Jan 14, 2006 07:08
Mi otra habitación.
Llego de trabajar. Muerto. Camino sin hacer ruido en casa para no despertar a nadie, son las seis de la mañana. Entro en mi habitación. Mi rincón, mi lugar, mi fábrica de sueños, mi creadora de pesadillas. Pero esta vez es diferente a ese cuarto frío que me hace recordar cada día donde estoy. La luna brilla en el cielo con una luz mágica, esplendorosa. Me da calor, me recoge, me abriga. Hoy la luna que se refleja en el alféizar es distinta, me recuerda qué hago aquí. Parece que me habla, que me quiere proteger, que me ayuda a seguir. Me dice que luche, que continúe peleando por mis sueños como nunca. Le pido un deseo. Mi alma gemela hace lo mismo.
Tengo ganas de vivir. Y esa luz que me embruja me recuerda que estoy vivo.