Galletas de jengibre [Queer as Folk] - 022
Título: Galletas de jengibre
Autor: begok
Fandom: Queer as Folk.
Desafío: #22 - Turrón
Pairing o Personaje o Grupo: Brian Kinney / Justin Taylor + Gus
Rating: PG
Resumen: Hay olores que nos traen recuerdos
Advertencias: Post 5x13
Feedbacks: Se agradecen
Notas de Autor:
Tabla: Tabla
Galletas de jengibre
Cuando Brian se despierta, estira el brazo para buscar el cálido cuerpo de Justin, pero lo que encuentra es vacío, así que abre los ojos y busca a su compañero por la habitación, pero no hay ni rastro y se deja caer de nuevo en la cama, gruñendo porque mataría por una buena mamada matutina.
Y entonces lo siente.
Arruga la nariz y abre los ojos, incorporándose lentamente para intentar saber a qué huele. El recuerdo de sus primeras vacaciones en la casa de los Novotny le hace sonreír. Hasta ese momento Brian no supo lo que era celebrar la Navidad.
El aroma a jengibre y nuez moscada se extiende por la casa y sonríe recordando los insistentes intentos de Gus por comer las galletas de la abuela Deb. No le cuesta lo más mínimo imaginar que su hijo ha acabado convenciendo a Justin para hacerlas.
Se viste rápidamente con unos vaqueros viejos y una camiseta, agradeciendo que las chicas hayan educado bien a Gus y no tenga que preocuparse por pisar uno de sus juguetes cuando camina descalzo.
Escucha la risa de Gus desde las escaleras y sonríe, apoyándose en el quicio de la puerta cuando finalmente alcanza la cocina. Permanece allí unos minutos, observando cómo Justin amasa mientras Gus se encarga de seleccionar los cortadores que usarán en la siguiente tanda.
Carraspea para hacerse notar, aunque Brian está convencido de que Justin ha notado su presencia mucho tiempo antes. Gus corre a su encuentro y le abraza por la cintura, dejándole manchas de harina y restos de una sustancia pegajosa sobre la camiseta a la altura del abdomen.
- Esperaba que tardaras un poco más en despertarte. La primera hornada casi está lista -Justin habla por encima del hombro, sin dejar de cortar la masa con uno de los cortadores que Gus ha elegido.
Le revuelve el pelo a Gus después de darle un beso en la frente y camina hacia Justin, doblando las rodillas para colocarse a su altura mientras le obliga a darse la vuelta. Con calma, saboreándole como más le gusta, Brian besa a Justin, separándole los labios con la lengua mientras ignora los ruidos de desagrado de Gus.
- Buenos días -Brian susurra las palabras contra los labios de Justin.
- Buenos días -los ojos de Justin brillan cuando le sonríe.
Se acerca a la cafetera y la pone en marcha, anticipándose al amargo sabor deslizándose por su garganta, cuando escucha a Justin chasqueando la lengua. Le fulmina con la mirada esperando una contestación, pero su compañero ni se molesta en darle una explicación, se limita a ponerle una humeante taza de chocolate sobre la encimera y señalarle el taburete que hay junto al que ahora ocupa Gus, que mira fijamente el horno.
Con movimientos aparente despreocupados, aunque Brian puede percibir como contonea el culo más de lo estrictamente necesario, Justin saca la bandeja del horno y deja las galletas sobre una reja para que se enfríen más rápido antes de sentarse frente a Brian, con su propia taza de chocolate.
- No puedes tomar café con galletas de jengibre, Brian. Sería un sacrilegio -finalmente Justin se digna a explicar por qué demonios Brian está tomando un chocolate en lugar de su dosis diaria, y necesaria, de cafeína.
Justin le dedica una de sus sonrisas radiantes, ésa con la que consigue todo lo que se propone. Está a punto de replicarle con algún exabrupto cuando en su campo de visión aparece la mano de Gus intentando alcanzar una de las galletas y su mal humor se esfuma más rápido de lo que ha aparecido.
Le da un sorbo a su chocolate caliente y especiado, como a Justin le gusta prepararlo, y sonríe cuando Gus deja una de las galletas junto a su mano mientras murmurando su aprobación mientras engulle media galleta de un bocado.
Cuando Brian vuelve a mirar a Justin, que les observa con una sonrisa, piensa que puede vivir un día sin cafeína… o al menos lo suficiente para hacer feliz a sus chicos.
Espero que os guste.
Autor: begok
Fandom: Queer as Folk.
Desafío: #22 - Turrón
Pairing o Personaje o Grupo: Brian Kinney / Justin Taylor + Gus
Rating: PG
Resumen: Hay olores que nos traen recuerdos
Advertencias: Post 5x13
Feedbacks: Se agradecen
Notas de Autor:
Tabla: Tabla
Galletas de jengibre
Cuando Brian se despierta, estira el brazo para buscar el cálido cuerpo de Justin, pero lo que encuentra es vacío, así que abre los ojos y busca a su compañero por la habitación, pero no hay ni rastro y se deja caer de nuevo en la cama, gruñendo porque mataría por una buena mamada matutina.
Y entonces lo siente.
Arruga la nariz y abre los ojos, incorporándose lentamente para intentar saber a qué huele. El recuerdo de sus primeras vacaciones en la casa de los Novotny le hace sonreír. Hasta ese momento Brian no supo lo que era celebrar la Navidad.
El aroma a jengibre y nuez moscada se extiende por la casa y sonríe recordando los insistentes intentos de Gus por comer las galletas de la abuela Deb. No le cuesta lo más mínimo imaginar que su hijo ha acabado convenciendo a Justin para hacerlas.
Se viste rápidamente con unos vaqueros viejos y una camiseta, agradeciendo que las chicas hayan educado bien a Gus y no tenga que preocuparse por pisar uno de sus juguetes cuando camina descalzo.
Escucha la risa de Gus desde las escaleras y sonríe, apoyándose en el quicio de la puerta cuando finalmente alcanza la cocina. Permanece allí unos minutos, observando cómo Justin amasa mientras Gus se encarga de seleccionar los cortadores que usarán en la siguiente tanda.
Carraspea para hacerse notar, aunque Brian está convencido de que Justin ha notado su presencia mucho tiempo antes. Gus corre a su encuentro y le abraza por la cintura, dejándole manchas de harina y restos de una sustancia pegajosa sobre la camiseta a la altura del abdomen.
- Esperaba que tardaras un poco más en despertarte. La primera hornada casi está lista -Justin habla por encima del hombro, sin dejar de cortar la masa con uno de los cortadores que Gus ha elegido.
Le revuelve el pelo a Gus después de darle un beso en la frente y camina hacia Justin, doblando las rodillas para colocarse a su altura mientras le obliga a darse la vuelta. Con calma, saboreándole como más le gusta, Brian besa a Justin, separándole los labios con la lengua mientras ignora los ruidos de desagrado de Gus.
- Buenos días -Brian susurra las palabras contra los labios de Justin.
- Buenos días -los ojos de Justin brillan cuando le sonríe.
Se acerca a la cafetera y la pone en marcha, anticipándose al amargo sabor deslizándose por su garganta, cuando escucha a Justin chasqueando la lengua. Le fulmina con la mirada esperando una contestación, pero su compañero ni se molesta en darle una explicación, se limita a ponerle una humeante taza de chocolate sobre la encimera y señalarle el taburete que hay junto al que ahora ocupa Gus, que mira fijamente el horno.
Con movimientos aparente despreocupados, aunque Brian puede percibir como contonea el culo más de lo estrictamente necesario, Justin saca la bandeja del horno y deja las galletas sobre una reja para que se enfríen más rápido antes de sentarse frente a Brian, con su propia taza de chocolate.
- No puedes tomar café con galletas de jengibre, Brian. Sería un sacrilegio -finalmente Justin se digna a explicar por qué demonios Brian está tomando un chocolate en lugar de su dosis diaria, y necesaria, de cafeína.
Justin le dedica una de sus sonrisas radiantes, ésa con la que consigue todo lo que se propone. Está a punto de replicarle con algún exabrupto cuando en su campo de visión aparece la mano de Gus intentando alcanzar una de las galletas y su mal humor se esfuma más rápido de lo que ha aparecido.
Le da un sorbo a su chocolate caliente y especiado, como a Justin le gusta prepararlo, y sonríe cuando Gus deja una de las galletas junto a su mano mientras murmurando su aprobación mientras engulle media galleta de un bocado.
Cuando Brian vuelve a mirar a Justin, que les observa con una sonrisa, piensa que puede vivir un día sin cafeína… o al menos lo suficiente para hacer feliz a sus chicos.
Espero que os guste.