Abre la puerta y sonríe, no puede hacer otra cosa, se besan en la mejilla y deja espacio para que pase, todos se saludan, Gale les mira, sonríe, esta claro que sus amigos siempre van a estar ahí hasta cuando no sabe ni siquiera que los necesita, pero ahí están, sonriendo, bromeando como aquella primera navidad que pasaron todos juntos, muertos de frio, en aquel recóndito pueblo de Toronto, cuando tras la nevada decidieron irse en coche todos juntos.
No sabe si todos saben lo que ha pasado entre Randy y él, y han querido venir para que no se sienta solo, porque son las primeras navidades que no pasa con Randy. Porque el hecho de que se estén presentando de uno a uno en su casa, sabe que no es casualidad y una parte de él quiere enfadarse y echarles a patadas de su casa, pero no lo hace, porque aunque realmente lo que apetece es estar solo y regodearse en el dolor, pero sabe que tiene toda la vida por delante para poder hacerlo, porque es lo que mas le apetece.
Sin embargo vuelve al salón viendo como se han acomodado todos en el salón mirándole y sonriendo y él se siente incomodo, intimidado, observado, no quieren que vean su dolor, no quiere que vea como esta totalmente hundido, no quiere mostrarse vulnerable y sabe de sobra que en estas fechas es cuando mas vulnerable y desarropado se siente, por eso están ahí sus compañeros, de rodaje los que una vez fueron su familia y lo siguen siendo
- Bueno Gale… ¿nos vas a dar de cenar hoy?
- Sinceramente os debería mandar bien lejos, por venir sin avisar
- Bah sabemos que estabas deseando vernos
- No te pases -dice sonriendo-
- ¿va a venir alguien mas?
- Habéis traído el árbol, el pavo, un entrante… creo que falta el postre..
- ¿es que tu no vas a poner nada?
- ¿Qué tal la casa?
- Vale… tu ganas -dice Scott sonriendo-
Nadie dice nada sobre lo del postre, razón que le confirma que todos saben lo que ha pasado y que ninguno espera que Randy aparezca por la puerta. Que todos saben que Randy por fin ha encontrado a alguien con quien ser feliz y olvidar a Gale y se alegran por él, que él ya ha pasado pagina, y esta iniciando una nueva vida feliz y se la merece, así que están ahí, apoyando al pobre Gale. Él que no supo dar a Randy lo que merecía y ahora ya es demasiado tarde para ello. Hay cosas que no están destinadas a pasar y otras están destinadas a acabar y esta es una de ellas. Aun no se puede creer que todo haya terminado por el friki ese, no se puede creer que todo haya terminado, y que haya sido él quien ha dado el paso, quien siente tanto dolor en el pecho que apenas le deja respirar, siente su corazón latiendo lento y se pregunta si acabara por dejar de latir un día. No quiere pensar en él. Porque duele, duele mucho, ha sido demasiado tiempo intentando alargar algo que ambos sabían que no iba a durar, que no podía funcionar, han sido muchos años de agonía, que ya por fin han terminado
Nadie le ha mencionado y sabe que quizás nadie lo haga, no al menos en esas fechas. En esta puta época del año, quizás con el tiempo, si que pueda hablar del tema, hablar de él, pero en este momento se le hace imposible.
Mira a sus amigos y se da cuenta de que todo ha terminado, de que realmente ya no hay marcha atrás. Es ese preciso momento en el que hay que pasar pagina, en el que es su momento de pasar pagina. Lo único que no cuadra son las constantes llamadas de Randy, aun sabiendo que nunca va a escuchar su voz al otro lado. Supone que simplemente son los remordimientos de que todo se haya acabado así, quizás los remordimientos por todos los buenos momentos vividos. Todo se acaba, pero a veces tenemos una obsesión con que las cosas acaben bien y a veces es simplemente imposible.
- Bueno, sacare el vino… ya esta frio
- Bien… sabemos que eres todo un experto en vinos
- Soy experto en muchas cosas, por desgracia de la gran mayoría nunca seréis testigos
- Yo me lamento cada día por ello -dice Peter- pero… ya me estoy haciendo a la idea..
- Siempre supe que me equivoque a la hora de elegir.. -dice bromeando y sonríe-
Coloca las copas y sirve el vino en la mesa
- Primero un brindis -dice Sharon muy segura de si misma-
- El brindis no es de Nochevieja, por el nuevo año y los buenos propósitos y toda esa mierda.. -protesta Gale-
- Yo brindo muchas veces al año, no se tu…
- Bien… si te hace ilusión… brindemos -dice resignado-
- Bien.. por todos nosotros, por los que estamos y por los que ya no están, porque disfrutemos de estas fechas con las personas que deseamos tener en nuestras vidas, sin importar nada mas… y que Santa Claus nos traiga todo lo que hemos pedido…
- Porque sigamos teniendo trabajo felicidad y amor el año que viene y siempre….
- Porque celebremos muchas mas navidades juntos
Gale les mira y sonríe, todos han alzado su copa y es su turno, es su turno de levantar su copa y decir su brindis y se da cuenta de que no puede hablar, de que no sabe porque brindar, no sabe que es lo que desea para esas fechas ni para el año que viene ni para el resto de su vida, y lo único que tiene claro que le gustaría tener en su vida, ya no está, porque siempre fue demasiado cobarde como para hacer las cosas que sabía que tenía que hacer, para decir lo que tenía que decir sin importar nada mas.
Al final levanta su copa, con un mensaje claro, con un deseo claro
- Porque santa Claus me traiga este año lo que merezco
Todos chocan sus copas y beben un sorbo de vino.
- Bien, ya podemos comenzar a cenar
Es en ese preciso instante en el que vuelva a sonar el timbre de la puerta.