Title: Just you and me.
Fandom: RPS
Pairing: Michael/James
Raiting: NC-17
Words: 527
Disclaimer: No me pertenecen... si no estarían encerrados en una habitación teniendo sexo salvaje todo el día xDD
Advertisement: Incongruencias totales, y cosa rara que ha pasado xDD 3ª parte de "Rache", por lo que hay que haber leído "
Rache" y "
It's tea time" antes, sorry.
Notes: Para
wileret para San Valentin... y para así poder estar tranquila ya con esto xDD
Michael se removió inquieto en la cama. Notaba una sensación húmeda recorriendo su pecho, como si algo estuviese siguiendo un mapa invisible para el resto. Un gemido escapó de su garganta al notar esa ligera humedad sobre su miembro y después un frescor donde había estado con anterioridad la sensación.
Sus ojos se abrieron de golpe al sentir como algo engullía su erección. Ese algo no era otra cosa que la deliciosa boca de su compañero y, desde hacía poco, amante James McAvoy succionando, liberando y empapando su erecto miembro con su saliva. El cabello revuelto del castaño haciéndole cosquillas al rozar contra su piel. Alargó su brazo derecho hasta que los dedos de su mano se enredaron entre esos mechones color chocolate. Los ojos azules se alzaron a mirarle mientras los labios y la lengua de James abandonaban su tarea.
- No te tenía por alguien goloso, Jamie.-comentó con la voz ronca.
El castaño por toda respuesta acortó la distancia gateando hasta llegar a su boca y relamerle los resecos labios. El rubio aprovechó para atraerlo más y besarle vorazmente mientras McAvoy se sentaba en su abdomen. Sin mover ni un milímetro su cuerpo ni sin dejar de besarle, Fassbender acarició la columna del castaño con el dedo índice derecho, sabiendo que al otro le provocaría escalofríos. No se equivocó. El cuerpo sobre él tembló ligeramente mientras su dueño entreabría los labios y echaba la cabeza hacia atrás, provocando que la mano sobre su pelo rozase sutilmente la piel de su cuello.Verle sí terminó de convencerle para dar la vuelta bruscamente y apresarle entre el duro colchón y él mismo. Sus ojos, ambos pares azules, mirándose fijamente plagados de deseo y lascivia, hambrientos de imágenes del otro retorciéndose por el placer recibido del otro.
La lengua de Fassbender jugando con la oreja del escocés mientras le repetía una y otra vez “no deberías ser tan travieso, Jamie”, para a continuación descender lentamente por la mandíbula hasta llegar al mentón y volver a besar esos labios que tanta adicción han creado en él. Dos pares de manos recorriendo las pieles entrelazadas, rozándose entre ellas, buscando no dejar nada libre de su toque. Las piernas de McAvoy apresando las caderas del rubio, éste sobre él moviéndose lentamente, con calma, disfrutando de las reacciones que provoca en el otro. Las uñas del castaño clavándose en sus antebrazos, dejando marcas por las que después se preocuparán, ahora lo único que les importa son las emociones que están experimentando, los gemidos ahogados que irrumpen el silencio, hasta hace unos minutos, reinante. Los movimientos de Michael haciéndose más y más rápidos a instancia del escocés, que no deja de moverse bajo él en busca de más contacto. Sus respiraciones entrecortadas encontrándose a mitad camino en un beso totalmente salvaje que ahoga los roncos gemidos producidos al llegar por fin al clímax.
James deslizó sus piernas rozando las de Michael mientras le acogía entre sus brazos. Ambos cansados, pero con una sonrisa asomando en sus labios. Sabiendo que no tienen mucho tiempo para estar juntos, pero les da igual. Porque cuando lo están, sólo son ellos dos, sin nada de qué preocuparse.