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- Saluda desde tinieblas de kleenex, mocos y dolor muscular en general-
Tenía algunas cuatro tonterías escritas en word, para postear esta noche después del trabajo, o mañana. Lo que ocurre es que aún no las he terminado, pero me he visto en la necesidad imperiosa de contar lo siguiente:
Resulta que alguno de mis vecinos ha instalado una red inalámbrica. Como llevo varios días en cama, decidí anoche traerme el ordenador al cuarto donde duermo, conectado a internet con mi cutre sistema de cable-de-teléfono-de-tres-metros. Para mi sorpresa, sin querer, he pulsado la tecla de conexión inalámbrica (lujo que únicamente he podido disfrutar tirada en los pasillos de la universidad) cuando ¡plof! mi pequeño ordena me avisa de que una red se encuentra disponible. ¿Que puedo deciros? It Works!!! y ahora no tendré que extender el super cable por todo el pasillo! Es genial esto de aprovecharse de lo que pagan los demás , jiji. (Esperemos que dure)
Ahora me siento más Carrie que nunca, escribiendo en mi portatil sobre mi inmensa cama de 1,15 (aunque con mucho menos estilo, claro)
Esta noche me gustaría revisar vuestros diarios y comentaros un poquito. Veremos si no vuelvo al borde de la axfisia por esta invasión de mocos