"After all this time... is this what I get from you?"
Esta entrada iba a ser principalmente para anunciar que voy a tomarme unas pequeñas vacaciones. No desaparecer de LJ, por supuesto; simplemente relajarme un poco con el ritmo de actualización, en vez de obligarme a publicar cada tres días. Hace poco me di cuenta de que en todo lo que va de año no he hecho prácticamente nada por puro ocio. Todo lo que he visto o leído (o incluso jugado) ha sido para reseñarlo después, y eso ha terminado estresándome más de lo que imaginaba, hasta el punto de que empiezo a resentirme. Se me han juntado demasiadas cosas. El calor mortal que está haciendo tampoco ayuda nada, tengo las neuronas fundidas y me cuesta muchísimo escribir. Necesito un descanso y desconectar de las "obligaciones" de internet. Así que, de aquí a septiembre, voy a tomármelo con más calma. Seguiré subiendo reseñas cuando las tenga listas (quería ir a ver Inside Out esta semana, por ejemplo), pero mientras tanto me dedicaré a leer con tranquilidad, dibujar e intentar poner al día las cosas que sigo teniendo por ahí a medias.
Sin embargo, al final voy a aprovechar también para desahogarme con una explosión fangirlística de las que no vivía desde hace siglos. Porque, en esta línea de las vacaciones, aprovechando que estoy siguiendo Extant por la tele (la serie ci-fi de Halle Berry) y que el 12º reto que quiero escribir para Paleta de Palabras va a ser una historia de terror espacial, se me ocurrió la semana pasada que por fin había llegado la hora de hincarle el diente a Mass Effect, un juego que lleva en mi lista mucho tiempo y al que tenía unas ganas locas. Nada mejor que un buen juego para desoxidarse y cargar las pilas, ¿no?
Bien. Después de muchos problemas, conseguí instalármelo el jueves pasado. Y lo primero que tengo que decir es HOLY SHIT. Me siento más o menos así:
(... y la cara del Hada es con la que me mira mi familia)
Y es que me ha pegado fuerte. FUERTE. Muy fuerte, puede que incluso más que el subidón que me dio con Bioshock hace unos años, y eso ya es mucho decir. Mass Effect es uno de los mejores juegos que he jugado en mi maldita vida, me parece adictivo a la enésima potencia. Por si con eso no bastara, encima es la cosa más fangirleable del universo. Es la perfecta simbiosis de novela y serie de televisión, con el aliciente de que tú eres quien controla la historia. O al menos quien la dirige, porque controlar, lo que se dice controlar... sólo hasta cierto punto. Y es ese detalle, el poder tener el control sobre tantísimas cosas y al mismo tiempo tener otras muchísimas que escapan a tu control, lo que lo hace tan especial, en mi opinión. Creo que Mass Effect no es para jugarlo; es para vivirlo. Por lo menos, yo lo estoy viviendo a tope, con una intensidad que no me esperaba en absoluto. Así que ¡gracias, teniente_ross, por haberme tentado durante años con tus posts y tus fics, y por habérmelo vendido tan bien cuando te pregunté por él! Está siendo una experiencia alucinante ♥
El primer día que me senté a jugarlo, eché una partida de 4 horas por la mañana y otras 4 por la tarde. El segundo día... bueno, fue tan memorable que hasta he hecho un comic ilustrándolo. No tuvo desperdicio.
(Son demasiado tochas, si queréis verlas, pinchad para que os lleve a PB)
¿Conocéis esa sensación de "Venga, cinco minutillos más"? Pues eso. Durante hoooras. El sábado batí todos mis records, porque creo que mi límite de partida non-stop estaba en 5 horas, con Tomb Raider. Con Bioshock también me pegaba jornadas maratonianas, pero siempre haciendo descansos y nunca a esta magnitud. Sin embargo, con Mass Effect no podía parar. Perdí por completo la noción del tiempo y del espacio, creo que ni siquiera me moví de la silla para ir al baño. No me detuvo ni el miedo a que me reventara el PC, y eso sí que es raro, porque cuido el ordenador como si fuera mi hijo.
Pero es que la inmersión es brutal. Eso es algo que noté desde el minuto uno, cuando te ponen ante la pantalla para crear a Shepard. Sé que esto de personalizarte el personaje es algo muy típico de los RPG, pero, como no suelo jugar a este género, creo que es la primera vez que puedo diseñar por completo a mi avatar. Y, aunque suene muy sentimentaloide diciendo esto, me parece que eso establece ya un vínculo muy potente con el juego y con la historia. No estás por ahí corriendo con un muñeco prederterminado, igual al de todos los demás; esa de ahí es mi Shepard, lleva la cara, el nombre y el background que yo he querido darle, y eso dispara la imaginación. En un dos por tres, ya estás creando veinte mil headcanons sobre ella/él y su relación con todo el mundo. Incluso si en la patalla es más bien hierática (al menos, la mía lo es, LOL), eso no te coarta a la hora de seguir expandiendo su mundo y su personalidad.
Por ejemplo, yo elegí ser hija de soldados y "superviviente". Me parecía que venía a cuento, siendo Tomb Raider uno de mis juegos favoritos y habiéndome pasado el reboot el año pasado, donde tuve que aprender a sobrevivir sola, más o menos igual que mi pobre Shepard. Por eso, tengo el headcanon de que se quedó un poco tocada por el trauma y no traga las muertes innecesarias ni los peligros extremos ni las insubordinaciones. Pasar por una experiencia así, viniendo de una infancia segura y normal, aunque marcada por la disciplina militar, tiene que dejar poso. La visualizo como la jovencita dispuesta y decidida, pero muy verde, que se llevó el palo de su vida al tener que atravesar esa pesadilla en Akuze. También, aunque en el juego es muy calmada, me hace muchísima gracia imaginármela con arrebatos histéricos de vez en cuando. De hecho, en los cinco días que llevo jugando, ya se me han ocurrido 44 comics de coña sobre las situaciones que voy encontrando (y no es un número aleatorio, los voy apuntando todos en un papel, LOL). Basándome en todo esto, he decidido pisarle a fondo a la virtud, porque la rebeldía no me encaja con mi chica. E incluso el hecho de que sea más buena que un trozo de pan y termine teniendo a todo el mundo subido a la chepa me hace gracia.
El caso es que las simples pinceladas estándar que ofrece el juego te dan vía libre a que tú te montes la caracterización que te dé la realísima gana. Igual que yo tengo mis headcanons, cada cual tendrá los suyos. Y eso es oro puro para mí, tan fan del desarrollo de personajes. He jugado juegos muy buenos, con tramas estupendas y personajes muy carismáticos, pero nunca uno que tuviera esas dos cosas y además diera tantísima libertad al jugador, a ambos lados de la pantalla. Estoy disfrutando como una enana, Mass Effect es el sueño de todo fan y de todo escritor (y si encima eres de ci-fi, orgasmo asegurado).
Me fastidia que el PC no me deje sacarle un print a mi Shepard, porque estoy muy contenta con cómo quedó. Le exageré bastante las facciones, con una cara muy chupada, pómulos marcados, boca ancha, barbilla prominente y ojos grandes y hundidos, un poco rasgados. No se parece en nada a mí (salvo en el color de los ojos), pero tiene cara de superviviente, jaja. Nah, en realidad tiene cara de buena persona, lo que encaja todavía más con la personalidad que estoy eligiendo. He intentado dibujarla lo más fielmente posible, ahí os va:
(Mi Shepard más o menos fiel, y pruebas de expresiones para los hipotéticos comics, LOL)
Me llevé una alegría tremenda cuando descubrí que la herramienta de creación de personaje incluía cicatrices, porque estaba deseando ponerle algunas por la cara. Soy fan de las cicatrices. Que no nos permitieran elegir el físico me decepcionó un poco al principio, pero luego resultó que Shepard es exactamente como yo quería: atlética pero sin grandes curvas y con una pose muy normal. Casi monto una fiesta al ver que era bastante plana, estoy de tetonas hasta el moño. Lo único en lo que de verdad me hacía ilusión que se pareciera a mí era en ser bajita, pero hasta en eso acertaron, porque creo que es la más baja de todo el equipo. Hasta Liara parece más alta. No sé si cambiarán el físico estándar en función del tipo de personaje que elijas ser (yo me puse "infiltrado" y he salido bastante menudita).
El sistema de juego es otra cosa que me ha sorprendido gratamente. Todo lo que tiene de shooter es fantástico, la jugabilidad es mucho más cómoda de lo que me esperaba. El shooter es mi género favorito y el que más suelo jugar, pero me preocupaban los elementos de rol que pudiera incluir Mass Effect. Al final, le cogí el tranquillo enseguida. Creo que seguramente siga infrautilizando las posibilidades de luchar en pelotón... sólo ayer comencé a fijarme más en que las armas que usa cada uno sean en las que están entrenados, porque supongo que así se les sacará mejor partido, y hasta llegué a hacerme una lista con las especialidades de cada cual. Eso de no tener acceso al panel de experiencia de todos los subordinados me parece un atraso (podrían incluirlos en las taquillas, como los equipos). Sin embargo, soy incapaz de estar pendiente de los poderes que utilizan en plena batalla. Se supone que yo puedo ordenarles qué atacar y cómo, pero siempre dejo que hagan lo que les dé la gana. A veces no me acuerdo ni de mis propios poderes. Ya me pasaba en Bioshock, cuando tenía que combinar plásmidos y armas... eso de estar a dos cosas al mismo tiempo no lo admite mi cerebro, soy monotarea. Pero nos apañamos bastante bien, porque los tengo muy bien equipados y estoy en el nivel fácil. Ashley está ya convertida en una bestia parda, Tali le pisa los talones, y el binomio Garrus-Liara ha resultado ser tan bueno como siempre esperé. En más de una ocasión se han cargado ya a todo el mundo antes de que a mí me diera tiempo a desenfundar.
Lo que estoy llevando realmente mal es el tema del romance. ¡Dios, qué percal! No soporto a ninguna de mis dos opciones, LOL, ¡yo sólo quiero tirarme a Garrus salvar la galaxia! Con Liara me gusta hablar porque cuenta cosas interesantes, pero me pone nerviosa ese halo de moñez que la envuelve y que siempre fuercen las charlas hacia el campo romántico. De Kaidan me jode que se haya puesto tan directo de la noche a la mañana. Se pasó no sé cuántas misiones sin querer hablarme y, de repente, en la primera conversación personal que tenemos, ya empezó a meter ficha. Qué corra el aire, tío. Me pareció muy salido de ninguna parte. Venga ya, que tengo más confianza con Wrex que con él. Es curioso, porque me encanta el sexo en la ficción, pero en mi vida personal soy bastante asexual. Muy asexual. Tengo que tener una conexión muy fuerte con una persona para que me atraiga en ese sentido. Alguna vez me ha entrado algún tío de esa forma y he salido huyendo, literalmente. Me pone muy nerviosa. Y la conversación "romántica" con Kaidan me provocó esa misma sensación. A pesar de saber que es sólo un juego, me hizo sentir súper incómoda. Hasta ese punto llega la inmersión que genera Mass Effect, supongo. Al final le mandé a la mierda de mala manera para quitármelo de encima, aunque después me sentí tan culpable por haber sido tan borde que cargué de nuevo la partida y simplemente eludí ir a hablar con él. Soy piscis hasta jugando a Mass Effect, ajaja.
Pero, poniéndonos serios, de verdad no me gusta cómo lo han introducido. No tiene nada que ver con la relación que vas forjando poco a poco con Garrus, Tali, Ashley o el propio Wrex, con el que me encantaba hablar. Todos los miembros del equipo se van abriendo y contándote sus cosas. Le tengo un cariño especial a Tali, que me parece la cosa más mona del mundo, y si tengo que liarme con alguien me quedo con Garrus sin dudarlo. Bueno, me liaría hasta con Wrex antes que con Kaidan. Es absurdo que Liara, nada más llegar y sin conocerte siquiera, ya te esté poniendo ojitos, o que Kaidan te tire los trastos la primera vez que hablas con él o que se ponga paranoico con que prefieres estar con Liara (en serio, eso me parece lo más WTF de todo). Tómate un valium y déjame en paz, chaval *rolleyes* Creo que habría estado mejor que nos permitieran ir conociéndolos poco a poco de forma neutra y si acaso incluir a partir de cierto punto la opción del romance. Pero es que a veces hasta te acorralan. Kaidan me acorraló el otro día, con un diálogo bastante estrafalario que terminó crispándome los nervios. No tengo nada en contra de quien prefiera el Kaidan/Shepard, pero para mí está pasado de rosca.
Quitando eso, adoro a todo el equipo. Ganarse la confianza de Ashley cuesta al principio, pero cuando empieza a hablar se le coge cariño enseguida. Me parto con su forma de contar las cosas. A quien más quiero es a Tali y a Garrus, que me parecen adorables, cada cual en su estilo. Garrus es muy distinto a como lo imaginaba, pero ha superado mis espectativas, todo en él me encanta. Incluso el choque de sus tendencias "implacables" con el headcanon de mi Shepard es muy interesante y sus conversaciones son de mis favoritas. No esperaba que respetase tanto a Shepard y que prácticamente se esté dejando instruir por ella, es un detalle fantástico. Wrex también me encanta, a un nivel del que ni yo misma era consciente. Los personajes de su estilo siempre me han gustado mucho y, si Garrus me mira con cierta admiración a mí, yo admito que miro con admiración a Wrex. Durante estos días ha sido algo así como un colega/mentor para mí, aunque suene rarito decirlo. En un grupo en el que yo soy la que manda y todos tienen rangos inferiores, hablar con Wrex, que es un señor de la guerra mucho más experimentado que yo, me encantaba. Me estaba ilusionando mucho con la relación que empezábamos a forjar.
Pero... anoche llegué a Virmire. Y hoy hice esto para ilustrar mis sentimientos al respecto.
Lo que pasó en la playa me dejó tan en shock que apenas logré dormir 4 horas y a las 5:30 de la mañana ya estaba con los ojos como platos pensando en cómo coño solucionarlo. Pero no lo puedo solucionar. De todas las opciones que tenía para mantener con vida a Wrex (que he consultado hoy en la wiki), no llego a ninguna. Todavía no habíamos ido a por la armadura de su padre, por culpa de mi manía de ir visitando los cúmulos por orden. No tenía suficientes puntos de Encanto/Intimidación, porque nunca me habían parecido tan importantes las opciones de diálogo bloqueadas. Y, por supuesto, llevaba a todos los miembros del equipo conmigo. Así que, aunque cargué la partida no sé cuantas veces e hice todas las combinaciones posibles, no tengo forma de evitar que muera. Este asunto me ha dejado súper descompuesta, y me he dado cuenta de que lo que crea Mass Effect va más allá de la adicción. El trabajo que ha hecho BioWare es tan impresionante que se te muere un compañero y lloras, porque ha muerto por tu culpa y porque no lo vas a poder resucitar.
Me muero de rabia, no sólo porque Wrex era uno de mis personajes favoritos del equipo y le tenía muchísimo respeto, sino porque encima ¡estaba de acuerdo con su forma de ver las cosas! Me sentí muy impotente al no poder negociar más. Pero así es la vida también... en la vida no puedes cargar una partida y repetir la escena hasta que salga como tú quieres. Muero de rabia también porque yo siempre, sieeempre, antes de que existiera la mierda del autoguardado, tenía la costumbre de dejar un "salvado de seguridad" al final de cada nivel de un juego, para poder volver atrás si algo salía mal. Pero, como los últimos juegos que he jugado ya traían el autoguardado (Tomb Raider, Infinite, The Wolf Among Us...), con Mass Effect me puse comodona y no lo hice. En consecuencia, todas las partidas guardadas que tengo son estando ya en Virmire, de donde no puedo salir. Todas, excepto una que grabé el primer día, en Eden Prime. Así que, si quiero recuperar a Wrex, tendría que volver a empezar el juego casi desde el principio.
Llevo todo el día dando vueltas a qué hacer. Por un lado, no me importaría empezar de nuevo, porque quiero a Wrex en mi equipo hasta el final; no sólo ahora, sino también en Mass Effect 2 y en Mass Effect 3. Pienso en todo lo que voy a perderme y me dan ganas de llorar de verdad. Pero, por otro lado... ya debo llevar unas 30 horas de gameplay acumuladas, estoy en el nivel 28 de experiencia y además tengo un equipamiento de la leche, recolectado a lo largo de todas las chorrimisiones que he ido cumpliendo estos días. Los chicos están que lo petan, Ashley prácticamente mata enemigos con su mera presencia, y cada vez que pienso en todo lo que he pasado ya... Trebin, el X57, las naves varadas, Artemis Tau, Feros... tantas mierdecillas encontradas en sitios que ni recuerdo, que me han abierto secciones del códice y me han dado experiencia... Buf.
Siempre digo que los RPG no son mi estilo y que no me motiva jugarlos, pero ahora he descubierto que en realidad los suelo evitar porque activan al máximo todas mis manías obsesivo-compulsivas. Soy incapaz de dejar algo sin explorar o de deshacerme de cosas sin haber comprobado primero que no sirven para mejorar a nadie. Tantísimas horas ante las taquillas, seleccionando el mejor equipamiento para cada miembro del equipo, arma a arma, armadura a armadura, mejora a mejora... Tantísimas horas dando vueltas por ahí con el puñetero Mako para peinar los escenarios de las misiones secundarias, subiendo y bajando montañas, atascándome por todas partes... Habla la que era incapaz de salir de un escenario de Diablo hasta que no estaba explorado el último rincón y me había asegurado de que no me dejaba nada atrás. Con Mass Effect me ha pasado lo mismo, pero elevado a la máxima potencia y a escala intergaláctica. El subidón me pegó tan fuerte que he invertido mucho, me he empachado y no tengo el cuajo de renunciar a todo eso para volver a empezar y repetirlo. Así que creo que tendré que resignarme y asumirlo. Al menos, así veré cómo se desarrolla todo al perder a Wrex y después tendré más alicientes para jugar una partida diferente, haciendo las cosas de otra manera.
En fin, ya veremos qué pasa. Por lo pronto, mientras buscaba lo de Wrex, ya me he spoileado que ésta no será la única pérdida en Virmire. Puto planeta; si lo llego a saber, te dejo para el final. Pero vamos, aquí la decisión es obvia: bye, bye, Kaidan. Ni harta de vino dejo morir a Ashley para salvarte a ti. No es nada personal mentira, sí lo es. Ahora me siento todavía más culpable por haberle dado largas con lo del romance. Aaay, Dios...
Cuando termine, volveré a hacer alguna reseña más decente. Mientras tanto, a ver si sigo dibujando y hago esos comics que tengo apuntados. Muchos son de cuando estuve en la Ciudadela por primera vez, aquello sí que fue puro fun and games.
Sin embargo, al final voy a aprovechar también para desahogarme con una explosión fangirlística de las que no vivía desde hace siglos. Porque, en esta línea de las vacaciones, aprovechando que estoy siguiendo Extant por la tele (la serie ci-fi de Halle Berry) y que el 12º reto que quiero escribir para Paleta de Palabras va a ser una historia de terror espacial, se me ocurrió la semana pasada que por fin había llegado la hora de hincarle el diente a Mass Effect, un juego que lleva en mi lista mucho tiempo y al que tenía unas ganas locas. Nada mejor que un buen juego para desoxidarse y cargar las pilas, ¿no?
Bien. Después de muchos problemas, conseguí instalármelo el jueves pasado. Y lo primero que tengo que decir es HOLY SHIT. Me siento más o menos así:
(... y la cara del Hada es con la que me mira mi familia)
Y es que me ha pegado fuerte. FUERTE. Muy fuerte, puede que incluso más que el subidón que me dio con Bioshock hace unos años, y eso ya es mucho decir. Mass Effect es uno de los mejores juegos que he jugado en mi maldita vida, me parece adictivo a la enésima potencia. Por si con eso no bastara, encima es la cosa más fangirleable del universo. Es la perfecta simbiosis de novela y serie de televisión, con el aliciente de que tú eres quien controla la historia. O al menos quien la dirige, porque controlar, lo que se dice controlar... sólo hasta cierto punto. Y es ese detalle, el poder tener el control sobre tantísimas cosas y al mismo tiempo tener otras muchísimas que escapan a tu control, lo que lo hace tan especial, en mi opinión. Creo que Mass Effect no es para jugarlo; es para vivirlo. Por lo menos, yo lo estoy viviendo a tope, con una intensidad que no me esperaba en absoluto. Así que ¡gracias, teniente_ross, por haberme tentado durante años con tus posts y tus fics, y por habérmelo vendido tan bien cuando te pregunté por él! Está siendo una experiencia alucinante ♥
El primer día que me senté a jugarlo, eché una partida de 4 horas por la mañana y otras 4 por la tarde. El segundo día... bueno, fue tan memorable que hasta he hecho un comic ilustrándolo. No tuvo desperdicio.
(Son demasiado tochas, si queréis verlas, pinchad para que os lleve a PB)
¿Conocéis esa sensación de "Venga, cinco minutillos más"? Pues eso. Durante hoooras. El sábado batí todos mis records, porque creo que mi límite de partida non-stop estaba en 5 horas, con Tomb Raider. Con Bioshock también me pegaba jornadas maratonianas, pero siempre haciendo descansos y nunca a esta magnitud. Sin embargo, con Mass Effect no podía parar. Perdí por completo la noción del tiempo y del espacio, creo que ni siquiera me moví de la silla para ir al baño. No me detuvo ni el miedo a que me reventara el PC, y eso sí que es raro, porque cuido el ordenador como si fuera mi hijo.
Pero es que la inmersión es brutal. Eso es algo que noté desde el minuto uno, cuando te ponen ante la pantalla para crear a Shepard. Sé que esto de personalizarte el personaje es algo muy típico de los RPG, pero, como no suelo jugar a este género, creo que es la primera vez que puedo diseñar por completo a mi avatar. Y, aunque suene muy sentimentaloide diciendo esto, me parece que eso establece ya un vínculo muy potente con el juego y con la historia. No estás por ahí corriendo con un muñeco prederterminado, igual al de todos los demás; esa de ahí es mi Shepard, lleva la cara, el nombre y el background que yo he querido darle, y eso dispara la imaginación. En un dos por tres, ya estás creando veinte mil headcanons sobre ella/él y su relación con todo el mundo. Incluso si en la patalla es más bien hierática (al menos, la mía lo es, LOL), eso no te coarta a la hora de seguir expandiendo su mundo y su personalidad.
Por ejemplo, yo elegí ser hija de soldados y "superviviente". Me parecía que venía a cuento, siendo Tomb Raider uno de mis juegos favoritos y habiéndome pasado el reboot el año pasado, donde tuve que aprender a sobrevivir sola, más o menos igual que mi pobre Shepard. Por eso, tengo el headcanon de que se quedó un poco tocada por el trauma y no traga las muertes innecesarias ni los peligros extremos ni las insubordinaciones. Pasar por una experiencia así, viniendo de una infancia segura y normal, aunque marcada por la disciplina militar, tiene que dejar poso. La visualizo como la jovencita dispuesta y decidida, pero muy verde, que se llevó el palo de su vida al tener que atravesar esa pesadilla en Akuze. También, aunque en el juego es muy calmada, me hace muchísima gracia imaginármela con arrebatos histéricos de vez en cuando. De hecho, en los cinco días que llevo jugando, ya se me han ocurrido 44 comics de coña sobre las situaciones que voy encontrando (y no es un número aleatorio, los voy apuntando todos en un papel, LOL). Basándome en todo esto, he decidido pisarle a fondo a la virtud, porque la rebeldía no me encaja con mi chica. E incluso el hecho de que sea más buena que un trozo de pan y termine teniendo a todo el mundo subido a la chepa me hace gracia.
El caso es que las simples pinceladas estándar que ofrece el juego te dan vía libre a que tú te montes la caracterización que te dé la realísima gana. Igual que yo tengo mis headcanons, cada cual tendrá los suyos. Y eso es oro puro para mí, tan fan del desarrollo de personajes. He jugado juegos muy buenos, con tramas estupendas y personajes muy carismáticos, pero nunca uno que tuviera esas dos cosas y además diera tantísima libertad al jugador, a ambos lados de la pantalla. Estoy disfrutando como una enana, Mass Effect es el sueño de todo fan y de todo escritor (y si encima eres de ci-fi, orgasmo asegurado).
Me fastidia que el PC no me deje sacarle un print a mi Shepard, porque estoy muy contenta con cómo quedó. Le exageré bastante las facciones, con una cara muy chupada, pómulos marcados, boca ancha, barbilla prominente y ojos grandes y hundidos, un poco rasgados. No se parece en nada a mí (salvo en el color de los ojos), pero tiene cara de superviviente, jaja. Nah, en realidad tiene cara de buena persona, lo que encaja todavía más con la personalidad que estoy eligiendo. He intentado dibujarla lo más fielmente posible, ahí os va:
(Mi Shepard más o menos fiel, y pruebas de expresiones para los hipotéticos comics, LOL)
Me llevé una alegría tremenda cuando descubrí que la herramienta de creación de personaje incluía cicatrices, porque estaba deseando ponerle algunas por la cara. Soy fan de las cicatrices. Que no nos permitieran elegir el físico me decepcionó un poco al principio, pero luego resultó que Shepard es exactamente como yo quería: atlética pero sin grandes curvas y con una pose muy normal. Casi monto una fiesta al ver que era bastante plana, estoy de tetonas hasta el moño. Lo único en lo que de verdad me hacía ilusión que se pareciera a mí era en ser bajita, pero hasta en eso acertaron, porque creo que es la más baja de todo el equipo. Hasta Liara parece más alta. No sé si cambiarán el físico estándar en función del tipo de personaje que elijas ser (yo me puse "infiltrado" y he salido bastante menudita).
El sistema de juego es otra cosa que me ha sorprendido gratamente. Todo lo que tiene de shooter es fantástico, la jugabilidad es mucho más cómoda de lo que me esperaba. El shooter es mi género favorito y el que más suelo jugar, pero me preocupaban los elementos de rol que pudiera incluir Mass Effect. Al final, le cogí el tranquillo enseguida. Creo que seguramente siga infrautilizando las posibilidades de luchar en pelotón... sólo ayer comencé a fijarme más en que las armas que usa cada uno sean en las que están entrenados, porque supongo que así se les sacará mejor partido, y hasta llegué a hacerme una lista con las especialidades de cada cual. Eso de no tener acceso al panel de experiencia de todos los subordinados me parece un atraso (podrían incluirlos en las taquillas, como los equipos). Sin embargo, soy incapaz de estar pendiente de los poderes que utilizan en plena batalla. Se supone que yo puedo ordenarles qué atacar y cómo, pero siempre dejo que hagan lo que les dé la gana. A veces no me acuerdo ni de mis propios poderes. Ya me pasaba en Bioshock, cuando tenía que combinar plásmidos y armas... eso de estar a dos cosas al mismo tiempo no lo admite mi cerebro, soy monotarea. Pero nos apañamos bastante bien, porque los tengo muy bien equipados y estoy en el nivel fácil. Ashley está ya convertida en una bestia parda, Tali le pisa los talones, y el binomio Garrus-Liara ha resultado ser tan bueno como siempre esperé. En más de una ocasión se han cargado ya a todo el mundo antes de que a mí me diera tiempo a desenfundar.
Lo que estoy llevando realmente mal es el tema del romance. ¡Dios, qué percal! No soporto a ninguna de mis dos opciones, LOL, ¡yo sólo quiero tirarme a Garrus salvar la galaxia! Con Liara me gusta hablar porque cuenta cosas interesantes, pero me pone nerviosa ese halo de moñez que la envuelve y que siempre fuercen las charlas hacia el campo romántico. De Kaidan me jode que se haya puesto tan directo de la noche a la mañana. Se pasó no sé cuántas misiones sin querer hablarme y, de repente, en la primera conversación personal que tenemos, ya empezó a meter ficha. Qué corra el aire, tío. Me pareció muy salido de ninguna parte. Venga ya, que tengo más confianza con Wrex que con él. Es curioso, porque me encanta el sexo en la ficción, pero en mi vida personal soy bastante asexual. Muy asexual. Tengo que tener una conexión muy fuerte con una persona para que me atraiga en ese sentido. Alguna vez me ha entrado algún tío de esa forma y he salido huyendo, literalmente. Me pone muy nerviosa. Y la conversación "romántica" con Kaidan me provocó esa misma sensación. A pesar de saber que es sólo un juego, me hizo sentir súper incómoda. Hasta ese punto llega la inmersión que genera Mass Effect, supongo. Al final le mandé a la mierda de mala manera para quitármelo de encima, aunque después me sentí tan culpable por haber sido tan borde que cargué de nuevo la partida y simplemente eludí ir a hablar con él. Soy piscis hasta jugando a Mass Effect, ajaja.
Pero, poniéndonos serios, de verdad no me gusta cómo lo han introducido. No tiene nada que ver con la relación que vas forjando poco a poco con Garrus, Tali, Ashley o el propio Wrex, con el que me encantaba hablar. Todos los miembros del equipo se van abriendo y contándote sus cosas. Le tengo un cariño especial a Tali, que me parece la cosa más mona del mundo, y si tengo que liarme con alguien me quedo con Garrus sin dudarlo. Bueno, me liaría hasta con Wrex antes que con Kaidan. Es absurdo que Liara, nada más llegar y sin conocerte siquiera, ya te esté poniendo ojitos, o que Kaidan te tire los trastos la primera vez que hablas con él o que se ponga paranoico con que prefieres estar con Liara (en serio, eso me parece lo más WTF de todo). Tómate un valium y déjame en paz, chaval *rolleyes* Creo que habría estado mejor que nos permitieran ir conociéndolos poco a poco de forma neutra y si acaso incluir a partir de cierto punto la opción del romance. Pero es que a veces hasta te acorralan. Kaidan me acorraló el otro día, con un diálogo bastante estrafalario que terminó crispándome los nervios. No tengo nada en contra de quien prefiera el Kaidan/Shepard, pero para mí está pasado de rosca.
Quitando eso, adoro a todo el equipo. Ganarse la confianza de Ashley cuesta al principio, pero cuando empieza a hablar se le coge cariño enseguida. Me parto con su forma de contar las cosas. A quien más quiero es a Tali y a Garrus, que me parecen adorables, cada cual en su estilo. Garrus es muy distinto a como lo imaginaba, pero ha superado mis espectativas, todo en él me encanta. Incluso el choque de sus tendencias "implacables" con el headcanon de mi Shepard es muy interesante y sus conversaciones son de mis favoritas. No esperaba que respetase tanto a Shepard y que prácticamente se esté dejando instruir por ella, es un detalle fantástico. Wrex también me encanta, a un nivel del que ni yo misma era consciente. Los personajes de su estilo siempre me han gustado mucho y, si Garrus me mira con cierta admiración a mí, yo admito que miro con admiración a Wrex. Durante estos días ha sido algo así como un colega/mentor para mí, aunque suene rarito decirlo. En un grupo en el que yo soy la que manda y todos tienen rangos inferiores, hablar con Wrex, que es un señor de la guerra mucho más experimentado que yo, me encantaba. Me estaba ilusionando mucho con la relación que empezábamos a forjar.
Pero... anoche llegué a Virmire. Y hoy hice esto para ilustrar mis sentimientos al respecto.
Lo que pasó en la playa me dejó tan en shock que apenas logré dormir 4 horas y a las 5:30 de la mañana ya estaba con los ojos como platos pensando en cómo coño solucionarlo. Pero no lo puedo solucionar. De todas las opciones que tenía para mantener con vida a Wrex (que he consultado hoy en la wiki), no llego a ninguna. Todavía no habíamos ido a por la armadura de su padre, por culpa de mi manía de ir visitando los cúmulos por orden. No tenía suficientes puntos de Encanto/Intimidación, porque nunca me habían parecido tan importantes las opciones de diálogo bloqueadas. Y, por supuesto, llevaba a todos los miembros del equipo conmigo. Así que, aunque cargué la partida no sé cuantas veces e hice todas las combinaciones posibles, no tengo forma de evitar que muera. Este asunto me ha dejado súper descompuesta, y me he dado cuenta de que lo que crea Mass Effect va más allá de la adicción. El trabajo que ha hecho BioWare es tan impresionante que se te muere un compañero y lloras, porque ha muerto por tu culpa y porque no lo vas a poder resucitar.
Me muero de rabia, no sólo porque Wrex era uno de mis personajes favoritos del equipo y le tenía muchísimo respeto, sino porque encima ¡estaba de acuerdo con su forma de ver las cosas! Me sentí muy impotente al no poder negociar más. Pero así es la vida también... en la vida no puedes cargar una partida y repetir la escena hasta que salga como tú quieres. Muero de rabia también porque yo siempre, sieeempre, antes de que existiera la mierda del autoguardado, tenía la costumbre de dejar un "salvado de seguridad" al final de cada nivel de un juego, para poder volver atrás si algo salía mal. Pero, como los últimos juegos que he jugado ya traían el autoguardado (Tomb Raider, Infinite, The Wolf Among Us...), con Mass Effect me puse comodona y no lo hice. En consecuencia, todas las partidas guardadas que tengo son estando ya en Virmire, de donde no puedo salir. Todas, excepto una que grabé el primer día, en Eden Prime. Así que, si quiero recuperar a Wrex, tendría que volver a empezar el juego casi desde el principio.
Llevo todo el día dando vueltas a qué hacer. Por un lado, no me importaría empezar de nuevo, porque quiero a Wrex en mi equipo hasta el final; no sólo ahora, sino también en Mass Effect 2 y en Mass Effect 3. Pienso en todo lo que voy a perderme y me dan ganas de llorar de verdad. Pero, por otro lado... ya debo llevar unas 30 horas de gameplay acumuladas, estoy en el nivel 28 de experiencia y además tengo un equipamiento de la leche, recolectado a lo largo de todas las chorrimisiones que he ido cumpliendo estos días. Los chicos están que lo petan, Ashley prácticamente mata enemigos con su mera presencia, y cada vez que pienso en todo lo que he pasado ya... Trebin, el X57, las naves varadas, Artemis Tau, Feros... tantas mierdecillas encontradas en sitios que ni recuerdo, que me han abierto secciones del códice y me han dado experiencia... Buf.
Siempre digo que los RPG no son mi estilo y que no me motiva jugarlos, pero ahora he descubierto que en realidad los suelo evitar porque activan al máximo todas mis manías obsesivo-compulsivas. Soy incapaz de dejar algo sin explorar o de deshacerme de cosas sin haber comprobado primero que no sirven para mejorar a nadie. Tantísimas horas ante las taquillas, seleccionando el mejor equipamiento para cada miembro del equipo, arma a arma, armadura a armadura, mejora a mejora... Tantísimas horas dando vueltas por ahí con el puñetero Mako para peinar los escenarios de las misiones secundarias, subiendo y bajando montañas, atascándome por todas partes... Habla la que era incapaz de salir de un escenario de Diablo hasta que no estaba explorado el último rincón y me había asegurado de que no me dejaba nada atrás. Con Mass Effect me ha pasado lo mismo, pero elevado a la máxima potencia y a escala intergaláctica. El subidón me pegó tan fuerte que he invertido mucho, me he empachado y no tengo el cuajo de renunciar a todo eso para volver a empezar y repetirlo. Así que creo que tendré que resignarme y asumirlo. Al menos, así veré cómo se desarrolla todo al perder a Wrex y después tendré más alicientes para jugar una partida diferente, haciendo las cosas de otra manera.
En fin, ya veremos qué pasa. Por lo pronto, mientras buscaba lo de Wrex, ya me he spoileado que ésta no será la única pérdida en Virmire. Puto planeta; si lo llego a saber, te dejo para el final. Pero vamos, aquí la decisión es obvia: bye, bye, Kaidan. Ni harta de vino dejo morir a Ashley para salvarte a ti. No es nada personal mentira, sí lo es. Ahora me siento todavía más culpable por haberle dado largas con lo del romance. Aaay, Dios...
Cuando termine, volveré a hacer alguna reseña más decente. Mientras tanto, a ver si sigo dibujando y hago esos comics que tengo apuntados. Muchos son de cuando estuve en la Ciudadela por primera vez, aquello sí que fue puro fun and games.