En la comunidad intentamos crear un cuadro comparativo entre dos famosos sistemas de rating usados por el fandom a lo largo de los años con la intención de guiar a todos los usuarios al momento de publicar y también al momento de buscar historias. Si uno está acostumbrado a leer bajo una clasificación y encuentra una historia clasificada con otro sistema en este sitio, podía pasar de ella, confundirse o no tener la menor idea de lo que está a punto de leer con el riesgo de encontrarse en la mitad de la lectura con temas que para su edad, experiencia o modo de vida necesiten una orientación. Como sabemos, los enfoques que se dan en los temas que tratamos al escribir son distintos como seremos humanos hay, incluso arriesgaría a decir que en el fanfiction específicamente muchos son explorados o intensificados más allá de lo que la propia serie, film, comic o libro trata. Así que ante todo quisimos ayudar a grandes rasgos para que estas situaciones se den lo menos posible.
Me pareció importante aclararlo para entender de donde partimos cuando llegamos aquí con esta idea ya que los límites de las clasificaciones no son tan determinantes incluso teniendo clasificaciones estándar en el mundo.
El sistema de ff.net lo crea una parte del fandom tratando de responder a las necesidades que los autores tenían al clasificar. Se nutre aún así casi todo del MPAA. Como se sabe gran parte del fandom tomó el sistema MPAA para clasificar sus fanfics porque es el sistema usado para clasificar films dentro del cine y productos para la TV. Si bien cada país suele tener variaciones en la clasificación que pueden determinar que una película/serie sea clasificada de un modo diferente según donde se distribuya; tal vez te resulte más fácil comprender la clasificación si se traslada a su origen, es decir, a la práctica. Saber qué clasificación se les ha dado a las series que más nos gustan o aquellas películas que hemos visto podría darnos una mano si tenemos dudas. Si a una serie se le dio el rating de PG-13, nos ayudaría pensar cómo mostró en su momento estos temas de los que uno quiere escribir.
En cualquier caso lo que hay que comprender primero es que el fandom es por excelencia plural, una de las cosas que más amo de él es que no tiene frontera. Dentro conviven diferentes culturas, personas de diferentes nacionalidades con diferentes religiones, costumbres, ideologías, idiomas, preferencias sexuales, etc y con edades de toda índole. Si a todo esto se le suma que cada persona es un individuo único con un cúmulo de experiencias vividas, las posibilidades son infinitas en internet y está claro que nadie a ciencia cierta sabe quién podría leernos. El fandom al escribir fanfics necesitaba nutrirse de alguna clasificación general (no siempre con éxito) en un intento de no sólo proteger al autor sino de guiar o prevenir a los lectores de todas estas partes del mundo sobre los contenidos de esas historias, en especial la necesidad de proteger los menores de edad que en los tiempos que corren por internet son grupos enormes. Tener esta idea presente nos vuelve más precavidos, al momento de publicar puede también ayudarte entender que no sólo nuestros amigos podrían leer nuestro relato sino aquella persona que menos esperemos en un pueblito a miles de km de donde vivimos con una historia de vida totalmente distinta a la nuestra. Ser consciente de ello nos ayuda para mí a tener presente que al clasificar lo que escribimos, el fin es informar al otro lo mejor que podamos pero el principal es no perjudicarlo.
Estas son razones por la que los parámetros que se toman para elegir una clasificación y otra, como mencioné antes, no tienen límites estrictos y fáciles de reconocer. Tenemos lo estándar, útil como guía, pero los límites pueden ser débiles y nuestra experiencia tanto en la vida como el conocimiento sobre nuestras series, comic, libros o films preferidos de los que escribimos, ayudan a veces más a sacarnos de las dudas. Una secuencia de planos en una película podría determinar que un rating cambie, del mismo modo, un solo capítulo dentro de cuarenta capítulos de un longfic, podría determinar la necesidad de advertir en un encabezado a los lectores sobre lo que ocurre en él o cambiar directamente la clasificación a una mayor.
Me pareció importante aclararlo para entender de donde partimos cuando llegamos aquí con esta idea ya que los límites de las clasificaciones no son tan determinantes incluso teniendo clasificaciones estándar en el mundo.
El sistema de ff.net lo crea una parte del fandom tratando de responder a las necesidades que los autores tenían al clasificar. Se nutre aún así casi todo del MPAA. Como se sabe gran parte del fandom tomó el sistema MPAA para clasificar sus fanfics porque es el sistema usado para clasificar films dentro del cine y productos para la TV. Si bien cada país suele tener variaciones en la clasificación que pueden determinar que una película/serie sea clasificada de un modo diferente según donde se distribuya; tal vez te resulte más fácil comprender la clasificación si se traslada a su origen, es decir, a la práctica. Saber qué clasificación se les ha dado a las series que más nos gustan o aquellas películas que hemos visto podría darnos una mano si tenemos dudas. Si a una serie se le dio el rating de PG-13, nos ayudaría pensar cómo mostró en su momento estos temas de los que uno quiere escribir.
En cualquier caso lo que hay que comprender primero es que el fandom es por excelencia plural, una de las cosas que más amo de él es que no tiene frontera. Dentro conviven diferentes culturas, personas de diferentes nacionalidades con diferentes religiones, costumbres, ideologías, idiomas, preferencias sexuales, etc y con edades de toda índole. Si a todo esto se le suma que cada persona es un individuo único con un cúmulo de experiencias vividas, las posibilidades son infinitas en internet y está claro que nadie a ciencia cierta sabe quién podría leernos. El fandom al escribir fanfics necesitaba nutrirse de alguna clasificación general (no siempre con éxito) en un intento de no sólo proteger al autor sino de guiar o prevenir a los lectores de todas estas partes del mundo sobre los contenidos de esas historias, en especial la necesidad de proteger los menores de edad que en los tiempos que corren por internet son grupos enormes. Tener esta idea presente nos vuelve más precavidos, al momento de publicar puede también ayudarte entender que no sólo nuestros amigos podrían leer nuestro relato sino aquella persona que menos esperemos en un pueblito a miles de km de donde vivimos con una historia de vida totalmente distinta a la nuestra. Ser consciente de ello nos ayuda para mí a tener presente que al clasificar lo que escribimos, el fin es informar al otro lo mejor que podamos pero el principal es no perjudicarlo.
Estas son razones por la que los parámetros que se toman para elegir una clasificación y otra, como mencioné antes, no tienen límites estrictos y fáciles de reconocer. Tenemos lo estándar, útil como guía, pero los límites pueden ser débiles y nuestra experiencia tanto en la vida como el conocimiento sobre nuestras series, comic, libros o films preferidos de los que escribimos, ayudan a veces más a sacarnos de las dudas. Una secuencia de planos en una película podría determinar que un rating cambie, del mismo modo, un solo capítulo dentro de cuarenta capítulos de un longfic, podría determinar la necesidad de advertir en un encabezado a los lectores sobre lo que ocurre en él o cambiar directamente la clasificación a una mayor.
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