Sobreviví
Damas, caballeros, sigo viva. He tenido que esperar para esta entrada unos días, para conocer un poco más a la gente. El tema principal del post, El comienzo de clases. Como algunos sabrán, he comenzado en un nuevo instituto. Sinceramente, estaba acojonada.
Los profesores son unos cabrones. Nos matan a trabajos, temarios y deberes, a pesar de ser la primera semana. Nos han puesto un parte colectivo y van a castigarnos a toda la clase. Es un coñazo eso de patearte el instituto para ir de una clase a otra, en un día si estamos dos horas seguidas en nuestra clase, es un milagro. Salimos tardísimo y siempre me pierdo los 10 primeros minutos de la serie de las series. Y, ¿saben qué? El Fernando de Herrera es el mejor sitio del mundo.
Porque tenemos dos recreos. Porque en el puesto venden incluso perritos calientes. Porque el chico de la primera fila de matemáticas está que te mueres, y me he colgado (irremediable e irreversiblemente) de él. Porque el chico que está detrás mía es un pesado, aprovechado y depravado y porque el que está junto a él siempre me defiende y da la cara cuando yo no lo pido. Porque me giro quince veces al día cuando llaman a la otra chica de la clase que se llama como yo, y en matemáticas hay otra con la que comparto nombre y apellido. Porque me he ganado a la profesora de biología y porque el de lengua tiene pintas de pervertido. Porque hay un chico clavado a Gale Harold, otro a Ringo Starr y un clon de Mick Jagger. Porque veo cunco veces al día a uno que podría pasar perfectamente por el novio de
ranki (físicamente, no es que me lo invente). Porque comparto clase con los de humanidades y porque mi grupo es el mejor del mundo.
Es como un universo nuevo, ¿saben? Aquí no te juzgan, ni te repudian, ni te utilizan para copiar los deberes. Aquí se te acercan, se presentan y te dicen que vaya falda más chula llevas. Te dicen que te pareces a otra chica de la clase y te preguntan si eres un poquito hippie. "¡Qué guay, una hippie! Por cierto, ¿puedo sentarme contigo en Métodos de la Ciencia?". Porque NO se separa la gente por estratos y en los recreos llegamos a estar juntas las 18 chicas que somos en la clase. Porque he hecho más amigas de las que pensaba poder tener (y en un tiempo record). Porque una toca el violonchelo, otra es de aquellas pijitas a la antigua que le gustan a las madres, porque no dan a una oportunidad de cerrarse en banda. Porque sentarte en dos clases distintas con la misma persona es imposible y, repito, estoy colgadísima por el chico de matemáticas. Porque dejan DAR CLASE y son mínimamente maduros.
Porque es el mejor instituto del mundo.
Y sé que no viene al caso, pero estoy siguiendo Friends en Cuatro (oº) y, a pesar de haber visto ya la serie completa (dos veces), esta vez ha sido aún más KYA. La boda de Mónica y Chandler (mis personajes favoritos entre los favoritos). Especificando: Gary God Oldman escupiendo a Matt Leblanc mientras dice la palabra "petate". Iba a darme un algo, en serio. Creo que mi suspiro-fangirl se oyó incluso en el primer piso. Casi salto sobre mi padre cuando, en uno de mis filosofeos sobre el fin de la temporada, dijo "¿quién es ese Gary Oldman?" y mi madre le contesta "es ese actor que sale". Conté hasta 10: "No, Gary Oldman no es ese actor. Es EL actor. Y si volvéis a usar su nombre en vano, la ira de las fangirls caerá sobre vosotros". Creo que están planteándose el llevarme a un psicólogo.
Por cierto, esta noche lo voy a tener dificil para ver Queer as Folk. Mis padres vieron el avance de esta noche y casi les da un chungo, entre la homofobia y el escepticismo. "Mira, una serie de maricones". ¡JA! Volví a conta hasta diez, esta vez para no suspirar -de nuevo- ante la imagen de... ah, Dios *se desmaya solo de pensar en la serie*