[fic] Lazo de la Vida
Título: Lazo de la Vida
Fandom: Hmmm...fandom? no lo creo... WAG femmeslash...algo frik, pero nuevo.
Pairing: Sylvie van der Vaart/Petra Frings
Rating: NC-17
Resumen: AU. Petra Frings infiltra el respeto con el enamoramiento.
Petra le relata a Sylvie la inquietud sobre el hecho de hacer el amor con una persona del mismo sexo... y con una reconstrucción mamaria.Basado en los relatos de Sylvie hechos en la historia "XXIII" (fic redactado en inglés con Joris Mathijsen/Gary Medel)
Sylvie se divorció de su esposo Rafael hacía poco. Estuvo en terapia sicológica para superar el trauma de tener el rótulo de ex-esposa de futbolista y para lidiar con el proceso. Al final, encontró su pasión en los tatuajes.
Se retiró de la actuación, pero no completamente del modelaje, ya que ella posa con los tatuajes que ella misma ha diseñado.
De España se marcha a Hamburgo y decide trabajar en una tienda de tatuajes. El primer tatuaje que hizo fue el nombre de su hijito e incluso ella misma diseña la tipografía.
La campaña de autodetección temprana, la empezó en España, poco antes del divorcio. En su gira europea, justo pasó por Alemania, beneficiando a muchas señoras y novias de futbolistas o como se dice en inglés, WAGS. Una de ellas, era Petra Frings, quien estaba atravesando una posible separación de Torsten, con dos hijas.
Pese a su alemán con prosodia neerlandesa infiltrada (de hecho, Sylvie encuentra su alemán muy chancado comparado con el hablado por su ex-esposo o el de Mathijsen), Petra se emocionó con la arenga pro-vida de la holandesa.
Al terminar el discurso y dar partida al buffet, finalmente, Sylvie decide acercarse a la alemana.
-Te ves bien con ese lacito de la vida
-Danke schön- contestó.
Petra estaba tímida. Además, tomen en cuenta que a la aspirante ex-esposa le estaba mirando constantemente el escote de Sylvie, pero ella no quería hacerse notar.
De hecho, si no fuera porque Petra se sentó al lado de la holandesa, hasta ahí hubiese llegado todo.
-¿Dónde lo conseguiste?
-No es Cartier, si me preguntas- dijo Petra- la mandé a hacer durante la Eurocopa. Es suiza. Es un MontBlanc. Fíjate la florcita.
-Interesante. Muy interesante- dijo Sylvie.
Luego, se intercambiaron los números. Se enviaban mensajes de texto e incluso iban de shopping, compraban carteras y joyas Tous (Petra las compra por sus hijitas, porque les gusta el osito, sobre todo a la menor), risas y capuccinos bien conversados.
Pero luego, Sylvie debía continuar con su gira europea.
Se dejaron de ver y siguieron criando a sus respectivos hijos y la forma de vida impuesta por el mainstream.
Pero Petra supo por un blog que Sylvie continuaba la gira por Europa en Austria. De hecho, dejó a Torsten que viera a las niñas.
Una vez más, se emocionó y ella aplaudió a la neerlandesa. Ella lucía el mismo lazo de la vida MontBlanc de la ocasión anterior.
-Insisto, Petra. Te ves bella con ese lazo de la vida.
- Tú inspiras a muchas mujeres a querer y respetar la vida preocuparse por estas- dice indicando sus senos- disculpa por ser tan coloquial...
-No...no hay problema, Petra...
No se habían vuelto a ver desde ese entonces.
Pero Sylvie vuelve otra vez a la vida de Petra, cuando se enteró a través de un blog muy conocido, que Rafael y Sylvie estaban divorciados de manera oficial.
Y ella busca trabajo en la tienda de tatuajes de Hamburgo y de hecho lo encuentra.
Petra amaba a una sobreviviente, amaba a alguien que batalló contra el cáncer de seno y salió victoriosa. Amaba a alguien que amaba la vida.
Sylvie ahora era una mujer rebelde, con el nombre de su hijo tatuado en el antebrazo. Una mujer rebelde con senos reconstruidos.
Aunque van der Vaart no sabía que ahora Frings podría reconciliarse con el futbolista del Werder Bremen.
Entonces, llamada telefónica y la holandesa parte hacia el departamento de la germana.
Y ahí estaba ella, vistiendo un bello vestido color beige, cuando la alemana le pregunta:
-Disculpa por ser tan indiscreta, pero...¿hiciste el amor con Rafa luego de la reconstrucción?
A lo que ella contesta:
-No dejé que Rafa me tocara...
Petra está en silencio. Ella estaba tímida por las cosas que probablemente diría. Tardaron tres minutos... tres eternos minutos, para que finalmente le dijera:
-Te amo, Sylvie. Quiero sentir tu beso, tu caricia. Aunque...no creo que sea lo mismo...
-Muchos me dicen eso por mi reconstrucción...espera, Petra...
Van der Vaart se saca la ropa superior, incluyendo los sostenes.
Al quedar en topless, Petra estaba un poco desilusionada, por la frialdad con la que la holandesa se desprendió de sus vestiduras.
Ella se sentó en los pies de la cama. La alemana recobra la confianza, cuando Sylvie la invita a sentarse en una de las piernas y le dijo:
-Tócame. Siénteme.
Tomó la mano de la germana y la pasó sobre su delantera reconstruida. Recorrió los alrededores. No se atreve a apretarlos, pero finalmente llega a las areolas y a los pezones.
En ese momento, sólo bastó las yemas de los dedos para masajear la punta de ambos pezones... cuando empezaron a tomar forma, Sylvie quería más aún, incitándola a recorrer el resto de la piel.
Los besos no tardaron en llegar... más las caricias de la van der Vaart que de a poco fueron deshaciéndose de las prendas de la aspirante a ex de Torsten.
La chica sólo había quedado en sostenes y una reveladora pantaleta. (A Petra les agradan más las pantaletas que las tangas).
Mientras Sylvie besaba su hombro, procedió a remover de su sostén...
Finalmente, luego de un largo proceder entre besos y caricias, ambas quedan finalmente desnudas...
-Behüren mich, Sylvie- pronuncia Petra.
Los besos eran cada vez más pronunciados y elevados de tono. Las caricias aumentaban de energía a medida que pasaban los segundos.
El único problema es que no tenían ningún dispositivo para realizar la penetración (ver "Amanecer en Leverkusen")...
La holandesa se atreve a rozarse sobre la germana... ese hecho le produjo en ella excitación profunda... nunca había sentido tan bien en su vida.
Todos sus sentidos estaban al servicio de Sylvie.
No había juguetes sexuales, ni nada por el estilo...
Los besos y las caricias era para disipar la tensión por la solución del problema. Cabe destacar que ambas han sido madres, pero ninguna de las dos ha tenido experiencia con alguien del mismo sexo y sólo han tenido experiencia con sus esposos, acostumbradas al modelo heterosexual.
Pero Petra se abre de piernas y se posa sobre los labios mayores de la holandesa.Se roza sobre ella, causándole placer.
Sylvie de a poco recobra su identidad femenina... a través de los sonidos y vocalizaciones abstractas...suspiros y aspiraciones a gemidos era parte del ambiente. Petra lo siente también.
Sin querer queriendo, la alemana utilizó una modalidad llamada tribadismo. La raíz de la palabra es griega y quiere decir 'frotar'.
-Sylvie...aw, Sylvie- gemía Petra.
Los clítoris se encontraban entre sí para producir la sensación placentera... jamás ella había tocado otro similar al suyo.
Pero la Frings encontraba un poco incómoda la situación, a lo cual cambió con caricias y besos la posición que más tarde iba a adoptar. Ella lamía el pezón de la neerlandesa, lo cual hizo que sus sentidos se exacerbaran más de la cuenta...
Hasta que luego, se sobreviene lo máximo...
Van der Vaart se le ocurre abrir la piel entre el monte de Venus y los labios menores. Eso dio como resultado que el órgano eréctil femenino quedara al descubierto.
La conjunción de ambos clítoris y el oscilar exquisito de Sylvie provocó que aquello fuera como un cartucho de nitroglicerina en el cuerpo de Petra...
Ella gimió todo lo que nunca gimió cuando estaba con Torsten. Sylvie también lo hacía. Jamás había logrado en su vida un orgasmo tan exquisito como aquel día.
Por primera vez, desde su cirugía, que resucitaba como mujer. Pronunciaba el nombre de Petra...
-Siento que...¡Oh Sylvie! siento que...
Petra no pudo decirle nada, sin embargo, olvidó todo...y derramó un líquido transparente.
La neerlandesa queda asombrada con lo que había pasado...pero de todos modos, cae exánime sobre ella...
-Eso no sé lo que es...pero me hiciste mujer y eso es loable en ti...¡Oh Petra! Este día jamás lo olvidaré.
-Yo tampoco...ahora sé lo que es hacer el amor con una sobreviviente.- dijo Petra.
-Gracias por todo... gracias por todo...Petra...
-A ti Sylvie...porque me hiciste ver lo poderosas que podemos ser...
-Quédate a mi lado...estoy muy cansada.
-No te dejaré...yo también lo estoy.
Se quedaron jadeando, mirando al cielo y acariciándose el pelo y abrazándose la una a la otra.
Luego de aquello, se despidieron y no han vuelto a verse.
Petra finalmente salva su matrimonio y Sylvie se entera...pero aún la sigue amando.
De hecho, dos clientes salieron de la tienda de tatuajes donde se encontraba la van der Vaart trabajando, cuando de pronto, una visita la sorprende.
La abraza de manera muy cariñosa.
El mismo día en que pasó, van der Vaart rindió cuentas de su lesbianismo.
Ahora ya no tiene reparos en decirlo. Incluso hasta se lo contó a un colega de su ex esposo.
Ella ya no tiene miedo.
Porque ella ama la vida en todos sus aspectos.
Su rebeldía se complementa con su femineidad.
Ahora es una nueva Sylvie van der Vaart.
Una Sylvie que ama la vida...y a Petra Frings.
FIN HISTORIA
19 AGOSTO 2010
N.A: Sylvie estimuló las glándulas anexas de Petra, esto
provocó un fenómeno poco frecuente, pero biológicamente factible llamado 'eyaculación femenina' o squirting en inglés.
Sólo es posible mediante la masturbación o una relación lésbica, pero se puede lograr.