(no subject)
[32/32]
Fandom: RPS
Pairing: David Grohl, referencias a Kurt
Número de Palabras: 100
Premios: 10
Notas: Post Nirvana con angst, por supuesto.
El reloj registra sólo un par de horas, pero Dave sabe que ya han pasado varias eternidades. Aún no entiende cómo ha llegado aquí, ni por qué está sentado en la batería con las baquetas en la mano. Tan sólo lo está. Y toca. Más que tocar; destroza. Sin parar. Dejando que la ira (¿por qué lo has hecho, joder?), la frustración (¿qué hago ahora, yo solo, en esta mierda de mundo?), el miedo (¿dónde estás ahora...?) fluyan con cada golpe.
Y tan sólo cuando transcurre otra eternidad, Dave empuja el goliat al suelo y lo hace pedazos a patadas.
[33/33]
Fandom: Moulin Rouge
Pairing: Nini/Argentino
Número de Palabras: 64
Premios: 10
El Argentino la intercepta en el cabaret, una mano en la cintura, la otra abarcándole un pecho.
“Esta noche”.
“Y una mierda. Ya tengo cliente”.
“¿Otro mendigo caliente de los tuyos?”.
“Ninguno de tu categoría”.
“Esta noche”, insiste.
“Quiero el doble”.
“Ni hablar”.
“Pues lárgate”.
“Ahora”.
“¿Ahora?”.
“Ahora”. Le levanta la falda de cancán, sin esperar respuesta, y Nini olvida cómo empezó la discusión.
Fandom: RPS
Pairing: David Grohl, referencias a Kurt
Número de Palabras: 100
Premios: 10
Notas: Post Nirvana con angst, por supuesto.
El reloj registra sólo un par de horas, pero Dave sabe que ya han pasado varias eternidades. Aún no entiende cómo ha llegado aquí, ni por qué está sentado en la batería con las baquetas en la mano. Tan sólo lo está. Y toca. Más que tocar; destroza. Sin parar. Dejando que la ira (¿por qué lo has hecho, joder?), la frustración (¿qué hago ahora, yo solo, en esta mierda de mundo?), el miedo (¿dónde estás ahora...?) fluyan con cada golpe.
Y tan sólo cuando transcurre otra eternidad, Dave empuja el goliat al suelo y lo hace pedazos a patadas.
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Fandom: Moulin Rouge
Pairing: Nini/Argentino
Número de Palabras: 64
Premios: 10
El Argentino la intercepta en el cabaret, una mano en la cintura, la otra abarcándole un pecho.
“Esta noche”.
“Y una mierda. Ya tengo cliente”.
“¿Otro mendigo caliente de los tuyos?”.
“Ninguno de tu categoría”.
“Esta noche”, insiste.
“Quiero el doble”.
“Ni hablar”.
“Pues lárgate”.
“Ahora”.
“¿Ahora?”.
“Ahora”. Le levanta la falda de cancán, sin esperar respuesta, y Nini olvida cómo empezó la discusión.