[trad-esp] What Words Can't Do - Parte III: Hogar (2/2)

Aug 29, 2015 03:00

Parte III: Hogar (1/2)

Es el ruido de un leve zumbido que despierta a Kyungsoo y suelta un suspiro de alivio cuando se da cuenta de que es sólo la ducha corriendo; había pensado que realmente estaba lloviendo. Oye la ducha apagarse y después de unos momentos, la puerta del baño finalmente se abre.

Kyungsoo se cubre con las mantas y finge dormir, no queriendo que Kai sepa que ya está despierto. Oye pasos cerca de la cama y abre uno de sus ojos, curioso por saber lo que podría estar haciendo Kai. Se queda tieso en la cama cuando ve que el joven está caminando por la habitación sin una toalla. Cierra los ojos de nuevo con fuerza, con la esperanza de que Kai no haya notado su movimiento.


Durante un momento hay silencio, y luego escucha el sonido de papeles y páginas volteándose, el garabateo ocasional de un lápiz contra el papel. ¿Qué está haciendo? Abre un ojo otra vez. Y entonces siente una respiración en su cara, ambos ojos se abren de golpe, sólo para ver la cara de Jongin a una pulgada de la suya.

"Sé que estás despierto. Te diviertes mirándome en toda mi gloriosa desnudez, ¿hmm? Si quieres verme solo tienes que pedirlo." Sus palabras son calientes contra su piel y su aliento huele ligeramente a pasta de dientes.
Es demasiado pronto para esto, así que no es ninguna sorpresa que el cerebro de Kyungsoo no pueda manejar esa cercanía tan temprano en la mañana.

"¡Cállate! Tú eres el que está caminando por ahí desnudo. No quería ver nada de todos modos."

Kai lo ignora e inclinándose hacia atrás, dice, "Eww, tu aliento."

Kyungsoo se sonroja y se cubre la boca, recordando que recién se ha levantado y no se ha cepillado los dientes todavía.

"¡Si no te gusta, entonces no te acerques a mí!" Kyungsoo grita con las manos tapando su boca.

"Está bien, no me importa." Kai le sonríe antes de quitar la mano de Kyungsoo y a continuación, darle un beso. Es un beso corto, dulce y mentolado, el sabor de la menta aun persistiendo en la boca de Kyungsoo incluso después de que Kai se alejara.

"Querías acurrucarte conmigo anoche, ¿eh?" Kai bromea mientras se sienta en su lado de la cama, envolviendo sus brazos alrededor de Kyungsoo.

"¡No! Así es como yo duermo. No puedo evitarlo."

El rostro de Kai se tuerce en una sonrisa. "Todavía estaba despierto cuando te metiste a la cama."
Kyungsoo se pone rojo de nuevo.

"Kyungsoo-ah, si quieres algo, tienes que preguntar ¿de acuerdo? ¿Cómo se supone que voy a dártelo si no lo pides?" Sacude la cabeza con desaprobación ante Kyungsoo.

"Pero es embarazoso." Kyungsoo murmura debajo de las sábanas, donde se había metido para ocultar el enrojecimiento de sus mejillas.

"No es embarazoso. Haré todo lo que me pidas." Kai jala las mantas hacia abajo, exponiendo a Kyungsoo para poder mirarlo directamente mientras habla.

"¿Cualquier cosa?"

"Cualquier cosa."

"¿Por qué?" Kyungsoo finalmente se sienta para estar al mismo nivel que Kai.

"Tú sabes por qué." Kai murmura tímidamente, y es raro ver a Kai tímido por algo.
A Kyungsoo le gusta.

"No sé por qué." Inclina la cabeza un poco hacia la derecha, fingiendo inocencia.

Kai entrecierra los ojos. "Tú sabes por qué."

"Nop. Vas a tener que recordármelo." Kyungsoo bromea juguetonamente.

"Pfft. Entonces supongo que nunca lo sabrás." Kai se levanta de la cama y se dirige al cuarto de baño, dejando a Kyungsoo ahí.

"Aww, qué aburrido." Kyungsoo gruñe, finalmente rodando fuera de la cama.

•••••

Y por supuesto, tal como Kyungsoo había temido, estaba lloviendo.

Eran gotitas ligeras, una llovizna a lo sumo, pero era obvio que había estado lloviendo mucho más antes. Ya sabía qué esperar, pero Kyungsoo igual vería si el parque de atracciones estaría abierto de todos modos, porque bueno, nunca se sabe.

Estaba cerrado.

Kyungsoo no había llegado con un plan B. ¿Qué iban a hacer ahora? No había nada que hacer en el hotel.
Bueno, aunque podían sól-

No. Kyungsoo se estremece un poco, recordando cómo sólo el besar a Kai lo hizo puré.

Con un rostro triste, se vuelve hacia Kai y suelta la mala noticia, "Lo siento Kai. Tenía muchas ganas de llevarte. Debería haber revisado el clima con más cuidado." Aparta sus ojos de Kai, no queriendo ver la decepción del menor.

"Está bien. Me estoy divirtiendo con sólo estar aquí contigo." Kai le asegura.

"¿Qué hacemos ahora?" Kyungsoo se atreve a mirar a la cara de Kai, y se siente aliviado al ver una sonrisa pensativa en su rostro.

"No sé. No sé nada de este lugar." Kai se encoge de hombros.

"¿Podemos caminar por la ciudad?" Kyungsoo sugiere.

Kai asiente con la cabeza, y Kyungsoo espera aún recordar el camino por la ciudad -habían sido casi dos años desde que se había ido de la ciudad, y más de uno desde que se había convertido en el enfermero de Kai.

Sonríe mientras piensa en los años que están por venir.

•••••

La suerte no está de su lado y comienza a llover tan pronto como salen del taxi, por lo que tienen que correr al refugio más cercano. Están en las afueras de la ciudad y el lugar más cercano que pueden encontrar es un parque solitario y húmedo, con una caseta lo suficientemente grande para ambos y se acurrucan debajo mientras la lluvia comienza a aumentar aún más.

Kyungsoo se estremece, su cabello está empapado y su camisa húmeda, y lamenta la decisión de usar un suéter delgado con tan terrible clima.

Kai tira de Kyungsoo debajo de su chaqueta, envolviéndolos bajo el calor de la chaqueta que por suerte se había acordado de ponerse antes de salir de su habitación.

"Te vas a mojar." Kyungsoo empieza a alejarse de Kai.

"Te vas a enfermar." Replica, tirando de él más cerca.

Y pronto se encuentran en un tira y afloja, Kyungsoo alejándose y Kai tirando de él más cerca suyo.
Kyungsoo se aleja demasiado en una ocasión, y es enviado justo debajo de la lluvia que se había reducido a un golpeo constante.

"Aish. Tanto para estar seco." Kyungsoo gime desde fuera de la caseta, su suéter semi-seco quedando completamente empapado de nuevo.

Kai sale de debajo de la caseta para reunirse con él y saca la lengua, tratando de probar la condensación que caía. Kyungsoo se ríe ante la vista, porque extrañaba ver el lado inocente de Kai.

"¿Quién necesita estar seco? Es mucho más divertido aquí." Kai declara, de cara al cielo y dando vueltas con gracia, Kyungsoo no puede evitar pensar que Kai sería un bailarín increíble con la formación adecuada.

Kai comienza a jalarlo hacia el área de juegos antes de que tenga la oportunidad de decir algo.

"Vamos a jugar Kyungsoo-ah" Kai arrastra a Kyungsoo hasta uno de los toboganes y luego se sienta detrás de él, empujándolos hasta que están deslizándose a lo largo del tobogán en espiral mojado por el agua, terminando amontonados al final. Los dos son un desastre sobre el suelo, sus ropas están embarradas, la lluvia los ha empapado y sus cabellos están pegados a sus rostros.

Y ríen, ríen hasta que les falta el aliento porque esto no es lo que habían planeado, tampoco lo que hubieran querido, pero el estar vivo se trata justamente de eso.

El sentimiento de la naturaleza, áspera y hermosa, dejarte llevar por la alegría de estar con alguien que amas, sin saber qué esperar, todo impredecible y nuevo.

Y no necesitan un parque de atracciones o un carnaval para divertirse, porque se tienen el uno al otro y con eso ¿qué más podían necesitar?

•••••

Kyungsoo ni siquiera se preocupa por su tonto suéter mientras rueda en el charco de líquido marrón oscuro junto a él (no tiene mucho apego por el suéter azul marino de todos modos, pero se lo había puesto porque recordó que Kai había dicho que le gusta ese color).

"¡Ven a empujarme!" Kai lo llama desde el columpio.

Kyungsoo levanta la vista del charco de líquido misterioso en el que está echado y tiene la esperanza de que sea sólo agua, incluso si no le gusta particularmente ese suéter.

Sintiéndose perezoso, Kyungsoo se arrastra literalmente hasta los columpios, pasando por donde las piernas de Kai cuelgan. Kai rueda los ojos, diciéndole que está arruinando su suéter. Kyungsoo se emociona por la preocupación de Kai en salvar la tela endurecida y terrosa (porque tenía razón, ¡a Kai realmente le gusta ese suéter!). Finalmente se levanta utilizando a Kai como apoyo, y Kai impacientemente le exige de nuevo a Kyungsoo que lo empuje.

Así que Kyungsoo hace justamente eso, empuja a Kai impulsándolo hacia los brazos del cielo goteante. Kai deja que sus piernas cuelguen libremente y se inclina hacia atrás, sintiendo el aire y la lluvia golpear su rostro. Y la sonrisa que adorna su rostro es real, esa luz que Kyungsoo ha visto sólo unas cuantas veces está de vuelta y Jongin es feliz de nuevo, está vivo otra vez y se ve libre, como si el mundo estuviera justo en la punta de sus dedos.

"Mira, estás volando Jongin." Kyungsoo grita por sobre el ruido de la lluvia, recordando su promesa.

Los ojos de Kai se amplían un poco, porque lo había olvidado, acerca de la promesa infantil que un enfermero le había hecho alguna vez. Y una risa rota sale de su garganta porque nadie recordaba las promesas de Kim Jongin, ni siquiera el mismo Kai.

"Sí, supongo que sí, ¿eh?" Kai extiende ambos brazos hacia fuera, como si fuera un pájaro ahora, y Kyungsoo lo empuja hacia el cielo de nuevo, esta vez más fuerte, como si Kai realmente pudiera volar.

"Sí." Kyungsoo le sonríe a Kai, incluso si no puede verlo y siente que todo esto es muy cursi, como si fuera a una película de chicas, porque la vida de Do Kyungsoo nunca había sido tan emocionante o interesante; esto es demasiado anormal, demasiado fuera de lo común para estar pasando. Pero eso no es cierto, se da cuenta, porque así debe ser, es lo correcto.

Kim Jongin ya no es sólo un paciente en un hospital mental y Do Kyungsoo ya no es sólo un enfermero; no, son dos chicos tontos que por fin han encontrado su propósito de vida, su razón de ser.

Y a Kyungsoo no le importa si está loco o si va a cuidar de este chico por el resto de su vida, porque él no quiere sólo animales de cuatro patas en su lecho de muerte, y no quiere simplemente pasar los aburridos hoy y mañanas solo. Quiere hacerlo con Kai, Kim Jongin, y quiere hacerlo hasta que alcance la edad madura de 60 o 70 años y ya sea hora de retirarse, para que pueda ir a casa a los brazos de Kai, acurrucarse junto a él todas las noches hasta el día en que dejen sus cuerpos, finalmente yendo hacia la eternidad.

"Esto es tan cursi." Kai espeta, y si no fuera por la lluvia Kyungsoo habría pensado que Kai está llorando.

"Tú eres el que dijo que quería volar."

"No creí que lo recordarías." No creí que nadie lo recordaría, añade en silencio.

"Recuerdo todo sobre ti."

Kai sólo responde tranquilamente con un "Qué cursi."

Kyungsoo no responde porque las palabras quedan atrapadas en su garganta, así que en su lugar, simplemente empuja a Kai de nuevo, de nuevo hacia el cielo que apenas empieza a aclararse de celeste, y sus blancas nubes hinchadas finalmente comienzan a pintarlo una vez más.

•••••

Cómo se las arreglan para volver a la habitación es un milagro para Kyungsoo.

De algún modo ellos mismos se controlan en el camino de regreso desde el parque, el conductor del taxi seguía disparándoles miradas sucias por el espejo retrovisor cada vez que Kyungsoo hacía un ruido vergonzosamente alto cuando Kai lo tocaba en los lugares adecuados, los labios de Kai viajando a lo largo de su mandíbula, su cuello, rozando el lóbulo de su oreja, sus manos vagando sobre el cuerpo de Kyungsoo.

El enfermero normalmente autoconsciente se olvida del mundo, su mente solamente pensando en Kai. El olor de Kai, la forma en que quema cuando Kai toca un solo lugar por mucho tiempo, y el viaje en taxi parece durar cinco veces más de lo que duró la primera vez.

Kyungsoo no recuerda haber pagado al taxista, su único recuerdo del evento es que alguien -debe haber sido Kai- le entrega al infeliz conductor su pago, antes de que este se marchara enfadado.

Tropiezan por los pasillos, las manos nunca soltando al otro y cuando finalmente entran en su habitación, Kai empuja a Kyungsoo contra la primera pared que encuentra. El dolor en su espalda no es registrado mientras Kai besa con avidez a Kyungsoo, ambos desesperados por más, no quieren detenerse. Debido a que es ahí mismo, en los brazos del otro. Sí, es donde pertenecen, dónde encajan a la perfección, el lugar donde están destinados a estar.

Esta vez Kyungsoo no está nervioso cuando Kai lo tira sobre la cama. No está nervioso cuando Kai levanta su camisa hasta que sale por su cabeza y cae al suelo. No está nervioso cuando Kai se quita la camisa inmediatamente después, revelando los abdominales ligeramente bronceados que yacían debajo, los mismos que él había estado soñando desde hace meses. No está nervioso cuando Kai comienza a besarlo, partiendo desde su cabeza... pero siente su pulso detenerse cuando Kai traza un camino hacia abajo, besando lentamente dondequiera que puede... y para cuando las manos de Kai están deshaciendo los botones de sus pantalones, su corazón se acelera y su respiración se vuelve irregular.

Kyungsoo se retuerce en anticipación y Kai hace una pausa para mirar al mayor, anhelo y deseo está escrito en sus ojos marrones. Kyungsoo lo ama, ama este sentimiento de excitación, de deseo -no, es necesidad, y pronto se siente impaciente.

Kyungsoo no es de ninguna manera virgen, pero en cuanto a Kai, no está seguro. ¿Hasta dónde ha llegado Kai? (¿Con quién? ¿Dónde?) ¿Alguna vez ha sido besado por alguien más? (Sin duda, un chico de ese aspecto ha sido besado antes... ¿no?) ¿Kim Jongin alguna vez ha tenido... sexo? (Este pensamiento no alegra a Kyungsoo; imaginar a Jongin teniendo sexo con otra persona arruina su estado de ánimo).

"Ah. Kai, Kai espera." Kyungsoo trata de controlar su respiración un poco, para no hacer tan obvio que está demasiado ansioso.

Kai lo mira desde donde está besando y acariciando la piel junto a su ombligo, peligrosamente cerca a otros lugares.

"¿Qué?" Tararea, continuando lo que está haciendo.

"Ah. ¿Alguna vez… has hecho esto antes? Kyungsoo espera no estar arruinando el ambiente.

"Esto… ¿te refieres a si he tenido sexo?"

"Sí."

"Oh. Sí. Unas cuantas veces en realidad. La mayoría de ellas con consentimiento." Kai murmura contra la piel blanca y lechosa, sus manos recorriendo el calor entre sus piernas.

"Espera, ¿qué quieres decir con 'la mayoría de ellas'?" Kyungsoo se sienta, soltándose del agarre de Kai.

"Sí. Algunas de ellas fueron mi elección. Mi decisión. Porque quería hacerlo, supongo." Kai intenta empujar a Kyungsoo sobre la cama de nuevo.

"¿Y las demás?"

Un segundo pasa antes de que Kai responda. "No tenía la edad suficiente para saber que estaba sucediendo de todos modos." Se encoge de hombros.

Kyungsoo se le queda mirando.

"¿Eso es todo? Se han... aprovechado de ti y ¿tú sólo te encoges de hombros?" Kyungsoo siente la ira empezando a acumularse. La imagen de algún enfermero o enfermera joven, usando a Jongin, cuyos ojos brillaban y destellaban algo mágico, enferma a Kyungsoo. Era sólo para su propio placer. ¿Por qué le importaría de todos modos? No lo dañaría, ¿cierto? ¿Y qué podría este chico con hermosos ojos y completa ignorancia hacer al respecto?

Porque, por supuesto, estaba loco. Era el que había matado a sus padres, a su propia familia, sí, él. ¿Por qué debería merecer algo, algo en absoluto?

Este mismo chico, que había estado encerrado durante tantos años y no había tomado mucho tiempo para que sus ojos se oscurecieran, cualquier luz se había ido cuando se dio cuenta de que estaba enjaulado; no en un hospital ni en una casa, en una prisión.

"Kim Jongin, detente."

Kai se detiene y rígidamente se sienta en la cama.

"¿Qué?" Pregunta con cautela.

"Te voy a sacar del hospital. Vas a venir a vivir conmigo."

Kai comienza a reírse, pero es una risa seca y falsa, suena más como si estuviera asfixiándose.

"¿Sacarme del hospital? ¿A mí? Eso es lindo, muy lindo." Escupe entre risas.

"No estoy bromeando." Kyungsoo le da una mirada dura. ¿Por qué se ríe? ¿No quiere ser libre? ¿Quiere permanecer en ese maldito hos-

"¿Qué te hace pensar que van a dejar que un loco salga al mundo? Al mundo real. Tu mundo." La voz de Kai es venenosa ahora, y no hay rastro de la excitación de antes.

"Tú no estás loco." Kyungsoo finalmente dice lo que había estado en su mente desde hace tiempo. Tiene que hacerle saber. Él necesita saber.

Kyungsoo tiene miedo cuando Kai se ríe esta vez.

"¿Qué quieres decir con que no estoy loco? ¿Estás tratando de decir que me han estado mintiendo todos estos años? ¿Qué lo que me han estado diciendo desde el principio ha sido falso? ¿Qué la razón por la que no puedo salir, no puedo amar, no puedo ser feliz es una mentira?" Kai exige con los dientes apretados.

"No es verdad. Sé que no es cierto. Kim Jongin no está loco." Kyungsoo responde con voz firme.

Más risas asfixiadas salen de la garganta de Kai.

"¿Y cómo sabes que no estoy loco? ¿Hmm, enfermero Do? ¿Es porque te sostengo así?" Agarra a Kyungsoo con fuerza, deslizando sus brazos alrededor de su cintura. "¿Es porque te beso y pretendo ser inocente? ¿Pretendo ser sano?"

"Pero sé que no estás pre-"

Kai empuja a Kyungsoo sobre la cama con fuerza y sus manos se envuelven alrededor de su cuello. Es casi como si fuera el destino, la forma en que las manos de Kai encajan perfectamente alrededor del cuello de Do Kyungsoo, como si estuvieran hechos el uno para el otro. Y entonces empieza a apretar, causándole asfixia a Kyungsoo.

Un ruido sordo hace su camino hasta los labios de Kyungsoo. El aire está dejando sus pulmones ahora...

"¿Y qué tal ahora? ¿Todavía estás seguro de que no estoy loco?" Kai lo reta, mirándolo fijamente a los ojos y luego empezando a apretar un poco más.

"No estás loco." Sale apenas audible.

Kai aprieta un poco más.

Los ojos de Kyungsoo comienzan a humedecerse.

Aire. Necesita aire.

"¿Qué? No puedo escucharte por tu asfixia." Kai incita.

Kyungsoo se siente ceder. Pero no cambia de parecer, porque está seguro de ello.

"¿Todavía quieres que salvarme? ¿Estar conmigo? ¿Con un loco?" Sigue burlándose.

"Te amo. Incluso si me matas, todavía te amaré." Kyungsoo sabe que será lo último que podrá decir antes de dejarse llevar por la oscuridad que indudablemente viene ahora-

Hasta que Kai afloja su agarre. Sus manos se alejan, cayendo torpemente a sus costados.

"¿Por qué?"

Aire corre por su tráquea y el pecho de Kyungsoo se expande dolorosamente, sus pulmones privados de oxígeno lo toman con avidez en la medida que pueden.

Una pausa. Kyungsoo respira, mareado por la ingesta súbita de oxígeno en exceso.

"Porque. Porque te amo más de lo que nunca he amado a nadie antes. Más que a mi trabajo. Más que a todos mis ex novios y ex novias juntos. Demonios, probablemente más que a mis padres." La voz de Kyungsoo va ganando fuerza ahora, su respiración está casi de vuelta a la normalidad.

"Pero, ¿por qué? ¿Por qué tú-" Kai es interrumpido por Kyungsoo.

"No he terminado de hablar. Lo he visto. Lo hermoso que eres. Lo perfecto de tu ser. No importa lo que te dijeron. Porque no es cierto. Nadie puede decirte lo que eres. Tú eres quien eres. Nadie puede quitarte la felicidad, la alegría. La gente va a tratar de decirte lo que eres. Y tú querrás escucharlos. Pero no puedes. Yo no te voy a dejar. Y-yo lo he visto. Yo-" Kyungsoo no puede respirar otra vez, esta vez porque no puede encontrar las palabras para decir lo que necesita, para mostrarle a Kim Jongin que él no es lo que dicen que es. Que él es él mismo y nadie puede decirle lo contrario-

"Sabes, estás tan loco como yo." Kyungsoo ya no está mirando a Kai, sino más bien a Kim Jongin, el chico con esos ojos estúpidamente maravillosos que están vidriosos ahora, las lágrimas amenazando con derramarse.

Kyungsoo le da una media sonrisa, sus ojos están vidriosos también y su visión está empezando a fallar. "¿No estamos todos un poco locos de todos modos?"

•••••

Resfriados.

"¿Lo dijiste en serio?" Jongin susurra un poco después.

"¿Sobre qué?"

"Que me llevarías lejos."

"Sí. Cada palabra." Acerca al menor a su pecho.

"Yo... yo quiero irme. ¿Vas a salvarme?" Es casi un gemido.

"Sí, lo haré."

•••••

El resto de su viaje transcurre sin incidentes, pero Kyungsoo está satisfecho con ver a Jongin contento, y lo que es más importante, esperanzado.

"Entonces, ¿qué tal estuvo su viaje? ¿Hicieron cosas divertidas?" Sehun mueve sus cejas sugestivamente.

"Por supuesto, eso es lo primero que tenía que salir de tu boca." Kyungsoo rueda los ojos.

"Bueno, las cosas parecían bastante intensas cuando me fui..."

"Pues te informo que nosotros no hicim-" Kyungsoo comienza a defenderse.

"Hicimos más de lo que tú siquiera podrías soñar en hacer con Luhan." Kai interviene con una sonrisa plasmada en su rostro.

"¡Oye! ¡Nosotros lo hemos hecho tantas veces que ni siquiera querrás saber!" Sehun estalla, rápidamente defendiéndose.

"¡Yah, Sehun-ah!, ¡¿qué estás diciendo?!" Luhan grita y golpea a Sehun en los bíceps con fuerza. Está de pie detrás de él mientras aclara las cosas y su rostro quema por la vergüenza. Prefiere mantener su vida sexual en privado, muchas gracias.

"Ellos actúan como si yo nunca hubiera tenido sex-" Luhan ignora las protestas de Sehun y lo arrastra de nuevo al coche, quejándose de la boca de su novio durante todo el camino.

Los otros dos se echan a reír, intercambiando miradas de complicidad, una de ellas insinuando algo de verdad en las acusaciones de Sehun.

Parte II: Tal vez || Epílogo

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