Por F. William Engdahl - Un sorprendente reconocimiento por parte del editor de la revista médica más respetada del mundo, The Lancet, ha sido prácticamente ignorado por los grandes medios. El Dr. Richard Horton, editor en jefe de la revista The Lancet publicó recientemente un comunicado declarando que una cantidad sorprendente de la investigación publicada, es poco fiable en el mejor caso, si no es del todo completamente falsa, así como, fraudulenta.
Horton declaró: “Gran parte de la literatura científica, tal vez la mitad, puede ser simplemente falsa. Afligida por los estudios con muestras pequeñas, efectos pequeños, análisis exploratorios inválidos, y conflictos flagrantes de interés, junto con una obsesión por perseguir las tendencias de moda de dudosa importancia, la ciencia ha dado un giro hacia la oscuridad.”
Para indicar el punto, en otras palabras, Horton afirma sin rodeos que las principales compañías farmacéuticas falsifican o manipulan los ensayos, la seguridad y la eficacia de sus diversas drogas tomando muestras demasiado pequeñas para ser estadísticamente significativas o mediante la contratación de laboratorios de ensayo, o científicos en el laboratorio, o científicos que tienen evidentes conflictos de interés, como complacer a la compañía farmacéutica para obtener más subvenciones. Al menos la mitad de todas estas pruebas son inútiles o peores que eso, afirma. A medida que las drogas tienen un efecto importante en la salud de millones de consumidores, la manipulación equivale a negligencia criminal y malversación.
Los estudios patrocinados por la industria farmacéutica a los que Horton se refiere, desarrollan fármacos comerciales o vacunas que supuestamente ayudan a las personas, que se utilizan para capacitar al personal médico, para educar a los estudiantes de medicina y más.
Horton escribió sus comentarios impactantes después de asistir a un simposio sobre la reproducibilidad y confiabilidad de la investigación biomédica en el Wellcome Trust en Londres. Señaló la confidencialidad o reglas “Chatham House” donde los asistentes tienen prohibido dar nombres: “Mucho de lo que se publica no es correcto.” Yo no estoy autorizado a decir quién hizo esta observación porque se nos pidió observar las reglas de Chatham House. También se nos pidió no tomar fotografías de diapositivas”.
Leer más