(VIXXfic) Momentos
Titulo: Momentos
Couple: LeoBin
Capítulo: 1
[Leer capítulo]
POV HongbinLlegaron a casa por fin, después de un largo y duro día de promociones, firmas y prácticas y mas prácticas de la nueva canción de comeback. VIXX se estaba haciendo famoso rápidamente y por ello cada vez era mas duro mantener el ritmo, pero aun se las arreglaban para no caer agotados al suelo, sobretodo N, que cada vez tenía mas y mas responsabilidades a sus espaldas de líder.
HongBin se alegraba de que, aunque fuese agotador, el hacer las promociones de nuevas canciones les obligaran a permanecer juntos, sin poder dedicarse apenas a actividades individuales, porque entre unas cosas y otras casi no recordaba la última vez que habían estado los 6 juntos tantos días seguidos.
Eran mas de las 12, y, mientras esperaba que todos se duchasen, HongBin aprovechó para cenar unos cereales y ordenar un poco sus cosas mientras intentaba relajarse, pero no lo conseguía. Esperaba que una ducha de agua fría le ayudase a relajar los músculos y calmarse después de todo el estrés pero muy en el fondo sabía que eso no iba a hacer gran cosa. Aplastó esos pensamientos antes incluso de que naciesen y siguió a lo suyo.
Un rato después salió del baño duchado y con el pijama puesto, aun con el pelo húmedo. Como había dejado que los demás se duchasen antes, al parecer, casi todos se habían acostado ya. Pero él, a pesar de lo cansado que se sentía, no tenía nada de sueño. Sabía que era el estrés, hacía demasiado tiempo que no tenía un día libre en condiciones, y entre eso y el cansancio acumulado estaba en los límites.
Normalmente solo había una cosa que le ayudase a relajarse de manera que pudiese dormir de verdad durante unas horas y descansar como hacía días que necesitaba. De modo que se dirigió a la ventana que daba al río, a la butaca que tenían sabiendo que él estaría ahí, como cada noche, esperando a que todos se acostasen para acostarse él, únicamente por si alguno tenía algún problema o algo así. Leo siempre cuidaba de los demás sin que nadie le pidiese nada, y lo hacía sin ser agobiante ni estar encima, solo siendo observador y atento.
El piso estaba prácticamente a oscuras, y donde estaba puesta la butaca estaba aun mas a oscuras, pero alcanzaba a distinguir a Leo sentado, con los auriculares puestos, mirando la ciudad de noche, tranquilamente, y casi de inmediato comenzó a sentir el efecto tranquilizador que producía en él.
Normalmente huía de ello, porque sabía perfectamente que sentir algo así por alguien que es del mismo sexo y que además forma parte del mismo grupo que tú no es precisamente una buena idea. Es mas, sabía que aunque los aceptase, Leo no iba a reaccionar nunca por él como le gustaría, en gran parte por su carácter. Era demasiado apático sobre el tema del amor, y mas teniendo en cuenta que su familia lo había educado como si la homosexualidad fuese un tabú, como para la mayoría de gente en ese país.
El hecho de que hubiese aceptado ayudar a N junto con los demás del grupo para que los jefazos dejasen de pedirle imposibles parecía casi un milagro tratándose de alguien como Leo.
Pero ese no era un día normal. Necesitaba la tranquilidad que solo le podía dar Leo por el simple hecho de ser él, de modo que se sentó a su lado sin decir nada. La butaca era lo suficientemente grande para que una persona se sentase cómodamente, y con dos el espacio faltaba un poco, pero ni el uno ni el otro se habían quejado de ello en ninguna de las noches que habían pasado observando las luces de la ciudad de noche.
Sin mediar palabra ni mirarlo, Leo le ofreció uno de los auriculares a HongBin, y este se lo puso y la música inundó su cuerpo. Por las noches Leo siempre escuchaba canciones del tipo relajantes y tranquilas, y esa noche no era distinta. De modo que se recostó en el respaldo, cerró los ojos y dejó su mente vagar mientras al poco rato le embargaba la placentera sensación de relax previa al sueño.
. . .
POV Leo
Unos 10 minutos mas tarde, Leo notó exactamente el momento en que HongBin cayó dormido por el suave golpe que le su dio la cabeza mojada en el hombro, y solo en ese momento se atrevió a mirarlo.
Llevaba tiempo evitando quedarse a solas con él, pero después de mas de un mes sin prácticamente parar a descansar, HongBin se veía tan agotado que hasta las perspicaces fans habían notado el aspecto insano del muchacho debajo de todos los esfuerzos que hacían diariamente los maquilladores para esconderlo, y las redes estaban bastante calientes por ello.
Estaba preocupado por si al mánager o a alguno de los jefes les daba por exigirle a HongBin que pareciese mas sano en pantalla o alguna estupidez de esas. Ya se esperaba de todo, sobretodo después de que a N no parasen de repetirle que tenía que ser mas masculino de lo que era realmente por miedo a que comenzasen a correr rumores por todos lados sobre su supuesta homosexualidad y la empresa comenzase a perder dinero. Lo mas irónico era que esos rumores hacía ya tiempo que estaban y eran uno de los motivos por los cuales N tenía tantos fans.
Los únicos que realmente sabían que N era homosexual eran los miembros del grupo, especialmente Ravi, y todos, sin excepción, se habían unido casi sin hablarlo para evitar algún ataque de los de arriba a su líder. Todos se habían sorprendido cuando Leo decidió sacar el tema, porque al parecer se había ganado la fama de cerrado de mente o algo así por culpa de su familia, pero sobretodo, por culpa de los esfuerzos mas que notorios que había hecho para intentar engañarse a si mismo.
Pero, ¿Que podía hacer él? ¿Como podía no aceptar y proteger a N cuando él mismo era como él? Simplemente tenía suerte de que no se le notase, pero hacía ya meses que se había dado cuenta de sus sentimientos por la personita que dormía plácidamente contra su hombro, y los había acabado aceptando muy a regañadientes.
Leo desabrochó su sudadera y se la quitó, arropando a HongBin con ella. El muy inconsciente tenía el pelo mojado y se iba a resfriar si se dormía así. Le apartó un mechón de pelo que le caía sobre los parpados, con cuidado de no despertarle, y volvió a mirar por la ventana sin ver nada, dejando vagar otra vez la mente.
Sabía que pasaba con ese tipo de sentimientos, la gente hablaba, él cantaba y escuchaba continuamente canciones sobre ello. Sabía que aumentarían lo suficiente como para cometer una estupidez tras otra por él, y mas si no le correspondía, y Leo tenía la certeza de que no le correspondía y no lo haría nunca.
HongBin se comportaba con el resto de miembros del grupo como se comportaba con él, era una persona cariñosa por naturaleza, y esos momentos de complicidad cuando, estando con cámaras, HongBin le ayudaba a sobrellevarlo con pequeñas tonterías, y esas noches que pasaban juntos escuchando música casi en silencio sabía de sobras que no eran especiales. No acababa de recordar exactamente cuando comenzó a esperarlas, cuando se volvieron tan importantes para él, y cuando sus sentimientos por su compañero habían pasado de ser solo los que sentía por los demás a ser como una especie de bomba de relojería a medio formar.
Por ello, a su vez esperaba que no creciesen mas, puesto que en ese momento, él, con estar con HongBin, con verlo y hablar con él cada día, y tener pequeños e insignificantes momentos como el de esa noche de vez en cuando, tenía bastante.
Iba notando como el cansancio acumulado le vencía a él también, y sin darse cuenta, dejó de oponer resistencia al sueño que llevaba luchando desde hacía varias horas por cerrar sus ojos.
"Ojalá este momento no acabase nunca" pensó mientras sus ojos se desenfocaban y caía dormido, su cabeza apoyada suavemente contra la de HongBin, en ese pequeño mundo en el que entraban solo cuando estaban juntos.
Couple: LeoBin
Capítulo: 1
[Leer capítulo]
POV HongbinLlegaron a casa por fin, después de un largo y duro día de promociones, firmas y prácticas y mas prácticas de la nueva canción de comeback. VIXX se estaba haciendo famoso rápidamente y por ello cada vez era mas duro mantener el ritmo, pero aun se las arreglaban para no caer agotados al suelo, sobretodo N, que cada vez tenía mas y mas responsabilidades a sus espaldas de líder.
HongBin se alegraba de que, aunque fuese agotador, el hacer las promociones de nuevas canciones les obligaran a permanecer juntos, sin poder dedicarse apenas a actividades individuales, porque entre unas cosas y otras casi no recordaba la última vez que habían estado los 6 juntos tantos días seguidos.
Eran mas de las 12, y, mientras esperaba que todos se duchasen, HongBin aprovechó para cenar unos cereales y ordenar un poco sus cosas mientras intentaba relajarse, pero no lo conseguía. Esperaba que una ducha de agua fría le ayudase a relajar los músculos y calmarse después de todo el estrés pero muy en el fondo sabía que eso no iba a hacer gran cosa. Aplastó esos pensamientos antes incluso de que naciesen y siguió a lo suyo.
Un rato después salió del baño duchado y con el pijama puesto, aun con el pelo húmedo. Como había dejado que los demás se duchasen antes, al parecer, casi todos se habían acostado ya. Pero él, a pesar de lo cansado que se sentía, no tenía nada de sueño. Sabía que era el estrés, hacía demasiado tiempo que no tenía un día libre en condiciones, y entre eso y el cansancio acumulado estaba en los límites.
Normalmente solo había una cosa que le ayudase a relajarse de manera que pudiese dormir de verdad durante unas horas y descansar como hacía días que necesitaba. De modo que se dirigió a la ventana que daba al río, a la butaca que tenían sabiendo que él estaría ahí, como cada noche, esperando a que todos se acostasen para acostarse él, únicamente por si alguno tenía algún problema o algo así. Leo siempre cuidaba de los demás sin que nadie le pidiese nada, y lo hacía sin ser agobiante ni estar encima, solo siendo observador y atento.
El piso estaba prácticamente a oscuras, y donde estaba puesta la butaca estaba aun mas a oscuras, pero alcanzaba a distinguir a Leo sentado, con los auriculares puestos, mirando la ciudad de noche, tranquilamente, y casi de inmediato comenzó a sentir el efecto tranquilizador que producía en él.
Normalmente huía de ello, porque sabía perfectamente que sentir algo así por alguien que es del mismo sexo y que además forma parte del mismo grupo que tú no es precisamente una buena idea. Es mas, sabía que aunque los aceptase, Leo no iba a reaccionar nunca por él como le gustaría, en gran parte por su carácter. Era demasiado apático sobre el tema del amor, y mas teniendo en cuenta que su familia lo había educado como si la homosexualidad fuese un tabú, como para la mayoría de gente en ese país.
El hecho de que hubiese aceptado ayudar a N junto con los demás del grupo para que los jefazos dejasen de pedirle imposibles parecía casi un milagro tratándose de alguien como Leo.
Pero ese no era un día normal. Necesitaba la tranquilidad que solo le podía dar Leo por el simple hecho de ser él, de modo que se sentó a su lado sin decir nada. La butaca era lo suficientemente grande para que una persona se sentase cómodamente, y con dos el espacio faltaba un poco, pero ni el uno ni el otro se habían quejado de ello en ninguna de las noches que habían pasado observando las luces de la ciudad de noche.
Sin mediar palabra ni mirarlo, Leo le ofreció uno de los auriculares a HongBin, y este se lo puso y la música inundó su cuerpo. Por las noches Leo siempre escuchaba canciones del tipo relajantes y tranquilas, y esa noche no era distinta. De modo que se recostó en el respaldo, cerró los ojos y dejó su mente vagar mientras al poco rato le embargaba la placentera sensación de relax previa al sueño.
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POV Leo
Unos 10 minutos mas tarde, Leo notó exactamente el momento en que HongBin cayó dormido por el suave golpe que le su dio la cabeza mojada en el hombro, y solo en ese momento se atrevió a mirarlo.
Llevaba tiempo evitando quedarse a solas con él, pero después de mas de un mes sin prácticamente parar a descansar, HongBin se veía tan agotado que hasta las perspicaces fans habían notado el aspecto insano del muchacho debajo de todos los esfuerzos que hacían diariamente los maquilladores para esconderlo, y las redes estaban bastante calientes por ello.
Estaba preocupado por si al mánager o a alguno de los jefes les daba por exigirle a HongBin que pareciese mas sano en pantalla o alguna estupidez de esas. Ya se esperaba de todo, sobretodo después de que a N no parasen de repetirle que tenía que ser mas masculino de lo que era realmente por miedo a que comenzasen a correr rumores por todos lados sobre su supuesta homosexualidad y la empresa comenzase a perder dinero. Lo mas irónico era que esos rumores hacía ya tiempo que estaban y eran uno de los motivos por los cuales N tenía tantos fans.
Los únicos que realmente sabían que N era homosexual eran los miembros del grupo, especialmente Ravi, y todos, sin excepción, se habían unido casi sin hablarlo para evitar algún ataque de los de arriba a su líder. Todos se habían sorprendido cuando Leo decidió sacar el tema, porque al parecer se había ganado la fama de cerrado de mente o algo así por culpa de su familia, pero sobretodo, por culpa de los esfuerzos mas que notorios que había hecho para intentar engañarse a si mismo.
Pero, ¿Que podía hacer él? ¿Como podía no aceptar y proteger a N cuando él mismo era como él? Simplemente tenía suerte de que no se le notase, pero hacía ya meses que se había dado cuenta de sus sentimientos por la personita que dormía plácidamente contra su hombro, y los había acabado aceptando muy a regañadientes.
Leo desabrochó su sudadera y se la quitó, arropando a HongBin con ella. El muy inconsciente tenía el pelo mojado y se iba a resfriar si se dormía así. Le apartó un mechón de pelo que le caía sobre los parpados, con cuidado de no despertarle, y volvió a mirar por la ventana sin ver nada, dejando vagar otra vez la mente.
Sabía que pasaba con ese tipo de sentimientos, la gente hablaba, él cantaba y escuchaba continuamente canciones sobre ello. Sabía que aumentarían lo suficiente como para cometer una estupidez tras otra por él, y mas si no le correspondía, y Leo tenía la certeza de que no le correspondía y no lo haría nunca.
HongBin se comportaba con el resto de miembros del grupo como se comportaba con él, era una persona cariñosa por naturaleza, y esos momentos de complicidad cuando, estando con cámaras, HongBin le ayudaba a sobrellevarlo con pequeñas tonterías, y esas noches que pasaban juntos escuchando música casi en silencio sabía de sobras que no eran especiales. No acababa de recordar exactamente cuando comenzó a esperarlas, cuando se volvieron tan importantes para él, y cuando sus sentimientos por su compañero habían pasado de ser solo los que sentía por los demás a ser como una especie de bomba de relojería a medio formar.
Por ello, a su vez esperaba que no creciesen mas, puesto que en ese momento, él, con estar con HongBin, con verlo y hablar con él cada día, y tener pequeños e insignificantes momentos como el de esa noche de vez en cuando, tenía bastante.
Iba notando como el cansancio acumulado le vencía a él también, y sin darse cuenta, dejó de oponer resistencia al sueño que llevaba luchando desde hacía varias horas por cerrar sus ojos.
"Ojalá este momento no acabase nunca" pensó mientras sus ojos se desenfocaban y caía dormido, su cabeza apoyada suavemente contra la de HongBin, en ese pequeño mundo en el que entraban solo cuando estaban juntos.