Eyeshield-21 Review

Jan 20, 2009 00:39

(Mierda con la cosa esta que se me había comido la review!)

Eyeshield21- Opinión y Review...

Me he traicionado a mí misma y a mis gustos... Alguna vez tendría que pasar, ¿no? Bueno, pues ha pasado.
Me explico.
Hace un tiempo, durante una quedada,leviosa8  puso un par de capítulos de un nuevo anime de deportes que quería enseñarnos. El anime en cuestión iba sobre futbol americano (que no rugby, que son cosas diferentes) y un chavalillo que a todas luces se convertiría en la estrella del equipo. En si mismo ese argumento no me interesaba, pero me reí mucho viéndolo, tanto por el diseño de personajes como por las situaciones bizarras en que aparecían más que por la emoción del deporte en sí.
O sea, cuando digo que me reí mucho me refiero a que me reí mucho.
Y así, más tarde, le pedí a esa amiga que me pasara los primeros capítulos del manga para leer en scanlations. Y ahí quedó la cosa.

La verdad: no me gustan los manga-anime de deportes (bueno, tal vez el día que saquen uno dedicado a la equitación y dibuje bien los caballos, hasta lo veo y todo); no me gustan porque no es el tipo de historia que me interese. En primer lugar porque los deportes no me atraen salvo unos muy concretos; luego, porque ya en la etapa colegio-instituto me tragué unas cuantas series (con 13-14 años tampoco tienes mucho juicio) tales como “Campeones” (“Capitan Tsubasa”) o “La Panda de Julia” (no sé el nombre original ahora mismo) y demás... y la única que realmente veía con ganas porque me gustaba más allá de cualquier otra cosa era “Chicho Terremoto”, que si bien iba sobre baloncesto y te daba pequeñas lecciones del juego de manos de Bobby (sí, el perro con calzones), pero que realmente veía porque me reía como pocas veces me he reído viendo anime.
Es curioso que normalmente los animes a los que más me he enganchado, lo he hecho porque en su momento me partía la caja con ellos.

La cuestión es que no me gusta la idea de ver partidos aaaaaaaaaaaaaaargos sobre un deporte que me trae al fresco, tampoco me gusta la idea de esa rivalidad tan japonesa sobre “fulanito es el mejor haciendo la colada/yo tengo que superarle y lavar más blanco”, que da lugar a miradas asesinas, odios y otra clase de cosas que, yo como buena y vaga española, me parece que están más cerca de la obsesión enfermiza y la competitividad pura y dura antes que un poco de sana envidia que ayude a mejorar. Puede que la filosofía budista de los japos del tipo “intenta siempre mejorar” sea lo que quieran transmitir, pero de ahí a los extremos obsesivos de los animes de deportes, lo encuentro totalmente exagerado. Y otro tanto si nos ponemos a hablar sobre las fantasmadas y proezas físicas de los jugadores... Eso no me importa cuando hablamos de series de fantasía, pero cuando son estas cosas, me pongo en plan “¡Venga ya, hombre!”

Además: aunque ya haya perdido la cuenta de todas las series que he visto (aunque puedo recontarlas), llega un momento que es difícil que te sorprendas con algo nuevo, así que si veo una serie nueva, tiene que engancharme por un motivo mejor que solo el de hacerme reír. Para eso ya tengo “Boboboo” y sus paridas, y no por ello me he enganchado.
Así que, en resumen, hay otros géneros que me gustan más y que no tienen los detalles irritantes que veo en los animes de deportes.

Entonces, ¿cómo cambié de opinión?

Bueno; había visto algunos fanarts de la serie en DA, y hace poco, viéndolos de nuevo con loremaula  , me piqué para saber qué eran y de dónde habían salido. Así que comencé a ver la serie de nuevo en el Youtube, donde la mayoría de los capítulos (creo que hasta el 124) están subtitulados en español bastante bien, sin localismos ni faltas de ortografía. Por otro lado también le eché un ojo al manga, que según avanza respecto al anime, se ve que cambiaron escenas, las censuraron o simplemente apuntaron de otra manera. Como suele pasar, los anime son una versión más relajada de los manga en los que se basan, y aunque los capítulos de humor son memorables en el anime, lo cierto es que éste, con tal de dar un final que el manga no tenía, han metido bastantes capítulos de relleno hacia el final que se hacen largos y artificiosos. De hecho el final del anime culmina con el partido final entre los dos grandes antagonistas, mientras que el manga va más allá.

En todo caso, mientras veía ambos, he pasado bastante-demasiado de los partidos en sí mismos. Mi nivel de autismo en ese sentido hace que realmente todavía no me haya enterado muy bien en qué cosiste ese deporte aparte de anotar tantos corriendo con un balón en forma de melón (o cabeza de Stewe). Porque en realidad yo he ido a ver lo que me interesaba: el humor y unos personajes esperpénticos en medio de un instituto lleno de situaciones bizarras al más puro estilo [b]“Ranma ½”[/b] y en donde a ratos se celebran partidos.

Y de hecho esa es digamos la principal razón por la que me ha gustado esta serie. Los personajes y su interacción + situaciones serias + situaciones humorísticas. Los partidos como tales no me interesan (ya sé que van a ganar) aunque sí otra serie de cosas sobre los mismos que diré a continuación.
Aparte del humor, tal vez lo que más me haya gustado sea la idiosincrasia del equipo protagonista. Como en todos los animes shonen la cosa consiste en “pásale el balón a Will” con tal de ganar, y el resto mirando... una cosa que *odio* en muchas series y que hace que tenga una tirra casi irracional al protagonista... pues en esta serie no es así.
Al menos no tan exagerado. Es cierto que el chavalillo corredor es el protagonista y que es la estrella y blablabla, pero en este caso no es como en “Capitan Tsubasa” donde Oliver ganaba los partidos con un hombro pocho, la pierna hecha puré y pensando cosas raras sobre el balón (“el balón es mi amigo” decía), sino que es más un trabajo de equipo donde todos los personajes brillan con luz propia y muchas veces se comen con patatas al protagonista.

El equipo protagonista, los “DeimonBats”, son una panda muy ecléctica de tipos raros y yo diría que hasta feos y deformes. En clara contraposición están los guaperas y divos de los equipos a los que se enfrentan, pura carne de cañón solo por sus caras bonitas y ejércitos de fangrrlss (tanto en el fandom como en la propia serie) que babea por ellos. Me encanta ver como un personaje que parece un mono u otro que parece una castaña les patean a todos ellos. Éste motivo y la interacción de los propios personajes (más algunos de los equipos contrarios) hacen que los partidos tengan un punto interesante más allá del juego en sí... cuando se los toman en serio, porque las coñas no cejan en toda la historia.

Es aquí en donde pasamos al apartado de los personajes. Son bastantes porque el equipo tiene 11 jugadores+acoplados y los de otros equipos que tienen algo de importancia. A saber:

*Sena Kobayakawa:


¿Qué será esa costumbre japonesa de ponerle a los protagonistas de los shonen el nombre de un río? Bueno, es el prota, claro. A primera vista encaja en el esquema shonen de japonés de ojos grandes y mirada viva, con cabellos encrespados y tozudo como mula que lucha por ganar hasta el final y blablabla. Tomemos como molde a Seiya (otro río) y hagamos fotocopias, que así los tenemos a todos. En fin...
Afortunadamente Sena no es así, o al menos no es así cuando no está jugando. Me gusta más en su día a día que durante los partidos. La razón es que Sena era un chavalillo del que todo el mundo abusaba, y cuya única defensa era salir por patas, literalmente; razón por la que acabó en el equipo jugando en el puesto de “pilla el balón y sal corriendo con él hasta la meta”. De hecho ya en el primer capítulo le pasa que le persigan los matones del instituto. Sena, aunque madura mucho a lo largo de la serie, no deja de tener ese aire inocente y cándido de niño que realmente no tiene malicia (candidez bien entendida, no idiotez como Goku adulto) , y a mí al menos me encanta su amistad con otros personajes, sobre todo Monta, o cuando se acojona o mete la pata por su torpeza. No es mi personaje favorito pero sí me cae bien considerando que es el protagonista.

*Raimon Tarou (Monta):


Nombrando a Sena, tengo que nombrar a éste necesariamente. Monta es un mono, literalmente... incluso su actor de doblaje en la serie es el mismo que el de “L” en “Death Note”, que ya sabemos que es simiesco. Su aspecto es casi el de un chimpancé, y tiene fijación por los plátanos y por hacer maniobras acrobáticas muy simiescas...
Vamos, que pone a huevo que los demás le llamen “monito”, aunque a él eso le cabrea mucho.
A mí me gusta por varias razones: tiene un sentido práctico, es franco y además, pese a no ser un jugador que destaque por su físico (todo lo contrario, es muy caricaturesco), ayuda a ganar sin que sea el protagonista, lo que siempre son puntos extra para mí. Además, me encanta su amistad con Sena y lo colado que está por Mamori (que no le da bola, claro; es un crío), cosas que lo hacen más humano y creíble. En el manga y el anime, si bien de forma distinta, tiene un par de muy buenos capítulos sobre lo que he mencionado arriba, y que en uno de ellos salga con mucho protagonismo Ikkyo, el Vegeta-budista, que también es un personaje que me gusta mucho pero que es de un equipo rival.
En fin: monta es un buen ejemplo que demuestra que para ser un buen personaje no hace falta tener un adonis lleno de traumas y facetas, sino simplemente una persona normal e incluso poco agraciada

*Hiruma Youichi:


]
Mi favorito, tal vez para mi desgracia -_-, porque realmente es el personaje más popular que hay y con todo lo que eso conlleva. Aunque Hiruma me encante, sobre todo en el manga, como es tan popular, se le usa un tanto indiscriminadamente y hay capítulos en el anime en donde está claramente de más. Pero bueno, ese no es el tema ahora.
Lo cierto es que Hiruma, pese a no ser el protagonista principal, se come a todos los demás con patatas. Cuando le vi por primera vez, pensé que era un cruce entre vampiro y super-saiyan, si bien su intención es que parezca un demonio para así amedrentar a sus rivales y llevarse a todo el mundo de calle. Si bien no es el mejor jugador, sino que es incluso un tanto enclenque considerando al resto, y su aspecto (digan lo que digan las fangrrrrrls) es repelente, él es de hecho el cerebro y el capitán.
Hiruma lo consigue porque gracias a él se ganan todos los partidos; es muy inteligente y sus planes van desde la pura estrategia a la salida chorra pura y dura, eso sí. Para muestra, un botón.

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Además de captar atención por sus salidas, Hiruma es un personaje con muchos matices; está obsesionado con ganar, aunque no le importa el premio sino el hecho de ganar en sí, al parecer debido a ciertos piques familiares con su padre que no han sido desvelados todavía en su totalidad. En todo caso es el que consigue llevar al equipo a la victoria, aunque luego en la práctica sean los demás los que marquen los tantos.

Su relación con los demás es también compleja. A mi parecer, con Sena y Monta es un poco como un maestro-hermano mayor, en plan Piccolo y Son Gohan. Los demás, aunque le tienen miedo -siempre va a punta de metralleta- le acaban respetando y viendo como su líder, incluso sus amigos de toda la vida. Y él es junto con Sena, el único en tener una relación amorosa en curso a lo largo de la serie que parece bastante popular.
Personalmente me encanta todo lo referente a este personaje, aunque encuentro que a ratos está sobre-explotado y pasado de rosca en algunas cosas que podrían haber sido prescindibles.

*Kurita Ryokan:


El mejor amigo de Hiruma en términos reales (Musahsi se perdió buscando setas) y personaje que nada más verlo me pareció una castaña... en el sentido literal, no figurado. También es uno de mis favoritos, tanto por su aspecto deliberadamente caricaturesco, como por su candidez y benevolencia, salvo cuando entra en modo furioso. Kurita es el culpable de que todos los demás hayan acabado jugando al futbol, aunque no se sabe muy bien de dónde le viene la afición más allá de sus ídolos infantiles. En cierto modo es el causante de que haya historia.
También me encanta sobre todo su relación con Musashi y Hiruma, especialmente el último. Viéndolos son un poco como “el gordo y el flaco”, aunque cambiando personalidades donde Hiruma pone la mala leche y el sarcasmo mientras que Kurita pone la benevolencia y candidez, pero que le para los pies al otro cuando es necesario. Kurita es de nuevo uno de esos personajes que no tiene papeles para ser popular pero que hacen que me guste el grupo.

]*Gen Musashi: junto con el anterior, otro de los grandes y mejor amigo de Hiruma, aunque tal vez sea el personaje que me da un tanto más igual que el resto del grupo. Es también uno de los miembros fundadores y el más serio de todos los personajes, salvo en algún
capítulo humorístico en donde hace cosas -IC- que también me han hecho partirme la caja. A lo primero aparece un tanto en las sombras en plan “rey Arturo, cuándo volverá”, pero que una vez que aparece, si bien hace cosas y su interacción con los amigos y el resto del grupo, tampoco es para tanto... al menos para mí.
Es el más serio en el sentido de que es el más adulto de todos. A raíz de la enfermedad de su padre, él se ve obligado a trabajar para salir adelante pese a ser todavía un estudiante, lo que hace que sea mucho más maduro y no tan alocado como el resto. Pero como no falla en las series japos, la cosa está un tanto pasada de rosca.

*Los hermanos “Haaa”:no son hermanos, sino un trío de matones que se ven metidos en el equipo a base de chantajes y casualidades hasta que al final acaban formando parte de él pese a sí mismos. Se les conoce por ese mote porque tienen esa muletilla cada vez que se sorprenden o retan por algo. También son los matones que persiguieron a Sena en el primer capítulo.
Sin embargo, conforme va pasando la serie, se van viendo matices sobre ellos con sí son interesantes, sobre todo en el manga. El mayor también tiene pique con el padre, y los otros dos, uno aspira a divo -aunque se lleva un canto en los dientes- y el otro es aficionado a leer comics... me encanta una escena del manga en donde dice “Los comics yankies también están bien... supongo” y otra en donde sale dibujando una historia de su invención llena de fantasmadas.
Físicamente son los más normales de todos los personajes, pero su comportamiento y situación también los hace fuera de lugar.

]*Montón de personajes bizarros.
Entiéndase por eso a todo el montón de miembros del equipo que también tienen su protagonismo pero que tampoco necesitan un desarrollo exhaustivo. Entre ellos destacan: Daikichi Komusubi, el clon de Appanaman (o como se escriba) que es tal vez el personaje más deforme y bizarro de todos, pero que admira a Kurita por su fuerza (y menosprecia a los Haa por eso), y sigue a Hiruma porque es su sensei, sin cuestionarle en absoluto. También tiene sus momentos, pero es un personaje más bien del montón.
Otro personaje bastante significativo aunque englobado en el grupo de “los simples” (genial el capítulo en que ganan postre gratis por un año en la cafetería del instituto) es Manabu Yukimitsu], una rata de biblioteca obligada a serlo por culpa de su madre, pero acaba siendo
parte importante del equipo, aunque pase mucho tiempo en el banquillo. Tal vez este personaje sea el que mejor expone cómo un tipo flacucho y medio calvete puede ganar a los demás.
Otro es el perro de Hiruma, Cerberos, que al final acaba siendo un perro humanizado, si bien solo es mala leche -los animales se parecen a sus dueños- y solo le mueve el hambre; hace cosas que tienen utilidad y da pie a muchos momentos humorísticos.
Finalmente el personaje que más me da igual de toda la panda Natsuhiko Taki “El Chivo” (le llaman así por la barbita y porque está como una cabra), el hermano de Suzzuna. Ese, aunque a ratos tiene momentos -además de los partidos-, deja la estupidez de Gourry a la altura del betún y solo está ahí para hacer la gracia. No le odio, simplemente no me interesa.
Hay más personajes, pero tampoco son para seguir mencionando.

*Las chicas, Mamori y Sezuna:
Un problema casi endémico de los manga, del tipo que sean, es el estereotipo de los personajes femeninos, siendo tanto una representación ideal del prototipo de mujer-esposa japonesa como de otros valores que las mujeres occidentales encontramos machistas, y que desgraciadamente dan lugar a mucho bashing en todos los fandoms a las mujeres, cosa que detesto.
No he metido mucho la nariz en este fandom, pero hasta cierto punto parece que no es así, o al menos no tan exagerado como en el tan repelente fandom de “DeathNote”.En la serie hay varios personajes femeninos (Toriyama es el que tiene el dudoso merito de haber hecho mangas sin ni una sola mujer), aunque solo dos destacan por su protagonismo más o menos constante. Ellas son...

Mamori Anezaki:


La chica sale desde el principio de la serie, y es la mejor amiga de Sena. Más tarde, leyendo el manga, descubres que su madre es medio yankie, lo que hace que tenga unos rasgos un tanto diferentes al resto y hable inglés razonablemente bien. También se ve que considera a Sena (digan lo que digan algunos fans) como su hermano pequeño y ha cuidado de él durante toda la vida, protegiéndole de los matones. Es ahí en donde comete la primera falta que los fans le echan en cara: el proteger a Sena y no darse cuenta de que el chavalillo es la estrella del equipo -cosa que es mantenido a propósito en secreto- porque durante un tiempo le sigue viendo como un crío pequeño. Mamori NO es la única que se equivoca en ese sentido pero sí a la que más se le echa en cara... ¡tócate los pies!
En todo caso, a primera vista, Mamori podría haber sido otra “Patty” de campeones; la típica chavala que se pasa el día suspirando desde el banquillo por el bien-estar de su amado mientras que el otro pasa de ella como de comer mierda... Pero afortunadamente no es así.
Mamoiri, merced de una jugada de Hiruma, pasa a ser la manager del equipo, así que todos los trabajos de logística recaen sobre ella, tanto que al final acaba por desarrollar un lenguaje de signos con el que poder comunicarse en secreto con Hiruma durante los partidos. También es muy trabajadora e inteligente, aunque le pierden los pasteles de crema -su obsesión- y dibujando da pena... En el manga me encanta el diario que lleva sobre lo que van haciendo día a día, todo hecho con dibujitos en plan niño de parvulario XD.
Por último, a lo largo de la historia, Mamori empieza a ver a Hiruma de otra forma y se ve que hay rollete en medio. Es una pareja aún no resuelta (Hiruma es un personaje muy complicado en muchos sentidos) y que me gusta aunque no es de mis más favoritas. Me ha sorprendido ver lo bastante bien acogida que está en el fandom.

Suzunna: la otra chica del grupo y la hermana del jugador más idiota del equipo. Ella, al contrario que él, es muy lista y sobre todo observadora, aunque no deja de ser una cría. Es la jefa de animadoras (el resto tampoco es que pinten mucho) y tiene complejo de Lina Inverse en cuanto a su desarrollo físico. No me cae mal, aunque a ratos parece que está ahí solo porque forma pareja con Sena, si bien su relación es muy cándida e inocente, muy tierna... y Sena no parece ni darse cuenta de por dónde viene el aire. También está ahí para arreglar los temas que los demás no se atreven a decir (Suzunna, ya dije, es muy observadora) y patearle las costillas a su hermano cuando todo el mundo lo pide a gritos.
No me cae mal, es graciosa, pero creo que se podría haber desarrollado más.

Hay otras chicas en la serie pero no hay espacio para eso.

Hay otros personajes de otros equipos, como Panther, el chico negro del Bronx, o Ikkyo, el Vegeta-budista, que me caen bien, aunque no tienen el mismo atractivo bizarro de todos los de antes. Luego hay una laaaaarga colección de guaperas y rivales apolíneos a los que patean el culo y que me dan más o menos igual, y por último el personaje que más detesto de todo la serie si bien su rol es muy importante, Agon Kongo, aunque parece que tiene muchos fans.

En fin: como ya dije, no veo la serie por los partidos especialmente, sino por los personajes, el humor y las situaciones en las que se envuelven. Me encantaron capítulos como los de las fiestas del instituto (al más puro estilo “Ramna”, como ya comenté) y otros ya más serios en donde se ve a los personajes y las situaciones en que se ven envueltos. Pero es solo por eso que he visto y la he disfrutado.

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