvo memorable no le permite escuchar nada más allá del sonido del envoltorio del condón al romperse, Justin no llega a captar la importancia de las palabras del semental que no repite con un hombre.
Espero que os guste.
Autor: begok
Fandom: Queer as Folk
Personaje/Pairing/Grupo: Brian Kinney/Justin Taylor
Rating: NC-17
Resumen: En una no-relación siempre hay momentos que marcan el presente y el futuro
Advertencias: Situado en la S1, la primera noche de Justin en el loft
Nota de Autor: Cada uno de los momentos está situado en una temporada
El lugar más hermoso 2/7
No puede evitar reírse cuando Brian se levanta de la cama y comienza a hacer malabares en mitad del salón. Brian está desnudo y no puede evitar empalmarse ante la hermosura del hombre que ha hecho que hasta sus fantasías más locas parezcan juego de niños comparadas con la realidad.
Masculla su nombre y sonríe y Brian, ese hermoso hombre que está poniendo patas arriba su loft, se gira para mirarle, como si algo hubiera captado su atención. Desnudo en mitad de la estancia, el hombre le mira con la ceja arqueada, sonriendo de medio lado cuando nota el abultamiento bajo la sábana a la altura de su entrepierna.
Nunca ha visto una sonrisa así en su vida. Tiene algo de felina, una pizca de peligrosa y mucho de excitante y su cuerpo reacciona haciendo que los ojos verdes se oscurezcan.
- ¿No has tenido suficiente?
A Justin se le seca la boca en cuanto escucha ese tono ronco y sensual de Brian, que comienza a caminar hacia la cama con una elegancia impropia de alguien que está tan colocado.
Intenta no parecer el adolescente asustado que es cuando Brian sube a la cama, dándole una increíble visión de su hermoso cuerpo… y de su cada vez más hinchada polla. Con una patada Brian aparta la sábana, dejándole expuesto.
- Veremos qué has aprendido y qué estás dispuesto a aprender de ahora en adelante.
Brian separa sus piernas y se arrodilla entre sus muslos, sonriendo de medio lado cuando se inclina y pone su rostro a tan solo unos centímetros del de Justin. Tiene tantas ganas de besarle que le queman los labios por la necesidad de hacerlo, pero algo le dice que a Brian no le gustaría, así que contiene la respiración, esperando que Brian se apiade de él y le dé lo que desea.
Pero en lugar de eso, Brian roza su nariz con la suya y le dedica una sonrisa depredadora que le hace estremecerse antes de levantar sus piernas para poder colocar una de las almohadas bajo sus caderas. Justin se lame los labios, anticipándose, hasta el momento todo lo que le ha hecho ha sido jodidamente caliente. Cuando Brian se inclina para besarle, todo su cuerpo se agita de puro placer incluso antes de que sus labios se rocen.
Es cierto que no ha besado a ningún hombre antes y las besos con las chicas no pasarán precisamente a los anales de la historia por ser especialmente buenos, más bien todo lo contrario, pero está seguro de no equivocarse si dice que Brian es un puto genio besando.
Brian le besa de un modo lascivo, haciéndole empalmarse aún más, pero a la vez es un beso suave, urgente pero lento y Justin no puede evitar derretirse entre sus brazos, entregándose como si fuera el último día de su vida… o el primero.
Gime cuando Brian desaparece entre sus piernas y siente el primer lengüetazo sobre su erección, tiene que aferrarse a las sábanas con todas sus fuerzas, intentando no volver a quedar en evidencia esa noche. A pesar de todas las madrugadas que ha fantaseado con algo así, de la cantidad de veces que se ha masturbado pensando en ello… nada le ha preparado para la realidad, para tener al hombre más sexy del mundo entre sus muslos haciéndole una mamada tan impresionante que teme que en cualquier momento se le va a fundir el cerebro y se le va a parar el corazón.
Cierra los ojos y respira hondo cuando Brian engulle su polla de una vez, haciéndole sentir cosas que jamás había sentido antes. Es intenso, es abrumador y es increíble. Apenas puede controlar sus reacciones cuando el primer dedo de Brian comienza a adentrarse en su culo. Definitivamente no va a tardar mucho en correrse como siga así y no es que tenga ninguna intención de pedirle que pare de hacerlo.
Cuando los dedos de sus pies comienzan a curvarse, se obliga a abrir los ojos y tirar del pelo castaño de Brian, que le devuelve una mirada desenfocada y oscura.
- Voy a… -la voz le sale estrangulada.
- Si no, no estaría haciendo un buen trabajo -la sonrisa glotona de Brian le hace jadear.
Ni siquiera se plantea resistirse cuando las primeras oleadas del orgasmo le llegan tras un nuevo lametón de Brian. Su cuerpo se sacude con los espasmos, la cabeza le da vueltas y el corazón le golpea en el pecho hasta dolerle mientras observa a Brian limpiándole como si fuera un helado.
Se permite cerrar los ojos unos segundos, lo que tarda Brian en incorporarse y cubrir su cuerpo con el suyo. Cuando le mira, se le atasca el aliento en la garganta porque jamás ha visto a un hombre tan hermoso.
- Espero que hayas tomado buena nota porque algún día tendrás que demostrarme lo que has aprendido.
Tal vez porque aún no sabe quién es Brian Kinney, tal vez porque después de un intenso orgasmo su cerebro es incapaz de entender nada o porque la anticipación de otro polvo memorable no le permite escuchar nada más allá del sonido del envoltorio del condón al romperse, Justin no llega a captar la importancia de las palabras del semental que no repite con un hombre.
Espero que os guste.