Titulo: Memorias de Jersey
Autor: eminahinata
Fandom: Hawaii Five-0
Palabras: 1,113
Pareja: Ilyan Wolfe/Daniel Williams
Advertencia: Slash, Personajes Originales, ligero crossover, un poco AU.
Universo: ----
Dedicatoria: A Yvarlcris, quien ha pedido sobre Danny antes del canon y con mi personaje original: Ilyan Wolfe.
Disclaimer: Hawaii Five-0 y sus personajes no me pertenecen, son propiedad de K/O Paper Products y 101st Street Television en asociación con
CBS Productions. Este fic se hace sin fines de lucrar, ¿vale? Si fueran míos, Danno y Steve estarían juntos desde hace mucho tiempo de forma definida y no sólo por el condenado y maravilloso subtexto. ¿Qué? ¡Se vale soñar!
Resumen: Hay situaciones que marcan una amistad. Y otras que marcan algo más grande. AU.
Notas de Autor: ¡Hola! Bueno, antes que nada, aclarar ciertas cosas: En mi verso Costellano los sucesos de la tercera temporada de Torchwood ocurrieron de otra forma, por lo que todos ahí se encuentran vivos (Ianto, Tosh, Owen) y sigue siendo Torchwood. Ésta memoria no es de ese verso, por lo que Ianto murió (para gran tristeza mía). Sólo para aclarar.
Ahora: ¡ya ha llegado el final! Quería agradecer a todas las personas que lo leyeron y especialmente a
yvarlcris,
destielwinchi y
lea1santome que siempre estuvieron ahí para animarme con sus adorables comentarios. ¡Muchas gracias!
Ésta es la última memoria y sólo queda la memoria epilogo. Saben que sus comentarios son siempre bienvenidos y sin más que agregar, ¡a leer!
.
Memoria Treinta
By: eminahinata
.
Ilyan Wolfe, de treinta y tres años, veía con tristeza como su mejor amigo se aferraba a Deian y Naomi con desesperación, como si fueran sus salvavidas en ese preciso momento.
Las cosas desde el divorcio de Danny no habían ido muy bien, especialmente luego de que Rachel se casara con Stan Edwards y que los problemas con la custodia de Grace fueran un tema da cada día. Danny estaba destrozado y gracias a eso había cambiado de forma notoria en su comportamiento, siendo más cortante y sarcástico que antes, una actitud más voluble a la que podía recordar y las ojeras que persistían bajo los ojos del rubio.
No estaba mal, pensaba. De esa forma seria más difícil que alguien pudiera lastimar de nueva cuenta al detective, pero no podía entristecerse por lo mismo.
Y Danny tampoco era el único afectado. También lo eran sus hijos.
Por mucho tiempo ambos niños vieron a Rachel como la figura materna que nunca tuvieron la oportunidad de conocer y muchas de las cosas que se necesitaba explicar a la niña fueron dadas por Rachel, por lo que Naomi tenía un gran cariño a la mujer británica. Ahora el corazón de sus hijos, especialmente Naomi, se encontraba roto por lo que había sucedido en el último año y algunos meses.
Temía que con esto su hija se cerrara y no le permitiera el paso a nadie más que no fuera la familia cercana.
En la familia también era un lio. Ianto había muerto en agosto y desde entonces todo era caos. Su hermano había tenido problemas en su trabajo gracias a lo mismo y si no fuera por Rick y Audrey, quienes vivían también en Miami gracias al trabajo de Rick, es probable que su hermanito hubiera cometido una locura. Ianto y Ryan estaban muy unidos, tanto como lo eran él y Danny, y era eso lo que había causado una gran depresión en su hermano.
Sus tíos también estaban dolidos. Todos estaban dolidos. Y Danny no pudo evitar derrumbarse luego del funeral en donde también estuvieron el Capitán Harkness, amante de Ianto, y la Policía Cooper junto con su marido Rhys Williams. También estuvieron Rhiannon y su familia en el lugar y era triste que la forma en que se reunieron fuera por tal razón.
Y ahora… ahora Danny se mudaría hasta una isla en el pacifico para seguir a Grace, ya que Rachel y su nuevo marido rico se mudaban a Hawaii para que Edwards abriera un hotel alá. Y Danny los iba a seguir, porque era Grace y eso justificaba todo.
Naomi no lo había tomado bien y se había encerrado en su habitación durante todo el día luego de que se les diera la noticia. Deian lo había tomado con más calma y sólo se había sentado en todo momento en el salón, viendo a la televisión sin realmente verla.
Danny había llorado. Los dos habían llorado, pero él entendía. Él haría lo mismo por sus hijos.
Ahora él se encontraba en el umbral que daba de la cocina al salón, viendo a tres de las cuatro personas más importantes en su vida abrazándose y llorando en silencio, queriendo aprovechar los últimos momentos de su cercanía. Deian apoyaba su cabeza en el hombro de Danny mientras que Naomi descansaba la cabeza en el pecho del rubio, ambos niños siendo rodeados por los brazos fuertes del detective.
Se apartó y los dejó a solas.
Ellos necesitaban ese tiempo sin ninguna interrupción.
----
Daniel Williams, de treinta y tres años, suspiró y vio con melancolía a todas las personas que lo rodeaban en ese momento.
Todos se encontraban en el aeropuerto de Newark, a finales de noviembre, despidiéndose de él con entusiasmo y deseándole suerte en su nuevo trabajo.
Julio lo abrazó y prometía comportarse con una sonrisa un poco tensa, haciendo el mayor de sus esfuerzos para no llorar como lo hacía Samantha tras ellos siendo abrazada por Emily que no podía ocultar su tristeza. Stuart y Liam también se encontraban ahí, haciendo un pequeño espacio en su apretada agenda, ambos siempre ofreciéndole cualquier ayuda y deseando lo mejor y saludos a la pequeña Grace.
Rebeca y Chris se encontraban de pie al lado de Ilyan, claramente molestos pero sabiendo que no se podía hacer nada. Casey era la más resentida de todos ellos, pero aun así se encontraba al lado de sus padres para despedir a su hermano mayor. Por una vez su padre se comportaba y no hacia el intento de encerrarlo en una torre (como cada vez que se le presentaba la oportunidad), animando a todos y abrazando protectoramente a su madre que lloraba en su hombro.
Kevin y su familia, Robert y Diana, se encontraban también ahí, Donna no pudiendo asistir al encontrarse internada en el hospital pero aun así deseándole lo mejor en el viaje.
En fin, todos se encontraban ahí para despedirse y ver por última vez en un largo tiempo a una de las personas que querían. Y eso calentaba su corazón. Porque él siempre tendría a donde regresar.
−“Pasajeros al vuelo a destino Honolulu, por favor presentarse en la puerta correspondiente. Pasajeros al vuelo a destino Honolulu, por favor presentarse a la puerta correspondiente”.
−Bueno… −suspiró, dándole a todos una sonrisa trémula−, es hora de irme. Lo llamare cuando aterrice, ¿vale? -dijo a sus padres, abrazándolos un poco más.
Hizo un gesto al resto antes de dar media vuelta y empezar el camino hasta equipaje.
−¡Tad! -gritó alguien tras él reconociendo la voz y deteniéndose para permitir que la niña lo alcanzara.
−Nena… −susurró Danny. Ella simplemente le extendió una pequeña caja envuelta en papel decorativo y con vacilación la tomo en sus manos. Momentos después Deian e Ilyan se encontraban a su lado, formando un pequeño círculo.
−Es de parte mía y Nao -susurró Deian con un adorable sonrojo en sus mejillas. Danny sonrió con mucho cariño y abrió con suavidad el obsequio hasta revelar una corbata negra con rayas grises en ella.
Él sonrió con los ojos nublados y en un movimiento abrazo a los dos niños.
−Yo siempre voy a estar ahí, ¿vale? Cuando ustedes se estén preparando para ir a la escuela yo llamare. Todos los días, lo prometo -dijo, depositando un beso en cada cabeza con adoración.
Ambos niños le sonrieron y asintieron.
Ilyan y él se vieron en a los ojos unos segundos antes de sonreír. No había más palabras que decirse, ya todas habían sido pronunciadas en su momento.
Y con esa última sonrisa, tomo el vuelo a Honolulu que cambiaría su vida de formas que él nunca se había imaginado.
Ni en un millón de años.
-Fin-