Sábado a media tarde.
Bien, Cereza anda inspirada y tras leer una noticia sobre Kim Petras el transexual más joven del mundo una idea algo rara se le vino a la cabeza; algo así como las posibles similitudes entre Bill y Tim/Kim xD. Lo que dejo es un one-shot raro, no lo entiendo y posiblemente no de lo mejor que he escrito pero bueh, es lo que 'hay' que para mí ya es mucho considerando mi periodo de abstinencia u.u.
Fandom: Tokio Hotel
Claim:BillxTom
Advertencias: No lime ni lemon (?) xD. Y una insinuación de Bill seme o.o. Oh, sí, OoC (???) ¿Te acuerdas, Cide? *-*
Título: ¿Conoces a Kim Petras?
Tom no era bueno con las palabras, y cuando abría la boca siempre la cagaba… Como ahora, que sentado afuera del camerino que compartía con Bill, esperaba que su gemelo se contentara o por lo menos le permitiera explicarse con propiedad. Intentar explicarse, cabía resaltar.
Y es que él no era el culpable, más bien ese don inexistente de la retórica que poseía; a veces creía que esto se debía al hecho de haber nacido primero, y no llegar a tiempo a la repartición de habilidades. O tal vez a ese humor tan retorcido que poseía y que solía sacar de quicio a Bill, cual fuera la causa ahora tendría que esperar hasta el final de las entrevistas del día para poder hablar con él.
Sin nada que hacer se levantó de su sitio en el piso y fue por una soda. Todo comenzó hace un mes cuando de regreso a Alemania se encontraron con una noticia por demás escandalosa, bueno polémica debido a que a pesar de ser un país desarrollado aún quedan sectores conservadores. Era una historia vieja, poco recordaba de ella, sinceramente no es como si en verdad le importara en aquellos tiempos cuando lo único que le interesaba era poder tocar su, amada, Gibson, con su, amado, hermano. El caso es que en los titulares se podía leer “El transexual más joven” o “¿Él o ella? ¿Kim o Tim Petras?” algunos periódicos más osados ponían una foto del antes y del después; y él, tenía que admitir que Kim era una chica muy linda. Pero ese no es el hecho que marcó su vida, sino que cuando leyó uno de esos periódicos en donde exponían las razones del porqué de cambio de sexo no pudo evitar hacer algunas comparaciones.
Desde siempre, y eso no era una exageración después de todo había compartido una bolsa de placenta con Bill, conocía a su gemelo, conocía cada una de sus facetas, los gestos que acompañaban su rutina diaria, el movimiento corporal… En conclusión, todo. Aunque había ciertas veces que se cuestionaba seriamente algunas de esas conductas, y no es porque le resultaran ajenas más bien era el hecho de que en su mayoría de veces podía ver esas actitudes en algunas de las chicas del colegio o la hermana de Georg. Ciertamente no le molestaba nada de esto pues era Bill y él lo amaba así; aunque le preocupaba que algo más fuera el causante de esos desplantes.
Al terminar de leer el artículo en cuestión tenía un firme objetivo; observar meticulosamente a Bill. Hacía algunos años que habían dejado de lado eso de compartir cama o bañarse juntos, ya eran unos adolescentes no unos niños de cinco, así que escudándose en eso y no en el hecho de que ver a su gemelos desnudo le causaba cierto morbo (placer no admitido); puso en práctica su fase uno: Acercamiento fraternal para la mejora de la relación que de fondo se leía invasión al espacio personal de Bill con el fin de conocerlo a fondo.
Este plan consistía en compartir cuarto de hotel y si la ocasión lo permitía dormir juntos; pero no es porque le causara placer sentir un cuerpo casi igual al suyo pegado a él, más bien se debía a que entre ese enredo de piernas y brazos que solían hacerse buscaba alguna señal ‘anormal’ en el cuerpo de Bill como una leve inflamación en la parte del tórax o algo.
Al cabo de una semana declinó la opción de que algo físico pasara. Así que tal vez la cuestión era psicológica por lo quee pasó a la fase dos: Mejoramiento de la relación hermano-hermano empleando la técnica conversación casual, que era lo mismos intromisión en cada uno de los aspectos sentimentales o no de la vida de Bill.
Todo empezó con unas cervezas y pizza en el cuarto de Gustav quien al ver que no tenía opción cedió amablemente su recámara para la convivencia del grupo, algunas bromas por aquí, chismes por allá y ya más de tres sixs se sumaban al organismo de los chicos, para estas alturas los secretos más ‘oscuros’ empezaban a aderezar el ambiente; y fue por ello que se enteró de algunas cosas no muy gratas, para empezar Bill había tenido una relación más allá de lo fraternal con Andreas y que en alguna borrachera le había practicado un oral a Georg pero ninguno recordaba muy bien de los detalles. O que hacía algunos meses había salido con Bushido con el fin de entablar una relación más afable con Tokio Hotel pero que había terminado en una sesión del sexo más fuerte que hubiera experimentado. Al momento de esta confesión Tom estaba más sobrio que borracho y empezaba a cuestionarse si ese malestar que sentía era el producto de un adelanto de la resaca o de la vida amorosa de Bill.
Desde ese momento se propuso a sí mismo no separarse de su gemelo, olvidando el objetivo principal y adoptando el papel de hermano mayor que lo protegería de todo el mundo, o lo que era lo mismo de raperos de dudosa reputación o seudo amigos.
Para el inicio de la cuarta semana Bill estaba tan fastidiado de la situación que le puso un ultimátum o dejaba sus estupideces o le contaría a mamá de qué fue lo que en realidad le pasó al Señor Teddy. Y bajo esa amenaza tuvo que ceder.
Pasó otra semana tratando de idear un plan para poder seguir con sus investigaciones, pero nada se le ocurría y cansado de tanto pensar en lo mismo decidió escoger la idea más obvia y sencilla: preguntarle directamente.
Lo que nos coloca en la actualidad en el set de grabación de una televisora alemana, en la cual se les realizaría una entrevista, después de correr a los G’s pasó media hora meditando cómo iniciar, pero Bill se adelantó.
-Bien, Tomi, lo que sea que tienes que decir puedes soltarlo.
Miró a través del espejo y captó la mirada alentadora de Bill y eso fue suficiente para decir lo primero que se le ocurrió.
-¿Alguna vez has pensado en ser mujer?
Una mirada entrecerrada le indicó que no había sido la pregunta correcta.
-Digo, es que a veces tu actitud-se detuvo al ver el pronunciado ceño de su gemelo y trató de calmarse-. Es que sinceramente hay veces que tienes ciertos episodios muy no varoniles y… ¿Conoces a Kim Petras?
Eso le ameritó una lluvia de objetos, en su mayoría pequeños ya que Bill tenía a la mano su pequeño estuche de maquillaje-otro punto obvio que omitió-y junto a ello unos cuantos gritos que le hicieron huir del cuarto.
Después de la soda fue a buscar a David que se encontraba con Gustav. El manager al verlo le regañó por poner en un estado muy cerca del colapso nervioso a Bill, escuchó todo lo que le dijo Jost, después de todo el repelar o no hacer que le prestabas atención traía menos privilegios en los viajes; David Jost podía ser una persona muy vengativa. Aún así lo quería. Después de asegurarle que no volvería a pasar se dirigió de nuevo al camerino, había pasado media hora del incidente y esperaba que su gemelo estuviera más calmado.
Tocó dos veces, algo tonto pero de supervivencia cuando Bill estaba enojado, nadie contestó, vacilante entró, un segundo después se encontraba aprisionado contra la puerta y un muy tranquilo Bill, tanto que asustaba, se acercó a sus labios para susurrar.
-Ahora verás que tanto quiero ser mujer.
Errores, dedazos, y demás~, se agradecen ^^. Por cierto un agradecimiento a mi wife-prima por dar su muy oportuna opinión xD... :3.
Fandom: Tokio Hotel
Claim:BillxTom
Advertencias: No lime ni lemon (?) xD. Y una insinuación de Bill seme o.o. Oh, sí, OoC (???) ¿Te acuerdas, Cide? *-*
Título: ¿Conoces a Kim Petras?
Tom no era bueno con las palabras, y cuando abría la boca siempre la cagaba… Como ahora, que sentado afuera del camerino que compartía con Bill, esperaba que su gemelo se contentara o por lo menos le permitiera explicarse con propiedad. Intentar explicarse, cabía resaltar.
Y es que él no era el culpable, más bien ese don inexistente de la retórica que poseía; a veces creía que esto se debía al hecho de haber nacido primero, y no llegar a tiempo a la repartición de habilidades. O tal vez a ese humor tan retorcido que poseía y que solía sacar de quicio a Bill, cual fuera la causa ahora tendría que esperar hasta el final de las entrevistas del día para poder hablar con él.
Sin nada que hacer se levantó de su sitio en el piso y fue por una soda. Todo comenzó hace un mes cuando de regreso a Alemania se encontraron con una noticia por demás escandalosa, bueno polémica debido a que a pesar de ser un país desarrollado aún quedan sectores conservadores. Era una historia vieja, poco recordaba de ella, sinceramente no es como si en verdad le importara en aquellos tiempos cuando lo único que le interesaba era poder tocar su, amada, Gibson, con su, amado, hermano. El caso es que en los titulares se podía leer “El transexual más joven” o “¿Él o ella? ¿Kim o Tim Petras?” algunos periódicos más osados ponían una foto del antes y del después; y él, tenía que admitir que Kim era una chica muy linda. Pero ese no es el hecho que marcó su vida, sino que cuando leyó uno de esos periódicos en donde exponían las razones del porqué de cambio de sexo no pudo evitar hacer algunas comparaciones.
Desde siempre, y eso no era una exageración después de todo había compartido una bolsa de placenta con Bill, conocía a su gemelo, conocía cada una de sus facetas, los gestos que acompañaban su rutina diaria, el movimiento corporal… En conclusión, todo. Aunque había ciertas veces que se cuestionaba seriamente algunas de esas conductas, y no es porque le resultaran ajenas más bien era el hecho de que en su mayoría de veces podía ver esas actitudes en algunas de las chicas del colegio o la hermana de Georg. Ciertamente no le molestaba nada de esto pues era Bill y él lo amaba así; aunque le preocupaba que algo más fuera el causante de esos desplantes.
Al terminar de leer el artículo en cuestión tenía un firme objetivo; observar meticulosamente a Bill. Hacía algunos años que habían dejado de lado eso de compartir cama o bañarse juntos, ya eran unos adolescentes no unos niños de cinco, así que escudándose en eso y no en el hecho de que ver a su gemelos desnudo le causaba cierto morbo (placer no admitido); puso en práctica su fase uno: Acercamiento fraternal para la mejora de la relación que de fondo se leía invasión al espacio personal de Bill con el fin de conocerlo a fondo.
Este plan consistía en compartir cuarto de hotel y si la ocasión lo permitía dormir juntos; pero no es porque le causara placer sentir un cuerpo casi igual al suyo pegado a él, más bien se debía a que entre ese enredo de piernas y brazos que solían hacerse buscaba alguna señal ‘anormal’ en el cuerpo de Bill como una leve inflamación en la parte del tórax o algo.
Al cabo de una semana declinó la opción de que algo físico pasara. Así que tal vez la cuestión era psicológica por lo quee pasó a la fase dos: Mejoramiento de la relación hermano-hermano empleando la técnica conversación casual, que era lo mismos intromisión en cada uno de los aspectos sentimentales o no de la vida de Bill.
Todo empezó con unas cervezas y pizza en el cuarto de Gustav quien al ver que no tenía opción cedió amablemente su recámara para la convivencia del grupo, algunas bromas por aquí, chismes por allá y ya más de tres sixs se sumaban al organismo de los chicos, para estas alturas los secretos más ‘oscuros’ empezaban a aderezar el ambiente; y fue por ello que se enteró de algunas cosas no muy gratas, para empezar Bill había tenido una relación más allá de lo fraternal con Andreas y que en alguna borrachera le había practicado un oral a Georg pero ninguno recordaba muy bien de los detalles. O que hacía algunos meses había salido con Bushido con el fin de entablar una relación más afable con Tokio Hotel pero que había terminado en una sesión del sexo más fuerte que hubiera experimentado. Al momento de esta confesión Tom estaba más sobrio que borracho y empezaba a cuestionarse si ese malestar que sentía era el producto de un adelanto de la resaca o de la vida amorosa de Bill.
Desde ese momento se propuso a sí mismo no separarse de su gemelo, olvidando el objetivo principal y adoptando el papel de hermano mayor que lo protegería de todo el mundo, o lo que era lo mismo de raperos de dudosa reputación o seudo amigos.
Para el inicio de la cuarta semana Bill estaba tan fastidiado de la situación que le puso un ultimátum o dejaba sus estupideces o le contaría a mamá de qué fue lo que en realidad le pasó al Señor Teddy. Y bajo esa amenaza tuvo que ceder.
Pasó otra semana tratando de idear un plan para poder seguir con sus investigaciones, pero nada se le ocurría y cansado de tanto pensar en lo mismo decidió escoger la idea más obvia y sencilla: preguntarle directamente.
Lo que nos coloca en la actualidad en el set de grabación de una televisora alemana, en la cual se les realizaría una entrevista, después de correr a los G’s pasó media hora meditando cómo iniciar, pero Bill se adelantó.
-Bien, Tomi, lo que sea que tienes que decir puedes soltarlo.
Miró a través del espejo y captó la mirada alentadora de Bill y eso fue suficiente para decir lo primero que se le ocurrió.
-¿Alguna vez has pensado en ser mujer?
Una mirada entrecerrada le indicó que no había sido la pregunta correcta.
-Digo, es que a veces tu actitud-se detuvo al ver el pronunciado ceño de su gemelo y trató de calmarse-. Es que sinceramente hay veces que tienes ciertos episodios muy no varoniles y… ¿Conoces a Kim Petras?
Eso le ameritó una lluvia de objetos, en su mayoría pequeños ya que Bill tenía a la mano su pequeño estuche de maquillaje-otro punto obvio que omitió-y junto a ello unos cuantos gritos que le hicieron huir del cuarto.
Después de la soda fue a buscar a David que se encontraba con Gustav. El manager al verlo le regañó por poner en un estado muy cerca del colapso nervioso a Bill, escuchó todo lo que le dijo Jost, después de todo el repelar o no hacer que le prestabas atención traía menos privilegios en los viajes; David Jost podía ser una persona muy vengativa. Aún así lo quería. Después de asegurarle que no volvería a pasar se dirigió de nuevo al camerino, había pasado media hora del incidente y esperaba que su gemelo estuviera más calmado.
Tocó dos veces, algo tonto pero de supervivencia cuando Bill estaba enojado, nadie contestó, vacilante entró, un segundo después se encontraba aprisionado contra la puerta y un muy tranquilo Bill, tanto que asustaba, se acercó a sus labios para susurrar.
-Ahora verás que tanto quiero ser mujer.
Errores, dedazos, y demás~, se agradecen ^^. Por cierto un agradecimiento a mi wife-prima por dar su muy oportuna opinión xD... :3.