[Fiction]

Jul 23, 2011 00:25

 Ok, este es mi intento de escritora. Vamos a ver que sale *u* ;

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Capítulo 1

Norrland, Suecia, Año 2009-

“¡Qué ciudad más aburrida!” era en lo único que podía pensar Larsa mientras miraba por la gran
ventana del Colegio.

El paisaje que se observaba en ella era poco alentador; las veredas y los techos de las casas cubiertos de
nieve, los arboles despojados de sus hojas y el clima frío hacían que la calle fuera poco transitada.

Y esto; aunque para cualquier persona normal pudiese pasar desapercibido; molestaba mucho al joven. Era
una persona enérgica, de grandes aspiraciones, temeraria y… extrema. Ese era su “pequeño” gran
problema, las cosas tranquilas y aburridas lo ponían de mal humor, deseaba alejarse de la cotidianeidad
y explorar otros mundos, ver más allá de lo que estaba acostumbrado a ver, hacer algo importante y
quedar en la historia.

Pero lamentablemente, su vida era como la de cualquier joven normal. Y por el momento no parecería
cambiar.

Pensando en esto, miraba de reojo el reloj de pared. Faltaban 10 minutos, y sería libre.

9…8…7…6…5…4…3…2…y ¡sonó la campana!

Mientras juntaba sus cosas para largarse del lugar, pudo oír una conversación que captó su atención.

- ¿Has probado ya?
- ¿Hm? ¿Qué cosa?
- ¡Tonto! Estoy hablando de la puerta misteriosa…
- Oh! Ese rumor que está circulando por toda la escuela.
- Sí, yo no lo he comprobado aún, pero un amigo me ha dicho que si vas a la biblioteca de la
escuela a las 12 de la noche, aparece una puerta que nunca estuvo allí.
- ¿Osea que en lugar de 6 puertas hay 7?
- Exacto, y si eres buen observador vas a descubrir que se filtra luz por su rendija, como si alguien
estuviera del otro lado.
- Jajaja! ¡Que cuento más gracioso! ¿Quién podría creer en algo así?
- ¡No puedes estar tan seguro de eso! Aunque me da un poco de miedo entrar a la escuela de
medianoche.

Aquello que había escuchado a hurtadillas, había logrado quitarle una sonrisa.
«Por fin algo interesante! », pensó.

Y con toda la emoción contenida, se levantó rápidamente del pupitre haciendo un ruido espantoso que
asustó a los chicos que se habían quedado platicando en el salón. Sin duda alguna, su intento de “pasar desapercibido” había fallado.

- ¡Dios! ¿Hace cuanto que estaba Larsa ahí?
- No lo sé, ya sabes, él es  silencioso como un ninja.

Sin escuchar ya a sus compañeros, el muchacho se fue silbando del salón. Contento porque por fín,
había logrado encontrar algo divertido en su aburrida vida.

fin~

escritora, fail, cuento

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